Título: Como hacer las cosas de corazón.
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Título: Como hacer las cosas de corazón
Texto: Colosenses 3:23-24
Introducción:
Es muy raro que alguien o alguno de nosotros no hallamos dicho o escuchado esa frase tan conocida…DE CORAZON.
Yo no soy muy bueno para hablar hermanos, pero lo que digo lo digo de corazón.
Yo no sé cantar bien hermanos, pero cuando canto lo hago de corazón.
Aquí le traigo su regalito es poquito, pero va de corazón.
Le compré esta ropita humilde, pero de corazón. Etc.
Pero sabemos realmente nosotros lo que significa la expresión
¿DE CORAZON?
El apóstol Pablo les dice a los colosenses en su carta, en el capítulo 3:23
Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres.
Tomando como base este texto podemos definir que:
De corazón significa hacer las cosas desde el alma, desde sus adentros, desde su interior, donde solo Dios puede ver. Dios mira el corazón.
De corazón significa hacer las cosas lo mejor posible, de la mejor manera y sin apariencias es decir con sinceridad, con sencillez de corazón y con humildad.
Por último, también de corazón significa hacer las cosas con voluntad, con gratitud, con ánimo, con alegría y siempre teniendo en mente que todo debe ser hecho por amor a Cristo y para la gloria de Dios.
Tomando en cuenta todos estos significados ahora traslademos esta enseñanza a nuestras vidas como creyentes que somos y veamos cómo hacer las cosas de corazón.
Que ya no sea solamente una frase sino un estilo de vida de nuestra parte.
I. Hacemos las cosas de corazón cuando primero nos consagramos a
Dios… 2 Crónicas 17:12-18.
Amasías nos da un buen ejemplo de un creyente que primeramente se ofrece a Dios pues de los 5 generales que el rey Josafat tenía solo él se menciona que primero se ofreció a Dios, es decir se consagró a Dios
Un creyente que hace las cosas de corazón primero él se ofrece voluntariamente es decir que antes de ofrecer su servicio primero ofrece su persona a Dios…
Lastimosamente hoy somos muchos los creyentes que le ofrecemos a Dios nuestro servicio, le ofrecemos nuestros talentos, le ofrecemos nuestros dones, nuestro tiempo, nuestras ofrendas, nuestros diezmos, nuestras alabanzas, pero tristemente nosotros como personas no nos hemos entregado por completo al Señor.
Debemos comprender que un principio bíblico es que antes de las ofrendas Dios quiere alofrendante.
Génesis 4:3-5
En estos textos la palabra de Dios nos dice que:
Miró Dios con agrado a Abel primero y a su ofrenda después.
pero no miró con agrado a Caín primero y a la ofrenda suya después.
Es decir, antes de ver la ofrenda primero Dios ve la actitud del ofrendante.
Y este mismo principio lo podemos aplicar en otras áreas de nuestra vida cristiana:
· Antes de la adoración Dios quiere al adorador. Tu corazón
· Antes de la intercesión Dios quiere al intercesor
· Antes del servicio Dios quiere al servidor. No tu uniforme
· Antes de las dadivas Dios quiere al dador
· Antes del mensaje Dios quiere al mensajero
Para Dios lo primero es usted, después lo de usted.
O como alguien dijo: El regalo sin el que lo regala no tiene mérito”.
¿Dónde está nuestro corazón cuando adoramos?
¿Dónde está nuestro corazón cuando alabamos?
¿Dónde está nuestro corazón cuando servimos?
Nuestro corazón debe estar consagrado, apartado para Dios.
Le hago el siguiente desafío: Propongámonos desde ahora ofrecernos primeramente a Dios y luego nuestro servicio, nuestros dones, nuestros talentos etc. Seamos lideres o no, consagrémonos a Dios primero.
Debemos ser como Amasías
Dios busca un Amasías que esté dispuesto a ofrecerse, primeramente, el como persona y después que ofrezca lo que Dios en su gracia ha puesto en sus manos.
Dios busca un Amasías que primero consagre su vida
Dios busca un Amasías que primero consagre su corazón
Dios busca un Amasías que primero se rinda ante él
Tenemos que saber que solo cuando nos damos primeramente a Dios lo que damos será agradable delante de él.
