Cisternas Rotas
Lectura Bíblica: Jeremías 2.8-13
…Y anduvieron tras lo que no aprovecha. 9 Por tanto, pleitearé aún con vosotros, dice Yahvé. Con los hijos de vuestros hijos pleitearé. 10 Pasad, pues, a las costas de Quitim y mirad; enviad a Cedar y considerad cuidadosamente. Ved si se ha hecho cosa semejante a esta. 11 ¿Acaso alguna nación ha cambiado sus dioses, aunque estos no son dioses? Sin embargo, mi pueblo ha cambiado su gloria por lo que no aprovecha. 12 ¡Espantaos, cielos, sobre esto, y horrorizaos! ¡Pasmaos en gran manera!, dice Yahvé. 13 Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen el agua.
Oración
Texto: Jeremías 2.12-13
…dice Yahvé: 13Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen el agua.
Introducción
Cisternas rotas: En una región como Palestina, donde el agua no abunda, se hacía indispensable construir cisternas para conservar el agua.
A. ¿A quiénes van dirigidas estas palabras?
Jeremías 2.8 La acusación va dirigida, ante todo, contra los principales responsables.
1. En primer lugar, contra los sacerdotes, no en cuanto ministros del culto, sino en su función de instructores, es decir, como depositarios de la Ley y encargados de enseñarla al pueblo (cf. Oseas 4.10)
2. Luego, contra los pastores o jefes, título que en el antiguo Oriente se daba a los reyes, de quienes se esperaba que establecieran un orden social justo (véase Sal 72 1-2; cf. Jeremías 22.13-19.
3. Finalmente, contra los profetas, infieles a su misión de proclamar la palabra de Dios (cf. Jeremías 1.9). La lucha contra los falsos profetas fue una de las pruebas más duras que debió afrontar Jeremías (cf. Jeremías 23 9-40; 28 1-17).
B. El Juicio de Dios
Jeremías 2.9 El Señor ha decidido entablar un proceso judicial contra su pueblo infiel y pone como testigo al cielo (v. 12; cf. Isaías 1.2). Los motivos de la acusación se especifican en Jeremías 5 8,10-11,13.
Jeremías 2.10 Las costas de Quitim: otra posible traducción: las islas de occidente, nombre que designa no solo a los habitantes de la isla de Chipre, sino, en general, a todas las poblaciones costeras en la parte oriental del Mediterráneo.
Cedar era una tribu nómada del norte de Arabia (véase Salmo 120.5). Con respecto a Palestina, los sitios aquí mencionados representan puntos bastante alejados en direcciones opuestas, es decir, hacia el oeste y el este, respectivamente. 2.10-11 Cf. Salmos 106 19-20; Romanos 1.23.
Jeremías 2.11 En el lenguaje bíblico, la gloria del Señor suele describirse como una manifestación luminosa que hace percibir de manera sensible la presencia divina en la creación (cf. Salmo 19.1; Isaías 6.3), en el Templo (Isaías 6.3-4; Ezequiel 10.4) o en medio de su pueblo (Éxodo 40.34–38; Ezequiel 1.27–28). Véase Juan 1.14
Jeremías 2.12. Dios emite un juicio sobre la infidelidad de su pueblo, la ira de Dios ante la apostasía de Israel.
Jeremías 2.13 Cisternas rotas: (cf. 2 Samuel 2.13). Siempre existía la posibilidad de que se agrietaran y dejaran escapar el agua. Además, la calidad del agua estancada no admitía comparación con la que brotaba de la fuente. Agua viva: Cf. Juan 4.10–14; 7.37-38; véase Juan 4.10
Resumen.
Antes de castigar a los pecadores, Dios debate con ellos para llevarlos al arrepentimiento.
Él nos reclama lo que nosotros debiéramos reclamarnos a nosotros mismos Tened temor al pensar en la ira y la maldición que será la porción de los que se apartan de la gracia y el favor de Dios.
La gracia en Cristo se compara con el agua de una fuente, fría y refrescante, que limpia y fertiliza
a) Al agua viva porque vivifica a los pecadores muertos, revive a los santos desanimados, sostiene y mantiene la vida espiritual, y manda vida eterna y fluye para siempre.
b) Abandonar esta Fuente es el primer mal; se hace esto cuando el pueblo de Dios descuida su palabra y sus ordenanzas.
c) El pueblo excavó para sí, cisternas rotas, que no retienen el agua. Así son el mundo y sus cosas; así son los inventos de los hombres si se les sigue y se confía en ellos.
d) Con propósito de corazón aferrémonos sólo del Señor: ¿adónde más iremos? ¡Qué dados somos a abandonar la consolación del Espíritu Santo por el goce sin valor del entusiasta e hipócrita!
Aplicación
1. ¿En qué se parece lo que hemos comentado con nosotros?
2. ¿Hemos cavado cisternas bajo tierra con el temor de pasar sed en el desierto de esta vida?
3. ¿Hemos despreciado la fuente de agua viva, limpia, pura, perdurable y refrescante para nuestras almas, que produce en nuestras almas vida y vida eterna por el agua retenida y fangosa que nos lleva a la enfermedad y la muerte?
4. ¿Hemos como ellos en su tiempo reforzado sus paredes para evitar pérdidas sin pararnos a pensar en la posibilidad que los fenómenos naturales, los terremotos y deslizamientos la rompan y toda esa agua se convierta en enfermedad, soledad y muerte?
Cristo es la fuente de agua viva, el que da vida y salvación eternas, donde el que beba de ella, jamás tendrá sed
El mundo, con sus supuestos deleites es el agua fangosa de nuestras cisternas; es agua enfermiza, agua de soledades, injusticias, maldades que lleva al ser humano a la muerte y muerte eterna.
Que Dios nos ilumine, que te ilumine. AMEN
Oración