Crisis en la familia perfecta

Hubo crisis en la familia de Jesús

Crisis: es un cambio brusco o una modificación importante en el desarrollo de algún suceso, y ésta puede ser tanto física como simbólica. Cambio profundo y de consecuencias importantes en un proceso o una situación, o en la manera en que estos son apreciados.

Lucas registra los 12 años de Jesús como el momento en que ocurre un suceso que causa crisis.

El versículo 48 deja claro el sentimiento de los padres de Jesús: angustia. Esta palabra significa estar adolorido, sufrir o entristecerse.

¿Qué papá no ha llorado por causa de sus hijos? ¿Qué hijo no ha llorado por causa de sus padres?

Lección: Las crisis no son un reflejo de una mala familia sino de ser familia.

Contexto de la familia perfecta

Los padres de Jesús cumplían las tradiciones religiosas

Los padres de Jesús mantenían rutinas, las tradiciones religiosas ya eran costumbre.

Desde niño Jesús estaba acostumbrado a asistir al templo, escuchar lecciones de los maestros y participar de las ceremonias.

*La asistencia a la Iglesia y la instrucción cristiana no es un antídoto para las crisis pero son medicina para atravesar y vencer las crisis.

*Nunca debiéramos sancionar la Iglesia como método de castigo. Quitarles a los hijos la oportunidad de asistir a la Iglesia por haber hecho algo malo es más negativo que positivo.

*Poner otros intereses sobre los del cumplimiento de la palabra de Dios les da a los hijos un mensaje oculto pero contundente: Dios es una carga, hay que aprovechar cada vez que nos podamos librar de ella.

Dios adolescente

El dilema para María y José era que Dios estaba a su cargo, debían cuidarlo hasta que se hiciera adulto y entonces cumpliera su propósito de salvar al mundo.

Perder al adolescente era exponerlo a un mundo enorme en el cual podrían hacerle daño y trucar el propósito que tenía en la tierra.

Los vestigios divinos son evidentes en el deseo de Jesús de quedarse en el templo y preferir quedarse con los maestros de la ley que irse a la playa o a jugar con los chicos.

Papás de un hijo con propósito

José y María sabían que su hijo tenía un propósito. ¿Sabes que tus hijos tienen un propósito?

José y María no sabían como se cumpliría ese propósito, por lo que cada acontecimiento sería una pista para descubrirlo, por eso María guardaba todas las cosas en su corazón. ¿Estás descubriendo ese propósito junto con tus hijos?

José y María sabían que tenían una responsabilidad como cuidadores e inspiradores para que Dios/hombre alcanzara madurez y cumpliera su propósito. ¿Estás asumiendo tu responsabilidad como padre?

José y María comprendían que la autoridad delegada por el mismo Dios los obligaba a poner límites y a marcar el camino, por eso Jesús volvió con ellos a casa y se mantenía sujeto a ellos. ¿Estás ejerciendo tu autoridad como padre y marcando el camino para tus hijos?

Jesús sabía que Él era Dios pero también sabía que como tal debía mostrar obediencia y capacidad de someterse a la autoridad, por eso obedeció. ¿Estás sometiéndote a tus padres aunque a veces no te gusten sus reglas?

José y María no sabían como se cumpliría ese propósito, por lo que cada acontecimiento sería una pista para descubrirlo, por eso María guardaba todas las cosas en su corazón. ¿Estás descubriendo ese propósito junto con tus hijos?

Los vestigios del propósito

Vísperas de una celebración judía (la Pascua) Jesús va a Jerusalén para ser crucificado por el pecado del mundo.

Tras tres días de ausencia en la vida de sus padres, Jesús aparece deslumbrando a propios y extraños con su sabiduría. Tres días después de estar ausente en la vida de sus discípulos, Jesús aparece deslumbrando al mundo con Dios hecho hombre.

Jesús deja claro que su propósito va más allá de los sentimientos y que su lugar no era según los propios criterios de sus padres sino según el plan de Dios. El propósito de Jesús iba más allá de la lógica humana, se trata de los planes perfectos y soberanos de Dios.

Conclusión

Lucas 2.52 NVI

Jesús siguió creciendo en sabiduría y estatura, y cada vez más gozaba del favor de Dios y de toda la gente.

Asegúrate de considerar la formación en cada una de estas áreas de la vida de tus hijos:

Sabiduría/inteligencia

Estatura/física y saludablemente

Favor de Dios, una relación con él

Favor de la gente, crecimiento social