DEIDAD DEL ESPIRITU SANTO
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INTRODUCCION
INTRODUCCION
Repaso del Domingo anterior.
La Biblia nos enseña que el Espíritu Santo es una persona.
La Biblia nos enseña que el Espíritu Santo es una persona. Jesús nunca se refirió a “eso” cuando hablaba del Espíritu Santo. En , y 16, por ejemplo, habló del Espíritu Santo como “él” (), porque no es una fuerza o un objeto sino una persona. Quienquiera que hable del Espíritu Santo como “eso” es porque no ha recibido una correcta instrucción o simplemente no sabe discernir.
Jesús nunca se refirió a “eso o algo” cuando hablaba del Espíritu Santo. En Juan cap. 14, 15 y 16, por ejemplo, habló del Espíritu Santo como “él” (). Y la razón es porque no es una fuerza o un objeto sino una persona.
Así que perfectamente se puede argumentar que cualquiera que hable del Espíritu Santo como “eso” es porque no ha recibido una correcta instrucción o simplemente no sabe discernir.
La Biblia nos dice... Que El Espíritu Santo tiene intelecto, emociones y voluntad. Aparte de ello, la Biblia también le asigna actos propios de alguien que no se reduce a ser una fuerza, sino una persona real.
Por ejemplo:
El Espíritu Santo habla: (). “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias: Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios”
(). “Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado”
El Espíritu Santo intercede: (). “Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles”
El Espíritu Santo testifica: “Cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio acerca de mí” ().
El Espíritu Santo guía, dirige: : “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir” ().
El Espíritu Santo encomienda: “Mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre” ().
“Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro” ().
“Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios” ().
El Espíritu Santo ordena: “Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia; y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió” (, ).
El Espíritu Santo encomienda: “Mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre” ().
Al Espíritu Santo se le puede mentir: “Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti?, y vendida ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios” (, ).
El Espíritu Santo puede ser afrentado: “¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia?” ().
El Espíritu Santo puede ser contristado: “Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios con el cual fuisteis sellados para el día de la redención” ().
El Espíritu Santo puede ser blasfemado: “Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada. A cualquiera que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el venidero” (, ).
Si observamos… Cada una de las emociones y de los hechos que hemos señalado son propios de una persona. El Espíritu Santo no es una fuerza impersonal, como lo es la gravedad o el magnetismo. Es una Persona, con todos los atributos de la personalidad. Pero no es solamente una Persona; también es Dios.
Cada una de las emociones y de los hechos que hemos señalado son propios de una persona. El Espíritu Santo no es una fuerza impersonal, como lo es la gravedad o el magnetismo. Es una Persona, con todos los atributos de la personalidad. Pero no es solamente una Persona; también es divino.
El ESPÍRITU SANTO ES DIOS
El ESPÍRITU SANTO ES DIOS
La deidad del Espíritu Santo ha sido revelada en la Biblia y existen tres características que corroboran tal afirmación: (1) Su nombre se intercambia con el del Padre y el Hijo; (2) sus atributos son divinos iguales a los del Padre y el Hijo; (3) realizas obras que únicamente puede ser atribuidas a un ser divino.
Su nombre se intercambia con el del Padre y el Hijo
Su nombre se intercambia con el del Padre y el Hijo
En el Nuevo Testamento tanto el apóstol Pedro como el apóstol Pablo hacen referencias al Espíritu Santo de manera intercambiable para referirse a Dios. En Hechos capítulo 5 se narra que Ananías y Safira se pusieron de acuerdo para vender una propiedad. Observe
1 Pero cierto hombre llamado Ananías, con Safira su mujer, vendió una heredad,2 y sustrajo del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo sólo una parte, la puso a los pies de los apóstoles.3 Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad?4 Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios.
RVR60 “1 Pero cierto hombre llamado Ananías, con Safira su mujer, vendió una heredad,2 y sustrajo del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo sólo una parte, la puso a los pies de los apóstoles.3 Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad?4 Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios.”
El relato nos dice Ananías y Safira se quedaron con una parte del dinero de la venta tratando de hacer creer a Pedro que lo habían puesto todo a disposición del Señor. La Biblia dice que Pedro preguntó: “Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieras al Espíritu Santo y sustrajeras del producto de la venta de la heredad?” (), luego en el verso 4. declara: “no has mentido a los hombres, sino a Dios”.
Me gustaría hacer un poco de justicia con el pasaje y mencionar algunos datos que creo que ha de ser importante, sin alejarme del tema.
