Bienaventurados los de Limpio Corazón
El sermón del Monte • Sermon • Submitted
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· 251 viewsLa promesa de la santidad, de como esta detona el poder de Dios en nuestras vidas
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Handout
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El Corazón
El Corazón
¿Qué es el corazón?
Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
Diferentes culturas a lo largo de la historia han tenido diferentes concepciones de cómo funciona el cuerpo humano, y esto también es cierto para los antiguos escritores israelitas de la Biblia. Sabían que el corazón era un órgano, lo entendían como el cofre que sostiene la vida; incluso hay un ataque al corazón mencionado en la Biblia, como Nabal "cuyo corazón murió dentro de él y se convirtió en una piedra".
Pero por la mañana, cuando ya a Nabal se le habían pasado los efectos del vino, le refirió su mujer estas cosas; y desmayó su corazón en él, y se quedó como una piedra.
Pero los autores bíblicos hablan sobre el corazón de muchas otras maneras que pueden parecer extrañas para los lectores modernos. Eso se debe a que los israelitas no tenían ningún concepto del cerebro ni ninguna palabra para describirlo. Entonces imaginaron que toda la actividad intelectual de un ser humano tiene lugar en el corazón. Por ejemplo, si tú conoces con tu corazón; el corazón es donde entiendes y haces conexiones. En el libro de Proverbios, la sabiduría mora en el corazón, y tu corazón es lo que usas para discernir entre la verdad y el error.
Entonces, el corazón es donde piensas y le das sentido al mundo, pero hace más. En la Biblia, el corazón es también donde sientes emociones. Siente dolor en su corazón, como Hannah cuando no podía tener hijos. De hecho, la frase "corazón roto" viene del hebreo bíblico. También experimenta miedo en su corazón; en realidad puede deprimirse o angustiarse.
Pero por el otro lado, tu corazón es donde experimentas la alegría. En hebreo, ser feliz es ser "bueno de corazón" o tener un "corazón de alegría".
Entonces el corazón es el generador de vida física y también tu vida intelectual y emocional, pero hay más. En el hebreo bíblico, el corazón es donde tomas decisiones motivadas por tus deseos. David "tuvo en su corazón construir un templo para Dios". Su corazón es donde se centran sus deseos; se llaman "los deseos de su corazón", y si realmente quiere algo, lo buscará. Como Natán le dice a David, "lo que está en tu corazón, ve y hazlo".
Entonces, en la Biblia, el corazón es el centro de todas las partes de la existencia humana. Como en el Proverbio, "guarda tu corazón, porque de él mana la vida".
El profeta Jeremías creía que el corazón humano estaba fundamentalmente roto; "El corazón de un humano es engañoso sobre todo, irreversiblemente enfermo, que puede entenderlo". Observó a toda una generación alejarse de Dios y comenzar a sacrificar a sus hijos como si fuera algo bueno.
Por eso, en la imaginación de los profetas hebreos, la única esperanza para la humanidad es la renovación total del corazón humano. Moisés predijo que si Israel alguna vez amaría realmente a su Dios, su lev tendría que ser "circuncidado", una metáfora sorprendente de eliminar el mal y la obstinación del corazón humano. David, después del asesinato y el adulterio, suplica a Dios que "cree en mí un corazón puro". Ezequiel esperaba un día en que Dios "quitara el corazón de piedra" y le diera a su pueblo un "corazón nuevo de carne suave". Esto es similar a la esperanza de Jeremías de que Dios escriba los mandatos de la Torá en el nivel de Su pueblo.
Lo que nos lleva todo el camino de vuelta al Shema. Todos los días, el pueblo de Dios está llamado a dedicar a Dios su cuerpo y mente, sus sentimientos y deseos, su futuro y sus fracasos. Esto es lo que significa Amar al Señor, Dios mío, con todo tu corazón.
El corazón es nuestro GPS, en consecuencia amar a Dios con todo el corazón nos da dirección.
¿A qué se refiere el Señor entonces al hablar de ser “Limpios de Corazón ?
El Señor se refiere a los íntegros, a los que han decidido vivir una vida de Santidad.
La Santidad de Dios
, veces santo, 3 veces íntegro
Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, santo, santo, Jehová de los ejércitos; toda la tierra está llena de su gloria.
La Santidad de Dios se revela en su Naturaleza
La Santidad de Dios se revela en su Naturaleza
Es Perfecto en Todos sus caminos.
El es la Roca, cuya obra es perfecta,
Porque todos sus caminos son rectitud;
Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él;
Es justo y recto.
Él es únicamente Santo
No hay santo como Jehová;
Porque no hay ninguno fuera de ti,
Y no hay refugio como el Dios nuestro.
