EL AMOR, CUMPLIMIENTO DE LA LEY (Romanos 13:8-10)

Romanos   •  Sermon  •  Submitted
0 ratings
· 10,877 views

El amor, ágape, que sólo nace de la gracia de Dios, ahora dado a nosotros, por medio de Cristo, como cumplimiento de la ley.

Notes
Transcript
1 AMAROS (8)
2 LOS MANDAMIENTOS NOS LLEVA A ESTO (9)
3 ES EL CUMPLIMIENTO DE LA LEY (10)
INTRODUCCIÓN
Desde el capítulo 12, estamos viendo, en varios sermones, como obra un cristiano, debido a su regeneración por la gracia de Dios.
Un cristiano, debe vivir en culto de vida a Dios, buscando lo bueno, agradable y aceptable a DIos.
Un cristiano debe vivir en comunión con sus hermanos y para gloria de Dios.
Un cristiano debe amar a sus enemigos, los enemigos del Evangelio.
Un cristiano debe someterse a toda autoridad, estado, iglesia y hogar.
Y ahora, Pablo viene a exhortarnos, para que veamos, que por encima de todo, está el amor, como cumplimiento de la ley, pero no un amor humano, natural, sino un amor que nace de la gracia de Dios, “ágape”. Que nada debe ni nada teme.
Todo lo que hemos hablado antes, se resume, en esto que veremos ahora.

1. AMAROS (8)

Para poder entender este versículo, debemos enlazarlo con el anterior:
Romanos 13.7 LBLA
7 Pagad a todos lo que debáis; al que impuesto, impuesto; al que tributo, tributo; al que temor, temor; al que honor, honor.
Dar a todos los que debéis dar, a las autoridades, y entre vosotros...
a) No os debáis otra cosa que no sea amor.
Vamos primero a ver lo que no significa este pasaje:
No significa, que el cristiano no pueda pedir prestado, por ejemplo, al banco, lo ideal es que no hiciera falta. Lo que quiere decir este pasaje es que el Cristiano, debe pagar lo que debe, tanto a las autoridades, como al que le ha prestado, sin demorar, ni faltar a su palabra y compromiso.
Una cosa que es importante en esto, y esto desde un punto de ética pastoral: No somos seres que no nos amamos y prestamos dinero con interés a cambio, sino que entre nosotros, debe haber caridad con los mas necesitados y que no halla la necesidad que el necesite pida prestado.
El cristiano no debe prestar, sino dar, de ahí viene, también, nos os debáis nada. El cristiano no ayuda, con el interés de”hoy por mi, mañana por ti”, esto no tiene que tener cabida en la vida de un cristiano, sino que ayuda, por que ama.
Proverbios 3.27–28 LBLA
27 No niegues el bien a quien se le debe, cuando esté en tu mano el hacerlo. 28 No digas a tu prójimo: Ve y vuelve, y mañana te lo daré, cuando lo tienes contigo.
b) Es un mandamiento
-Hay tres pensamientos que están claramente implícitos aquí:
- En primer lugar, encontramos una condena del hábito de algunos, que siempre están listos a pedir prestado, pero que son muy remisos a devolver la suma prestada. En cuanto a esto, véase el : “El impío toma prestado y no paga …”.
- En segundo lugar, encontramos una alabanza del amor, compuesta por un autor que poco tiempo antes había escrito . El dice que entre todas las deudas que una persona pueda haber contraído hay una que nunca puede ser pagada totalmente, a saber, la deuda del amor. Además, en el presente caso Pablo no está pensando en primer lugar en la deuda que tenemos con Dios, sino, tal cual lo indica el contexto, en la deuda que tenemos con el prójimo. Se trata, entonces …
En tercer lugar, de un amor de “unos por otros”. Pero esta expresión, en el caso presente, no significa meramente “por todos los hermanos creyentes”. Claro, no cabe duda que estos están incluidos. Hasta podría decirse que están incluidos de un modo especial (véanse 12:10, 13; ), pero al añadir: “porque el que ama a su prójimo ha cumplido la ley” se aclara que se incluye a todos aquellos con quienes al creyente entra en contacto—y particularmente, por supuesto, aquellos que tienen necesidades especiales. De hecho, en cierto sentido nadie queda excluido de este amor que todo lo abarca.
Resumiendo, entre nosotros, lo que nos tenemos que deber unos a otros, es el amor, siempre debemos dar amor, y siempre tenemos que entender que a nuestro hermano, primeramente, y al prójimo en general, necesita nuestro amor, pero vuelvo a decir, no es un amor carnal ni humano, es el que es dado por Dios, que hoy inunda nuestro corazón.
Gálatas 5.14 LBLA
14 Porque toda la ley en una palabra se cumple en el precepto: Amaras a tu projimo como a ti mismo.
Después de ver que el amarnos es un mandamiento, y amar al prójimo lo es también, vamos a ver que con esto, cumplimos la ley.