En primer lugar...
v.1 «…Ananías» El nombre en hebreo c era Hananiah, que significa «Yahvé ha dado gentilmente» o «Yahvé tiene gracia» .- En cambio «…Safira» quien era la esposa de Ananías. Es un nombre arameo que significa «bella»; ambos eran creyentes, o por lo menos es lo que nos da entender el pasaje.
- «…Safira» Esta era la esposa de Ananías. Es un nombre arameo que significa «bella»; ambos eran creyentes.
v.2 En el verso 2. Dice… que Ananías sustrajo del precio es decir…se quedó con parte del precio y la mujer lo sabía» Para las mujeres que le apañan todo a los maridos.. Lo interesante es que Este verbo “sutrajo” es el mismo que se usa en para describir el pecado de Acán.
F.F. Bruce... En su comentario sobre Hechos ha expresado que Ananías fue a la Iglesia primitiva lo que Acán a la Conquista. Este pecado tiene la capacidad de dañar a toda la iglesia. El término también aparece en en referencia a esclavos que roban a sus amos.
F.F. Bruce... En su comentario sobre Hechos ha expresado que Ananías fue a la Iglesia primitiva lo que Acán a la Conquista. Este pecado tiene la capacidad de dañar a toda la iglesia. El término también aparece en en referencia a esclavos que roban a sus amos.
v.2 continua diciendo «…trayendo solo una parte , la puso a los pies de los apóstoles» Pareciera que Ananías y Safira estaban imitando lo que hacían los otros hermanos y lo que hizo el mismo Bernabé en . Quien tenia una heredad, la vendió y trajo el precio y lo puso a los pies de los apóstoles.
37 como tenía una heredad, la vendió y trajo el precio y lo puso a los pies de los apóstoles.
Hechos
Ahora bien…
Esta pareja tenía la libertad de vender su propiedad personal o no hacerlo , y también de dar parte o la totalidad de la misma a la obra del Señor.
Lo que no debían hacer era dar solo una parte y decir que lo habían dado todo. Su motivación y la hipocresía de sus acciones revelaron sus corazones. La Biblia dice en proverbios 21.2 que “todo el camino del hombre es recto en su propia opino; pero Dios pesa los corazón.”
14 Proponed en vuestros corazones no pensar antes cómo habéis de responder en vuestra defensa;
2 Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; Pero Jehová pesa los corazones.
1
(ver v. 4c; ). Dios mira el corazón (ver ; ; ; ; , , ; ).
v.3 - «…ha llenado Satanás tu corazón» curiosamente Esta es la misma palabra usada por Pablo cuando les dice a los de Efeso ser llenos del Espíritu Santo en ( ).
18 No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu,
Efesios 5.18
La llénura es algo que requiere de la cooperación! de nosotros, la realidad es que va a depender de que queremos ser llenos. Si llenarnos de Dios o llenarnos de la influencia del maligno. Yo quisiera decir como Josué, “Mi casa y yo serviremos a Jehová” ¡Somos llenos de algo!
El verso 3. También nos muestra la batalla cósmica entre Satanás y El Espíritu Santo. Satanás tratando llenar el corazón Ananías para mentir, para pecar en contra del Espíritu Santo.
Definitivamente es La batalla que habla Pablo en Gálatas, entre las obras de la carne y las obras del Espíritu
17 Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.18 Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley.19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia,20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
¡La llenura requiere de la cooperación! ¡Somos llenos de algo (ver la nota completa en 5:17)! Satanás forma parte, pero nosotros somos responsables (ver ). Recomiendo el libro Tres preguntas cruciales sobre la guerra espiritual, de Clinton E. Arnold. Asombrosamente, hay una constante influencia satánica en las vidas de los creyentes (ver ; ). Ver las notas completas en 2:4 y 3:10.
Galatas
Definitivamente en el caso de Ananías y Safira estaban en medio de esa lucha, pero ellos dejaron que fuera Satanás quienes lo llenarán.
Esta frase (es decir, «llenar el corazón») podría ser un modismo hebreo (ver ; ; ). Muchos estudiosos suponen que los primeros capítulos del Hechos proceden originalmente de un escrito arameo.
17 Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.18 Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley.19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia,20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
Galatas 5.17-
Mis amados hermanos si leemos el pasaje nos damos cuenta que ellos habían mentido a Pedro y a la iglesia pero en realidad le mintieron al Espíritu.
Bob Utley, El libro de los Hechos: El Historiador Lucas, ed. Patricia Cabral y Gisela Ramos, trans. Summer Palmer, Comentario del intérprete bíblico (Marshall, TX: Lecciones Bíblicas Internacional, 2015), .
