borara

Sermon • Submitted 5 years ago

0 ratings

· 5 views

Notes

Transcript

Comentario al Nuevo Testamento: Evangelio según San Juan 19:38–42

José y Nicodemo actuaron de acuerdo. Deben haberse puesto de acuerdo de antemano en cuanto a qué haría cada uno. En consecuencia, llegaron totalmente preparados

La primera pala llena de tierra se desliza por la madera, haciendo un sonido sordo en la tapa del ataúd. La pila de tierra recién excavada espera a los trabajadores que vendrán a cubrirla. Los dolientes miran hacia el agujero y luego se van. ¿Qué dices en ese momento? Enterrado. Muerto y enterrado. El fin.

Considera quién fue el que murió. Él era "el Autor de la vida" (), en quien estaba la vida (). Cristo se declaró a sí mismo como "el camino, la verdad y la vida" (). Al igual que el Padre, da la vida a quien desea (). Tenía vida en sí mismo por derecho y don como el Hijo de Dios, "porque así como el Padre tiene vida en sí mismo, así también le ha concedido al Hijo que tenga vida en sí mismo" (). Sin embargo, Cristo murió y fue enterrado.El Hijo de Dios eterno y vivificante, al hacerse hombre para redimir a los pecadores moribundos, fue humillado por el bien de su pueblo. Se humilló hasta el punto de la muerte, incluso la muerte en una cruz (), como el siervo obediente del Padre. Morir y ser enterrado son parte de nuestra suerte como descendientes de Adán, pero el Hijo bebió libremente de esta copa por nuestro bien.

En su humillación, nuestro profeta Jesucristo murió y fue enterrado. Los profetas fueron asesinados por declarar la palabra del Señor (). Jesús fue el profeta final (), quien proclamó "la voluntad de Dios para nuestra salvación" (Catecismo más corto 24). Fue a Jerusalén como profeta y murió allí (). Y, como el profeta Jonás, Jesucristo fue liberado de la muerte, habiendo estado "bajo el poder de la muerte por un tiempo" (SC 27; cf. y ).

En su humillación, Cristo nuestro sacerdote tuvo que ser enterrado y continuar "bajo el poder de la muerte por un tiempo". Su muerte fue sacerdotal "ofreciéndose un sacrificio para satisfacer la justicia divina" (SC 25). Otros sacerdotes habían ofrecido sacrificios según el mandato de Dios. Pero era imposible que la sangre de toros y cabras pudiera quitar el pecado (). Esos sacrificios debían ofrecerse una y otra vez porque el mismo sacerdote necesitaba que le quitaran sus propios pecados (). La finalidad y la suficiencia del sacrificio que hizo Jesucristo, sin embargo, se mostró vívidamente en la humillación de ser enterrado, poniendo fin a todos los demás sacrificios ().

En su humillación, Cristo nuestro rey fue humillado al ser ejecutado y enterrado, para que pudiera ejecutar su oficio "al someternos a sí mismo, al gobernarnos y defendernos, y al restringir y conquistar a todos sus enemigos y a nosotros" ( SC 26). El rey que murió desarmado y avergonzado a los gobernantes y autoridades a través del instrumento mismo de su muerte (; cf. ). El rey vivificador, Jesucristo, no solo se identificó con nosotros en nuestra muerte y en ser enterrados, sino que demostró que la muerte misma debe ceder ante él. Pablo nos recuerda que el último enemigo que no solo debe ser restringido sino conquistado es la muerte misma, que Jesús vence por nosotros ().

Cristo, en su poder de resurrección, nos acompaña por el valle de la sombra de la muerte (). La muerte misma es ganancia para el cristiano porque nos lleva al Salvador (; ). La recitación del evangelio por parte de Pablo no termina con "que fue enterrado", sino con las palabras triunfales "que fue resucitado al tercer día" (). El evangelio necesariamente incluye la muerte y el entierro de Cristo, porque su resurrección significa que "Cristo también sufrió una vez por los pecados, el justo por el injusto, para poder llevarnos a Dios, siendo muerto en la carne, pero vivificado en el espíritu "(). Fue "declarado Hijo de Dios en el poder según el Espíritu de santidad por su resurrección de entre los muertos" ().

