Trascendencia de la Primera Visión

La sequía en China

La sequía en China

El 24 de mayo de 2011, varias agencias de información hicieron eco de la misma noticia. En China se estaba padeciendo la sequía más grave de los últimos 50 años. Unidades del ejército chino disparaba cohetes a las nubes en un esfuerzo por producir lluvia. En esas circunstancias, se decidió abrir las compuertas de la mayor presa del mundo, la presa de Las Tres Gargantas, para liberar miles de millones de metros cúbicos de agua hacia las partes afectadas por la sequía.

La apostasía

El Salvador Jesucristo estableció su iglesia en el meridiano de los tiempos por medio de una misión de aproximadamente tres años y medio. Esta iglesia, la Iglesia de Jesucristo, poseía características únicas, tales como la autoridad de Dios para realizar milagros y el conocimiento correcto del plan de salvación a través de la revelación. Después de la resurrección y ascención de Jesucristo, los apóstoles se esforzaron por dar testimonio al mundo y en las escrituras se registran bautismos de cantidades exhorbitantes de conversos, en una obra misional que podría parecer realmente imparable.

No obstante, la Biblia misma registra numerosas advertencias contra grupos dentro de la misma iglesia que comenzaron a oponerse a los líderes y a predicar doctrinas diferentes a la doctrina de Jesucristo. Esto, aunado a la constante persecución de judíos y romanos llevó a la Iglesia a su desintegración rápidamente. Antes de que terminara el primer siglo, antes siquiera de que pasaran 70 años de la formación de la Iglesia, los apóstoles habían sido asesinados, los miembros habían sido dispersados y la comunicación desde los cielos había cesado para ser reemplazada por un conjunto de doctrinas de los hombres. Por aquel tiempo, entre el primer y tercer siglo, podemos encontrar numerosas obras que sirven como evidencia de intensas luchas doctrinales y políticas que comenzaron a surgir a causa de la ausencia de la revelación.

El ascenso de Constantino el Grande y el concilio de Nicea

En el año 311, en el cuarto siglo, Constantino el Grande tomó el poder de Roma a través de un golpe de estado. Observando el gran número de conversos al cristianismo y la confusión reinante, decidió aprovecharla a su favor, estableciendo al cristianismo como la religión oficial de Roma. Sin embargo, los cristianos estaban lejos de ser una sola creencia. Así que en 325 convocó un gigantesco concilio, el concilio de Nicea, para dar unidad de creencia a los cristianos. Muchos obispos se negaron a asistir, dado que Constantino no tenía autoridad de Dios para semejante tarea. Constantino resolvió el problema asesinando a los obispos que rehusaban asistir y colocando a otros en su lugar. Así se inició el concilio. Los distintos puntos de vista sobre la naturaleza de la trinidad resultaron en la formación de dos grandes partidos, el de Arrio y el de Atanasio, los cuales dieron pie a la fundación de dos grandes iglesias: la iglesia católica y la ortodoxa. Ambas iglesias se excomulgaron una a la otra y se establecieron en Roma y Grecia, respectivamente, con un gran número de partidarios. El mundo entero se encontraba bajo una sequía espiritual.

La reforma protestante

De la misma manera en que el ejército chino disparó cohetes hacia el cielo buscando la lluvia, los hombres buscaron también una respuesta del cielo. No fue sino hasta 1517, doce siglos más tarde, que, en protesta de los abusos cometidos por la Iglesia de Roma, Martín Lutero clavó sus 95 tesis en la puerta de la Iglesia del Palacio de Wittenberg. Su valiente acción dio inicio al llamado movimiento protestante, que sería una evidencia de la búsqueda de Dios ante la sequía espiritual que asolaba el mundo. En los siguientes tres siglos, muchos valerosos hombres de fe fueron condenados a la hoguera por causa de su persistente búsqueda de la verdad.

William Tyndale es un ejemplo de ese tipo de héroes de la fe. Hallado culpable de traducir la Biblia al idioma inglés, fue amarrado a una estaca donde, después de estrangularlo, quemaron su cuerpo.

No fue sino hasta el siglo XVI que

José Smith recibió la Primera Visión

Los 4 relatos de la Primera Visión

53 El profeta José Smith y mi padre Hyrum Smith, y Brigham Young, John Taylor, Wilford Woodruff y otros espíritus selectos que fueron reservados para nacer en el cumplimiento de los tiempos, a fin de participar en la colocación de los cimientos de la gran obra de los últimos días,

54 incluso la construcción de templos y la efectuación en ellos de las ordenanzas para la redención de los muertos, también estaban en el mundo de los espíritus.

55 Observé que también ellos se hallaban entre los nobles y grandes que fueron escogidos en el principio para ser gobernantes en la Iglesia de Dios.

56 Aun antes de nacer, ellos, con muchos otros, recibieron sus primeras lecciones en el mundo de los espíritus, y fueron preparados para venir en el debido tiempo del Señor a obrar en su viña en bien de la salvación de las almas de los hombres.

