VIENTO RECIO
Sermon • Submitted
0 ratings
· 2,615 viewsNotes
Transcript
VIENTO RECIO
VIENTO RECIO
8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.
llenar
En hechos 5:3, satanas lleno
3 Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad?
EN El Espiritu Santo lleno
18 No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu,
En el dia de pentecostes
2 Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados;
EN la explicacion a nicodemo
8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.
Cuando Jesús le describió a Nicodemo la obra del Espíritu de Dios, dijo,
Cuando Jesús le describió a Nicodemo la obra del Espíritu de Dios, dijo,
“El viento [pneuma] sopla [pneo] de donde quiere”;
algunos eruditos piensan que la cláusula debería ser:
La obra del Espíritu (pneuma) es invisible y misteriosa así como lo es el soplo del viento (pneuma). El hombre no puede controlar a ninguno de los dos.
La obra del Espíritu (pneuma) es invisible y misteriosa así como lo es el soplo del viento (pneuma). El hombre no puede controlar a ninguno de los dos.
ASI COMO UN BEBE QUE NACE …
NO SABE COMO NACIO…
QUIEN SE IMPLICO EN SU NACIMIENTOASI CUANDO UNO NACE DE NUEVO NO SABE COMOPERO SABE QUE NACIOPORQUE ENTIENDE EL REINO EN QUE NACIO Y LO VE...
ESE NUEVO NACIDO NECECITA UN GUIA EN LO ESPIRITUAL
Jesús emplea en el v. 8 otra analogía para explicar el nuevo nacimiento, aprovechando un juego de palabras. Viento, Espíritu y “aliento” son tres posibles traducciones de pneuma4151.
LA MANIFESTACION DEL VIENTO… IGUALA A LA DES ESPIRITU SANTO
---- Este v. contiene un juego de palabras que no se puede expresar en español en forma adecuada. La palabra griega pneuma significa tanto viento, como Espíritu
----- . La obra del Espíritu (pneuma) es invisible y misteriosa así como lo es el soplo del viento (pneuma).
------- El hombre no puede controlar a ninguno de los dos.
Viento
El viento simboliza la labor regeneradora del Espíritu e indica sus operaciones misteriosas, independientes, penetradoras, purificadoras y que imparten vida.
8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.
;
2 Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados;
RVR608 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.
Testificar y el Espíritu SantoSinopsis
.
)Testificar y el Espíritu SantoSinopsis
El testimonio cristiano es efectivo a través del poder,
fortalecimiento y guianza del Espíritu Santo.
Testificar es un aspecto de guerra espiritual,
y los creyentes necesitan ayuda sobrenatural para enfrentar la oposición de Satanás.
El Espíritu Santo respalda a la iglesia del primer siglo, … tambien a los creyentes al testificar
RVR6031 A éste, Dios ha exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar a Israel arrepentimiento y perdón de pecados. 32 Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen.
El Espíritu Santo da poder para testificar efectivamente
Hch 1.8Hechos de los Apóstoles 1.8 (RVR60) — 8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.Ver también ; –49Lucas 4.14–19 (RVR60) — 14 Y Jesús volvió en el poder del Espíritu a Galilea, y se difundió su fama por toda la tierra de alrededor. 15 Y enseñaba en las sinagogas de ellos, y era glorificado por todos. 16 Vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer. 17 Y se le dio el libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el libro, halló el lugar donde estaba escrito: 18 El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos; 19 A predicar el año agradable del Señor. (RVR60) — 48 Y vosotros sois testigos de estas cosas. 49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.Confirma el testimonio de los creyentes1 Tes 1.5; –41 Tesalonicenses 1.5 (RVR60) — 5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros. (RVR60) — 3 ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron,4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.Convence a las personas de su necesidadJn 16.7–11Juan 16.7–11 (RVR60) — 7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.9 De pecado, por cuanto no creen en mí;10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.Tráe a las personas al nuevo nacimientoJn 3.5–8Juan 3.5–8 (RVR60) — 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.El Espíritu Santo guía a los creyentes a testificarHch 8.39–40Hechos de los Apóstoles 8.39–40 (RVR60) — 39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. 40 Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.Ver también ; –7Hechos de los Apóstoles 8.29–35 (RVR60) — 29 Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro.30 Acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?31 El dijo: ¿Y cómo podré, si alguno no me enseñare? Y rogó a Felipe que subiese y se sentara con él.32 El pasaje de la Escritura que leía era este: Como oveja a la muerte fue llevado; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no abrió su boca. 33 En su humillación no se le hizo justicia; Mas su generación, ¿quién la contará? Porque fue quitada de la tierra su vida. 34 Respondiendo el eunuco, dijo a Felipe: Te ruego que me digas: ¿de quién dice el profeta esto; de sí mismo, o de algún otro? 35 Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le anunció el evangelio de Jesús. (RVR60) — 6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia;7 y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió.Testificar y la guerra espiritualAp 12.11Apocalipsis 12.11 (RVR60) — 11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.Ver también –17Efesios 6.15–17 (RVR60) — 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;Testificar y persecuciónResultados de testificar en persecuciónAp 1.9Apocalipsis 1.9 (RVR60) — 9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.Ver también ; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.