A Cristo se le llama correctamente el primogénito de entre los muertos (). Las palabras cantadas por David, que Dios no permitiría que su santo sufriera decadencia (), tuvo que esperar la humillación de Cristo bajo el poder de la muerte por un tiempo para encontrar su gran cumplimiento en su resurrección. La humillación dio paso a la exaltación cuando Cristo resucitó de entre los muertos al tercer día y ascendió a la gloria. La humillación de Cristo significa nuestra exaltación a medida que morimos con Cristo para pecar y su poder sobre nosotros ahora (; ) y, finalmente, para siempre.

La tierra puede acumularse, pero el hijo de Dios ha sido liberado del estado del pecado y la miseria, enfrentando la muerte misma y los dolores del infierno para siempre (SC 20, 19), por la humillación y exaltación de Cristo. La esperanza de la vida eterna y el final final de la muerte y los entierros se debe a que Jesucristo fue humillado al morir y ser enterrado y luego fue exaltado en su gloriosa resurrección. ¡Aleluya, qué Salvador y qué esperanza!

------

Una razón es que el entierro de Jesús marcó un punto de inflexión importante en la misión de Jesús. Normalmente entendemos la vida de Jesús como una progresión de la humillación a la exaltación. El punto más bajo de su humillación fue su crucifixión en la cruz, pero pronto fue seguida por la exaltación en su resurrección y su ascensión a la diestra de Dios. Podemos ver fácilmente el fuerte contraste entre la humillación y la exaltación, pero a menudo pasamos por alto el hecho de que la transición de la humillación a la exaltación no comenzó en su resurrección, sino en su entierro.

44. P. ¿Por qué hay agregado, Él descendió al infierno? A. Que en mis mayores tentaciones puedo estar seguro, y consolarme totalmente con esto, que mi Señor Jesucristo, por su inexpresable angustia, dolores, terrores y agonía infernal en la que fue sumido durante todos sus sufrimientos, pero especialmente en la cruz me libró de la angustia y el tormento del infierno.

Y como lo hizo, usted y yo podemos estar seguros de que la justicia de Dios está plenamente satisfecha, de modo que escaparemos de esa condenación. Aquí está la base sólida del cristiano para la esperanza. ( El Catecismo de Heidelberg: una guía de estudio [P&R], 76)

------

Entierro, no es evento al que le prestamos atención “Es tan importante como su muerte resurrección, es un elemento principal de nuestra fe, : Murió, sepultado, resucito. Esto estaba en las escrituras, Los tres eventos poseen una importancia capital, para la salvación y para la vida cristiana practica .... “Hemos sido bautizados en su muerte, sepultados por el bautismo.... para que así resucitemos y andemos en novedad de vida.

Por nuestra unión con Cristo participamos en cada uno de estos eventos. Tan sobrenatural como su muerte fue su resurrección. Jesus soberanamente obro en las acciones libres de los hombres para hacer exactamente lo que el había determinado en su voluntad eterna. Todos fueron responsables, pero cumplieron la voluntad de Dios. Jesus es Dios y podemos decir que aunque él estaba fisicamente muerto, él estaba vivo en el Espíritu coordinando su propio funeral. Jesus controlo cada detalle de su propio entierro. Dios no puede morir y estaba allí coordinado todo.

Romanos, los dejaban para escarmiento a la vista de todos mientras eran comidos por los perros y luego en fosa común a menos que los pidieran Det 21.22 (el fue ejecutado y era día de pascua) Todo era contra la ley.

Murió el viernes 3 pm víspera del día de reposo 6 PM. Quien celebrar el día de reposo sin problemas de conciencia Nada sucedió como ellos querían, sino como Dios lo planeó. Debía morir como el cordero pascual, ningún hueso fue quebrado.

2. La valiente petición de José de Arimatea

Todos ellos mencionan a José como el principal responsable de la operación y, por curioso que parezca, cada uno de ellos menciona algo que los otros tres omiten. S. Mateo es el único que dice que era “un hombre rico” (). S. Marcos es el único que dice de él que era un “miembro noble del concilio, que también esperaba el reino de Dios” (). S. Lucas es el único que dice que era un “varón bueno y justo […] que también esperaba el reino de Dios, y no había consentido en el acuerdo ni en los hechos de ellos” (). Aquí, S. Juan es el único que dice que era “discípulo de Jesús, pero secretamente por miedo de los judíos”.

a) José honró a Cristo cuando sus discípulos le habían abandonado. Demostró más fe y más valor que sus seguidores más cercanos.