2. LOS MANDAMIENTOS NOS LLEVA A ESTO (9)

¿Que mandamientos?
Hay un total de 613 leyes en total, la cuales se recogen en 2, las dos tablas, y se resumen en 1, el Shema Israel
Deuteronomio 6.4–9 LBLA
4 Escucha, oh Israel, el Señor es nuestro Dios, el Señor uno es. 5 Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza. 6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; 7 y diligentemente las enseñarás a tus hijos, y hablarás de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes. 8 Y las atarás como una señal a tu mano, y serán por insignias entre tus ojos. 9 Y las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas.
Deuteronomio 6:4
Pero aquí Pablo se refiere a:
a) Los mandamientos de la segunda tabla.
Éxodo 20.12–17 LBLA
12 Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días sean prolongados en la tierra que el Señor tu Dios te da. 13 No matarás. 14 No cometerás adulterio. 15 No hurtarás. 16 No darás falso testimonio contra tu prójimo. 17 No codiciarás la casa de tu prójimo; no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni nada que sea de tu prójimo.
Vemos, comparando con este pasaje, que Pablo no dice, honra a tu padre y a tu madre, bueno, ese mandamiento es un gran deber, y todo cristiano, debe amar a Dios, honrar a sus padres, y cumplir los otros cuatros, que van maás enfocado al prójimo y quizás, son difíciles de cumplir.
Alguno me dirá, eso es fácil, yo te digo que no es tanto, amar y cumplir sin hipocresía. Porque por nuestras fuerzas no cumplimos ninguna coma de la ley, y somos injustos ante de Dios por naturaleza, ahora analizaremos cada unos de estos 4 mandamientos que van más explicitamente para salvaguardar el bien del prójimo.
Ahora me diréis si son fáciles de cumplir:
1 No cometerás adulterio: Es En sentido particular y literal, relación sexual entre un hombre casado y una mujer que no es la suya, o entre una mujer casada y un hombre que no es su marido.
2 No matarás: Cesar, quitar, acabar con la vida de tu prójimo.
Ventura, S. V. (1985). En Nuevo diccionario biblico ilustrado (p. 27). TERRASSA (Barcelona): Editorial CLIE.
3 No hurtaras: No robar el bien de tu prójimo.
4 No codiciarás: Es una idolatría a lo material, desear lo que Dios no te ha dado, desear lo que tiene tu prójimo, te llevará a hurtar, adulterar, o matar.
¿Quién no ha cometido adulterio?
Porque cada vez que deseas la mujer de tu prójimo, lo estás cometiendo, porque, casado o casada, cada vez que deseas otra persona que no sea tu cónyuge, estás cometiendo adulterio.
Mateo 5.28 LBLA