2ª Corintios 8:1-5.
En estos textos vemos que el apóstol Pablo les habla a los corintios del buen ejemplo de la generosidad de los hermanos de Macedonia, estaban en grandes pruebas, en grandes pobrezas y con todo y eso fueron grandes en generosidad para ayudar a otros creyentes que estaban pasando por los mismos problemas económicos.
Le rogaron a Pablo que les permitiera el privilegio de ofrendar.
Pero ahora hay muchos creyentes que si no nos motivan no ofrendamos, tienen que decirnos que sembremos, que pactemos etc.
A un creyente consagrado lo que le motiva es su propio corazón agradecido.
Pero lo que superó las expectativas de Pablo fue la entrega de esos hermanos pues el mismo dice: Y no como lo esperábamos, sino que a sí mismos se dieron primeramente al Señor.
Es decir, antes de ofrendar se entregaron por entero en cuerpo y alma al Señor.
Entonces debemos comprender que antes de todas las cosas Dios nos quiere a nosotros, Dios quiere nuestra vida, Dios quiere nuestro corazón.
II. De corazón es servir al Señor sin apariencias… Efesios 6:5-8
En estos textos el apóstol Pablo da instrucciones como debe ser la relación entre amos y criados, les dice a los siervos la manera en que deben comportarse en su trabajo, deben trabajar no sirviendo al ojo
Es decir, no para ser vistos (no sólo cuando el amo está mirando)
Hay muchas personas que son bien pilas en su trabajo cuando saben que el patrón está cerca pero no más saben que se fue y entonces bajan el ritmo al trabajo. (Eso es estar sirviendo al ojo)
Tenemos que reconocer que nosotros como creyentes le servimos al mejor amo de todos nuestro Señor Jesucristo. Y es por eso que nuestro servicio a el debe ser de corazón y con sinceridad.
Tristemente muchos creyentes le servimos al Señor con apariencias solo para ser vistos por los demás, presumimos de nuestros dones, de nuestras habilidades y se nos olvida que Cristo nos está viendo.
No debemos servir para que otros nos vean, para que otros se den cuanta de lo que hicimos, eso no le agrada al Señor…
Mateo 6:1-4
Cuantos creyentes hay que servimos al Señor con ánimo, con entusiasmo, sin nada de pereza, pero lastimosamente nos gana la apariencia.
Nos gusta la alabanza de la gente, nos gusta que otros sepan lo bueno que somos en la vida cristiana, el Señor nos dice ya tienen su recompensa ¿Y cual es esa recompensa? La alabanza de las personas a las que queremos impresionar.
Recuerda que no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha.
Tu izquierda puede ser tu pastor, tus líderes, tu hermano o hermana de lado, tu vecino, tu familia etc.
Recordemos que si Dios lo sabe eso cuenta y mucho porque lo que el vio que hiciste en secreto en su tiempo te lo recompensara en público.
Pero es necesario que como creyentes sirvamos a Dios sin apariencia.
Tenemos que estar dispuestos a servir a Dios de corazón y no solamente de labios.
Isaías 29:13.
Isaías habla de un cristianismo de boca
¿Y que es un cristianismo de boca?
· Predicar un sermón que no estamos dispuestos a practicar
· Leer una lectura que no estamos dispuestos a obedecer
· Cantar un canto que no vivimos
· Aceptar un privilegio a la fuerza, para que no digan
· Hablar de Cristo por envidia para que vean que yo también puedo
· Orar lo que no creemos. Hoy él hará milagros, pero no lo creemos
· Creernos mas espirituales que otros etc.
Servir al Señor sin apariencias es vivir lo que hablamos, lo que predicamos, lo que cantamos, lo que oramos etc.
III. De corazón es reconocer que Dios nos ha dado mucho y en
respuesta servirle con gratitud… 1 Samuel 12:24.
No es poco lo que Dios ha hecho con nosotros
No es poco lo que Dios ha hecho por nosotros
No es poco lo que Dios ha hecho en nosotros
Nuestra gran salvación
Nuestro gran perdón de pecados
Nuestra gran salida, un día seremos levantados por nuestro gran Salvador Jesucristo.
Ahora que ya sabemos que significa de corazón, vamos a practicarlo hasta que Cristo venga por nosotros. Amén.