¡Tómalo en serio!, Dios te llamó a ser santo
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¡Tómalo en serio!, Dios te llamó a ser santo
¡Tómalo en serio!, Dios te llamó a ser santo
Escritura: 1 Pedro 1:13-16
11 de mayo de 2019
Cada día en el mundo se escriben miles de libros relacionados con diferentes temas, algunos son mas llamativos que otros y tienen una mayor demanda también, en ámbito religioso ocurre lo mismo, si nos paseamos por la librería cristiana, probablemente nos encontraremos cada semana o cada mes con las ultimas novedades escritas en el medio, como tener mejores matrimonios, como criar mejor a nuestros hijos, como predicar, como aconsejar, en fin, nos encontramos con mucha literatura de todo tipo, sin embargo, hay temas de los que no se escribe mucho y uno de ellos es la santidad, no hay una abundancia de literatura acerca de como ser un hombre o una mujer santa, ¿por qué?, por que la palabra en si misma es intimidante, choca, no vende, sin embargo, la idea de ser santo es algo tan importante en la Biblia que merece una mayor atención especialmente de todos nosotros que nos consideramos cristianos.
Es muy probable que hablemos de santidad, pero ¿cuán probable es que estemos viviendo en santidad cada día?
Santidad no se refiere a vestir de una manera diferente, o a caminar de una manera diferente, santidad se refiere a un cambio en nuestra mente y que es capaz de transformar toda nuestra vida.
1 Pedro 1:13-16, nos dice que debemos conducirnos de una manera completamente contraria al mundo, porque no somos miembros de él, sino que de uno diferente:
Por eso, dispónganse para actuar con inteligencia; tengan dominio propio; pongan su esperanza completamente en la gracia que se les dará cuando se revele Jesucristo. 14 Como hijos obedientes, no se amolden a los malos deseos que tenían antes, cuando vivían en la ignorancia. 15 Más bien, sean ustedes santos en todo lo que hagan, como también es santo quien los llamó; 16 pues está escrito: «Sean santos, porque yo soy santo».
EL LLAMADO DE DIOS PARA NOSOTROS LOS CRISTIANOS, ES A SER COMO ÉL ES, SANTO.
La palabra santo no significa otra cosa mas que apartado y en el contexto de la Biblia se refiere a apartarse para Dios.
Él nos ha llamado a vivir apartados de todo lo que no es de su agrado, no se trata de cambiar el atuendo, o de cambiar el color del pelo, sino que se trata de cambiar nuestro corazón y empezar a vivir una vida entregada y consagrada al Señor.
¿Qué implica esto para nosotros?, Implica un cambio, pero ¿qué tipo de cambio?, Un cambio en nuestra mente.
Ser cristianos, no tiene que ver con que hagamos algunos cambios en nuestra rutina diaria.
En muchas ocasiones cuando estudio la Biblia con alguien, me preguntan, ¿y qué necesito cambiar o dejar de hacer para ser cristiano?, la respuesta es ¡Todo!, para ser cristianos necesitamos dejar de hacer todo lo que hacíamos y cambiar todo lo que pensamos para poder vivir como a Dios le agrada.
Por su puesto que esto no es algo que a la gente le agrade, y esto es así, porque piensan que pueden vivir un cristianismo light, poco profundo, sin compromisos, sin embargo, este pasaje de Pedro y muchos otros mas nos dicen todo lo contrario, no podemos vivir con un pie en el cielo y otro en el mundo, con Dios nos entregamos por completo, o mejor no entreguemos nada, porque a él no le agradan los compromisos a media.
Cuando hagas un voto a Dios, no tardes en cumplirlo, porque a Dios no le agradan los necios. Cumple tus votos Eclesiastés 5:4
Entonces es muy importante que tomemos en serio el llamado de Dios y no a la ligera, no sea que por ser muy superficiales terminemos perdiendo el camino y naveguemos a la deriva.
