Gn 8:1-22 - Un altar de gratitud como respuesta a Su gracia - Serie Génesis No. 18

INTRODUCCIÓN

Estamos estudiando el libro maravilloso de Génesis. Dios hablando a nuestros corazones por medio de Su Palabra.

Sin embargo, debemos preguntarnos lo siguiente. ¿Significan sus Palabras mucho más de lo que significa cualquier otra palabra? ¿Lo que Él dice está cambiando nuestras vidas?

Noé ha iniciado un viaje por fe, ha escuchado las Palabras de Dios y le ha creído.

Esto le ha llevado a estar en un viaje, pasando la puerta de la salvación y ahora bajo resguardo de Dios. Noé, no solamente alcanzó gracia ante los ojos de Dios, sino que su familia fue bendita por él. El arca lo ha salvado, Noé ha dado los pasos de la fe que son necesarios para alcanzar la bendita salvación que es confiar en quién está presente en el arca y que simboliza el arca, que es Jesucristo.

Pero lo cierto, es que no todos alcanzaremos esa dicha. Sería tan precioso ver que muchas personas o todas las personas se salvan de la destrucción, pero la gente rechaza la salvación. La rechazó en el tiempo de Noé, y la sigue rechazando hoy.

¿Pero qué quieres hacer tú, que conoces la gracia de Dios en Cristo Jesús?

El tema de hoy es: “Un altar de gratitud como respuesta a Su Gracia” y está basado en Gn 8.

EXÉGESIS Gn 8

Noé ha estado algún tiempo en el arca. Él sabe algunas cosas. La primera que Dios lo ha salvado. La segunda, que todo ser vivo a excepción de los que están en el arca y los peces, han sido destruidos a causa del pecado.

La fe de Noé ha sido probada y ha vencido. Está viendo los resultados de su fe. ¡Tiene vida, Él y los suyos, Él y los que Él ama!

Cuánto nos gustaría tener la dicha de Noé, de que nuestras familias, a quienes amamos, alcanzaran también la salvación. La fe de Noé ha generado esas bendiciones y nuestra fe también podría traer a nuestros seres queridos a los pies del Señor.

Lo primero que notamos es que:

Su gracia se manifiesta en su fidelidad. Dios no abandona a Sus Hijos y cumple sus promesas. Gn 8:1-5

Génesis 8.1 RVR60

1 Y se acordó Dios de Noé, y de todos los animales, y de todas las bestias que estaban con él en el arca; e hizo pasar Dios un viento sobre la tierra, y disminuyeron las aguas.

“Y se acordó Dios de Noé, y de todos los animales, y de todas las bestias que estaban con él en el arca”. Dios tiene los ojos puestos en Noé y su familia. Su ira es grande contra el pecado, pero su gracia es más grande para con los suyos. No creo que Noé esté aturdido o preocupado, creo que este es un paso posterior después de la prueba, ya ha visto que la salvación ha llegado a su familia. Debe tener muchas preguntas en su cabeza pero sabe que puede confiar en Dios. Y DIOS ES FIEL.

¿Confías en Dios? Es fácil decir que confiamos en Dios. Todos queremos confiar en Dios ¿verdad? Por supuesto que sí!, Necesitamos aprobar exámenes, necesitamos salud, necesitamos economía, necesitamos trabajo, necesitamos que un proyecto nos salga bien, necesitamos vender, pagar el crédito el banco, triunfar en algo, para eso sí buscamos a Dios y confiamos en Él.

Parece que cuando necesitamos algo sí podemos confiar en Dios. Y aunque Dios es fiel con nosotros, no es este el caso de Noé. Noé tuvo que construir y hemos dicho, tal vez cerca a 100 años el arca, y necesitaba todos esos días vivir piadosamente, vivir en temor de Dios. Vivía en la JUSTICIA DE DIOS. Esta es la diferencia entre la confianza de Noé y la que muchas veces tenemos nosotros.

Noé, se rindió por completo a Dios, eso hemos estudiado anteriormente, tuvo que creer en Dios, predicar la Palabra, predicar el arrepentimiento y la justicia de Dios y ser tan temeroso de Dios. Puso su confianza en Él aún no sabiendo cuál era el destino del ARCA, ¡ESO ES FE!

La FE es confiar plenamente en Dios y dejar que ÉL haga en nuestra vida lo que le apetezca de acuerdo a su SANTA Y MARAVILLOSA VOLUNTAD.

Pero nosotros confiamos en ÉL cuando necesitamos algo de Él y no cuando nos pide Dios que nos entreguemos totalmente a su JUSTICIA, SANTIDAD Y VOLUNTAD.

Dios tiene los ojos puestos en Noé, y si viviésemos en la justicia, santidad y voluntad de Dios, que distintas serían nuestras vidas.

