El Espíritu de Dios y el entendimiento humano
El Espíritu de Dios y el entendimiento humano
28Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. 29Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días.
Aunque todos los creyentes han recibido el don del Espíritu Santo, las Escrituras señalan a Dios dando ciertos dones especiales a individuos para el cumplimiento de tareas específicas.
Un don espiritual puede tener la intensión de equipar su receptor para una función específica o cargo asignado. Aquellos que son equipados de esta manera necesitan el poder habilitador del Espíritu de Dios para realizar sus tareas asignadas.
16Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. 17Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.
La habilidad divina de un creyente a usar un idioma, desconocido para el hablante. El don de lenguas puede ser utilizado para alabar a Dios o para enunciar un mensaje de Dios que, complementado con el don de interpretación de lenguas, edifica a los demás creyentes. Es de notar que “lenguas” puede a veces significar simplemente “otros idiomas”.
Es dado a creyentes particulares Hch 2:4 Ver también 1 Co 12:11,30 no es universal entre los cristianos
Cuando los godos de Rumanía atacaron Asia Menor el 264, tomaron numerosos prisioneros griegos que profesaban el cristianismo. Cuando ya confiaban en que estos no se volverían contra ellos, quedaban en libertad bajo su nuevo dominio. Entre estos griegos, se hallaba un hombre que contrajo matrimonio con una mujer goda, y cuyo nieto, Ulfilas, llevó a cabo una gran labor misionera dentro de este pueblo bárbaro y pagano. Lo que en principio parecía una desgracia para los cristianos de Asia Menor, se convirtió en una sutil infiltración que permitió a Ulfilas predicar el Evangelio con excelentes resultados.
Gracias a sus conocimientos del griego y de la lengua de los godos, Ulfilas se propuso traducir los textos sagrados al idioma gótico. Pero había un problema: los godos no tenían un idioma escrito, sino oral, y sus únicos símbolos escritos eran unos pocos caracteres rúnicos que se empleaban en sus rituales mágicos. Lejos de amilanarse ante esta dificultad, Ulfilas creó un alfabeto gótico usando letras griegas para representar sonidos góticos. Así, fue el responsable de la primera traducción de la Biblia al idioma gótico.
Para simplificar la teología que transmitía en sus discursos, Ulfilas adoptó el arrianismo como enseñanza principal, y por ello esta corriente de pensamiento llegó a ser la creencia religiosa predominante entre las tribus bárbaras germánicas.
Aplicación:
Misionero: El Señor levanta vocaciones misioneras en el momento y lugar donde las considera necesarias, y permite que su Evangelio prospere incluso en los contextos más hostiles.
Arrianismo: Doctrina que considera a Jesús como un ser creado por Dios, y no Dios mismo, en un intento de simplificar la teología de la trinidad.
Comisión: La gran comisión es imparable; el Evangelio se extiende aun cuando requiere crear un lenguaje escrito para que se pueda transmitir entre aquellos que tan solo tienen una lengua de tradición oral.
ENTENDIMIENTO. Un término bíblico usado para referirse a la comprensión de significados, diferenciado de la mera aprehensión de hechos o datos (Dn. 12:8; Mt. 13:13–14). Es la traducción más frecuente del hebreo bîn, bînāh («entendimiento, sabiduría, conocimiento, significado»), de una raíz para «separar (mentalmente), para distinguir». El AT se refiere al entendimiento como el don de Dios (1 R. 3:9), a través de la palabra (Sal. 119:104). En el paralelismo de Proverbios 4:5 es un sinónimo de sabiduría, una virtud intelectual muy exaltada en Proverbios. En 1 R. 3:9 es asociado con el discernir entre lo bueno y lo malo, un uso que se ajusta muy bien a su significado esencial.
Los términos más usados en el NT son noeō («ponderar, pensar, entender»), ginōskō («saber, estar consciente de»), y suniēmi («enviar o añadir, entender a fondo, percibir claramente») y sus derivados.
En las Escrituras, el repetido contraste entre «el oír» y «el entender» (Neh. 8:8; Is. 6:9–10; Mr. 4:12; 7:14; Hch. 28:27, etc.) es el mejor indicio del significado de este concepto. Entender implica un conocimiento a fondo, además de una mera aprehensión del dato dado. De manera que, particularmente en las cosas espirituales, el entendimiento es un don divino (Sal. 119:34, 73; 2 Ti. 2:7; 1 Jn. 5:20); el entendimiento de uno puede ser «abierto» (Lc. 24:45); «iluminado» (Ef. 1:18) o, por el contrario, «entenebrecido» (Ef. 4:18). Es un resultado de la fe (Heb. 11:3); es esencial para el conocimiento de la voluntad de Dios (Col. 1:9); es riqueza espiritual (Col. 2:2); puede sobrepasar los logros mismos que una persona haya logrado en amor (1 Co. 13:2).
La cita frecuente en el NT de Isaías 6:9ss. (p. ej., Mr. 4:12; Mt. 13:13–14; Jn. 12:40; Hch. 28:26, 27) indica la estrecha relación entre el entendimiento de las cosas de Dios y la sujeción obediente a la voluntad de Dios (cf. 1 Co. 1–2).
46. Un caso de envidia sana
Fil 1:15.
Cuando los godos cristianos tuvieron la Biblia escrita en su idioma, a otras tribus bárbaras les entró un poco de sana envidia. Los hunos, que antaño fueron temidos por sus feroces guerreros, ahora se afanaban en idear para su idioma una escritura que les permitiera disponer de la Biblia en su lengua. Para ello, usaron letras siríacas que representaran los sonidos hunos, creando así un nuevo lenguaje escrito del que derivaron idiomas como el mongol y el manchú.
Una vez más, el Evangelio sorprendía al mundo al abrirse paso incluso entre aquellos que habían sido tachados de indomables, obrando el milagro de ver a un pueblo guerrero abandonando la espada para tomar la pluma.
Aplicación:
Envidia: Pablo nos exhortó a anhelar los mejores dones y a desechar las vanas envidias, pero bueno es el celo por la Palabra de Dios, bueno es desear su conocimiento y difusión.
Expansión del Evangelio: El Evangelio se ayuda a sí mismo despertando en los corazones de los creyentes el deseo de hacerlo prosperar; no hay dificultad que la fe no pueda vencer.
Biblia: Debemos agradecer a todos aquellos que pusieron su empeño y su saber en la traducción de los textos sagrados, de forma que tengamos acceso a ellos en nuestro idioma.
Cultura: El Evangelio no solo ha transformado corazones, sino que también ha tenido notables aportaciones culturales, pues muchas lenguas como el mongol y el manchú se elaboraron con el propósito de poder conocer el contenido de la Biblia.