¿CÓMO PODEMOS AFIRMAR NUESTRO COMPROMISO CON DIOS?
1) PREPARANDO NUESTRA MENTE PARA LA ACCIÓN
En los versículos anteriores, Pedro está hablando acerca de todas las bendiciones que como cristianos ya tenemos y de la importancia de mantenernos firmes en nuestra fe, esperando a que el Señor regrese por su iglesia y para esto, nuestra mente debe prepararse para actuar de la manera adecuada.
La primera batalla que como cristianos debemos vencer, es contra nuestra mente, si nuestros pensamientos no están alineados con la voluntad de Dios, entonces vamos hacia atrás en la batalla.
Cada día nos vemos enfrentados a muchas situaciones que tienen un gran potencial para desanimarnos y hacernos perder el camino.
La televisión, la música, las amistades, la situación financiera, laboral, las enfermedades, todo esto y mucho más, pueden llegar a desanimar nuestra fe, si es que esta no está firmemente basada en convicciones.
Pedro sabe que nuestra fe, es muy valiosa y si la perdemos, también podemos perder nuestra salvación y todo por lo que nuestro Señor se sacrificó.
En versículo 7, se nos habla acerca del valor que tiene nuestra fe.
Pedro nos dice: El oro, aunque perecedero, se acrisola al fuego. Así también la fe de ustedes, que vale mucho más que el oro, al ser acrisolada por las pruebas demostrará que es digna de aprobación, gloria y honor cuando Jesucristo se revele. (1 Pedro 1:1)
Nuestra fe es mas valiosa que el oro y tiene mucho valor delante de Dios, entonces, si esta fe que tenemos se debilita a causa de una mente débil, entonces perdemos todo lo que Cristo ha conseguido para nosotros.
Por esta razón, la batalla con nuestra mente es vital para que sigamos en carrera y no desistamos en medio de esta., pero no es fácil, por esta razón es que Pedro también nos indica en que áreas debemos trabajar para ir adelante en la batalla.
2) TENIENDO DOMINIO PROPIO
Tengan dominio propio, es decir, tener autocontrol, mantener las emociones y sentimientos a raya, la versión Reina Valera utiliza la idea de estar sobrios, lo que significa prácticamente lo mismo que hemos definido, no tener la cabeza aturdida o embriagada por otras cosas que no sean las cosas de Dios, Pablo alude a esta misma idea en Efesios 5:18: No se emborrachen con vino, que lleva al desenfreno. Al contrario, sean llenos del Espíritu.
Llenos del Espíritu, atentos, alertas.
La idea de estar despiertos, atentos, alertas es muy común en el Nuevo Testamento, de hecho, un poco más adelante en el capítulo 5:8 de 1 Pedro, se nos advierte acerca de esto y se nos da el ¿por qué?
Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.
Cuando no tenemos dominio de nuestras emociones, somos presa fácil de cualquier táctica del enemigo, Pablo nos dice lo siguiente en Efesios 6:11: Pónganse toda la armadura de Dios para que puedan hacer frente a las artimañas del diablo.
Las artimañas o engaños del diablo, nos pueden hacer caer en su trampa de mentiras, por esta razón es vital practicar el dominio propio, estar autocontrolados y guiados por el Espíritu de Dios.
3) PONIENDO NUESTRA ESPERANZA EN LO VENIDERO
Cada año después de Navidad, nuestros hijos empiezan a planear lo que van a recibir como regalo al final del año, ellos lo hacen porque tienen plena confianza en que van a recibir su regalo, ellos piden lo que quieren, sueñan con lo que quieren, y están seguros que cuando llegue esa noche casi un año después ellos recibirán un regalo, probablemente sea lo que quieran, aunque nadie se los asegura, sin embargo, ellos saben que lo recibirán y lo esperan con ansias, cuando llega el momento y ven el o los paquetes de regalo bajo el árbol, sus mentes sueñan con lo que hay debajo del papel y al abrirlo, sus ojos se llenan de alegría, porque recibieron un regalo mejor o mas de lo que esperaban.
