ÍDOLOS: Salud y Prosperidad
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Introducción:
Introducción:
La popularidad de la prosperidad.
El mensaje de la prosperidad.
Los mensajeros de la prosperidad.
Tres peligros del ídolo de la prosperidad.
El ídolo de la prosperidad lleva a dudar de la sabiduría de Dios.
El ídolo de la prosperidad lleva a dudar de la sabiduría de Dios.
La sabiduría de Dios no siempre tiene sentido a nuestra perspectiva, porque nuestra perspectiva no es tan grande como la de Dios.
La vida de Job nos revela que la incomodidad presente tiene un propósito divino, aunque nunca se expresa ese propósito.
Ese propósito divino no nos es siempre revelado. La vida de Job nos revela que la incomodidad presente tiene un propósito divino, aunque nunca se expresa ese propósito.
Ilustración: VIDEO- Panorama del libro de Job.
Aplicación:
El ídolo de la prosperidad lleva a perderse de la salvación de Dios.
El ídolo de la prosperidad lleva a perderse de la salvación de Dios.
Muchos siguieron a Jesús por las grandes señas, o milagros, que él hacía, sanando a los enfermos, discapacitados, y endemoniados que le traían. En , Jesús alimentó a un grupo de por lo menos cinco mil hombres (expertos estiman entre diez y quince mil contando a mujeres y niños).
Después de esto, Jesús fue al otro lado del mar de Galilea, el de Tiberias.Y le seguía gran multitud, porque veían las señales que hacía en los enfermos.Entonces subió Jesús a un monte, y se sentó allí con sus discípulos.Y estaba cerca la pascua, la fiesta de los judíos.Cuando alzó Jesús los ojos, y vio que había venido a él gran multitud, dijo a Felipe: ¿De dónde compraremos pan para que coman éstos?Pero esto decía para probarle; porque él sabía lo que había de hacer.Felipe le respondió: Doscientos denarios de pan no bastarían para que cada uno de ellos tomase un poco.Uno de sus discípulos, Andrés, hermano de Simón Pedro, le dijo:Aquí está un muchacho, que tiene cinco panes de cebada y dos pececillos; mas ¿qué es esto para tantos?Entonces Jesús dijo: Haced recostar la gente. Y había mucha hierba en aquel lugar; y se recostaron como en número de cinco mil varones.Y tomó Jesús aquellos panes, y habiendo dado gracias, los repartió entre los discípulos, y los discípulos entre los que estaban recostados; asimismo de los peces, cuanto querían.Y cuando se hubieron saciado, dijo a sus discípulos: Recoged los pedazos que sobraron, para que no se pierda nada.Recogieron, pues, y llenaron doce cestas de pedazos, que de los cinco panes de cebada sobraron a los que habían comido.Aquellos hombres entonces, viendo la señal que Jesús había hecho, dijeron: Este verdaderamente es el profeta que había de venir al mundo.
El próximo día, la misma multitud siguió a Jesús a Capernaum. Él les resalta que ellos le estaban buscando por la satisfacción física que Él les había provisto el día anterior, . Ellos todavía demandaron una señal para creer en Él, .
Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os saciasteis.
Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os saciasteis.
Le dijeron entonces: ¿Qué señal, pues, haces tú, para que veamos, y te creamos? ¿Qué obra haces?Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dio a comer.
Le dijeron entonces: ¿Qué señal, pues, haces tú, para que veamos, y te creamos? ¿Qué obra haces?Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dio a comer.
Jesús les responde que Él es quién les verdaderamente saciará, . Al contestar las dudas de los judíos, otra vez, les afirma que Él es el verdadero pan del cielo quien los saciará, .
Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: No os dio Moisés el pan del cielo, mas mi Padre os da el verdadero pan del cielo.Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.Le dijeron: Señor, danos siempre este pan. Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: No os dio Moisés el pan del cielo, mas mi Padre os da el verdadero pan del cielo.Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.Le dijeron: Señor, danos siempre este pan. Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.
Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.
Esto hizo dudar a varios, . Y Jesús fue aún más específico, . Jesús les hablo de una forma fuerte porque sabía que muchos aún no creían en Él, que le seguían sólo por lo que Él les proveía, y no por quién era Él realmente, el Hijo de Dios, .
Entonces los judíos contendían entre sí, diciendo: ¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?
Entonces los judíos contendían entre sí, diciendo: ¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?
Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero. Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él.
Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero. Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él.
Pero hay algunos de vosotros que no creen. Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían, y quién le había de entregar.
Pero hay algunos de vosotros que no creen. Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían, y quién le había de entregar.
Desde entonces, muchos dejaron de seguirle y se perdieron de la salvación en Él, .
Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con él.
Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con él.
Ilustración: Centenares de personas que buscan a Dios cuando las cosas andan mal, pero cuando todo está “tranquilo” no ven la necesidad que seguir a Dios. Se ve también personas con la actitud opuesta, que siguen a Dios y son fieles mientras todo anda bien, pero el cuando se encuentran atravesando circunstancias difíciles, le dan la espalda a Dios y dejan de seguirle.
Aplicación:
El ídolo de la prosperidad lleva a despreciar la bendición de Dios.
El ídolo de la prosperidad lleva a despreciar la bendición de Dios.
La bendición de ser un instrumento de la obra de Dios, ; .
Y le preguntaron sus discípulos, diciendo: Rabí, ¿quién pecó, éste o sus padres, para que haya nacido ciego?Respondió Jesús: No es que pecó éste, ni sus padres, sino para que las obras de Dios se manifiesten en él.
Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo.
Dios permite lo que odia para cumplir lo que ama. —Joni Eareckson tada
La bendición de experimentar la gracia de Dios, , .
Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera;respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí.Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.
a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte,
La bendición de un testimonio resplandeciente del poder y gracia de Dios, .
Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros,que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados;perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos;llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos.Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal.
Ilustración: Joni Eareckson Tada
Prefiero estar en esta silla de ruedas conociendo a Dios, que de pie sin Él.
El sufrimiento provee el gimnasio en donde mi fe es ejercitado.
Yo tenía que ser sanada de mi deseo de ser sanada.
Lo mas débil que me sentía, más sobre [Él] me inclinaba, y lo más sobre [Él] que me inclinaba, mas fuerte lo encontraba.
Un problema que tengo con el movimiento de sanidad de fe es que tiende estar enfocado solamente sobre el aspecto físico de la sanidad. Pero Jesús siempre se alejaba cuando la gente se le acercaba solo para llenar sus necesidades físicas… Su verdadero interés era sanar el alma.
Una respuesta que dice “no” a la petición de sanidad física me ayuda a conocer más [Su] gracia y aumenta mi compasión por otros… Compartir [Su] sufrimiento es la sanidad más profunda… Es la verdadera sanidad.
Aplicación:
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