Cosas Nuevas y viejas
El bueno Escriba
Después de concluir su recital de las siete parábolas del reino, el Maestro les preguntó a sus discípulos si habían comprendido todo lo que les había dicho. Ellos le respondieron: Sí, Señor (51). Entonces El hizo la comparación semejando al escriba docto en las verdades del reino a un padre de familia que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas (52). Esto podría aludir a las nuevas verdades del cristianismo agregadas a las enseñanzas del Antiguo Testamento.
Aquel día salió Jesús de la casa (vea 12:46)—probablemente el hogar de Pedro en Capernaum—y se sentó junto al mar (1). Capernaum estaba sobre la costa del mar de Galilea (vea el mapa). Cuando mucha gente (2) lo redeó y se vio forzado a entrar en una barca, probablemente la que Pedro usaba para la pesca, allí se sentó.