El carácter Misericordioso de Dios

Introducción:

El capitulo 25 de Números esta compuesta de DOS historias; ambas muy relacionadas entre si pero que nos enseñan las DOS formas diferentes en las que Dios responde ante el pecado; aun si es en medio de su pueblo.

Como vimos en la primera historia: DIOS siempre responde con Ira, hacia el pecado. Su sentencia es de muerte hacia todo pecador.

El pecado es un doctrina principal en toda la Escritura:

Fíjese que la Biblia tiene 1189 capítulos; y solo en cuatro de ellos no aparece ninguna referencia ni al pecado, ni a ninguno de sus efectos. Estos capitulo son (la perfecta creación de Dios antes del pecado) y (el nuevo cielo y nueva tierra donde ya no mora el pecado).

En el idioma Hebreo con el que se escribe casi todo el AT, existen 8 palabras diferentes para cubrir todos los matices e implicaciones que envuelve el tema del pecado.

En el Griego existen 12 palabras diferentes que se traducen como pecado en español, pero que ilustran cada una diferentes aspectos de este.

Entre las muchas ideas que la Biblia presenta respecto al pecado la mas popular que tenemos es:

“Un acto de errar o fallar al no dar en el blanco”: Es como si el hombre en su soberbia aun cuando no puede conformarse al estándar divino; tampoco quiere y por ende “yerra” al vivir bajo sus propias opiniones, rechazando la sabiduría de Dios.

Otra idea es la de “rebelarse”: Esta es la actitud que en sentido general caracteriza al hombre respecto a Dios y a todas sus leyes.

La Biblia también presenta el pecado como un acto de “descarriarse” es decir abandonar el camino señalado por otro, para terminar perdiéndose.

En la Biblia pecado no es solo “algo” que hacemos sino algo que “somos”: Hemos nacido todo ser humano con una Naturaleza pecaminosa heredada de Adán; y eso hace que ya estemos condenados y separados de Dios aun desde nuestro nacimiento. Nuestros pecados solo confirman nuestra condición de maldad.

Por ultimo otra entre las formas en las que la Biblia expresa el pecado es como “un acto de ignorancia o falta de conocimiento”; la falta de conocimiento del Dios verdadero en el hombre le lleva a una idolatría y adoración falsa.

Como ya dijimos en cualquiera de sus expresiones Dios ve el pecado como una ofensa a hacia su santidad y que exige justamente la muerte del pecador.

Sin embargo en nuestra segunda historia en este capitulo vamos a ver como este mismo Dios que es Santo también responde con Perdón y Misericordia hacia el pecador; pasando por alto y cubriendo su pecado.

Esta realidad nos genera un conflicto/ nos pone en una controversia ¿por que?:

¿Como puede el Dios que es perfectamente Santo y que no tolera el pecado pasarlo por alto y extender su perdon?

¿O es que acaso Dios cierra los ojos hacia los pecados de algunos pero es severo para castigar los de otros?

¿Puede Dios ser Santo y Misericordioso a la vez, sin dejar de hacer lo que es correcto?

Las respuesta es un rotundo Si. Pablo dice en que en el evangelio Dios revela su Justicia; es decir le deja ver al mundo como el hace lo que es correcto tanto en salvar a un pecador que se arrepiente y cree; como en senticar al infierno a quienes escuchando de su Amor lo rechazan.

En la muerte de su Hijo; Dios castiga el pecado y es libre para extender su perdón a los que creen. Y a su vez sigue airado con los que rechazan tan grande acto de amor.

Esta segunda historia que vamos a estudiar hoy; es un excelente Anticipo del Evangelio que nos sera explicado muchos años después en la Cruz. Y nos prepara para entender como un Dios Santo puede actuar con Misericordia, perdonar el pecado de su pueblo.

I. [Zimri y Finees] (vs.6-9).

En los versículos 6 al 9 tenemos dos personajes completamente diferentes en sus acciones el uno de otro.

