LA GLORIA DE DIOS

DORCAS CMVIDA  •  Sermon  •  Submitted
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La Gloria de Dios

Gloria puede ser definida como la característica distintiva de la presencia de Dios, a menudo comparada con poder, energía o brillo. La Escritura afirma que la gloria de Dios se da a conocer a través de su obra de creación, sus actos de intervención en la historia y supremamente en la vida y la resurrección de Jesucristo.
La característica distintiva de la presencia de Dios, a menudo comparada con poder, energía o brillo. La Escritura afirma que la gloria de Dios se da a conocer a través de su obra de creación, sus actos de intervención en la historia y supremamente en la vida y la resurrección de Jesucristo.
Manser, M. H. (2012). Diccionario de temas bíblicos. (G. Powell, Ed.). Bellingham, WA: Software Bíblico Logos.
Si queremos interpretar adecuadamente el significado de la GLORIA DE DIOS contenido en el libro de Exodo en sus capítulos 33 y 34, no podemos leer los pasajes de la Biblia como elementos aislados, como componentes de una historia breve y particular de Israel. Sino, debemos entender que la Biblia, desde Génesis hasta Apocalipsis, es un solo libro, que a través de sus 66 libros busca revelar al hombre la mayor expresión de la gloria de Dios, que es la venida de Cristo a esta tierra.

Los cielos cuentan la gloria de Dios,

Y el firmamento anuncia la obra de sus manos.

¡Oh Jehová, Señor nuestro,

Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra!

Has puesto tu gloria sobre los cielos;

Y el firmamento anuncia la obra de sus manos.

3Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, santo, santo, Jehová de los ejércitos; toda la tierra está llena de su gloria.

La Biblia enseña que toda la magnificencia de la creación apunta a revelar la creación de Dios. La obra del creador revela la alta dignidad de quién la creó.
KABOD= Palabra hebrea usada en el Antiguo Testamento para referirse al concepto de GLORIA. Se traduce como peso, valor, honor, reputación honorable, importancia, nobleza, majestad.
Es decir, la Gloria de un hombre, se refiere a su reputación, a su importancia, a su grado de nobleza. Esto a menudo se refleja con elementos palpables y concretos , que permitan comparar entre sí a dos personas, como un título o un valor referencial de su riqueza. De ahí que al mirar la historia es posible identificar a un Rey como más importante que un conde o un general. De ahí que podemos saber que una persona clasificado como perteneciente a una clase social alta, tiene mayor importancia social, que uno clasificado en una clase social baja.
No obstante, con Dios no podemos usar el mismo concepto, porque básicamente, él no puede ser comparado, pues no hay otro como él. Podemos definir la Gloria “KABOD” de Dios como el mayor estándar de importancia, relevancia, honor, majestad que pueda existir. Sin duda, es un concepto que excede con creces nuestra capacidad de comprensión. Es la suma de todos sus atributos. Es por esencia santa. Santidad y gloria son inseparables.

¿Quién como tú, oh Jehová, entre los dioses?

¿Quién como tú, magnífico en santidad,

Terrible en maravillosas hazañas, hacedor de prodigios?

La protección y esperanza del pueblo es la gloria “KABOD” de Dios.
Como Dios constantemente busca revelarse al hombre, él emplea un concepto que en la Biblia lo conocemos como “SHEKINAH” que es la forma en la cual Dios manifiesta su Gloria aquí en la tierra, siendo una forma en que podemos conocer y acercarnos a su gloria.
La manifestación visible de Dios con su pueblo se le denomina gloria “SHEKINAH”.
Si consideramos el texto bíblico de y 34, podemos concluir que todo Israel observó la “manifestación de la gloria de Dios” con ellos (Shekinah) en la nube y la columna de fuego.

10Y hablando Aarón a toda la congregación de los hijos de Israel, miraron hacia el desierto, y he aquí la gloria de Jehová apareció en la nube.