Ellos le mintieron a Pedro y a la Iglesia, pero en realidad le mintieron al Espíritu. Teológicamente esto es muy similar al encuentro entre Jesús y Pablo en el camino de Damasco: «¿Por qué me persigues?» (ver ). Pablo perseguía a los creyentes, pero Jesús lo tomó como algo personal, como aquí lo hace el Espíritu. Esta debe ser una advertencia para los creyentes modernos.
Teológicamente esto es muy similar al encuentro entre Jesús y Pablo en el camino de Damasco: «¿Por qué me persigues? dijo Jesús pero Cristo ya no estana físicamente» (ver ). Observe… Pablo perseguía a los creyentes, pero Jesús lo tomó como algo personal. Del mismo modo aquí lo hace el Espíritu. Esta debe ser una advertencia para los creyentes modernos cuando hablamos más de la iglesia, o murmuramos de ella.
V.4 «No has mentido a los hombres sino a Dios» El problema no fue que se hayan quedado con parte del dinero, sino que mintieron para parecer espirituales. Tenga en cuenta que incluso un acto amable de generosidad, al tener una motivación equivocada, es un pecado (ver ). Pero hacía donde quiero llegar es que aquí se identifica al Santo Espíritu como Dios aleluya!!!
- «No has mentido a los hombres sino a Dios» El problema no fue que se hayan quedado con parte del dinero, sino que mintieron para parecer espirituales. Tenga en cuenta que incluso un acto amable de generosidad, al tener una motivación equivocada, es un pecado (ver ). Observe que aquí se identifica al Santo Espíritu mencionado en el versículo 3 como Dios.
El pecado es cosa seria para Dios; el pecado les costó la vida dice el verso 5. (ver ; , ).
Parece que se estaba cumpliendo en Ananías lo que dice el profeta Ezequiel
4 He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecare, esa morirá.
20 El alma que pecare, esa morirá; el hijo no llevará el pecado del padre, ni el padre llevará el pecado del hijo; la justicia del justo será sobre él, y la impiedad del impío será sobre él.
6 Pero no mató a los hijos de los que le dieron muerte, conforme a lo que está escrito en el libro de la ley de Moisés, donde Jehová mandó diciendo: No matarán a los padres por los hijos, ni a los hijos por los padres, sino que cada uno morirá por su propio pecado.
Es obvio que en el pensamiento del apóstol Pedro “Mentir al Espíritu Santo” y “mentir a Dios” es exactamente lo mismo.
Así que, Pedro destacó que el Espíritu a quien Ananías había mentido era Dios.
Ahora bien siguiendo con el punto de que el nombre del Espíritu Santo se intercambia con el de Dios.
Observemos que...
En la carta a los corintios el apóstol Pablo emplea de forma intercambiable Espíritu Santo y Dios para censurar el pecado cometido en contra del propio cuerpo.
(). “Acaso no sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios está en vosotros? Si alguno destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a él, porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es”
Después, usa el mismo lenguaje (). “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual habéis recibido de Dios, y que no sois vuestros?, pues habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios”
Para Pablo “templo de Dios” y “templo del Espíritu Santo” es lo mismo. De hecho, el énfasis incurre en el Espíritu Santo morando en el creyente.
Esta declaración es consistente para afirmar la deidad del Espíritu Santo debido a que a lo largo del Nuevo Testamento resalta el hecho que las tres personas de la Trinidad habitan en el creyente. Miremos algunos pasajes que confirmar esta declaración
El Padre habitando en el creyente (; ).
16 ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré entre ellos, Y seré su Dios, Y ellos serán mi pueblo.
El Hijo estando en el creyente (; , ; ; ; ; ; ; ).
27 a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria,
20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
El Espíritu Santo morando en el creyente ( Jn14:16–17; , ; ; ; ).
9 Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él.
Por lo tanto, si el Padre habita en el creyente, el Hijo esta en el creyente, y el Espíritu Santo mora en el creyente no hay duda que tiene que ser Dios del mismo modo que el Padre y el Hijo. Pero NO son tres dioses. Son tres personas distintas y un solo Dios verdadero.
Está claro que Ser templo del Espíritu Santo significa que Dios habita en nosotros y al intercambiar la frase “templo de Dios” con “templo del Espíritu Santo”, se deja por sentado que el Espíritu Santo es Dios.
El Espíritu Santo es Dios y varios de sus nombres lo acreditan debido a que están asociado directamente a las personas del Padre y del Hijo para demostrar igualdad de condiciones.
