LECCIONES DESDE ESTER
LECCIONES DESDE ESTER
Muchos judíos no regresaron a Israel cuando tuvieron oportunidad, y no tenían intención de hacerlo en el futuro. Por esta causa, se introduce una nueva idea en el modo propio de entender del judío. Los judíos y la tierra prometida habían sido parte del mismo concepto, pero ahora hay judíos quienes desean continuar siendo judíos pero no desean vivir en la tierra prometida. La situación llevó a una reinterpretación de lo que significó ser un judío.
Al interpretar el libro de Ester se deben evitar dos extremos. Uno es la interpretación de que Ester y Mardoqueo eran judíos no regenerados y estaban fuera de la voluntad de Dios, ya que no habían regresado a Israel con los otros para ser parte de la comunidad judía en la tierra prometida. De acuerdo a esta interpretación, el único interés de Dios en el pueblo judío y en preservarlo era que el Mesías pudiera nacer entre ellos cientos de años más tarde. Esta interpretación comúnmente es hallada entre los cristianos llamados ultraconservadores, pero los judíos en el Israel de aquella época pueden haber sentido algo similar acerca de los judíos que decidieron no regresar a la tierra prometida.
Este extremo tiene que ser evitado por dos razones. La primera es que es indigno del Dios que está retratado en el AT. La segunda es que esta es una mala interpretación desde el punto de vista e intención del judío que escribió el libro de Ester. Uno de los principios de interpretación es que el texto no puede significar para nosotros algo que no significó para el escritor del mismo. El punto de enfoque del autor del libro de Ester es que Dios amó a todos los judíos y continuará cuidándolos y salvándolos, aunque ellos hubieran elegido no vivir en Israel ni ser parte del culto religioso allí.
El otro extremo que hay que evitar es el de los embellecimientos imaginativos de los rabíes. De acuerdo a un rabí, Mardoqueo y Ester eran casados. De acuerdo a otro, Ester dio a luz un hijo muerto cuando escuchó el edicto de exterminar a los judíos. No hay que interpretar más allá de lo que el texto dice claramente.
Amán y Amalec, ambos son ateos prácticos. No toman a Dios en cuenta porque no creen en Dios ni le temen. Creen que la historia es de ellos y que pueden controlarla y al hacerlo rechazan ambas cosas; el Dios de los judíos y su creencia de que Dios los protegerá.
El mensaje de Ester al judío creyente es que las cosas en un país extranjero no son como parecen. El verdadero poder no está en el palacio ni en la suerte. El poder pertenece sólo a Dios y él continuará usándolo en favor del pueblo judío aquí y ahora al igual que lo ha hecho siempre.
La Septuaginta y el Tárgum II indican que ella rehusó las comidas, las cuales no estaban de acuerdo con las restricciones de la ley judaica. Pero el relato hebreo no da indicio de tal rechazo, como fue en el caso de Daniel y sus amigos.