b) José honró a Cristo a pesar de que fuera algo peligroso. Manifestar en público el respeto por alguien que había sido condenado como malhechor, por alguien perseguido por los sumos sacerdotes y los dirigentes de los judíos; decir prácticamente “soy amigo de Cristo” era algo ciertamente valiente. S. Marcos especifica que “entró osadamente a Pilato” (), lo que muestra claramente que fue un acto de valor inusitado.

había mantenido en secreto el que era discípulo,

c) José honró a Cristo cuando era un cadáver inerte y parecía que ya no se podía hacer nada por Él. No intervino públicamente cuando estaba obrando milagros y predicando sermones maravillosos, sino cuando no quedaba de Él más que un cuerpo exánime.

no era probable que la petición de José despertara la oposición de ningún judío o gentil. Pero, no obstante, no debemos olvidar que esto destruyó su reputación y le convirtió en enemigo de Caifás y de los principales sacerdotes.

Comenta Rollock: “Cuando Cristo obraba milagros y hablaba como ningún otro hombre ha hablado, José no hizo una confesión pública. Sin embargo, ahora que Cristo está muerto y humillado, se manifiesta públicamente. ¿A qué atribuirlo? Lo atribuyo a la fuerza que se deriva de la muerte de Cristo. Jamás ha vivido nadie en el mundo con un poder equiparable al cadáver de Cristo. Su muerte fue más poderosa que su vida”.

Entonces, su tumba debía ser asignada con los impíos. Pero, dice , “Estaba con un hombre rico en su muerte”. A todos los delincuentes comunes se les asignó ser enterrados de la misma manera: en el vertedero o en el camino, se fueron a la carroña. Jesús debería haber sido eliminado de esa manera, "Pero" - dice Isaías - "Será enterrado con los ricos". ¿Cómo va a suceder eso? No hay ningún discípulo rico.

De hecho, dijo que lo enterrarían tres días y tres noches y luego se levantaría, como Jonás estaba en el vientre del pez. Un día y una noche para ellos podría constituir cualquier parte del día. Decimos: "Me he ido tres días", podría significar la mitad de hoy, todo mañana y unas pocas horas del día siguiente. Hablaríamos de la misma manera. Se referían a un día como un día y una noche, que abarcaban tanto la parte clara como la oscura. Cualquier parte de un día y una noche constituía un día. Entonces, estaban considerando el viernes, a pesar de que estaba en la tumba unas horas antes del atardecer, el primer día; El sábado sería el segundo día; y aunque se levantó temprano en la mañana, estuvo en la parte baja del tercer día. Era crítico que Jesús estuviera en la tumba el viernes porque la profecía, de sus propios labios,

que hizo. ¿Cuanto mas nosotros ahora qeu vivimos al otro lado de la resurrección? Estas dispuesto a profesar a Cristo y pagar el precio de seguir a Cristo solo?

Nicodemo ve a Jesus levantado y llego a entender que él era una clase de rei qye ascenderái al trono llendo primero al calvario....

Si nadie pide el cuerpo hubiera sido llevado al gena. Hubiera sido quemado, destruido, sin sepultura y sin honor. Pero Dios guardo el cuerpo de su hijo, usando al voluntad de dos discípulos secretos que se armaron de valor para darle honor y para preparar el escenario de su resurrección. Vs. 46 Hizo rodar una piedra grande.

Movió los sacerdotes para tomar una decisión en Mateo, sabiendo que Jesus dijo que resucitaría… Sellaron la piedra con sello Romano “Pena capital” con guardia romana. Testimonio irrebatible de la resurrección.

Las mujeres vieron a Jose y a Nicodemo. Lucas vieron todo.... Testigos de su sepultura y de su resurrección… fueron responsables de seguirlo hasta la tumba, esa decisión estaba orquestada para acallar un argumento absurdo, en contra de la resurrección “Las mujeres se equivocaron de tumba”

-------

Este texto debería mover a los incrédulos a considerar seriamente como responder a esto…

Creyentes, esto nos mueve a confiar en Dios,,,, aquei parecia todo perdido. El rey, el hijo de Diso murio en debilidad y fue sepultado.... los discipulso estaban apesadumbrados no sabñian lo que pasaría mañana.... El murio y resucto, ¿Que le dices a tu alma en medio del dolor?

-------

Como Jesús fue crucificado por sedición, su cuerpo podría haber encontrado este destino, pero se salvó de esta indignidad.