Por eso estamos convencidos de que nuestro Señor va a cumplir todas sus promesas sobre nosotros. no es hombre para mentir, es absoluta y esencialmente íntegro.
¿Cómo pues puede un Dios esencialmente Santo, encontrarse con nosotros que somos esencialmente pecadores?
En virtud de ello el Señor, tiene su punto de encuentro con nosotros por medio de Nuestro Señor Jesucristo, pues al saldar la plenitud de la deuda, podemos encontrarnos nuevamente con el Padre. (por ello Jesús se sintió desamparado en la cruz)
Entonces, podemos afirmar que si el corazón es el epicentro mismo de nuestra vida, este al igual que el Señor deberá ser Santo siempre, para que pueda en consecuencia ver a Dios de la santidad intervenir.
Entonces, podemos afirmar que si el corazón es el epicentro mismo de nuestra vida, este al igual que el Señor deberá ser Santo siempre, para que pueda en consecuencia ver a Dios de la santidad intervenir.
¿Cómo se manifiesta la santidad en nuestras vidas, cómo somos identificados como limpios de corazón?
la vida de José
Nuestra actitud frente a las aflicciones
en nuestra forma de hablar.
Nuestra actitud frente a la inmoralidad
Y dejó todo lo que tenía en mano de José, y con él no se preocupaba de cosa alguna sino del pan que comía. Y era José de hermoso semblante y bella presencia.
Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus ojos en José, y dijo: Duerme conmigo. Y él no quiso, y dijo a la mujer de su amo: He aquí que mi señor no se preocupa conmigo de lo que hay en casa, y ha puesto en mi mano todo lo que tiene. No hay otro mayor que yo en esta casa, y ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo, pues, haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios? Hablando ella a José cada día, y no escuchándola él para acostarse al lado de ella, para estar con ella, aconteció que entró él un día en casa para hacer su oficio, y no había nadie de los de casa allí. Y ella lo asió por su ropa, diciendo: Duerme conmigo. Entonces él dejó su ropa en las manos de ella, y huyó y salió.
Nuestra actitud frente al ejercicio del perdón ,
No podía ya José contenerse delante de todos los que estaban al lado suyo, y clamó: Haced salir de mi presencia a todos. Y no quedó nadie con él, al darse a conocer José a sus hermanos.Entonces se dio a llorar a gritos; y oyeron los egipcios, y oyó también la casa de Faraón.Y dijo José a sus hermanos: Yo soy José; ¿vive aún mi padre? Y sus hermanos no pudieron responderle, porque estaban turbados delante de él.
Entonces dijo José a sus hermanos: Acercaos ahora a mí. Y ellos se acercaron. Y él dijo: Yo soy José vuestro hermano, el que vendisteis para Egipto. Ahora, pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; porque para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros.
Nuestra actitud Frente al Servicio , ,
Mas Jehová estaba con José, y fue varón próspero; y estaba en la casa de su amo el egipcio.
¿Cómo Llegamos entonces a ser llamados Limpios de Corazón?
en nuestra forma de reaccionar en los momentos de crisis.
en nuestra forma de
¿cómo podemos tener el corazón limpio? Este tema ha atraído la atención a lo largo de los siglos. Contiene dos grandes ideas. Primera, hay quienes dicen que sólo hay que hacer una cosa, que debemos hacernos monjes y aislarnos del mundo. 'Sólo esto es necesario,' dicen. 'Si quiero tener el corazón limpio, no me queda tiempo para nada más.' Esta es la idea básica del monasticismo. No vamos a detenernos en esto; sólo lo menciono de paso porque es completamente anti-bíblico. No se encuentra en el Nuevo Testamento, y es algo que ni ustedes ni yo hacemos. Esos esfuerzos de auto purificación están condenados al fracaso. El camino que indica la Biblia es más bien este. Lo que podemos hacer es caer en la cuenta de la negrura del corazón por naturaleza, y al hacerlo unirse a la oración de David, 'Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.' Uno puede comenzar a tratar de purificarse el corazón, pero al final de la vida seguirá estando tan tenebroso como al comienzo, o quizá más. ¡No! sólo Dios puede hacerlo, y, gracias a Dios, ha prometido hacerlo. La única forma en que podemos tener el corazón limpio es que el Espíritu Santo entre en nosotros y nos purifique. Sólo cuando Él mora en el corazón y actúa en él se purifica, y así lo hace produciendo 'así el querer como el hacer, por su buena voluntad.' Esta era la confianza de Pablo, que 'el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.' Esta es mi sola esperanza. Estoy en sus manos, y el proceso está en marcha. Dios actúa en mí y me purifica el corazón. Dios ha puesto manos a la obra, y sé, gracias a ello, que llegará el día en que seré irreprensible, sin mancha ni arruga. Podré entrar por la puerta de la ciudad santa, dejando todo lo impuro afuera, solamente porque Él lo hace.
estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;
porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad.
esperanza. Estoy en sus manos, y el proceso está en marcha. Dios actúa en mí y me purifica el corazón. Dios ha puesto manos a la obra, y sé, gracias a ello, que llegará el día en que seré irreprensible, sin mancha ni arruga. Podré entrar por la puerta de la ciudad santa, dejando todo lo impuro afuera, solamente porque El lo hace.
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,
Y renueva un espíritu recto dentro de mí.
Esto no quiere decir que tenga que permanecer pasivo en todo este proceso. Creo que la obra es de Dios; pero también creo lo que dice Santiago, 'Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros.' Quiero que Dios me acerque a sí, porque, si no, mi corazón seguirá ennegrecido. ¿Cómo me acercará Dios a sí? 'Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros,' dice Santiago. 'Limpiad las manos, y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.' El hecho de que sepa que en última instancia no puedo purificar y limpiar mi corazón en un sentido absoluto no quiere decir que deba seguir viviendo como un desecho a la espera de que Dios me purifique. Debo hacer todo lo que pueda, consciente, sin embargo, de que no basta, y de que Él es quien debe hacerlo. Escuchemos lo que dice Pablo: 'Dios es el que produce en vosotros así el querer como el hacer, por su buena voluntad.' Sí, pero, hay que mortificar los miembros, desprenderse de todo lo que se interpone entre uno y la meta a la que se aspira. Hay que mortificar, dar muerte. Dice Pablo en Romanos, 'Si el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.'
Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.
Todo lo que he tratado de decir se puede resumir así. ¡Van a ver a Dios! ¿No están de acuerdo en que esto es lo más importante y mayor que se nos puede jamás decir? ¿Es su meta, deseo y ambición supremos ver a Dios? Si así es, si creen este evangelio, deben estar de acuerdo con Juan en que, 'todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro.' El tiempo es corto, no nos queda mucho tiempo para prepararnos. Está cerca el gran día; en un sentido la ceremonia ya está preparada; ustedes y yo estamos esperando ser recibidos en audiencia por el Rey. ¿Lo esperan? ¿Se preparan para ello? Ahora no se avergüenzan de perder el tiempo en cosas que de nada valdrán llegado ese momento, pero entonces sí se avergonzarán. Ustedes y yo, criaturas temporales como somos, vamos a ver a Dios y a bañarnos en su gloria eterna para siempre. Nuestra única confianza es que El está actuando en nosotros y preparándonos para ello. Pero seamos activos también, purificándonos 'así como él es puro.'
¿cómo podemos tener el corazón limpio? Este tema ha atraído la atención a lo largo de los siglos. Contiene dos grandes ideas. Primera, hay quienes dicen que sólo hay que hacer una cosa, que debemos hacernos monjes y aislarnos del mundo. 'Sólo esto es necesario,' dicen. 'Si quiero tener el corazón limpio, no me queda tiempo para nada más.' Esta es la idea básica del monasticismo. No vamos a detenernos en esto; sólo lo menciono de paso porque es completamente anti-bíblico. No se encuentra en el Nuevo Testamento, y es algo que ni ustedes ni yo hacemos. Esos esfuerzos de auto purificación están condenados al fracaso. El camino que indica la Biblia es más bien este. Lo que podemos hacer es caer en la cuenta de la negrura del corazón por naturaleza, y al hacerlo unirse a la oración de David, 'Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.' Uno puede comenzar a tratar de purificarse el corazón, pero al final de la vida seguirá estando tan tenebroso como al comienzo, o quizá más. ¡No! sólo Dios puede hacerlo, y, gracias a Dios, ha prometido hacerlo. La única forma en que podemos tener el corazón limpio es que el Espíritu Santo entre en nosotros y nos purifique. Sólo cuando El mora en el corazón y actúa en él se purifica, y así lo hace produciendo 'así el querer como el hacer, por su buena voluntad.' Esta era la confianza de Pablo, que 'el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.' Esta es mi sola
Sólo los de limpio corazón verán a Dios: lo ven ahora con los ojos de la fe y verán su gloria en aquel día, porque sólo los plenamente sinceros podrán soportar la deslumbrante visión, cuyo luz hará desvanecer las tinieblas del engaño y cuyo fuego consumirá toda simulación.
J.Sttot