“.. e hizo pasar Dios un viento sobre la tierra, y disminuyeron las aguas”. - Este es el PODER DE DIOS EN MOVIMIENTO diciendo es tiempo de que Noé tenga un nuevo hogar y deje el arca.

Génesis 8.2–5 RVR60

2 Y se cerraron las fuentes del abismo y las cataratas de los cielos; y la lluvia de los cielos fue detenida.3 Y las aguas decrecían gradualmente de sobre la tierra; y se retiraron las aguas al cabo de ciento cincuenta días.4 Y reposó el arca en el mes séptimo, a los diecisiete días del mes, sobre los montes de Ararat.5 Y las aguas fueron decreciendo hasta el mes décimo; en el décimo, al primero del mes, se descubrieron las cimas de los montes.

Pasan cosas extraordinarias sobre la tierra. Dios el Creador es Soberano sobre su creación, tiene el poder de mandar y la tierra obedece.

Dios le había dicho a Noé que establecería un pacto con él y ha llegado la hora. Dios cumplirá su promesa.

Estos versículos muestran a Dios actuando a favor de Noé, es tiempo de que Él salga del arca.

Dios derrama su gracia. Él es fiel, no abandona a Sus Hijos y cumple sus promesas. Pero la fe de Noé se evidencia en los frutos que hay en su vida. Está en medio de agua y el rumbo del arca no lo controla él, pero este hombre de fe, necesita seguir confiando en Dios:

La fe que da frutos genera un cambio de vida, de actitud y de esperanza en Dios. Gn 8:6-14

Génesis 8.6–7 RVR60

6 Sucedió que al cabo de cuarenta días abrió Noé la ventana del arca que había hecho, 7 y envió un cuervo, el cual salió, y estuvo yendo y volviendo hasta que las aguas se secaron sobre la tierra.

Noé necesita seguir dependiendo de Dios. Noé necesita seguir confiando en Dios y sobre todo necesita ejercitar la ¡paciencia!

Gálatas 5.22 RVR60

22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,

Noé ha visto la gracia de Dios sobre su vida y ahora da frutos de paciencia. Él tiene que seguir dependiendo de Dios y hacerlo pacientemente.

¡Cuántos nos falta ser como Noé! Si en nuestras vidas fuésemos pacientes y confiáramos en Dios, en Su Voluntad, entonces no haríamos cosas que nos alejarían de Él! Él es fiel y va a cumplir, más nosotros muchas veces somos impacientes o faltos de fe.

Noé envía un cuervo para saber si ya la tierra está seca, esto si es que el cuervo puede reposar, pero esto no sucede de inmediato.

Génesis 8.8–9 RVR60

8 Envió también de sí una paloma, para ver si las aguas se habían retirado de sobre la faz de la tierra. 9 Y no halló la paloma donde sentar la planta de su pie, y volvió a él al arca, porque las aguas estaban aún sobre la faz de toda la tierra. Entonces él extendió su mano, y tomándola, la hizo entrar consigo en el arca.

Después del cuervo, envía una paloma. Algunos dirían que Noé pareciera estar desesperado. Pero más parece ser que Noé está aguardando pacientemente el momento que Dios le ordene salir.

¡Noé no sabe donde está yendo el arca, pero sabe quien lo conduce!

Tal vez es el momento que seamos un poco más como Noé y “dejemos todo en las manos de Dios” y le digamos, Señor, estoy conduciendo mi vida mal, necesito que tú lo hagas. Estoy cansado de equivocarme tanto, de lastimar a otros y a mí mismo, estoy cansado de pecar contra tí, necesito que tú lleves mi vida, a donde quieras llevarla, YO ESPERARÉ SEÑOR, yo esperaré en TÍ, esperaré tus tiempos y tus circunstancias, aún estas sean difíciles y no pueda entenderlas.

La nueva vida de Noé le trae nuevas actitudes y en esta oportunidad se observa su paciencia y temor a Dios. ¿No necesitamos tú y yo de nuevas actitudes en nuestra vida? Actitudes que reflejen que el Espíritu Santo está haciendo cambios continuos en nuestra vida.

Génesis 8.10–12 RVR60

10 Esperó aún otros siete días, y volvió a enviar la paloma fuera del arca. 11 Y la paloma volvió a él a la hora de la tarde; y he aquí que traía una hoja de olivo en el pico; y entendió Noé que las aguas se habían retirado de sobre la tierra. 12 Y esperó aún otros siete días, y envió la paloma, la cual no volvió ya más a él.

Noé no se apresura, es muy paciente, espera siete días, luego otros siete. Está vigilante de las cosas que están pasando, pero sabe que Alguien las está controlando.

“.. Y la paloma volvió a él a la hora de la tarde; y he aquí que traía una hoja de olivo en el pico..” - La tierra a causa de la acción divina ya se encuentra seca, de tal modo que hay zonas con árboles y vegetación y Noé sabe que Dios está obrando para que él pueda volver a tener una vida en su habitat normal.

