Viviendo como hijas consagradas.
Vidas consagradas • Sermon • Submitted
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· 19 viewsCuando no hay un verdadero cambio de vida espiritual en la persona que eleva las oraciones, tendrá estorbo hasta la presencia de Dios. Por esto el Apóstol enfatiza una vida santa sin ira ni contiendas para aquellos que se dirigen a Dios en oración. Además, la palabra “Quiero” de Pablo introduciendo el texto de 1 Tim.2:8 implica que el apóstol desea que todos los que vayan a elevar las oraciones sean personas consagradas, sin ira ni contienda.
Notes
Transcript
Introducción:
Un lenguaje figurativo
De las varias figuras literarias utilizadas a lo largo de toda la Biblia, el apóstol Pablo, en este punto particular emplea un lenguaje figurativo para presentar una condición en la que se debe orar a Dios. En este texto se emplea la figura literaria conocida como “Metonimia”.
¿Qué es la metonimia?
Es un lenguaje que se clasifican entre las figuras de relación, lo que significa el uso de una palabra en lugar de otra, sugerida por la primera.
Es decir, se pone la causa por el efecto o la señal por la realidad que indica el símbolo. Este tipo de figura es encontrada en varias partes de la Biblia.
En el caso en 1 Timoteo 2:8. Pues, veamos lo que dice el apóstol en este texto: “Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda.”
Aquí estamos ante una metonimia, puesto que, el apóstol menciona la causa (Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar) refiriéndose en realidad al efecto (levantando manos santas, sin ira ni contienda)
Entonces Pablo, en lugar de indicar la actitud y vida espiritual correcta al orar, utiliza la frase “levantando manos santas, sin ira ni contienda”.
Pero esta frase es sugerida por la primera, es el efecto de la primera ¿cuál? La oración en todo lugar.
Lo que significa que para orar en todo lugar, es decir sin límite, se debe tener una vida santa, de piedad, consagrada a Dios.
Es la actitud correcta al orar, indicando una vida piadosa..
Al orar por otros, la persona, espiritualmente, delante de Dios tiene que estar llevando una vida pura. De lo contrario su oración no será atendida por Dios. Juan 9:31 declara “Y sabemos que Dios no oye a los pecadores; pero si alguno es temeroso de Dios, y hace su voluntad, a ése oye.”
Ahora bien, hay tres énfasis en el texto, uno conlleva a los otros dos:
Santidad , que dará como resultado esperado, sin ira ni contienda.
Pensemos entonces, como vivir en esta condición, afecta nuestra vida espiritual y consagración a Dios.
Si queremos servir a Dios como él espera, no debemos ser contenciosos.
…EL SIERVO DEL SEÑOR NO DEBE SER AMIGO DE CONTIENDAS, SINO AMABLE PARA CON TODOS…” (2 Timoteo 2:24)
Mire esto: Las personas contenciosas no nacen como tal; son criadas así. En la mayoría de los casos, utilizan las herramientas que les fueron dadas para lograr por medio de intimidación lo que ellas quieren o desean; a estas personas les llamamos ‘peleones’.
Estamos hablando de una actitud arraigada en la persona y no rendida al Señor, puesto que sabemos lo que la Biblia nos enseña acerca de estar en Cristo: ¨De modo que si alguno está en Cristo, nueva Criatura es..........2 Cor 5:17
Ahora es difícil trabajar con una persona así, y la Biblia también enseña que nos debemos apartar de ella. Romanos 16:17-18 ¨Mas os ruego, hermanos, que os fijéis en los que causan divisiones y tropiezos en contra de la doctrina que vosotros habéis aprendido, y que os apartéis de ellos´
La persona contenciosa es una persona con la que nunca podrás estar de acuerdo, solamente estará fijándose en las diferencias y señalándolas.
Tal vez nos preguntemos: “¿Cómo puedo reconocerle sí”.
En primer lugar, cuando enfrentes a una persona contenciosa, su espíritu saldrá siempre a la superficie. Salomón dijo: “No reprendas al escarnecedor, para que no te aborrezca; corrige al sabio, y te amará” (Proverbios 9:8)
¡No acepta reprensión, ni corrección!
2. El servicio a Dios es de verdaderos creyentes, discípulos, gente que ha nacido de nuevo.
En Colosenses 3: 8-10 el apóstol Pablo hablando a la iglesia en Colosas, dice en el versículo 8 ¨8 Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca. 9 No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos, 10 y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno.
Hay tres actitudes que Dios espera que ya no estén en nosotros hablando de este tema una vez que le hemos conocido, que le hemos entregado nuestra vida a él:
Ira: Sentimiento de enfado muy grande y violento.cólera, furia.
Enojo: Es disgustarse por algo.
Malicia: Maldad, cualidad de malo, ocultando la intención con que se procede
Pablo también hablando de la nueva vida en Cristo enseña: Efesios 4.26-27
¨Airados, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis lugar al diablo¨
3. La mujer que sirve a Dios no debe ser contenciosa
Que dice la Biblia de la mujer contenciosa:
“Gotera continua en tiempo de lluvia y la mujer rencillosa, son semejantes; Pretender contenerla es como refrenar el viento, O sujetar el aceite en la mano ”. Proverbios 27:15-16
Pregúntese hermana a sí misma, “¿Soy una mujer contenciosa?”
Tal vez esa pregunta es difícil de responder porque no está exactamente segura de qué es una mujer contenciosa.
¿Son sus conversaciones con las personas usualmente o muchas veces una pelea para ver quién ganará o logrará que las cosas se hagan a su manera? ¿Gana usted muchas veces?
¿Pelea con su esposo?, ¿Hay contiendas en su hogar?, ¿Tiene usted un espíritu peleonero?, ¿Es usted una “sabelotodo”? ¿O tiene solamente un comentario contrario a lo que su esposo, o las demás personas dicen?
Mire lo que Dios nos dice :
Proverbios 17:14 ¨ El que comienza la discordia es como quien suelta las aguas; Deja, pues, la contienda, antes que se enrede.
Proverbios 17:14 ¨Mejor es un bocado seco, y en paz, Que casa de contiendas llena de provisiones.
2 Timoteo 2:23 ¨ Pero desecha las cuestiones necias e insensatas, sabiendo que engendran contiendas.
Conclusión:
Conclusión:
¿Queremos agradar a Dios?
Dios espera que le sirvamos sin ira, ni contiendas, que mostremos en nuestra manera de vivir, que estamos viviendo en Cristo, apartados de ira, enojo, de malicia y todo aquello que antes estaba en nosotros, que pertenecía a nuestra vida antigua, y sigamos el consejo del apóstol Pablo Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados .Efesios 5:1