El Espíritu Santo es Dios y varios de sus nombres lo acreditan debido a que están asociado directamente a las personas del Padre y del Hijo para demostrar igualdad de condiciones.
Por ejemplo, la promesa de Cristo a sus discípulos de en enviar “otro Consolador” para que este con ellos implica que Jesucristo estaba hablando de “otro ser” de la misma clase que Él ().
Observe
16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
Ahora bien…
A Cristo se le llama “abogado” que en griego significa intercesor, auxiliador, consolador (). El mismo término utilizó Cristo para referirse al Espíritu Santo “abogado y consolador” ( y 26), lo que demuestra que el Espíritu Santo tiene que ser una persona debido a que una fuerza impersonal no puede interceder, auxiliar, ni mucho menos consolar. Cristo revela que la condición entre el Hijo y el Espíritu Santo son iguales debido a que ambos son identificados como “abogados”, es decir los dos tienen la capacidad y poder para interceder delante del Padre.
Que gran privilegio el que tenemos. Dos abogados aleluya!! Si Cristo es Dios, entonces el Espíritu Santo tiene que ser también Dios.
Si Cristo es Dios, entonces el Espíritu Santo tiene que ser también Dios.
En otros pasajes de la Biblia se intercambia los nombres del Espíritu Santo con las otras dos personas de la Trinidad para enfatizar que Él es parte de la deidad. Se le llama “Espíritu de Dios” () ; “Espíritu de Dios viviente” (); “Espíritu del Señor” (); “Espíritu eterno” () “el Espíritu de Jesús” (, LBLA), “el Espíritu de Cristo” (; ); “el Espíritu de Jesucristo” (); “el Espíritu del Señor” (; ); “el Espíritu de su Hijo” ();elEspíritu Santo de la promesa (); el Espíritu de gracia (); y el Espíritu de verdad ().
Posee los atributos de la deidad
Posee los atributos de la deidad
La naturaleza del Espíritu Santo revela que Él es Dios. Los teólogos han llamado atributos a aquellas cualidades que Dios posee que no pueden obtenerse ni perderse y que constituyen lo que Dios es. Por ejemplo, Dios no simplemente tiene soberanía o amor como si estas fueran una combinación de componentes que constituyen su esencia, más bien Dios es soberano, y Dios es amor.[10] Del mismo modo, la Biblia le acredita atributos al Espíritu Santo que son únicos de la naturaleza de Dios.
Omnisciencia del Espíritu Santo
Omnisciencia del Espíritu Santo
La omnisciencia significa “tener todo conocimiento ”. El término solamente puede ser aplicado adecuadamente a Dios. Ya que, únicamente un ser que es infinito y eterno es capaz de conocer todo. Dios es capaz de ser consiente de todas las cosas, así como de entender todas las cosas y de comprender todas las cosas. Nunca aprende nada ni adquiere nuevos conocimientos. El tiempo pasado, presente y futuro le son totalmente conocidos. De hecho, nada en lo absoluto lo puede sorprender. Si Dios conoce todas las cosas es porque Él las ha creado y existen por su voluntad. RC. Sproul afirma que “sería imposible que Dios conociera todo si no controlara todo, y sería igualmente imposible que Dios controlara todo si no conociera todo.”
La escritura también revela que la persona del Espíritu Santo posee el atributo de la omnisciencia, lo que equivale a decir que Él conoce todo.
El profeta Isaías habló del conocimiento infinito y de la sabiduría del Espíritu de Jehová ().
13 ¿Quién enseñó al Espíritu de Jehová, o le aconsejó enseñándole?14 ¿A quién pidió consejo para ser avisado? ¿Quién le enseñó el camino del juicio, o le enseñó ciencia, o le mostró la senda de la prudencia?
Naturalmente, “Espíritu de Jehová” es intercambiable con “Espíritu de Dios” ().
Ahora bien…
Isaías señala que nadie puede gloriarse de haberle enseñado algo al Espíritu de Jehová, ya que Él no tuvo necesidad de pedir consejo a nadie.
Del mismo modo, el apóstol Pablo avala la omnisciencia del Espíritu Santo al señalar la capacidad perfecta de éste para conocer la mente de Dios
()”Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios. Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido”
Por supuesto que una exégesis simple indicará que a quien han recibido los creyentes es al Espíritu Santo () ; (). Por lo tanto, el atributo de la omnisciencia es parte de la naturaleza divina del Espíritu Santo.