Génesis 8.13–14 RVR60

13 Y sucedió que en el año seiscientos uno de Noé, en el mes primero, el día primero del mes, las aguas se secaron sobre la tierra; y quitó Noé la cubierta del arca, y miró, y he aquí que la faz de la tierra estaba seca. 14 Y en el mes segundo, a los veintisiete días del mes, se secó la tierra.

Noé estuvo más de un año en el arca. Esto sabemos porque Gn 7:6 nos dice la edad de Noé al momento de ingresar al arca (seiscientos años) y ahora tenemos información de que las aguas se secaron más de un año después.

¿Verdad que es paciente Noé? Él tiene esperanza en Dios, es una nueva vida y una nueva oportunidad.

Pero Noé no debe olvidar lo más importante en este nuevo comienzo, sigue estando bajo el Creador, deberá depender de Él en este nuevo comienzo, deberá seguir sujetándose a sus leyes, deberá reconocerlo como Señor.

A veces pensamos que porque ya somos salvos ahora es el momento de vivir una nueva vida en base a nuestras propias opiniones, gustos, pensamientos y que ahora tenemos vía libre para triunfar y tener éxito en lo que nos propongamos. Pero Noé sigue estando bajo el señorío del Creador, entonces podemos aprender que:

La vida de los hijos de Dios es de continua sujeción al Padre, Él nos lleva por caminos que en su Voluntad son lo mejor para nosotros. Gn 8:15-19

Génesis 8.15–17 RVR60

15 Entonces habló Dios a Noé, diciendo: 16 Sal del arca tú, y tu mujer, y tus hijos, y las mujeres de tus hijos contigo. 17 Todos los animales que están contigo de toda carne, de aves y de bestias y de todo reptil que se arrastra sobre la tierra, sacarás contigo; y vayan por la tierra, y fructifiquen y multiplíquense sobre la tierra.

Dios sigue siendo el Creador, de hecho, en este punto, ya no solo se ha revelado en Génesis como Creador, sino que ahora es el Soberano Juez, ya ejecutó su juicio contra los impíos y ahora da nuevamente ordenanzas a Noé.

¿A veces hemos olvidado que Dios es Juez, verdad? En nuestra mente humana a veces solo lo vemos como un genio de la lámpara, dispuesto o listo para cumplir y satisfacer nuestras necesidades. El que es Juez está mirándonos ahora mismo y puede ver más allá de lo que nosotros vemos. El puede ver la profundidad de nuestro corazón y pensamientos.

La orden nuevamente es de llenar la tierra, es un nuevo inicio para la humanidad.

Génesis 8.18–19 RVR60

18 Entonces salió Noé, y sus hijos, su mujer, y las mujeres de sus hijos con él. 19 Todos los animales, y todo reptil y toda ave, todo lo que se mueve sobre la tierra según sus especies, salieron del arca.

Aquel OMNIPOTENTE que es Justo y Sabio para decir: Entra al arca, ahora es igual de Justo y Sabio para decir: Sal del arca.

Noé fue paciente, no hizo las cosas a su manera, sino que dependió aún cuando la tierra ya estaba seca para esperar la instrucción de Dios y salir con su familia y todos los animales.

La vida de los hijos de Dios es o debería ser de continua sujeción al Padre, Él nos lleva por caminos que en Su Voluntad son los mejor para nosotros.

Pero falta un aspecto más en esta historia y es la gratitud de un hombre, que puede bajar de algo que parecía imposible, puede mirar atrás y ver una construcción inmensa de madera, que lo ha guardado de la destrucción, puede ver a su familia con vida, pero que sobre todo puede ver que hay Alguien que es digno de adoración, por su gran misericordia y amor:

La nueva vida es un continuo altar de adoración y gratitud como respuesta a la gracia de Dios. Gn 8:20-22

Antes de seguir con estos versículos, preguntamos a lo más profundo de nuestro corazón:

¿Tu vida es una muestra de adoración a Dios?

Porque si no lo es, si hay otras cosas en nuestra mente y nuestro corazón, que ocupan el lugar que le pertenece a Dios, probablemente tú y yo seríamos aquellos que se hubiesen quedado fuera del arca.

Pero Noé es distinto:

Génesis 8.20 RVR60

20 Y edificó Noé un altar a Jehová, y tomó de todo animal limpio y de toda ave limpia, y ofreció holocausto en el altar.

Noé fue paciente en el arca, pero ahora, se apresura a rendir gloria y honra, a darle adoración a quien es el SOBERANO DEL UNIVERSO, a Jehová.

Le hace un altar, toma de los animales limpios y aves limpias y ofrece un holocausto a Dios.