14 Y Jesús volvió en el poder del Espíritu a Galilea, y se difundió su fama por toda la tierra de alrededor. 15 Y enseñaba en las sinagogas de ellos, y era glorificado por todos.
16 Vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer. 17 Y se le dio el libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el libro, halló el lugar donde estaba escrito:
18 El Espíritu del Señor está sobre mí,
Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres;
Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón;
A pregonar libertad a los cautivos,
Y vista a los ciegos;
A poner en libertad a los oprimidos;
19 A predicar el año agradable del Señor.
48 Y vosotros sois testigos de estas cosas. 49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.
.Confirma el testimonio de los creyentes
5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros.
1 Tes 1.5; –41 Tesalonicenses 1.5 (RVR60) — 5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros. (RVR60) — 3 ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron,4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.Convence a las personas de su necesidadJn 16.7–11Juan 16.7–11 (RVR60) — 7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.9 De pecado, por cuanto no creen en mí;10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.Tráe a las personas al nuevo nacimientoJn 3.5–8Juan 3.5–8 (RVR60) — 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.El Espíritu Santo guía a los creyentes a testificarHch 8.39–40Hechos de los Apóstoles 8.39–40 (RVR60) — 39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. 40 Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.Ver también ; –7Hechos de los Apóstoles 8.29–35 (RVR60) — 29 Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro.30 Acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?31 El dijo: ¿Y cómo podré, si alguno no me enseñare? Y rogó a Felipe que subiese y se sentara con él.32 El pasaje de la Escritura que leía era este: Como oveja a la muerte fue llevado; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no abrió su boca. 33 En su humillación no se le hizo justicia; Mas su generación, ¿quién la contará? Porque fue quitada de la tierra su vida. 34 Respondiendo el eunuco, dijo a Felipe: Te ruego que me digas: ¿de quién dice el profeta esto; de sí mismo, o de algún otro? 35 Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le anunció el evangelio de Jesús. (RVR60) — 6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia;7 y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió.Testificar y la guerra espiritualAp 12.11Apocalipsis 12.11 (RVR60) — 11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.Ver también –17Efesios 6.15–17 (RVR60) — 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;Testificar y persecuciónResultados de testificar en persecuciónAp 1.9Apocalipsis 1.9 (RVR60) — 9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.Ver también ; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
;
3 ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron,4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.
–41 Tesalonicenses 1.5 (RVR60) — 5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros. (RVR60) — 3 ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron,4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.Convence a las personas de su necesidadJn 16.7–11Juan 16.7–11 (RVR60) — 7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.9 De pecado, por cuanto no creen en mí;10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.Tráe a las personas al nuevo nacimientoJn 3.5–8Juan 3.5–8 (RVR60) — 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.El Espíritu Santo guía a los creyentes a testificarHch 8.39–40Hechos de los Apóstoles 8.39–40 (RVR60) — 39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. 40 Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.Ver también ; –7Hechos de los Apóstoles 8.29–35 (RVR60) — 29 Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro.30 Acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?31 El dijo: ¿Y cómo podré, si alguno no me enseñare? Y rogó a Felipe que subiese y se sentara con él.32 El pasaje de la Escritura que leía era este: Como oveja a la muerte fue llevado; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no abrió su boca. 33 En su humillación no se le hizo justicia; Mas su generación, ¿quién la contará? Porque fue quitada de la tierra su vida. 34 Respondiendo el eunuco, dijo a Felipe: Te ruego que me digas: ¿de quién dice el profeta esto; de sí mismo, o de algún otro? 35 Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le anunció el evangelio de Jesús. (RVR60) — 6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia;7 y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió.Testificar y la guerra espiritualAp 12.11Apocalipsis 12.11 (RVR60) — 11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.Ver también –17Efesios 6.15–17 (RVR60) — 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;Testificar y persecuciónResultados de testificar en persecuciónAp 1.9Apocalipsis 1.9 (RVR60) — 9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.Ver también ; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros.