28 Pero yo os digo que todo el que mire a una mujer para codiciarla ya cometió adulterio con ella en su corazón.
Mateo 5:28
¿Quién no ha matado?
1 Juan 3.15 LBLA
15 Todo el que aborrece a su hermano es homicida, y vosotros sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en él.
¿Quién no ha robado?
Éxodo 20.15 LBLA
15 No hurtarás.
Éxodo
Defraudar ha la hacienda es robar, coger lo que no es tuyo, y adjudicártelo, es robar.
¿Quien no ha codiciado?
Si todos los anteriores pecados, comenzaron con este.
Por lo tanto, no te conviertas en mentiroso, y admite tu pecado, tu falta de amor, y pide perdón primeramente a Dios.
Todo, se resumé
b) Se resume: amarás al prójimo
No vale sólo con saber esta verdad, creo que casi todo el mundo, nacido en una cultura judeo-cristiana, se sabe los mandamientos. No basta con esto.
Sino, cumplirlos, pero, ¿Cómo lo voy a cumplir? Ahí es donde entra ese AMOR, el amor que cumple la ley, el amor dado por Dios, obrado por Cristo, para nuestro perdón, y que está en nosotros por la regeneración, obrada por el Espíritu Santo.
- La santa ley de Dios, es cierto, no salva a nadie. Véase . No obstante, una vez que una persona ha sido justificada por la fe, por gratitud, y motivada y capacitada por el Espíritu Santo, ésta desea hacer lo que Dios quiere que haga. Y esto se encuentra en la ley de los Diez Mandamientos tal cual se la resume en , y más tarde en las palabras de Jesús registradas en ; ; .
Mateo 22.39 LBLA
39 Y el segundo es semejante a éste: Amaras a tu projimo como a ti mismo.
Y con esto conseguimos ver:
-Esto demuestra que cada mandamiento negativo (“No …”) es en el fondo un mandato positivo. El significado es, por lo tanto: “Amarás, y por ello no cometerás adulterio sino que preservarás el carácter sagrado del vínculo matrimonial. Amarás, y por ello no matarás sino ayudarás a tu prójimo a mantenerse vivo y bien. Amarás, y por ello no hurtarás nada que pertenezca a tu prójimo sino más bien protejerás sus posesiones. Amarás, y como resultado no codiciarás lo que le pertenece a tu prójimo sino te alegrarás de que sea de él”.
c) Cómo a ti mismo
- La expresión: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo” merece unas palabras de explicación.
- Lo que Pablo realmente quiere decir—y Jesús antes de él—debe incluir al menos este pensamiento: en cierto que una persona se amará a sí misma, y también es cierto que lo hará a pesar del hecho de que el “yo” a quien ama tiene muchas faltas.
- Por lo tanto “el ciertamente debe amar también a su prójimo. Puede ser que no le guste, pero debe amarle, y debe hacerlo a pesar de las faltas de ese prójimo.