El vs.6 presenta a uno de ellos como “un varón de los hijos hijos de Israel”; el escritor bíblico nos da su nombre mas adelante; Zimri (vs.14). Pero ahora solo desea concentrarse en su atros acto de pecado.

A. El pecado de Zimri (vs.6).

Si bien es cierto que ya el NT en boca tanto de Jesus como de Pablo nos ha dejado saber de nuestra condición de “esclavos” del pecado (Jn8:34 o Rom6:16). No es hasta que ves algo como lo que este hombre hizo que lograr ser cociente y estar alerta del poder “seductor” que tiene el pecado y capacidad de enceguecernos haciéndonos incencibles e irracionales.

Dos cosas que deben resaltarse en las acciones de este hombre son:

El trae a esta mujer madianita al campamento; y el escritor bíblico nos dice: mientras aun se lloraba y se sufrían los efectos de este mismo pecado en el pueblo.

El pecado puede ser tan seductor en su oferta de placer que enceguece ante nuestros ojos cualquier advertencia de destrucción o de peligro.

Algunos estudioso ven en este hombre un acto mucho mas osado que el de los hombres juzgados en los vs.1 y 2. Pues estos salieron al campamento moabita y adoraron allí a Baal-peor. Pero este estaba trayendo al propio campamento israelita a esta mujer madianita.

El pecado con su poder seductor puede insensibilizar a tal punto nuestras conciencias, que podemos aun hasta llegar a romper limites morales, legales y hasta familiares con tal de auto-complacernos.

En Lc15 en la preciosa parábola del Hijo Prodigo se ilustra este poder “seductor” y “enceguecedor” al decir que después que este hijo rebelde había tocado fondo y esta en el estado de miseria mas bajo; entonces: “Volvió en sí” la NTV traduce “Cuando finalmente entro en razón”.

La ceguera y la seducción del pecado hace que muchos tanto fuera como dentro de la iglesia “pierdan la razón”. O sino de que otra forma se le puede llamar a que:

Hombres casados, y padres de familias abandonen su hogar por ir detrás de una nueva relación adultera.

O que mujeres casadas alimenten “amores platónicos” o “relaciones a través de las redes sociales”. Que les hacen divorciarse mas de la realidad para vivir un mundo de solo fantasías.

Y que decir de adolescentes y adultos que comprándole la mentira del placer y de la autogratificacion a este mundo se exponen al sexo ilícito o a la pornografía.

Mis amados en cualquier de sus expresiones y manifestaciones el pecado se presentara como seductor, buscara enceguecer nuestros ojos, insensibilizar nuestras conciencias, nos llevara a actuar sin “razón” perdiendo la cabeza, y al final nos pagara con dolor y muerte.

Dios quiera hoy, despertar nuestras conciencias a aquellos de nosotros que estemos luchando y siendo seducidos por algún pecado. Dios y solo El, nos haga “volver en Si” y despertar antes que sea demasiado tarde.

Los versos 7 y 8 ahora nos presentan a un segundo personajes; Finees.

B. El celo de Finees (vs.7-8).

Según las palabras del propio Dios en el vs.11; nosotros debemos interpretar las acciones de Finees como unas que fueron motivadas por el celo que sentía por Dios.

La idea en este versículo 11 es que Finees actuó movido con el celo de Dios y de la misma forma en la que Dios hubiese actuado.

No cabe ninguna duda que aquellos que están en una relación personal y constante con Dios no pueden estar al mismo tiempo en una relación contante con el pecado (1Jn3:9). Mas bien los que están en una relación con Dios, responde ante el pecado exactamente como Dios lo haría.

Ellos los rechazan, ellos lo combaten, ellos lo confiesan, ellos se apartan de el. ¿Es así como tu respondes ante el pecado remanente que todavía mora en ti?