1 Tesalonicenses 1.5 (RVR60) — 5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros. (RVR60) — 3 ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron,4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.Convence a las personas de su necesidadJn 16.7–11Juan 16.7–11 (RVR60) — 7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.9 De pecado, por cuanto no creen en mí;10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.Tráe a las personas al nuevo nacimientoJn 3.5–8Juan 3.5–8 (RVR60) — 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.El Espíritu Santo guía a los creyentes a testificarHch 8.39–40Hechos de los Apóstoles 8.39–40 (RVR60) — 39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. 40 Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.Ver también ; –7Hechos de los Apóstoles 8.29–35 (RVR60) — 29 Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro.30 Acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?31 El dijo: ¿Y cómo podré, si alguno no me enseñare? Y rogó a Felipe que subiese y se sentara con él.32 El pasaje de la Escritura que leía era este: Como oveja a la muerte fue llevado; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no abrió su boca. 33 En su humillación no se le hizo justicia; Mas su generación, ¿quién la contará? Porque fue quitada de la tierra su vida. 34 Respondiendo el eunuco, dijo a Felipe: Te ruego que me digas: ¿de quién dice el profeta esto; de sí mismo, o de algún otro? 35 Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le anunció el evangelio de Jesús. (RVR60) — 6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia;7 y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió.Testificar y la guerra espiritualAp 12.11Apocalipsis 12.11 (RVR60) — 11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.Ver también –17Efesios 6.15–17 (RVR60) — 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;Testificar y persecuciónResultados de testificar en persecuciónAp 1.9Apocalipsis 1.9 (RVR60) — 9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.Ver también ; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
Convence a las personas de su necesidad
7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.9 De pecado, por cuanto no creen en mí;10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.
Jn 16.7–11Juan 16.7–11 (RVR60) — 7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.9 De pecado, por cuanto no creen en mí;10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.Tráe a las personas al nuevo nacimientoJn 3.5–8Juan 3.5–8 (RVR60) — 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.El Espíritu Santo guía a los creyentes a testificarHch 8.39–40Hechos de los Apóstoles 8.39–40 (RVR60) — 39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. 40 Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.Ver también ; –7Hechos de los Apóstoles 8.29–35 (RVR60) — 29 Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro.30 Acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?31 El dijo: ¿Y cómo podré, si alguno no me enseñare? Y rogó a Felipe que subiese y se sentara con él.32 El pasaje de la Escritura que leía era este: Como oveja a la muerte fue llevado; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no abrió su boca. 33 En su humillación no se le hizo justicia; Mas su generación, ¿quién la contará? Porque fue quitada de la tierra su vida. 34 Respondiendo el eunuco, dijo a Felipe: Te ruego que me digas: ¿de quién dice el profeta esto; de sí mismo, o de algún otro? 35 Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le anunció el evangelio de Jesús. (RVR60) — 6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia;7 y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió.Testificar y la guerra espiritualAp 12.11Apocalipsis 12.11 (RVR60) — 11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.Ver también –17Efesios 6.15–17 (RVR60) — 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;Testificar y persecuciónResultados de testificar en persecuciónAp 1.9Apocalipsis 1.9 (RVR60) — 9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.Ver también ; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
Tráe a las personas al nuevo nacimiento
5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.
Jn 3.5–8Juan 3.5–8 (RVR60) — 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.El Espíritu Santo guía a los creyentes a testificarHch 8.39–40Hechos de los Apóstoles 8.39–40 (RVR60) — 39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. 40 Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.Ver también ; –7Hechos de los Apóstoles 8.29–35 (RVR60) — 29 Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro.30 Acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?31 El dijo: ¿Y cómo podré, si alguno no me enseñare? Y rogó a Felipe que subiese y se sentara con él.32 El pasaje de la Escritura que leía era este: Como oveja a la muerte fue llevado; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no abrió su boca. 33 En su humillación no se le hizo justicia; Mas su generación, ¿quién la contará? Porque fue quitada de la tierra su vida. 34 Respondiendo el eunuco, dijo a Felipe: Te ruego que me digas: ¿de quién dice el profeta esto; de sí mismo, o de algún otro? 35 Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le anunció el evangelio de Jesús. (RVR60) — 6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia;7 y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió.Testificar y la guerra espiritualAp 12.11Apocalipsis 12.11 (RVR60) — 11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.Ver también –17Efesios 6.15–17 (RVR60) — 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;Testificar y persecuciónResultados de testificar en persecuciónAp 1.9Apocalipsis 1.9 (RVR60) — 9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.Ver también ; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
El Espíritu Santo guía a los creyentes a testificar
39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. 40 Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.