Omnipresencia del Espíritu Santo
Omnipresencia del Espíritu Santo
El atributo de la omnipresencia define a Dios estando en todo lugar, trascendiendo el tiempo, espacio y materia. Él no está en un lugar parcialmente, sino que toda la plenitud de su ser se encuentra en todo lugar. Aunque, la manifestación de su presencia es diferente en algunos lugares debido a que Él puede bendecir en un lugar y maldecir en otro lugar, sin menguar su presencia. Del mismo modo se acredita al Espíritu Santo con el atributo de la omnipresencia. “¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia?” () Estas fueron las palabras expresadas por el rey David para asegurar que no existe lugar alguno donde pueda huir de la presencia del Espíritu de Dios. David declaró que el Espíritu de Dios está presente en los cielos y abajo en el Seol (), del mismo modo significa que Él está presente en todas las áreas intermedias que hay entre ambos lugares. Así como todo lo que hay en el oriente como en el occidente.[12] “¿Soy yo Dios de cerca solamente, dice Jehová, y no Dios desde muy lejos? ¿Se ocultará alguno, dice Jehová, en escondrijos que yo no lo vea? ¿No lleno yo, dice Jehová, el cielo y la tierra?” (). Jeremías menciona que nadie se puede ocultar de Jehová. Así que, si Jehová es Dios y de Dios nadie se puede ocultar, entonces el Espíritu Santo tiene que ser igualmente Dios, ya que de Él tampoco nadie se puede ocultar.
Omnipotencia del Espíritu Santo
Omnipotencia del Espíritu Santo
La omnipotencia no quiere decir que Dios puede hacer cualquier cosa, sino que puede hacer con poder cualquier cosa que el poder puede hacer. Él tiene todo el poder que existe o que pudiera existir. Sproul la define de esta manera “La omnipotencia se refiere al poder, la autoridad y el control soberano que Dios ejerce sobre el orden creado.”Del mismo modo el atributo de la omnipotencia es adjudicado al Espíritu Santo por virtud de su poder y autoridad en la obra de la creación, debido a que Él tomó parte en la creación como bien lo menciona el libro de Génesis cuando dice “y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.” (). De hecho, Génesis narra que el hombre fue creado por Jehová Dios (). Para Job fue la persona del Espíritu de Dios quien lo hizo o lo creo a él, y la misma vez le dio el soplo del Omnipotente para darle vida. ().
4 El espíritu de Dios me hizo, Y el soplo del Omnipotente me dio vida.
El relato en el libro de Job son consistente con el relato de la creación. Por ejemplo, fue Jehová Dios quien dijo “ Hagamos al hombre conforme a nuestra imagen y semejanza” (). Después, en el capítulo dos Dios sopló el aliento de vida en el hombre (). Así que tanto Génesis como Job no solo confirman que el Espíritu Santo es co-creador, sino que también es omnipotente.En el Nuevo Testamento se habla del poder del Espíritu Santo de forma destacada. Por ejemplo En se utilizan las expresiones “El Espíritu Santo” y “el poder del Altísimo” es llamativo que ambas expresiones se encuentran en construcciones paralelas o sinónimas. Desde luego, esto es, una referencia a la concepción virginal, un milagro de magnitudes incomparables. Más tarde, en la carta a los romanos Pablo expone estar de acuerdo que los logros de su ministerio se llevaron a cabo gracias a “potencia de señales y prodigios en el poder del Espíritu Santo” ().
19 con potencia de señales y prodigios, en el poder del Espíritu de Dios; de manera que desde Jerusalén, y por los alrededores hasta Ilírico, todo lo he llenado del evangelio de Cristo.
Del mismo modo, el Señor Jesucristo atribuyó al poder del Espíritu la capacidad para transformar los corazones de los hombres, ya que el Espíritu Santo es quien convence de pecado (), y regenera al hombre sin Cristo().
Jesús se refirió a esa habilidad para transformar al hombre caído diciendo que “Para los hombres esto es imposible, pero para Dios todo es posible” (; ver vv. 16–25). Estos pasajes indican que el Espíritu Santo tiene un poder que únicamente Dios posee, lo que implica que también es omnipotente.
Otro argumento, a favor de la autoridad y poder del Espíritu Santo es que Él es colocado junto al Padre y al Hijo en cuanto a la forma de practicar el bautismo.
La orden de Jesús en la gran comisión fue enviar a los discípulos para ir a todas la naciones para hacer discípulos y bautizarlos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo (). En esta orden Jesús deja claro que el Espíritu Santo tiene el mismo poder y autoridad que hay en el Padre como en el Hijo.
19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;
Asimismo, Pablo usa esta misma fórmula para bendecir a los creyentes de Corintios, “La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén”()
2 Corintios
14 La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén.
Conclusión.
Conclusión.