Juzgar a los demas

El Juzgar a los Demás INTRODUCCIÓN ¡He aquí un tema sumamente interesante para nuestra meditación en nuestra reunión de hoy en la Célula! ¡Cuántas veces somos seducidos a caer en esta actitud deshonesta de condenar o de juzgar precipitadamente a las demás personas! El texto del Evangelio de Lucas nos da las pautas para refrenar nuestra lengua y nuestros impulsos a fin de que nos seamos encontrados por el Señor como jueces de nuestros hermanos o de los demás. Pueda el Espíritu Santo guiarnos en el estudio de hoy y llevarnos a tomar las acciones del Maestro Jesús en nuestro vivir diario. Temas: Aceptación, Acusación, Aprendizaje, Ayuda, Beneficios, Consecuencias, Críticas, Enseñanza, Juzgar a los demás, Perdón, Promesas, Regalos, Relaciones. COMIENCE • ¿De qué persona sabia ha aprendido usted más hasta ahora? • ¿Cómo se aplica en nuestras relaciones personales la expresión “el que la hace, la paga”? Lucas 6:37-42 “37 «No juzguéis y no seréis juzgados; no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados. 38 Dad y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo, porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir». 39 Les dijo también una parábola: «¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán ambos en el hoyo? 40 El discípulo no es superior a su maestro; pero todo el que sea perfeccionado, será como su maestro. 41 »¿Por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? 42 ¿O cómo puedes decir a tu hermano: “Hermano, déjame sacar la paja que está en tu ojo”, no mirando tú la viga que está en el tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu propio ojo y entonces verás bien para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano.” EXPLORE 1. ¿Qué promesas específicas hizo Jesús? (vs. 37 y 38). R.- 37 «No juzguéis y no seréis juzgados; no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados. Jesús dio 3 promesas específicas: 1. No juzguéis, y no seréis juzgados; 2. no condenéis, y no seréis condenados; 3. perdonad (soltad) y seréis perdonados (soltados). Nos advirtió en contra de juzgar a los demás, porque cuando lo hacemos seremos juzgados de una manera similar. • El juzgar al que Jesús se refiere es la crítica, la actitud y práctica de juzgar con hipocresía, el juzgar (condenar) duramente las faltas de otros y pasar por alto las faltas propias. Es el juzgar basándose en el odio, la envidia, el prejuicio y la maldad. Es el juzgar rápidamente las motivaciones de los demás. • Estamos llamadas a mostrar amor incondicional por los demás, a pesar que hagan cosas que no deben de ser aprobadas. Debemos tener mucho cuidado al juzgar a otros de esta manera porque al hacerlo nos juzgamos y nos condenamos a nosotros mismos. Rompemos este mandato cuando: • pensamos en lo peor de los demás • cuando sólo hablamos a otros de sus errores. • cuando juzgamos una la vida de alguien, sólo por sus peores momentos. • cuando juzgamos los motivos ocultos de los demás. • cuando juzgamos a los demás sin tener en cuenta a nosotros mismos en sus mismas circunstancias. • cuando juzgamos a los demás sin ser conscientes de que nosotros mismos seremos juzgados. 2. ¿Cuánto quería Jesús que dieran sus discípulos? ¿Por qué? (v. 38). R.- 38 Dad y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo, porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir». Jesús quiere que sus discípulos sean muy generosos al dar. Jesús nos anima a dar sin temor a quedarnos sin nada. Quiere hacernos libres del temor de dar demasiado. 3. ¿Qué les da Dios a los que dan? (v. 38). R.- 38 Dad y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo, porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir». Jesús nos dice que Dios nos da abundantemente cuando somos generosos, aunque nadie puede dar más que Él. Pero aquí no solo se refiere a dar cosas materiales sino también dar a otros amor, bendición y perdón. Nunca perdemos cuando damos las cosas según el modelo de la generosidad de Dios. 4. ¿Cómo resumió Jesús la importancia de extender la gracia, la misericordia y la ayuda a otros? (v. 38). R.- 38 Dad y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo, porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir». Jesús resumió la bendición que recibiremos diciendo: Dad y se os dará 5. ¿Qué dará Dios a cada persona? (v. 38). R.- 38 Dad y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo, porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir». Dios nos dará aún mucho más abundante de lo que demos a otros : se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando. Dios nos medirá a nosotros de acuerdo a la misma medida que utilizamos para los demás. Seamos generosas con el amor, el perdón y la bondad a los demás. Si queremos más de esas cosas de Dios, debemos dar más de estas cosas a los demás. 6. ¿Qué razón dio Jesús para desanimar al ciego de tratar de guiar a otros ciegos? (v. 39). R.