Hch 8.39–40Hechos de los Apóstoles 8.39–40 (RVR60) — 39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. 40 Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.Ver también ; –7Hechos de los Apóstoles 8.29–35 (RVR60) — 29 Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro.30 Acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?31 El dijo: ¿Y cómo podré, si alguno no me enseñare? Y rogó a Felipe que subiese y se sentara con él.32 El pasaje de la Escritura que leía era este: Como oveja a la muerte fue llevado; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no abrió su boca. 33 En su humillación no se le hizo justicia; Mas su generación, ¿quién la contará? Porque fue quitada de la tierra su vida. 34 Respondiendo el eunuco, dijo a Felipe: Te ruego que me digas: ¿de quién dice el profeta esto; de sí mismo, o de algún otro? 35 Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le anunció el evangelio de Jesús. (RVR60) — 6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia;7 y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió.Testificar y la guerra espiritualAp 12.11Apocalipsis 12.11 (RVR60) — 11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.Ver también –17Efesios 6.15–17 (RVR60) — 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;Testificar y persecuciónResultados de testificar en persecuciónAp 1.9Apocalipsis 1.9 (RVR60) — 9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.Ver también ; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
Testificar y la guerra espiritual
Ap 12.11Apocalipsis 12.11 (RVR60) — 11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.Ver también –17Efesios 6.15–17 (RVR60) — 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;Testificar y persecuciónResultados de testificar en persecuciónAp 1.9Apocalipsis 1.9 (RVR60) — 9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.Ver también ; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.
15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;
Testificar y persecución
Resultados de testificar en persecución
Ap 1.9Apocalipsis 1.9 (RVR60) — 9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.Ver también ; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.
; ; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre.
40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad.
; El testimonio de Esteban lo lleva a convertirse en el primer mártir cristiano. La palabra “martir” viene de la palabra griega para “testigo”; ; ; ; ; ; ; .6Hechos de los Apóstoles 4.17 (RVR60) — 17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémosles para que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este nombre. (RVR60) — 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. (RVR60) — 54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió. (RVR60) — 22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.23 Y como ellos gritaban y arrojaban sus ropas y lanzaban polvo al aire,24 mandó el tribuno que le metiesen en la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.25 Pero cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un ciudadano romano sin haber sido condenado? (RVR60) — 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. (RVR60) — 3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, 4 para que lo manifieste como debo hablar. (RVR60) — 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, (RVR60) — 12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: 13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. (RVR60) — 9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. (RVR60) — 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecuciónMt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.
.Ayuda sobrenatural para enfrentar la persecución
Mt 10.18–20; .55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros.
;
.55Mateo 10.18–20 (RVR60) — 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. (RVR60) — 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,Ver también ; –10Hechos de los Apóstoles 5.18–19 (RVR60) — 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.19 Mas un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo:Hechos de los Apóstoles 18.9–10 (RVR60) — 9 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.Testificar es fomentado por la persecuciónHch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,
Testificar es fomentado por la persecución
Hch 8.1–5; –14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel.
4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo.
;
–14Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. (RVR60) — 12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
Hechos de los Apóstoles 8.1–5 (RVR60) — 1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, desce
1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él.3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel.
4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo.
12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien para el progreso del evangelio,13 de tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás.14 Y la mayoría de los hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.
Lo que el Espíritu Santo está diciendo a través de esta presencia del viento es que Él se va a mover por medio de su pueblo en una forma invisible.
Él va a impulsarlos de una manera poderosa en el mundo y se va a necesitar el viento del Espíritu Santo para esparcir a los discípulos por el mundo.
Aquel día en el aposento alto, ellos ya podían oír el sonido del viento recio; y esto sugiere que Dios estaba a punto de hacer algo poderoso y explosivo en sus vidas.
En pasajes posteriores del libro de Hechos, donde la gente recibió el Espíritu Santo, no hay más referencias a este viento. Este fue pues un acontecimiento único. A través del símbolo del sonido del viento, el Espíritu Santo estaba diciéndole a la iglesia que iba a suceder una invasión del Espíritu.