Poner nuestra esperanza en lo venidero, implica estar conscientes de que vamos a recibir el regalo prometido, está probablemente en camino, aunque no sabemos cuando llegará, sabemos y confiamos en que lo recibiremos y esperamos con ansias el momento, porque entendemos que cuando llegue no solo será un gran regalo, sino que superará nuestras expectativas y esto nos mueve a confiar y a esperar seguros de que lo recibiremos.
Ahora, cuando somos conscientes del valor de este regalo, hacemos todo a nuestro alcance para no estropear la sorpresa, es decir, nos ajustamos a vivir como a Dios le agrada para que nada de lo que hagamos o dejemos de hacer nos impida recibir de mano de nuestro Señor su regalo para vida eterna.
Y esto implica todo lo que Pedro nos dice a continuación.
4) OBEDIENTES A DIOS
14 Como hijos obedientes, no se amolden a los malos deseos que tenían antes, cuando vivían en la ignorancia. 15 Más bien, sean ustedes santos en todo lo que hagan, como también es santo quien los llamó; 16 pues está escrito: «Sean santos, porque yo soy santo».
Obediencia, es la llave del corazón de Dios, Pedro nos dice que no debemos retroceder, sino que mantenernos en la misma línea de conducta que ya estamos llevando.
Desobediencia, nos lleva al error, nos lleva a retroceder, a volver a caminar por donde andábamos antes de conocer a Dios y tenemos una gran advertencia acerca de esto:
2 Pedro 2:20-22 Si, habiendo escapado de la contaminación del mundo por haber conocido a nuestro Señor y Salvador Jesucristo, vuelven a enredarse en ella y son vencidos, terminan en peores condiciones que al principio. 21 Más les hubiera valido no conocer el camino de la justicia que abandonarlo después de haber conocido el santo mandamiento que se les dio. 22 En su caso ha sucedido lo que acertadamente afirman estos proverbios: «El perro vuelve a su vómito»,[c] y «la puerca lavada, a revolcarse en el lodo».
Retroceder implica volver y caer más bajo de lo que podemos pensar, entonces la obediencia a la Palabra de Dios, la búsqueda de santidad, la práctica del dominio propio, la esperanza puesta en las cosas correctas, nos permiten estar seguros y firmes en las promesas que Dios nos ha dado y aunque tarden en cumplirse, sabemos que a su debido tiempo las recibiremos y estas nos asombrarán más de lo esperado.
POR ÚLTIMO, Y ESTA ES LA CLAVE DE NUESTRO LLAMADO PARA HOY, SEAMOS SANTOS
Esta no es una recomendación de Dios para nosotros, ni tampoco es una advertencia simplemente, este es un mandamiento de Dios para todos los que nos llamamos cristianos, es nuestro estilo de vida, es lo que nos define entre todos los demás, es lo que le da fuerza a nuestra vida y propósito a nuestro caminar con Dios.
Por esto hay que tomar en serio el llamado de Dios y apartarse del patrón de este mundo para seguir el patrón de vida y conducta que nuestro Señor nos mostró y nos ordenó vivir a diario.
5) SEAN SANTOS, ASÍ COMO YO SOY SANTO.
Si somos cristianos, debemos tomar muy en serio este llamado de Dios a vivir como Él vivió y si alguien no ha tomado aún la decisión de ser un cristiano, este llamado es a considerar la decisión de hacerlo, Dios no nos esta llamando a un camino malo, sino que a uno excepcional, completamente diferentes, ÉL nos está llamando a un cambio en todo nuestro estilo de vida, en nuestras relaciones, en nuestra forma de ver a las personas, en nuestra mente acerca de lo que hemos estado haciendo hasta el día de hoy, Él te llama y nos llama a Ser Santos y a tomar en serio su llamado.
Dios le bendiga