Evidencias del Nuevo Nacimiento
El nuevo nacimiento es necesario para todo aquel que se considera creyente. "Tenemos que nacer de nuevo, sí queremos ver el reino de Dios".
INTRODUCCIÓN
1. ¿Quieres ver el Reino de Dios?
2. NACER DEL AGUA Y DEL ESPÍRITU:
1. COMUNIÓN CON DIOS:
2. SENSIBLES AL PECADO EN MI VIDA:
3. COMUNIÓN CON SU PALABRA
4. IMITAR A CRISTO
5. AMOR REAL Y PRÁCTICO POR OTROS CREYENTES
6. ¿AMAS MÁS EL MUNDO?
7. PRACTICAR JUSTICIA
8. DIOS NOS LLAMA A PURIFICARNOS
CONCLUSIÓN:
Evidentemente, el cambio que nuestro Señor declara aquí necesario para la salvación no es superficial ni ligero. No es una mera reforma, una corrección, un cambio moral o una alteración exterior de la vida. Es un profundo cambio del corazón, de la voluntad y del carácter. Es una resurrección. Es una nueva creación. Es pasar de muerte a vida. Es la implantación en nuestros corazones de un nuevo principio procedente de lo alto. Es dotar de existencia a una nueva criatura, con una nueva naturaleza, nuevos hábitos de vida, nuevos gustos, nuevos deseos, nuevos apetitos, nuevos juicios, nuevas opiniones, nuevas esperanzas y nuevos temores. No es nada más ni nada menos que esto lo que está implicado cuando nuestro Señor declara que todos necesitamos “nacer de nuevo”.