El Amor bajo la Perspectiva de Dios

Pero a vosotros los que oís, os digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen; 28 bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian. 29 Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, ni aun la túnica le niegues. 30 A cualquiera que te pida, dale; y al que tome lo que es tuyo, no pidas que te lo devuelva. 31 Y como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos. 32 Porque si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman. 33 Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo. 34 Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto.

27Pero a vosotros los que oís, os digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen; 28bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian. 29Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, ni aun la túnica le niegues. 30A cualquiera que te pida, dale; y al que tome lo que es tuyo, no pidas que te lo devuelva. 31Y como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos.

INTRODUCCIÓN.

El rasgo distintivo que cualquiera creyente verdadero en Jesús debe ser el amor.

32 Porque si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman. 33Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo. 34Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto. 35Amad, pues, a vuestros enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo; porque él es benigno para con los ingratos y malos. 36Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.

Reina Valera Revisada (1960). (1998). (). Miami: Sociedades Bı́blicas Unidas.

No es el amor que se deja llevar por lo sentidos o por la emociones, sino aquel que apela directamente a la voluntad; es decir que surge directamente de una decisión activa del creyente impulsada por el poder del ES obrando en su vida.

Para muchos cristianos el amor es un termino sencillo de hacer en lo que se refiere a Dios o a los hermanos en la fe, este es capaz de extenderse aún más pues alcanza incluso a aquellos que son incrédulos. Pero el amor cristiano va un paso más allá porque también incluye a los que odian a los creyentes.

En lo versos anteriores Jesús ha establecido claramente cuales son los valores de aquellos que son ciudadanos del reinos de Dios, quienes reconocen su pobreza espiritual (salvación), su hambre de justicia (anhelo que solo Dios puede otorgar), que lloran a causa de sus propios pecados y de los de otros y que aun encuentran gozo y alegría cuando son perseguidos a causa de su fe.

Pero también están las advertencias de Jesús para aquellos que se conforman con sus propias justicias, que estás saciados por lo que el mundo les ofrece, se sienten ricos, y buscan la aprobación de los hombres antes que la de Dios.

Pero ahora Jesús lanza un desafío a toda clase de oyentes que están ahí, escuchando su mensaje, que si de verdad quieren tomar en serio sus palabras, ellos de forma práctica deben vivir lo que acaban de escuchar.

Lc 6.27 Pero a vosotros los que oís, os digo:

Muchos tipos de oyentes estaban aquella tarde que Jesús estaba enseñando, sin embrago es muy clara la aclaración que el Señor da, porque no todo el que oye (Percibir una cosa por medio del sentido del oido) el mensaje, lo escucha (prestar atención a lo que uno oye).

LA NTV “A los que están dispuestos a escuchar”

27 »A los que están dispuestos a escuchar

No solo consiste en oír el consejo de Jesús por medio de la exposición de las escrituras, sino implica un acto de la voluntad, de disponerse a prestar verdadera atención, para ponerlo en acción.

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En una forma práctica y sencilla, pero muy profunda, Jesús estableció cuatro mandatos a los creyentes que definen cuan es el estándar de amor que Dios respecto a los patrones comunes que conocemos en el mundo.

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Pero el cristiano verdadero, aquel que quiere vivir de acuerdo al patrón de Cristo, tiene presente que aun aquellas personas hostiles hacia el representan el campo misionero y es ahí donde el amor hacia aquellos debe ser mostrado, no bajo la perspectiva de nosotros, sino desde el punto de vista de Cristo.

Pero a vosotros los que oís, os digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen; 28 bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian.

Los creyentes pueden llegar a sentirse tentado a vivir aislados de aquellos que aun están sin Cristo, pretendiendo evitar cualquier clase de influencia pecaminosa, tratando de evadir la persecución de personas que no concuerda con su fe, o incluso mirando a esas personas como enemigos.

Pero el cristiano verdadero, aquel que quiere vivir de acuerdo al patrón de Cristo, tiene presente que aun aquellas personas hostiles hacia el representan el campo misionero y es ahí donde el amor hacia aquellos debe ser mostrado, no bajo la perspectiva de nosotros, sino desde el punto de vista de Cristo.