- 39 Les dijo también una parábola: «¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán ambos en el hoyo? Esto es obvio. El ciego no puede guiar a otro ciego. Por lo tanto, no debemos buscar a otros hombres ciegos para que nos guíen, ni debemos tratar de guiar a los demás en nuestra ceguera. En su lugar, deberíamos hacer de Jesús nuestro líder, nuestro maestro, quien ve y sabe todas las cosas. Jesús nos enseña que primero seamos capaces de ver antes de atrevernos a guiar a otros; un ciego nunca servirá de buen guía. El discípulo que no está bien preparado, no debe atreverse a tomar las responsabilidades del maestro. Es indispensable que nos convirtamos y luego nos prepararemos bien antes de enseñar a otros. • Sant. 3:1, “Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación”. Jesús no quería que sus discípulos les hicieran caso a los fariseos. Más bien, deberían apartarse de ellos. • Rom. 1:26-28“26 Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas… 28 Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen”. En estas palabras de Jesús vemos la culpa de aquellos que son guías ciegos de ciegos. Vemos también nuestra responsabilidad de asegurarnos de que nuestros líderes no sean ciegos. 7. ¿Cómo se relacionan un discípulo y su maestro? (v. 40). R.- 40 El discípulo no es superior a su maestro; pero todo el que sea perfeccionado, será como su maestro. El discípulo no es superior a su maestro Si el maestro es ciego y el discípulo aprende y acepta todo lo que el maestro enseña, será otro ciego. El maestro ciego produce discípulos ciegos. • Mat. 10:24,25 “El discípulo no es más que su maestro, ni el siervo más que su señor. 25 Bástale al discípulo ser como su maestro, y al siervo como su señor. Si al padre de familia llamaron Belcebú, ¿cuánto más a los de su casa?” Aquí se refiere a la persecución. El discípulo de Jesús se identifica con su Maestro en todo. Si el Maestro sufre, entonces el discípulo también sufre. • Jn. 15:20, “Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la vuestra”. • Jn. 13:16, “El siervo no es mayor que su señor, ni el enviado es mayor que el que le envió”. mas todo el que fuere perfeccionado, será como su maestro. Vamos a llegar a ser como aquellos a los que seguimos, así que debemos elegir seguir a buenos maestros. Nunca un estudiante de Jesús debe atreverse a corregir al maestro, sino que debe tratar de ser todo el tiempo como su maestro. 8. ¿Cuál es el punto principal en la parábola de la viga y la astilla? (vs. 41 y 42). R.- 41» ¿Por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? 42 ¿O cómo puedes decir a tu hermano: “¿Hermano, déjame sacar la paja que está en tu ojo”, no mirando tú la viga que está en el tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu propio ojo y entonces verás bien para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano.” 9. ¿Cómo se llama a una persona que es incapaz de ver sus propios defectos? (v. 42) R.- 42 ¿O cómo puedes decir a tu hermano: “¿Hermano, déjame sacar la paja que está en tu ojo”, no mirando tú la viga que está en el tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu propio ojo y entonces verás bien para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano.” Jesús llamo “hipócrita” al discípulo que está ciego a sus propias fallas pero que siempre está listo para hacer de investigador de los defectos en la vida de los demás discípulos. Jesús nos advierte contra el hecho de buscar faltas en los demás. Es el intento de corregir la falta de alguien más cuando nosotros mismos tenemos la misma o mayor culpa. Jesús muestra que nosotros llegamos a ser mucho más comprensivas a nuestro propio pecado que a los pecados de otros. La manera en que Jesús usa esta palabra es en una manera fuerte de condenación. 10. ¿Qué se le exige a una persona antes de que pueda enseñar o instruir a alguien? (v. 42). R.- 42 ¿O cómo puedes decir a tu hermano: “¿Hermano, déjame sacar la paja que está en tu ojo”, no mirando tú la viga que está en el tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu propio ojo y entonces verás bien para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano. Cualquier discípulo que desee ser un maestro de otros debe ver claramente antes de atreverse a corregir la vida de los demás. Un ciego no puede ser guía de otros ciegos. Jesús no dijo que no era correcto ayudar a nuestro hermano con la paja en su ojo. Es un bueno ayudar a un hermano con la paja(pecado)en sus ojos, pero no antes de sacar la viga(pecado) que está en tu propio ojo. ANALICE 1. ¿Qué significa dar “una medida llena, apretada, sacudida y desbordante”? R.- Primeramente, se le da a Dios: No es porque Dios necesite dinero, Él es el dueño de todas las cosas. Al dar nosotras somos las beneficiadas. La bendición de dar: Para poder ser bendecidos se necesitan dos cosas, 1) Dar y 2) creerle a Dios, sin estas dos cosas no servirá de nada. Atreves de la biblia podemos ver este “secreto,” hay que dar para recibir. La acción de dar nos recuerda que vivimos por la gracia de Dios, como los pájaros y las flores, ellos no se preocupan por su futuro, y nosotros tampoco deberíamos hacerlo. Dar nos brinda una manera de expresar nuestra confianza en que Dios se ocupara de nosotros, tal como lo hace por las aves y los lirios. 