Introducción

El apóstol Pablo en estos versículos desarrolla un argumento más profundo y a su vez establece un punto especifico, no tan solo en la inmoralidad sexual en general como la lujuria que vimos la semana anterior, sin que se torna más especifico y enfoca su atención en una de sus manifestaciones más desagradables, la homosexualidad a sabiendas. Pablo hace una especie de paralelismo en relación con el genero humano, hombre-mujer, el hecho de cambiar la función natural en contra de su naturaleza.

El texto es más especifico un utilizando frases como “se encendieron en su lujuria”. analizáremos palabras especificas de estos dos versículos, pasiones degradantes, fusión natural, lujuria, hechos vergonzosos y el castigo de parte de Dios.

También las consecuencias de los pecados aquí condenados no son cometidos solamente por hombres y mujeres sino también, a veces, por “muchachos” y “muchachas”. Un escritor dice lo siguiente: “… recibiendo en sus propias personas el debido pago de su desviación”.

Que esta malvada práctica resulta en una cosecha de amargura es algo que ha sido probado una y otra vez y queda demostrado todos los días del año. Algunos de los frutos son: una conciencia sucia, insomnio, tensión emocional, depresión. Además, la discordia mental de este tipo no deja de afectar al cuerpo. En su muy interesante libro—None of These Diseases, Westwood, New Jersey 1963, p. 60—el doctor S.M. McMillen nos dice que según un informe publicado en 1948, dos tercios de los pacientes que visitaron al médico tuvieron síntomas causados o agravados por la tensión mental.[1]

Sin duda nuestro propósito es advertir, exhortar y animar a nuestros hermanos a vivir en santidad para mostrar la gloria de Dios al mundo y a su Iglesia.

La entrega a la pasión sexual - Romanos 1. 26-27

• 1. El cambio de la función natural del sexo (v.26)
• 2. La lujuria entre los géneros (v.27a)
• 3. El castigo justo como resultado (v.27b)