Amad a vuestros enemigos; no era algo que se enseñaba aun en las sinagogas por los propios maestros de la ley.

Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo.

El judaísmo del siglo I era exclusivista, intolerante, carente de amor, sobre todo para todos aquellos que pertenecían al mundo gentil, ellos había cambiado el énfasis de la enseñanza de Dios.

No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo Jehová.

Mientras que la ley ponía todo el énfasis en el amor por el prójimo, en una interpretación errada se le dio solo énfasis a que solo los israelitas eran dignos de amor, y el resto del mundo gentil debería sufrir desprecio.

Y es que al igual que ellos es muy fácil levantar una muralla de separación con aquellos que no comparten nuestra forma de pensar, nuestros gustos, aun quienes difieren de nuestros puntos de vista, o nuestra fe, pero eso no tiene nada que ver con el mensaje de reconciliación predicado desde la Cruz.

Mucho cristiano en pro de la defensa de la fe, de la pureza doctrinal, hace exactamente los mismo el día de hoy.

NVI  Si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; si tiene sed, dale de beber.

si tiene sed, dale de beber.

International Bible Society. (1979). Nueva Versión Internacional (). East Brunswick, NJ: Sociedad Bı́blica Internacional.

Bajo la perspectiva de Dios el amor es verdaderamente diferente, porque no tiene nada que ver con lo que sentimos, sino con lo que decidimos hacer respecto al mandato de Jesús (Si soy discípulo obedezco, sino, pues ni me preocupo).

En lugar de procurar el mal de aquellos que

Haced bien a los los que os aborrecen. El amor por los enemigos, no se queda en el terreno de la teoría, sino que pasa al terreno de las acciones concretas.

Realizar el bien (Kalos), es lo que bueno en sí mismo, no algo superficial, es decir ante la crueldad, mostrar la caridad.

No es que Jesús este diciendo debemos tomar una posición de “que alegría, que me sigan haciendo cosas feas, que me sigan diciendo, sigan por ahí, etc”, Sino que ante el agravio que podamos sufrir a causa de nuestra fe, no responsamos de la misma manera, sino con amor.

No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal.

Reina Valera Revisada (1960). (1998). (). Miami: Sociedades Bı́blicas Unidas.

Muchas veces podemos

Ante los embates de la critica, de la oposición, podemos ser tentados a pensar en tomar revancha, a tratar de defendernos a nosotros mismos con nuestros argumentos, pero la respuesta que el Señor pide de nosotros es responder en amor.

Esto representa una guerra en nuestros pensamientos, una constante confrontación entre la carne (deseos de venganza) y el espíritu (la voluntad de amar a otros aun cuando el otro me tiene actitudes, sentimientos malos, en mi contra)

9 no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición

no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición

Reina Valera Revisada (1960). (1998). (). Miami: Sociedades Bı́blicas Unidas.

NTV  No paguen mal por mal. No respondan con insultos cuando la gente los insulte. Por el contrario, contesten con una bendición. A esto los ha llamado Dios, y él los bendecirá por hacerlo

Nueva Traducción Viviente. (2009). (). Carol Stream, IL: Tyndale House Publishers, Inc.

Responder de esa forma, muestra el actuar de Jesús en la tierra, en nuestra vida, porque para obra de esa forma, se necesita de un amor sobrenatural, es imposible que un hombre / mujer puedan reaccionar de esa forma, si no conocen a Cristo.

Bendecid a los que os maldicen. No solamente incluye la acción de la voluntad de amor a aquellos que procuran el mal, o devolver el mal con bien, sino responder de buena manera a la palabras nocivas que se propagan.

A lo largo de la historia, muchos de los discípulos verdaderos de Jesús han sido rechazados, tenidos por menos, y aislados de la vida publica, por su fe en Cristo.

Sin embargo ninguno de ellos a pesar de los improperios sufridos, nunca pronuncio maldad en su boca contra sus verdugos.

orad por los que os calumnian. Cuantas veces por causa de la fe en Jesús muchos discípulos son calumniados, o sujetos de burlas, o hablan mal de el, la respuesta del hombre sería “Bueno si tu hablas mal de mi te vas a arrepentir” mientras que la del creyente verdadero es “Señor, no les tomes en cuenta esta pecado, más bien otorga tu salvación por el”.

Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.

Aun en medio de la injusticia Esteban oro por sus verdugos, quienes lo acusaron injustamente.

El verdadero creyente, responde de esa forma, no ora porque Dios tome en su mano a su enemigo y lo destruya, sino ora por sí arrepentimiento, por el perdón de sus pecados, por su salvación.

Pues el amor por los enemigos, no se queda en el terreno de lo teorico, de lo conceptual, sino que el Señor Jesús lo lleva a terrenos de la acción por medio de 4 formar practicas que nos describe

29 Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra;

No solamente es el actuar hacía otros, sino desde el como reaccionamos ante lo que otros pueden hacer.

¿Será acaso de debemos tomar esto de forma literal? ¿Qué es lo que dijo Jesús respecto a esto? ¿es acaso que Jesús esta prohibiendo a los discípulos la posibilidad de auto defenderse de forma legitima?

Cuando Jesús hubo dicho esto, uno de los alguaciles, que estaba allí, le dio una bofetada, diciendo: ¿Así respondes al sumo sacerdote? 23Jesús le respondió: Si he hablado mal, testifica en qué está el mal; y si bien, ¿por qué me golpeas?

Reina Valera Revisada (1960). (1998). (). Miami: Sociedades Bı́blicas Unidas.

Jesús mostró una respuesta apropiada mientras estaba siendo tratado injustamente.

El no volvió su cara, y le dijo, “pégame otra vez”, Sino que pido pacíficamente que le explicaran con claridad la razón del maltrato. (Injusticia del trato)

En ningún momento mostró violencia, ira, rencor o deseos de venganza, sino que con humildad el se defendió.

Poner la mejilla, no significa literalmente poner el rostro para el maltrato, sino disponer el corazón para no guardar deseos de rencor venganza, ante la hostilidad a la que estamos siendo sujetos.

Poner la mejilla, no significa literalmente poner el rostro para el maltrato, sino disponer el corazón para no guardar deseos de rencor venganza, ante la hostilidad a la que estamos siendo sujetos.

RVA Amados, no os venguéis vosotros mismos, sino dejad lugar a la ira de Dios, porque está escrito: Mía es la venganza; yo pagaré, dice el Señor. 20 Más bien, si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; y si tiene sed, dale de beber; pues haciendo esto, carbones encendidos amontonarás sobre su cabeza.

Santa Biblia : Reina-Valera Actualizad. (1989). (electronic ed. of the 1989 editio, ). El Paso: Baptist Spanish Publishing House.

Poner la otra mejilla, significa dejar lugar a que la Justicia de Dios opere, aun en medio de un situación de injusticia, es aceptar aun los malos tratos, sin ningún sentimiento de odio o un deseos de aplicar represalias o venganza hacía nadie, sino una actitud de perdón.

Puede existir en algún momento el deseo de tomar revancha ante una situación que nos parece injusta, Pero Pablo nos exhorta a detenernos y dejar a Dios obrar según su plan a su debido plan y a su debida hora.

29 Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, ni aun la túnica le niegues.

En lugar de Llenarte de amargura o de cualquier deseos de venganza, siempre nos es necesario mostrar una actitud opuesta.

La capa era una parte de la indumentaria muy importante, pues en algunos casos servía incluso como manto para dormir. Dentro de la Ley dada al pueblo de Israel por medio de Moisés se requería que todo manto fuera devuelto a su dueño antes del anochecer. (, ). Quedarse con el manto de alguien era un abuso grave.

El creyente verdadero no debe tomar represalias contra nadie, incluso, aun cuando puede ser despojado de forma ilegitima de un derecho, nunca debe buscar el pleito. (El caso de Bety y la casa).

Si las circunstancias así lo exigen, debemos estar dispuestos a pasar por alto nuestros derechos

29 Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, ni aun la túnica le niegues. 30 A cualquiera que te pida, dale;

¿Qué quiere decir esto? Qué vamos a ir por el mundo dando a todo el mundo que nos pide, sin ninguna clase de entendimiento?