Noé no construye una casa primero, o no busca alguna tierra donde quedarse e iniciar, sino que en su corazón está edificar un altar a Jehová, un altar de adoración y de gratitud.

¿Cuándo fue la última vez que te has rendido a los pies de Dios y le has dado las gracias por tu salvación, por el precio de la cruz para rescatarte?

Señor, tenemos que pedirte perdón, porque únicamente estás en mi mente cuando me acostumbré a repetir palabras para almorzar y cenar. Pero luego, ya no estás Señor. Cuando tengo alguna necesidad, un problema, una situación difícil, ahí estás Señor, solo te busco para eso. Pero no recuerdo haberte buscado para adorarte con mi vida, mis actitudes, con mis acciones y pensamientos. Renuévame Señor.

Noé ofrece holocausto, va a costar sangre, vida, para recordar que el hombre es pecador, pero que puede acercarse a Dios a través de un sacrificio, y nosotros hoy sabemos que ese es nuestro Señor Jesucristo.

Génesis 8.21–22 RVR60

21 Y percibió Jehová olor grato; y dijo Jehová en su corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del hombre; porque el intento del corazón del hombre es malo desde su juventud; ni volveré más a destruir todo ser viviente, como he hecho. 22 Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, y el día y la noche.

“Y percibió Jehová olor grato..” - Dios recibe, la acción de agradecimiento y temor de Noé, y lo recibe.

Jehová de los Ejércitos puede recibir con olor grato hoy tu arrepentimiento y tu fe en Cristo. Y puede recibir como olor grato, que te rindas ante Él y que le permitas ser el SEÑOR absoluto en tu vida.

Dios hace un compromiso consigo mismo. Reconoce que el corazón del hombre tiene serios problemas a causa del pecado, que está totalmente contaminado, pero ÉL no va a castigar nunca más con una inundación a escala global y mundial como lo ha hecho.

¿Es importante esto? Sí, claro que lo es. La misericordia de Dios está extendida a pesar de que el hombre tiene un corazón volcado al mal, la cruz sigue siendo hoy día una invitación al amor de Dios, a la salvación por medio de Cristo.

El juicio de Dios ya no se manifestará por un diluvio, sino por el rechazo a ese amor ofrecido en la cruz. Este será el castigo para aquel que rechace a Jesucristo y será un castigo eterno.

MEDITEMOS EN LA PALABRA

¿Y ahora, qué significa todo esto para nosotros? Cada vez que tenemos un encuentro con la Palabra del Señor, ¿nos sentimos confrontados? Ciertamente hay muchos cambios que deben hacerse en nuestra vida?.

Recuerdas la pregunta del inicio:

¿Significan sus Palabras mucho más de lo que significa cualquier otra palabra? ¿Lo que Él dice está cambiando nuestras vidas?

Hemos visto que Él es fiel, no abandona a sus hijos y cumple sus promesas. Pero ¿que hay de tí? ¿que hay de nosotros?

¿Cuál es tu respuesta a su preciosa gracia para contigo?

¿Hay un cambio en tu vida, un cambio de actitud, como lo hubo en la vida de Noé?

¿Hay sujeción al Padre y el deseo de hacer Su Voluntad aún cuando esta no se ajuste a nuestros planes o deleites como lo hubo en la vida de Noé?

¿Es tu vida un continuo altar de adoración a Dios, por la gratitud de que El Padre, ha dado a Su Hijo para rescatarte de tus pecados, ofreciendo en la cruz, lo último de Su Vida para perdonar tus maldades? ¿Adoras a Dios como lo hizo Noé?

Tal vez la respuesta de muchos es “No, de hecho estoy lejos de eso”. Pero hoy puedes iniciar de nuevo.

Noé tuvo un nuevo inicio y fue bendecido, pero su vida reflejaba la justicia y el temor a Dios. Y si has estado viviendo lejos de Dios, también puede ser tu inicio hoy.

Si no has estado viviendo en la Palabra de Dios, también puede ser tu primer día hoy.

Salmo 63.1–4 RVR60

1 Dios, Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, En tierra seca y árida donde no hay aguas, 2 Para ver tu poder y tu gloria, Así como te he mirado en el santuario. 3 Porque mejor es tu misericordia que la vida; Mis labios te alabarán. 4 Así te bendeciré en mi vida; En tu nombre alzaré mis manos.

Edifica un altar a Jehová hoy. Es sencillo, ya está listo. Se llama Jesucristo. Reconócelo en tu corazón como tu SEÑOR Y SALVADOR, arrodíllate en el silencio de tu habitación, habla con tu Señor, dile lo mucho que lo necesitas y lo mucho que te has olvidado de Él. Renueva tu compromiso con su ministerio, su Iglesia, Su evangelio y Palabra. Pon tu fe en Jesucristo, eso va a ser un verdadero olor grato al Padre y tu vida un continuo altar de adoración a Él.

Vamos a orar.