El acto de Finees no puede ser tomado a la ligera en esta segunda historia. De hecho es el punto principal alrededor del cual toda ella gira.

En los vrs. 10-13; Dios pronuncia su “aprobacion” ante tal acto de obediencia de Finees movido por su celo.

II. [Dios toma como expiación el acto de Finees] (vs.10-13).

En todos estos versículos hay una palabra clave que nos explica la forma en la que Dios tomo este acto de obediencia de Finees y debido a eso El extendió su Perdón a su pueblo.

Esa palabra es “Expiación”.

A. “Expiación”: Significa literalmente perdonar.

Esta palabra tiene muchos otros sinónimos o formas de traducirse en la Biblia; en especial en el AT. Cada una de ellas ilustran la forma en que Dios trata con el pecado, expresando su Perdón.

Cubrir o Pasar por alto: Es como si Dios pusiera su misericordia sobre los pecados de forma que ya no los ve o que los pasar por alto. En el AT esta idea estaba expresada en los sacrificios siendo Cristo el sacrificio final por todos los pecados.

Propiciar: Tiene que ver con que la ira sea aplacada y satisfecha, para que así no haya impedimento para el perdón. La sangre en el AT se ponía sobre “el propiciatorio” es decir el lugar donde la ira de Dios por el pecado de sus pueblo seria calmada. Cristo es esa propiciación para nosotros.

Reconciliar: La idea es que cuando se perdona la ofensa, la relación queda restablecida entre ambas partes. Jesucristo es el único mediador que puede reconciliar a Dios y al hombre.

Esta palabra aparece 16 veces en el Capitulo 16 del libro de Levíticos en donde Dios instruyo a su pueblo acerca de como se acercarían una ves al AÑO todo el pueblo en el día de la Expiación, para ofrecer sacrificios por los pecados de todo pueblo y recibir el perdón de Dios.

B. Teniendo todo esto en mente respecto a la Expiación en general; ahora podemos afirmar DOS cosas en nuestro texto:

El acto de Finees; es tomado por Dios como un acto de Expiación que hace que su furor/su ira se aparte del pueblo (vs.11).

La idea de que el “furor/la ira” de Dios se aparte de su pueblo aparece dos veces en este capitulo.

Vs.4 como resultado de que el pecador reciba la sentencia de muerte por su pecado.

Y aquí, vs.11 al Dios tomar la obediencia de Finees como un acto que trae Expiación y perdón sobre el pueblo.

Oh Dios castiga el pecado, trayendo muerte sobre el pecador o Dios expía/perdona el pecado por la obediencia de otro. (Y ese otro solo puede ser Jesus).

El acto de Finees; es tomado por Dios como un acto de Expiación no solo por el, sino también a favor de sus hermanos (vs.13).

Todo Israel dejo de sufrir la mortandad (vs.8b) después de que Finees matara a Zimri y Dios tomara este acto de obediencia como un acto de expiación.

En otras palabras lo que hizo “uno” sirvió para la bendición de “todos”. En la Biblia a eso le llamamos la Doctrina de la Imputación.

Es decir que Dios transfiere ya sea el pecado y sus consecuencias de Uno a todos. Y eso fue lo que paso con Adán y toda la raza humana.

Pero también eso es lo que paso con Cristo; el segundo Adán. Dios le imputa, le transfiere a todo aquel que cree la vida eterna y la bendición que solo Cristo merece y que gano con su vida de perfecta obediencia; a lo que creen en su nombre.

Dios puede ser Misericordioso:

No porque cierre los ojos ante el pecado de su pueblo; sino porque castigo el pecado de sus hijos en Cristo y por el sacrificio perfecto de su Hijo les extiende perdón/ Expiación de pecados.

No solo Dios le Imputo/ les transfirió a sus hijos la justicia perfecta que Cristo gano con su obediencia para que ellos ahora puedan acercarse a El y gozar de su comunión como hijos amados.