Dios nos llama a tener discernimiento aun en el dar, pues muchas veces esto se hace sin inteligencia, más que con un sentido de ayudar, puede ser lavar una conciencia, o que quien solicite la ayuda solamente lo vea como una forma de obtener ayuda sin ningún esfuerzo.

NTV  Pasé por el campo del perezoso, por la viña del falto de juicio. 31 Había espinas por todas partes; la hierba cubría el terreno, y el lindero de piedras estaba en ruinas. 32 Guardé en mi corazón lo observado, y de lo visto saqué una lección: 33 Un corto sueño, una breve siesta, un pequeño descanso, cruzado de brazos … 34 ¡y te asaltará la pobreza como un bandido, y la escasez, como un hombre armado!

31 Había espinas por todas partes;

la hierba cubría el terreno,

y el lindero de piedras estaba en ruinas.

32 Guardé en mi corazón lo observado,

y de lo visto saqué una lección:

33 Un corto sueño, una breve siesta,

un pequeño descanso, cruzado de brazos …

34 ¡y te asaltará la pobreza como un bandido,

y la escasez, como un hombre armado!

Dios condena la pereza y la indolencia.

No se trata de ser indolentes a la necesidad de otros, pero sí ser sabios para discernir a la hora de ayudar.

Aún cuando alguien pueda abusar de la generosidad que existe en el creyente verdadero; y se ande escondiendo para pagarle por algún préstamo, esto no debe lleva a cerrar nuestro corazón a mostrar amor y compasión por quienes están en necesidad.

De acuerdo al contexto que Jesús esta hablando aquí, el se refiere a cuando alguien con el que has tenido diferencia, quizá hasta ha sido atacado por el, pero ahora se encuentra en una necesidad, Jesús no manda a que te alegres por eso, sino que esa ahí donde debemos mostrar la misericordia de Dios tendiéndole la mano.

29 Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, ni aun la túnica le niegues. 30 A cualquiera que te pida, dale; y al que tome lo que es tuyo, no pidas que te lo devuelva.

EL creyente verdadero no debe llegar a tomar ninguna clase de represalias contra nadie, incluso cuando de forma descarada alguien a abusado de el tomando de lo suyo.

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Aun en medio de nuestros propios derechos, nuestra disposición debe ser siempre la de devolver bien por el mal tal como lo hizo Jesús.

TLA Si acaso sufren injustamente, recuerden que Dios les ha ordenado sufrir con paciencia. Y en eso Cristo les ha dado el ejemplo, para que hagan lo mismo, pues él sufrió por ustedes. 22 Cristo no pecó nunca, y jamás engañó a nadie. 23 Cuando lo insultaban, jamás contestaba con insultos, y jamás amenazó a quienes lo hicieron sufrir. Más bien, dejó que Dios lo cuidara y se encargara de todo, pues Dios juzga a todos con justicia. 24 Cristo hizo suyos nuestros pecados, y por eso murió en la cruz. Lo hizo para que nosotros dejemos por completo de hacer el mal, y vivamos haciendo el bien. Cristo fue herido para que ustedes fueran sanados.

Aun cuando pudiéramos alegar derecho a sentir indignación legítima por el abuso y el agravio en nuestra contra, el amor bajo la perspectiva de Dios no busca venganza, ni su propia justicia, sino descansa en la justicia perfecta de Dios.

31 Y como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos.

Muchas corrientes ideológicas y filosóficas contienen este mismo principio que Jesús enseña;

Isócrates: “No hagas a otros lo que te enoja cuando te hacen a ti”, Confusión dijo “Nunca impongas a otros lo que no elegirías para ti mismo”;Tobías “No hagas a nadie lo que a ti te desagrada”

Sin embargo todas estas ideas expresadas, son expresiones del ética humana; son expresiones egoístas, basadas en el amor propio, basadas en procurar el buen trato para uno mismo.

Todas estas filosofías o conceptos ideológicos, separan completamente el amor a los hombres, del mandamiento de Amar a Dios, por eso solo son pensamientos egoístas.

Si el amor de Dios no habita en nuestro corazón, es imposible que alguien puede pensar en de forma desinteresada, ocuparse de amar a otros

Todas ellas son una versión negativa del precepto dado por Jesús.

