EL CRISTIANO Y SU VESTIMENTA II

INTRODUCCIÓN

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I. En la lección anterior pudimos ver al menos tres cosas distintas pero relacionadas...

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A. El vestuario se introduce desde la caída del hombre, por causa de la vergüenza.

B. Al verse desnudo; el hombre trata de cubrir su desnudez haciéndose delantales.

C. Dios se involucró directamente con el vestir humano, al hacer túnicas de pieles.

II. En esta; nos centraremos en tres aspectos también relacionados con el mismo tema...

A. El propósito básico de la ropa o atavío humano a la luz de las Sagradas Escrituras.

B. El impacto de nuestros atavíos desde el contexto social, cultural, y espiritual.

C. Los principios bíblicos fundamentales en relación con las vestimentas humanas.

III. Bienvenidos.

DESARROLLO

I. Generalidades.

A. Cuando hablamos de la ropa; deberíamos referirnos a toda prenda que sirva para

cubrir u ocultar la desnudez humana; cf. .

1. El hombre; antes de caer en la vergüenza, anduvo desnudo por el Edén; cf. .

2. Comúnmente se considera que la desnudez es la ausencia plena o total de la ropa.

3. Pero esto no es del todo cierto; y así podemos reconocerlo en y .

B. Toda prenda sin duda es ropa; mas no toda prenda cubre, protege, u oculta el cuerpo de manera correcta (bíblica); cf. .

1. “Túnicas” usado en , es el mismo que podemos observar en .

3:21.

2. Así Adán y Eva; al igual que los sacerdotes, quedan ya “vestidos”; cf. .

3. Pero a pesar de esto mismo, se nos agrega el término “calzoncillos” en .

a. Vemos así una evolución en el vestuario humano, que Dios mismo introduce, por razón del servicio sacerdotal.

b. Tenemos una prenda que cubre las partes nobles (calzoncillos), y otro el resto del cuerpo (las túnicas).

c. Hoy día; sucede exactamente lo mismo, y usamos interiores y externas para cubrirnos.

Un traje de baño es una prenda de vestir; pero tan solo oculta las partes nobles del cuerpo.

Una minifalda, un top, unos shorts; no ocultan externamente el cuerpo de la forma adecuada.

El propósito bíblico de los atavíos es el ocultar, proteger o guardar la desnudez del cuerpo.

(bíblica)

C. Al hablar del vestuario “cristiano”; el énfasis recae primeramente en la protección,

cubierta u ocultamiento de nuestros miembros.

1. Se contrastan los delantales hechos por Adán y Eva, con las túnicas hechas por Dios; cf. , .

2. Se contrasta la poca protección u ocultamiento de tales delantales, con la correcta de las túnicas.

3. Se contrasta el estar vestidos (), con el intento pobrísimo por parte de Adán y Eva ().

a. ¿Quiere decir esto que nuestras hermanas deben llevar faldas hasta los tobillos?

b. ¿Cuándo una prenda es correcta o incorrecta; y cómo se establece tal situación?

c. ¿Quién tiene la última palabra en relación con el vestuario correcto del cristiano?

II. Principios Puntuales

A. El impacto de la ropa a nivel social y cultural.

1. Desde siempre la ropa y las vestimentas humanas han tenido un impacto en la cultura y sociedad.

2. Toda persona; sencillamente por la ropa que use, puede enviar una información determinada.

a. Jacob; por el mero hecho de hacerle a su hijo una túnica de colores, mostró su favoritismo.

b. Incluso en nuestros días una persona puede mostrar su luto por su forma de vestir; cf. .

c. Un sacerdote, una prostituta, un alto ejecutivo, un soldado; se reconocen por sus vestimentas.

Negar el impacto sociocultural del vestuario humano es hacerse voluntariamente ciego.

Pero negar esto desde el punto de vista moral o espiritual es tal vez muchísimo peor.

Nuestra forma de vestir consiente o inconscientemente trasmite una información determinada.

