Solo Gracia. Un regalo del corazón de Dios
La gracia aplicada a nuestras vidas, es la unica forma de alcanzar salvacion
introduccion.
El Consejo Inglés de Higiene Industrial llevó a cabo —hace algún tiempo— el siguiente experimento: Un sicólogo, empleado del citado Consejo, visitó algunas empresas comerciales, industriales y bancarias, diciendo a los empleados, uno por uno: “El jefe quiere hablar con usted.” Estas sencillas palabras: “El jefe quiere hablar con usted”, llenaron de inquietante preocupacíon a cuantos las oyeron. Algunos palidecían y se preguntaban: ¿Qué habrá pasado? ¿Qué me querrá decir? ¿Habrá alguna acusación contra mí? ¿Será para decirme que me van a dejar cesante?
Si el solo aviso de que el jefe quería hablar con ellos, llenó de angustiosa inquietud a aquellos obreros ingleses, ¿qué será cuando los ángeles suenen las trompetas del juicio para llamar a los pecadores a comparecer ante un Dios airado por los actos de pecado y perversidad de quienes se deleitan practicando lo que los sentimientos de Dios repelen y su justicia condena?
Se cuenta que la reina Elisabet de Inglaterra se sintió en cierta ocasión, airada contra Cristóbal Hatton, Canciller del Imperio; y cuando éste fue a entrevistarse con la soberana, Elisabet le lanzó una mirada que paralizó el corazón del Canciller, quien cayó muerto. Si tal cosa le puede suceder a un hombre ante la mirada de una reina, ¿qué será cuando el pecador tenga que comparecer ante un Dios que ciertamente está airado por las injusticias, crímenes y atropellos que se cometen en el mundo?
Las Sagradas Escrituras nos revelan que el Día de Dios, los reyes de la tierra, los príncipes, los millonarios, los poderosos y todos los inconversos, tratarán de esconderse en las cuevas y entre las peñas; y clamarán a los montes y a las peñas, diciendo: “Caed sobre nosotros y escondednos del rostro de aquel que está sentado en el trono del juicio, porque el gran día de su ira ha llegado; y, ¿quién podrá permanecer en pie delante de él?”