(Doctrina y Convenios 138:53–56 • DyC, p. 338)

No son opuestos, sino complementarios.

Los 4 relatos de la Primera Visión

Podemos confiar en especial en la versión de 1838.

La naturaleza de Dios

Dios puede ser visto

A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.

(Nuevo Testamento, • NT, p. 1670)

36 Pero yo tengo un testimonio mayor que el de Juan; porque las obras que el Padre me dio para que las cumpliese, las mismas obras que yo hago, dan testimonio de mí, de que el Padre me ha enviado.

37 Y el Padre que me envió ha dado testimonio de mí. Nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su aspecto

38 ni tenéis su palabra permaneciendo en vosotros, porque al que él envió, a este vosotros no creéis.

(Nuevo Testamento, • NT, p. 1680)

La verdadera naturaleza de Dios

Otra verdad que aprendemos, gracias a la Primera Visión y al profeta José Smith, es la verdadera naturaleza de Dios. Imagínense cuán bendecidos somos de saber que Dios es un ser con un cuerpo de carne y huesos tangible como el nuestro, que podemos adorar a un Dios que es real, a quien podemos entender, quien se ha mostrado y revelado a Sí mismo, y a Su Hijo, a Sus profetas, tanto a los de la antigüedad como a los de estos últimos días. Él es un Dios que escucha y contesta nuestras oraciones; un Dios que nos observa desde las alturasy que está constantemente preocupado por nuestro bienestar espiritual y temporal; un Dios que nos dio el albedrío para decidir por nosotros mismos seguirlo y obedecer Sus mandamientos sin coacción; un Dios que nos da bendiciones y nos permite enfrentar pruebas para que podamos crecer y llegar a ser como Él.

(2017, octubre, Adilson de Paula Parrella, ‘Verdades esenciales, nuestra necesidad de actuar,’ Liahona, noviembre 2017 ¶ 21)

La dispensación del cumplimiento de los tiempos

La dispensación del cumplimiento de los tiempos

9 dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su complacencia, la cual se había propuesto en sí mismo,

10 de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, tanto las que están en los cielos, como las que están en la tierra.

(Nuevo Testamento, • NT, p. 1861)

porque me propongo revelar a mi iglesia cosas que han estado escondidas desde antes de la fundación del mundo, cosas que pertenecen a la dispensación del cumplimiento de los tiempos.

(Doctrina y Convenios 124:41 • DyC, p. 288)

La preparación para la Segunda Venida

17 Por tanto, yo, el Señor, sabiendo las calamidades que sobrevendrían a los habitantes de la tierra, llamé a mi siervo José Smith, hijo, y le hablé desde los cielos y le di mandamientos;

18 y también a otros di mandamientos de proclamar estas cosas al mundo; y todo esto para que se cumpliese lo que escribieron los profetas:

19 Lo débil del mundo vendrá y abatirá lo fuerte y poderoso, para que el hombre no aconseje a su prójimo, ni ponga su confianza en el brazo de la carne;

30 Y también, para que aquellos a quienes se dieron estos mandamientos tuviesen el poder para establecer los cimientos de esta iglesia y de hacerla salir de la obscuridad y de las tinieblas, la única iglesia verdadera y viviente sobre la faz de toda la tierra, con la cual yo, el Señor, estoy bien complacido, hablando a la iglesia colectiva y no individualmente,

(Doctrina y Convenios 1:17–19 • DyC, p. 2–3)

30 Y también, para que aquellos a quienes se dieron estos mandamientos tuviesen el poder para establecer los cimientos de esta iglesia y de hacerla salir de la obscuridad y de las tinieblas, la única iglesia verdadera y viviente sobre la faz de toda la tierra, con la cual yo, el Señor, estoy bien complacido, hablando a la iglesia colectiva y no individualmente,

(Doctrina y Convenios 1:30 • DyC, p. 3)

José Smith fue preordenado

53 El profeta José Smith y mi padre Hyrum Smith, y Brigham Young, John Taylor, Wilford Woodruff y otros espíritus selectos que fueron reservados para nacer en el cumplimiento de los tiempos, a fin de participar en la colocación de los cimientos de la gran obra de los últimos días,

54 incluso la construcción de templos y la efectuación en ellos de las ordenanzas para la redención de los muertos, también estaban en el mundo de los espíritus.

55 Observé que también ellos se hallaban entre los nobles y grandes que fueron escogidos en el principio para ser gobernantes en la Iglesia de Dios.

56 Aun antes de nacer, ellos, con muchos otros, recibieron sus primeras lecciones en el mundo de los espíritus, y fueron preparados para venir en el debido tiempo del Señor a obrar en su viña en bien de la salvación de las almas de los hombres.

(Doctrina y Convenios 138:53–56 • DyC, p. 338)

La apertura de las compuertas de los cielos

La salida a luz del Libro de Mormón

La restauración del sacerdocio

La restauración de los templos

El restablecimiento de la organización de la Iglesia

La doctrina del matrimonio celestial

La obra misional

La obra vicaria

La recepción de las revelaciones