La esperanza para los muertos en Cristo.
la vida en cristo • Sermon • Submitted
0 ratings
· 179 viewsLa muorimos en Cristo tenemos esperanza que no tienen los que no conocen al Señor.
Notes
Transcript
Introducción: En esta noche, estamos en un momentos tristes, pero a la vez
uno de los momentos más dulces de la vida Cristiana.
Nos solidarizamos con la familia por la perdida que han sufrido de un ser tan querido, esposa, madre, abuela, hermana, etc; nosotros también sentimos la perdida de una querida hermana en Cristo, como alguien escribió: una maestra consejera, amiga, pero también una anciana de nuestra amada iglesia.
Nuestra hermana ha partido de esta vida siendo cristiana, dejándonos en el recuerdo su recuerdo y persistencia en la vida Cristiana. Viviendo y sirviendo a Nuestro Señor Jesucristo, y dejando siempre para nosotros la herencia de esperanza bienaventurada.
Lloramos nuestra pérdida, porque se separó de nosotros; pero también nos gozamos en su ganancia, puesto que ahora está mejor de lo que estaba Filipenses 1.23.
23 Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor;
Entonces, esta noche a través de las nubes y dentro de nuestras lágrimas se forma un recuerdo de promesa de Dios para nosotros, promesa que pueden tomar nuestros amigos y vecinos que aún no conocen al Señor si deciden entregar su vida a él como lo hizo nuestra hermana Elena.
A. La palabra de Dios dice que son Felices los que mueren en Cristo Apocalipsis 14.13
13 Oí una voz que desde el cielo me decía: Escribe: Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen.
1. Conocemos que hace algún tiempo nuestra amada hermana se convirtió en nueva criatura en Cristo (2 Corintios 5.17).
17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
2. Y también entendemos que desde entonces, habita en Cristo (Juan 15.4).
4 "Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como la rama no puede llevar fruto por sí sola, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
Ella llevó frutos espirituales, su propia vida espiritual, su testimonio, su tiempo como maestra, una persona de oración, quizás muchos vinieron a los pies del Señor por ella, pero también su familia, la mayoría de ellos están en los caminos del Señor.
Pero también podemos decir que...
3. Fue fiel hasta la muerte (Apocalipsis 2.10).
10 No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.
Este pasaje es parte del mensaje a la iglesia Esmirna, refleja el padecimiento que como iglesia cada uno de nosotros debemos tener, e inclusive a veces pasamos situaciones difíciles, períodos de tribulaciones, pero Dios espera que en medio de todo prevalezcamos, ante las asechanzas del enemigo; nuestra hermana también fue ejemplo de esto, y cumplió lo que Dios demanda, Fidelidad hasta la muerte, y estamos seguro que Dios le dio su corona en esta vida, porque esta corona es la recompensa de una vida plena en Cristo, como el ganador de una competencia que puede ostentar su guirnalda por haber ganado, pero también también sabemos que Dios también le dará su galardón cuando estén delante de él en el tribunal de Cristo.
Todas estas cosas que hemos dicho son parte de la felicidad que representa morir en Cristo, sin embargo.....
B. A menudo nos preguntamos por qué debemos morir.
1. Nuestro espíritu debe ser separado de este cuerpo mortal (1 Corintios 15.50)
50 Pero esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción.
26 Porque tal como el cuerpo sin el espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta.
El gusano debe convertirse en capullo primero, antes de resurgir como mariposa. pero el capullo es desechado.
Nadie puede vivir en la gloria eterna de Dios en el cielo en su condición terrenal presente, tenemos que ser transformados.( 1 Corintios 15:51, dice que seremos transformados)
Todo comienza con la elección de Dios, al recibir a Cristo nos convertimos en sus hijos, (Juan 1:12),pero culmina con nuestra glorificación que es la realización plena de nuestra herencia , por eso Pablo dice en Romanos 8:29
29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
Hermanos amigos es importante considerar que
2. Debemos ser cambiados (1 Corintios 15.51-57).
51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados, 52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados. 53 Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. 54 Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria. 55 ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? 56 ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. 57 Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.
Dios nos dio un cuerpo natural para que nuestro espíritu viva en este mundo, y nos dará un cuerpo celestial para el mundo venidero.
Pero también debemos considerar..
C. La separación es sólo por corto tiempo.
1. La pregunta de Job (Job 14.14)
14 Si el hombre muriere, ¿volverá a vivir?
Todos los días de mi edad esperaré,
Hasta que venga mi liberación.
Esta pregunta ha sido contestada por Jesús (Juan 11.25).
25 Jesús le dijo:
—Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá.
2. Nos reuniremos con él (2 Samuel 12.23).
23 Pero ahora que ha muerto, ¿para qué he de ayunar? ¿Podré yo hacerle volver? ¡Yo iré a él, pero él no volverá a mí!
3. Si el Señor viene antes que nosotros muramos, traerá a todos nuestros seres queridos con él (1 Tesalonicenses 4.13-18).
13 Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los demás que no tienen esperanza. 14 Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, de la misma manera Dios traerá por medio de Jesús, y con él, a los que han dormido.
15 Pues os decimos esto por palabra del Señor: Nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, de ninguna manera precederemos a los que ya durmieron. 16 Porque el Señor mismo descenderá del cielo con aclamación, con voz de arcángel y con trompeta de Dios; y los muertos en Cristo resucitarán primero. 17 Luego nosotros, los que vivimos y habremos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes, para el encuentro con el Señor en el aire; y así estaremos siempre con el Señor. 18 Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras.
Conclusión:
Si somos cristianos fieles como lo fue nuestro hermana que ha muerto, podremos dejar a los nuestros la misma herencia de esperanza que él nos ha legado.
La pregunta que debe estar en nuestra mente es la misma que siempre hacemos cuando estamos en un momento como este:
¿Estamos viviendo en Cristo?
¿Si nuestra vida termina hoy terrenalmente, iremos al Cielo con el Señor?
¿Tienes en tu vida la promesa de la vida eterna ?
Debemos reflexionar ahora, porque no sabemos cuando será nuestro último día sobre la tierra, ¿Estamos preparados para ese momento?