3. ES EL CUMPLIMIENTO DE LA LEY (10)

a) El amor
Lo acabamos de ver, lo dice Pablo ahora, lo vuelve a decir, el amor es el cumplimiento de la ley.
1 Corintios 13.4–7 LBLA
4 El amor es paciente, es bondadoso; el amor no tiene envidia; el amor no es jactancioso, no es arrogante; 5 no se porta indecorosamente; no busca lo suyo, no se irrita, no toma en cuenta el mal recibido; 6 no se regocija de la injusticia, sino que se alegra con la verdad; 7 todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
Mateo 22:36
Mateo 22.36–40 LBLA
36 Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento de la ley? 37 Y El le dijo: Amaras al Señor tu Dios con todo tu corazon, y con toda tu alma, y con toda tu mente. 38 Este es el grande y el primer mandamiento. 39 Y el segundo es semejante a éste: Amaras a tu projimo como a ti mismo. 40 De estos dos mandamientos dependen toda la ley y los profetas.
Y este amor que es de divino:
b) No hace mal al prójimo.
Hay un dicho que dicen, que hasta el amor mata, ciertamente, como todo nuestros instintos pecaminosos, un alteración de nuestro ser, una desvirtuación de algo que no necesariamente debe ser malo, se convierte en algo pecaminoso, obsesivo, sucio y diabólico.
Pero en este amor no hay cabida para el mal, todo lo contrario, este amor que se refiere Pablo, es un amor que busca lo bueno, que no hace lo malo, sino que busca el bien de su prójimo, la gloria de Dios, es un amor desinteresado, es un amor sin condición. Es un amor dado por Dios por medio de Cristo y que nos lleva mira e imitar a Cristo.
c) Lo vemos en Cristo.
Cristo, el objeto de nuestra fe, el motor y motivo de este amor, el dador de este amor. Por Él estamos en este camino, por él podemos cumplir la ley.
Lo vemos en su vida: El ejemplo con el que amó al Padre, y al prójimo.
Lo vemos en su sometimiento: Al Padre y al servir siendo Señor.
Salmo 110.1 LBLA
1 Dice el Señor a mi Señor: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.
Los vemos en su muerte: Muestra de su amor.
Lo vemos en su resurrección y en la gran comisión
Mateo 28.16–20 LBLA
16 Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les había señalado. 17 Cuando le vieron, le adoraron; mas algunos dudaron. 18 Y acercándose Jesús, les habló, diciendo: Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra. 19 Id, pues, y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, 20 enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado; y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.
Mateo 28:16-
Lo veremos en la eternidad.
Jeremias 31:
Jeremías 31.2–3 LBLA
2 Así dice el Señor: Ha hallado gracia en el desierto el pueblo que escapó de la espada, Israel, cuando iba en busca de su reposo. 3 Desde lejos el Señor se le apareció, diciendo: Con amor eterno te he amado, por eso te he atraído con misericordia.
Desde la eternidad para la eternidad.
Efesios 2.4–10 LBLA
4 Pero Dios, que es rico en misericordia, por causa del gran amor con que nos amó, 5 aun cuando estábamos muertos en nuestros delitos, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia habéis sido salvados), 6 y con El nos resucitó, y con El nos sentó en los lugares celestiales en Cristo Jesús, 7 a fin de poder mostrar en los siglos venideros las sobreabundantes riquezas de su gracia por su bondad para con nosotros en Cristo Jesús. 8 Porque por gracia habéis sido salvados por medio de la fe, y esto no de vosotros, sino que es don de Dios; 9 no por obras, para que nadie se gloríe. 10 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para hacer buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en ellas.
Efesios 2:4-
CONCLUSIÓN
El amor es el cumplimiento de la ley, pero no todo amor, sino el amor dado por Dios, obrado por Cristo, pues Cristo es el que vino no a abolir la ley sino a cumplirla. ()
Sólo por medio de la salvación, sólo por medio de Cristo, es que podemos practicar este amor, y ahora si, aunque antes no podiamos, amar a Dios y amar a nuestro projimo, para gloria de Dios, haciendo así la obediencia al Padre y el cumplimiento de su ley.
Si, somos pecadores, somos malos por naturaleza, y en nuestra carne está la facilidad de pecar, hacer daño a nuestro prójimo, muy distinto a lo que nos manda el Señor, pero, confía en el Señor, bastate en su gracia, sigue las pisadas de Cristo, aquel, que es el objeto de nuestra fe, aquel por el cual hoy si, podemos cumplir la ley.
Demos gracias a Dios, porque a pesar de nosotros, hoy, por amor de Cristo, podemos cumplir la ley.
Que el Señor nos de sabiduría y la humildad, que el Señor nos de su paz, que el Señor nos conceda más amor hacia Él, hacia nuestros hermanos, hacia nuestros enemigos, hacia nuestro prójimo, y menos hacía nosotros.
Si el Señor lo ordena, es porque en Él puedes cumplirlo a pesar de ti y la circunstancias de este mundo.
¡En todo, sólo a Dios la gloria!
Related Media
See more
Related Sermons
See more