Nuestro Señor fue exaltado a la manera de su entierro, pero eso fue simplemente una pista de lo que estaba por venir: la resurrección. Las Escrituras dicen que "era imposible que la muerte se aferrara a él" ( NVI). Por lo tanto, tan honroso como el lino y las preciosas especias y ungüentos eran para Jesús, eran absolutamente innecesarios, un desperdicio de buen lino y buena fragancia.

José y Nicodemo actuaron de acuerdo. Deben haberse puesto de acuerdo de antemano en cuanto a qué haría cada uno. En consecuencia, llegaron totalmente preparados.

Pero ahora, como fruto de la muerte expiatoria de Cristo y de su amor por él, este hombre de repente se ha vuelto muy valiente.

La valentía se manifiesta sobre todo en que actuó a pesar del hecho de que sabía que sus colegas del Sanedrín se enterarían de ello.

José contó con la cooperación voluntaria de Nicodemo.

41-42

Era el día judío de la Preparación. Véase sobre 19:14, 31. En otras palabras, era viernes. Se acercaba la puesta del sol. En consecuencia, a fin de que todo pudiera concluirse antes del sábado, no se podía perder tiempo. No se podía enterrar el cuerpo de Jesús en un sepulcro alejado. El tiempo no lo permitiría.

(2) Su novedad. Este sepulcro era nuevo.

Nunca habían entrado en él el deterioro y la descomposición. Era un lugar adecuado para que descansara en él el cuerpo del Señor. Cf. .

(3) Su propietario. Según era el sepulcro del propio José. Y José era rico. En consecuencia, viene enseguida a la mente “Con los ricos fue en su muerte”.

(4) Su aspecto general. Este sepulcro no era una cueva natural. Había sido labrado de piedra sólida (). Después de depositar el cuerpo de Jesús, José (con la ayuda de otros, naturalmente) colocó una gran piedra frente a la entrada del sepulcro (). Esta piedra era muy pesada (o muy grande) (). La entrada al sepulcro era baja, como se deduce del hecho de que María tuvo que inclinarse para mirar en su interior (20:11). Lo mismo tuvo que hacer Pedro (20:5; ). En ambos extremos del lugar en el que se colocaba el cuerpo se había dejado la roca lo suficientemente gruesa como para formar una especie de asiento (20:12).

Aplica:

El entierro de Jesús fue un elemento necesario en su humillación. Por medio de ello santificó la tumba para todos sus seguidores.

------

.....

Coram Deo

Nuestras obras no pueden y no pueden expiar nuestro pecado.

.....

Meditaciones sobre los Evangelios: Juan Juan 19:38–42

Hijo eterno de Dios honró al cuerpo morando en él durante treinta y tres años y muriendo finalmente en nuestro lugar. Fue corpóreamente como resucitó y ascendió al Cielo. Es con el cuerpo como se sienta a la diestra de Dios y nos representa ante el Padre en calidad de Abogado y Sacerdote. El cuerpo es el templo del Espíritu Santo durante la vida del creyente. El cuerpo resucitará al sonido de la última trompeta y, ya reunido con el alma, vivirá en el Cielo para toda la eternidad. Sin duda, ante hechos como estos, no debemos suponer que sepultar el cuerpo con reverencia carece de sentido.

Meditaciones sobre los Evangelios: Juan Notas: Juan 19:38–42

Nos muestra que existe un amplio espectro de tipos de creyentes. Algunos alcanzan la luz de inmediato y toman su cruz sin dilación, mientras que otros llegan a ella muy despacio, tras muchas dudas. Nos muestra que, muchas veces, quienes menos alardes hacen al principio son los que más brillan al final. Nicodemo confesó su amor a Cristo cuando Pedro, Santiago y Andrés le habían abandonado. ¡Qué necesaria es la paciencia y el amor al formarse una idea con respecto a la vida religiosa de los demás! Nicodemo tiene muchos más descendientes en la Iglesia de Cristo de lo que imaginamos. Quizá presenciemos cambios maravillosos en algunas personas si vivimos con ellas unos pocos años. A menudo, los árboles más sólidos y robustos son los que más tardan en crecer. El que tacha a hombres y mujeres de incrédulos simplemente porque no hacen una confesión de fe decidida desde el primer día olvida el caso de Nicodemo y demuestra su desconocimiento de los caminos del Espíritu. No cabe duda de que todos los elegidos de Dios son guiados a Cristo, pero no todos a la misma velocidad ni con las mismas experiencias.

borara

​

Coram Deo