El amor que Jesús estableció es de tratar a otros de manera que nos gustaría ser tratados, incluso aun cuando ellos no nos amen de la misma manera.

Porque la norma de Jesús establece un amor desinteresado, un amor que se centra únicamente en el bienestar del otro. Porque esa es al forma en la que Dios ama. .5b porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado.

5y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado.

Reina Valera Revisada (1960). (1998). (). Miami: Sociedades Bı́blicas Unidas.

Es solamente el verdadero creyente el que puede ser capaz de amar de esa forma, porque este amor no es producto de nada más que del Amor de Dios puesto en nosotros.

Jesús nos da de forma muy clara y practica tres ejemplos sobre como es el amor desde la perspectivas de Dios.

32 Porque si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman.

Para poder amar desde la perspectiva de Dios implica ir mucho mas allá, de lo que el mundo (pecadores) pretende mostrar como amor

No es nada difícil amar aquellos que nos caen bien, aquellos con los que tenemos cierta empatía, o con quien más o menos compartimos ciertos gustos o intereses, pero amar de esa manera no implica ningún mérito, por que todos los seres humanos lo hacen de la misma forma.

TLA 32 »Si sólo aman a la gente que los ama, no hacen nada extraordinario. ¡Hasta los pecadores hacen eso!

Sociedades Bíblicas Unidas. (2002; 2003). Traducción en lenguaje actual; Biblia Traducción en lenguaje actual (). Sociedade Bíblica do Brasil.

Amar a quienes nos aman, es algo natural, no requiere de ningún esfuerzo, por lo tanto tampoco tiene ninguna clase de impacto en el mundo.

El amor del creyente debe ser capaz de impactar al mundo, como el mundo conocerá del inmenso amor de Dios, si no somos capaces de compartirlo con otros,

No se trata de amar con las emociones, sino con la voluntad, de saludar a aun a aquellos que no me simpatiza, de orar por el compañero de trabajo que se que habla mal de mí, de predicarle a aquel vecino difícil que me tira la basura en mi patio, etc.

33 Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo.

¿Cual es el mérito de de ser bondadoso, con aquellos que lo son con nosotros? Ninguno.

TLA 33 Y si sólo tratan bien a la gente que los trata bien, tampoco hacen nada extraordinario.

¿Cual es la diferencia entre el creyente y el incrédulo de tratar con amabilidad a alguien que lo hace contigo? Ninguna.

Pero la demanda de Jesús es más alta, aun aquellas personas que te hacen mala cara, que sabes que hablan mal de ti, que en ocasiones es grosero (a), aun a ellos nunca debemos buscar venganza.

Traducción en lenguaje actual Capítulo 6

33 Y si sólo tratan bien a la gente que los trata bien, tampoco hacen nada extraordinario.

Toda actitud de revancha, debemos quitarla de nuestra vida.

TLA El amor no causa daño a nadie. Cuando amamos a los demás, estamos cumpliendo toda la ley.

Si el amor de Dios a sido derramado en nuestros corazones, Dios no a dotado de esa capacidad de amar a otros aun cuando no recibamos unas palabras de gratitud, un buen trato, aun cuando por la espalda alguien nos clave un puñal.

34 Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto.

Los bancos y las grandes compañías de Crédito al rededor del mundo prestan sus recursos siempre con la intención de obtener una ganancia.

Los bancos y las grandes compañías de Crédito al rededor del mundo prestan sus recursos siempre con la intención de obtener una ganancia. Pero esas no son la demandas de amor establecida por Dios.

El Señor no esta hablando de prestar a alguien que no puede pagar, pues ya que la enseñanza en la escritura es “No debáis nada a nadie, sino el amaros unos a otros”.

Lo que Jesús esta enseñando es extender la misericordia en tiempos de necesidad para con alguien, aun cuando esta haya procurado tu mal.

Como el mundo podrá notar la diferencia entre Cristo y el resto de las demás ideología, si sus discípulos, no viven bajos los principios y el ejemplo de Jesús.

El amar a los enemigos, así como Cristo los amo, es una muestra que el amor sobrenatural de Jesús a sido depositado en la vida de los creyentes, es una muestra de la vida nueva otorgada por medio de la salvación.