2. ¿Cuándo resulta fácil juzgar a los demás? 3. ¿Por qué es importante no juzgar ni condenar a los demás? 4. ¿Qué tienen en común juzgar, condenar, perdonar y dar? 5. ¿A qué clase de dar se refirió Jesús cuando dijo: “¿Den, y se les dará”? R.- La mayoría de nosotros trabajamos muy duro por nuestro dinero y Dios es consiente que lo obtuvimos duramente y Él se alegra cuando le damos. El amor a Dios no solo se expresa con cantos y sentir algunas emociones agradables, si no que necesitamos también darle a Dios. Tenemos que dejar que la razón más grande de dar sea un acto de alabar y adorar a Dios, declarando nuestro amor al Señor. Hay muchas maneras con las que podemos honrar a Dios, con la adoración oración, acciones y obediencia, pero el dar de nuestro dinero es ciertamente una de las maneras más grandes con la cual podemos honrarlo. El honrar a Dios con nuestro dinero nos trae bendición automáticamente, cuando usted está dándole al Señor, lo está honrando con lo que Él le a dado, automáticamente está abriendo los cielos para que las bendiciones caigan sobre de usted. El libro de proverbios lo dice de la siguiente manera. • Proverbios 3.9–10 “Honra al Señor con tus riquezas y con lo mejor de todo lo que produces. Entonces él llenará tus graneros, y tus tinajas se desbordarán de buen vino.” Cuando usted da, debe de ver que es para que el Reino de Dios sea ampliado en la tierra y tocar a los que están a nuestro alrededor con el evangelio y por lo tanto dando, nosotros estamos contribuyendo con el Reino de Dios, así que debemos intentar ser dadores para ver que este dinero se convierta en oportunidades para que llegue a otros el mensaje del evangelio y puedan ser salvos. Cuando nosotros damos a otros los bendecimos y Dios tomara cuidado de nuestras necesidades. Eso lo promete Dios; Él se encargará de nuestras necesidades, no hay nada que Dios no hará a favor de aquel que ayuda a otros. • Mateo 10:42 “2Y si le dan siquiera un vaso de agua fresca a uno de mis seguidores más insignificantes, les aseguro que recibirán una recompensa». Cuando nos preocupamos en ayudar a otros, Dios asume la responsabilidad de nuestros problemas y eso es una bendición real, porque Él sabe manejar nuestras dificultades más de lo que podemos. Nuestras bendiciones compartidas con otros regresan a nosotros. Mientras más bendices a otros, mientras más ayudas a otros, más bendiciones de Dios vienen sobre nosotras Dad y se os dará, medida buena… Esto nos dice que no solo se nos dará de regreso con bono extra y bendición extra. No podemos ganarle a Dios, mientras más trata usted de bendecir a otros a su alrededor, Dios entonces dirá; voy a derramar más bendiciones sobre ti. Mientras tú bendices a otros yo me encargare de retornar sobre ti la bendición. • Proverbios 11.24–25 NTV Da con generosidad y serás más rico; sé tacaño y lo perderás todo. El generoso prosperará, y el que reanima a otros será reanimado. 6. ¿Qué clase de ceguera tenía Jesús en mente cuando habló del ciego guiando a otro ciego? 7. ¿De qué manera es un discípulo bien entrenado como su maestro? R.- El maestro es el modelo o ejemplo para el alumno. La palabra “perfeccionado” quiere decir completamente enseñado; cuando el discípulo aprenda todo lo que el maestro pueda enseñar, será como él, sea bueno o malo. 8. ¿Qué circunstancias molestas pudo haber tenido Jesús en mente cuando dijo la parábola de la astilla y la viga? R.-La hipocresía de los fariseos. 9. ¿Qué defectos en nosotros mismos tendemos a pasar por alto? 10. ¿Quién es el más calificado para señalar los defectos de los demás? R.- solo Dios puede juzgarnos. CONCLUSION: No tengamos miedo el dar tanto para el Reino de Dios como darle a otros, todo esto Dios lo toma en cuenta, y ciertamente trae bendición y recompensa, debemos enseñarnos a dar sin esperar nada a cambio, quizás en este mundo no veamos la bendición pero ciertamente en el cielo Dios la tiene, quitemos de nuestros corazones esa tacañees que no nos deja recibir bendiciones de parte de Dios y demos con alegría con corazones dispuestos a llevar el reino de Dios hacia adelante. Honremos al siervo que Dios ponga en la iglesia, tenga o no tenga necesidad usted de con gozo con alegría no espere nada a cambio que las bendiciones se le multiplicaran, entiendo que ha habido ocasiones donde se abusa del dar y del evangelio de la prosperidad, yo no creo en un evangelio de prosperidad, eso es una mentira, y de aquellos que han abusado y comercializado con la fe, ciertamente Dios ya les tiene su recompensa. Tampoco puedo negar que en cuestión de dar hay bendición pues lo puedo ver a través de la biblia, ¿Usted llegara a ser rico si da? no lo se, pero si creo que va a ser bendecido como también creo que la riqueza esta con el Señor. APLIQUE • ¿En qué relación de su vida quisiera usted mostrar más gracia, misericordia y generosidad? ¿Cómo puede hacerlo? • ¿De qué maneras puede ser usted esta semana un discípulo más diligente de su Maestro celestial?