3. No podemos ignorar el enorme peso que tienen nuestras vestiduras a un nivel socio-cultural.

a. Nos vestimos o usamos cierta ropa, dependiendo del tipo del tipo de clima en que vivamos.

b. Al vestirnos damos evidencia de muchas cosas a nivel social, cultural, laboral y aún material.

c. Y nos vestimos además, dependiendo del tipo de moralidad o temor de Dios que tengamos.

Vemos entonces que el vestuario evidencia muchas cosas en relación con nosotros mismos.

Nuestros atavíos pueden mostrar nuestro contexto social, laboral, económico y hasta moral.

No podemos ignorar entonces la influencia de nuestras vestimentas a nivel social y cultural.

B. El contexto de la ropa a nivel espiritual.

1. Pero tampoco podemos ignorar el peso que nuestro vestuario pudiera tener a nivel espiritual.

2. Se espera que un cristiano vista acorde al temor de Dios, y testimonio personal; cf.

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3. Deberíamos preguntarnos si nuestro vestuario es piedra de tropiezo para otros; cf.

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No estoy abogando el uso de togas, túnicas, o burkas entre nosotros los hermanos.

Pero tampoco creo que como cristianos debemos usar ropa provocativa o sensual.

Existen principios muy claros en toda la palabra de Dios, en relación con el vestido.

C. Estableciendo una clara diferencia; cf. .

1. Es claro que las diferencias entre un creyente y un incrédulo se establecen a nivel interno.

2. Pero precisamente por ello; estas pueden reconocerse también a nivel externo y práctico.

3. No caigamos en la trampa de los fariseos (); pero tampoco en la de los liberales.

Cuando se nos habla sobre “la forma” o “la manera” de vestirnos; no es como si

se tratara una sugerencia, o una insinuación.

se tratara una sugerencia, ni una insinuación.

El evangelio; al hablar de la ropa o el vestir, establece patrones muy claros que todos estamos en la obligación de guardar u obedecer.

en la obligación de guardar u obedecer.

Así entonces; el tema del vestuario correcto no es dejado a la opinión personal, se determina por aquello revelado por Dios.

a lo revelado por Dios a través de su palabra.

III. Principios Bíblicos

A.

A. Existen tres patrones básicos o fundamentales en relación con la “forma” o la “manera” como todo creyente debe ataviarse.

B. Dichos estándares se nos revelan a través de toda la palabra de Dios; de forma

explícita en el N.T., e implícita en el A.T.

C. Estos principios son atemporales y universales; pues sirvieron en épocas pasadas, y sirven para hoy. No se limitaron a las sociedades bíblicas; pero se aplican a la nuestra.

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1. D

2. Por razón de nuestro tema (la vestimenta del cristiano), nos limitaremos a los versículos 9 y 10 de esta porción del evangelio; cf. .

3. En el contexto de la presentación o la vestimenta del cristiano, se destacan cuatro (4) aspectos muy importantes en relación con ello mismo.

a. “Ataviar” se refiere a la forma como debe arreglarse, adornarse, o embellecerse una mujer.

De“kosmeo” es de donde obtenemos “cosmos”, y evidencia buena disposición o armonía.

Es la palabra equivalente en el hebreo para hablar la disposición de la Creación por parte de Dios.

Dios nunca ha impedido que la mujer se embellezca; pero le advierte sobre enfatizar en

su interior; cf. .

1. Ambos textos enfatizan particularmente en los “atavíos adecuados” que debiera

usar toda mujer que se considere temerosa del Señor.

2. Pero esto no excluye al varón; sobre todo en nuestra sociedad contemporánea, que al igual que la mujer requieren claridad en este tema.

3. Estos textos presentan “estándares” o “fundamentos” específicos, claros y muy prácticos, antes que hablarnos de modas, prendas, o medidas.

La mujer virtuosa que sus muchas virtudes, destaca por su presentación; cf. .

La reina Ester que por sobre las demás doncellas, fue escogida por Asuero; cf. , .

a. “Decoro”

Sin embargo; Dios demanda o espera mujer resalte sus cualidades internas o espirituales.