35Y no podía Moisés entrar en el tabernáculo de reunión, porque la nube estaba sobre él, y la gloria de Jehová lo llenaba.

De echo, esto es un elemento muy importante para Moisés, pues él lo presenta ante Dios como una necesidad, cuando Dios le señala que por el pecado del pueblo, él no ha de caminar junto a ellos:

1Jehová dijo a Moisés: Anda, sube de aquí, tú y el pueblo que sacaste de la tierra de Egipto, a la tierra de la cual juré a Abraham, Isaac y Jacob, diciendo: A tu descendencia la daré; 2y yo enviaré delante de ti el ángel, y echaré fuera al cananeo y al amorreo, al heteo, al ferezeo, al heveo y al jebuseo 3(a la tierra que fluye leche y miel); pero yo no subiré en medio de ti, porque eres pueblo de dura cerviz, no sea que te consuma en el camino.

15Y Moisés respondió: Si tu presencia no ha de ir conmigo, no nos saques de aquí.

La intercesión de Moisés es un tipo de la obra intercesora de Cristo frente a Dios por seres pecadores como nosotros.
Pablo, habla en , sobre la acción intercesora de Cristo para traer dones a los hombres, que son en este nuevo pacto, una manifestación visible de la gloria, poder, honor de Dios.

8Por lo cual dice:

Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad,

Y dio dones a los hombres.

No obstante, Moisés comprende que necesita conocer más a Dios, con mayor intimidad; no le vasta solo su manifestación terrenal o visible, sino manifiesta su anhelo de conocer su gloria invisible (KABOD), santa, reservada sólo para quienes la buscan con intensidad y sinceridad de corazón.
Moisés sabía que no bastaba con la nube y el fuego, se necesitaba la presencia de un Dios Santo, todopoderoso y único, para el éxito de su misión dentro del plan de Dios.
Lo que Moisés nos enseña es a no conformarnos con ser testigos de la manifestación de Dios, sino ser parte de sus grandes planes y propósitos, buscando la gloria que encontramos sólo cuando subimos al monte santo a buscar de su presencia.

Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados

¿Quienes pueden subir a estas alturas? Los quebrantados y humildes de espíritu. Los que buscan intencional y adecuadamente el rostro de Dios. Los que se humillan con el prójimo para honrar a Dios.
Fue la mansedumbre de Moisés la que marcó diferencias. Esa mansedumbre le permitió subir a caminar a las alturas de su presencia.
40 días en la presencia de Dios
Es un tipo de como la búsqueda de Dios requiere ser enfrentada con decisión, constancia y el tiempo suficiente. ¿Cuánto tiempo dedicas a orar para buscar el rostro de Dios?
Es un tipo de como la búsqueda de Dios requiere ser enfrentada con decisión, constancia y el tiempo suficiente. ¿Cuánto tiempo dedicas a orar para buscar el rostro de Dios?
Necesitamos tiempo para estar quietos y buscar su gloria, su presencia. Su gloria es tan perfecta que no se parece a nada a lo que hoy conocemos. Nos sobrepasa en mucho. De ahí que Dios escondiese en la hendidura de la peña a Moisés, para que su gloria KABOD no lo consumiera.

20Dijo más: No podrás ver mi rostro; porque no me verá hombre, y vivirá. 21Y dijo aún Jehová: He aquí un lugar junto a mí, y tú estarás sobre la peña; 22y cuando pase mi gloria, yo te pondré en una hendidura de la peña, y te cubriré con mi mano hasta que haya pasado. 23

Este acontecimiento es profético, ya que la hendidura en la roca es la labor protectora de Cristo! Cuando nos refugiamos en él, podemos ver la gloria de Dios. Cristo es la máxima manifestación de su gloria, pero no basta con observarlo, sino, Moisés nos enseña debemos experimentar su obra en nuestras vidas.
No es una roca cualquiera. ¡Es la roca eterna!
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