Decoro es la traducción del término griego “kosmios”; de donde obtenemos “cosmos”.

Este término se relaciona con algo que está bien dispuesto o correctamente ordenado.

Dios no impide que la mujer se arregle o hermosee; pero enfatiza en su atuendo interno.

De nuevo Pablo establece que por encima del exterior, la mujer debe exaltar en su interior.

Se implica que el interior de la mujer hace evidente su figura interna o interior; cf. .

La belleza de Sara; a pesar de sus 65-70 años de edad, era muy evidente; cf. .

Ejemplo de esto mismo podemos reconocerlo a partir de la mujer virtuosa; cf.

La reina Ester que por sobre las demás doncellas, fue escogida por Asuero; cf. , .

, , .

31:22b, 25a, 30.

Tal mujer evidencia tanto un carácter piadoso, como una presentación externa adecuada.

La mujer virtuosa sin descuidar su exterior; enfatiza sobre todo en su aspecto o cualidades internas.

b. “Pudor”

Se refiere al sentido de vergüenza personal; al tomar en consideración a los demás.

Es el pudor lo que siempre detiene a una persona a cometer algo indigno o amoral.

Es el pudor lo que invita o evidencia un buen decoro; haciendo de las dos una sola.

c. “Modestia”

Esta es una virtud interna del ser, que evidencia el auto control o auto freno.

Una persona modesta es cuerda, tiene buen juicio, sensatez, y mesura.

La persona modesta es discreta; cosa con la que genera respeto y dignidad.

CONCLUSIÓN

I. Vemos entonces que nuestro vestuario deja mucho a pensar, desear o considerar...

A. El interior de una persona hace evidente su presentación personal o externa.

1. También Pedro escribe a mujeres creyentes, para hacer énfasis en una orden o precepto.

2. El texto no dice que mujer no deba arreglarse externamente; mas sin ostentación o pompa.

B. Al contraponer estas dos cosas; se hace evidente una forma particular de ser.

C. En dado momento; se puede reconocer a una persona, incluso por su vestir.

3. Hay un claro contraste entre los versos 3 y 4 que muestran a dos mujeres muy diferentes.

b. Parte de la actitud del corazón, que se hace evidente a través de la presentación física.

c. La mujer que profesa piedad; la hace evidente de varias formas, el vestuario una de ellas.

II. Un vestuario adecuado es sinónimo de buen gusto, buena presentación y respeto.

A. Una ropa indecorosa puede ser causa de tropiezo en muchos hombres, e incluso mujeres.

B. Una ropa inadecuada puede abrir la puerta a la provocación, la sensualidad, y la lascivia.

C. Toda persona debería saber que los hombres somos por naturaleza muy visuales; cf. .

III. Existen dos posturas muy diferentes en relación con el vestuario humano, la desnudez, y la sensualidad.

A. La posición humana después de la caída; que le lleva a cubrirse inadecuadamente; y la posición divina que evidencian pudor, modestia, y recato.

B. Debemos entender que no toda prenda de vestir es adecuada a la luz de la revelación de Dios, nuestro carácter espiritual, y testimonio personal.

C. Si bien nuestro Dios no habla de medidas, modas , o prendas particulares; si habla de principios, estándares, o patrones claramente distintivos.

II. Cada uno de nosotros como miembros de la familia del Señor; debemos entender que no toda prenda de vestir es adecuada a la luz de la revelación de Dios, de nuestra presentación personal como fieles, y de nuestro testimonio para los incrédulos.

C. Si bien nuestro Dios no habla de medidas, modas pasajeras, o prendas particulares de vestir; si habla de principios, estándares, o patrones claramente distintivos. Corresponde a cada uno de nosotros discernir que ropa es adecuada, y cual no llega a serlo.

1. Que nuestra forma de vestir sea consecuente con nuestras convicciones cristianas, y causen un buen testimonio entre quienes nos rodean.