UNIDOS EN LO FUNDAMENTAL (Romanos 14:1-12)

1 ACEPTAR AL DÉBIL EN LA FE (1-4)

2 HACER TODO PARA EL SEÑOR (5-6)

3 PORQUE SOMOS DEL SEÑOR (7-9)

4 NO MENOSPRECIE A TU HERMANOS (10-12)

INTRODUCCIÓN

Seguimos con una parte muy importante de la carta, avanzamos, no sólo tenemos que ser cristianos de nombres, sino que debemos también obrar como cristianos.

No podemos caer en una frialdad en la que nos convertimos en egoístas poseedores de una verdad que no es nuestra, sino que ha sido dado por Dios.

No creyéndonos la creme de la creme, sino que con humildad vivamos vidas santas para gloria de Dios.

Pablo va a abordar un tema, que no puede dejar pasar, ya bien avanzado esta carta, era muy importante para los primeros receptores, la iglesia de Roma, y para nosotros ahora… ¿Porque empezamos?

1 ACEPTAR AL DÉBIL EN LA FE (1-4)

Vemos que Pablo, vuelve a ser imperativo en esto. Vamos a Explicar a que se refiere Pablo en el contexto original.

a) Explicación del significado

- Pablo, al irse acercando al fin de esta epístola se da cuenta de que hay un importante problema que no ha tocado aún, a saber, el de la relación entre los débiles y los fuertes. Los fuertes eran aquellos que podían captar el significado de la muerte de Cristo para la vida diaria; es decir, para la comida y la bebida, etc., los débiles no podían hacerlo.

Los fuertes, eran aquellos que tenían una mayor madurez espiritual, y podían vivir el evangelio para la gloria de Dios, eran los gentiles, pero en cambio ellos condenaban a los débiles, (los judíos), por observar aún días y comidas que no eran necesarias para la salvación.

Los fuertes se jactaban, algo que es muy pecaminoso, de su “madurez” y “entendimiento” mientras veían a los judíos (débiles), en vez de tener una actitud de humildad y querer enseñar al otro para no caer en el error, juzgaba y despreciaban, pues no eran para ellos, cristianos verdaderos.

Aunque había también entre los fuertes, judíos arrogantes que veía a los gentiles más inmaduros por que no guardaban los días del Viejo pacto, estos judíos pensaban que el cristianismo completo era, también esto.

Pablo, no quería que la iglesia se dividiera por asuntos culturales, o porque otros aún no habían comprendido el Evangelio, Pablo los exhorta para mirar primeramente el Reino de Dios y su justicia. Para:

b) No juzguéis en base a opiniones personales.

Pablo dice, «Aceptar al débil en la fe, pero no para juzgar sus opiniones», no para juzgar sus opiniones con tus opiniones, sino para tener comunión y que sea la Palabra moldeando nuestro raciocinio.

Tito 1.15 LBLA

15 Todas las cosas son puras para los puros, mas para los corrompidos e incrédulos nada es puro, sino que tanto su mente como su conciencia están corrompidas.

No fuimos llamados a establecer dogmas en la igleisas en base a lo que nosotros pensamos y opinamos, sino en base a lo que dice la Biblia, por lo tanto, hermano, si te crees maduro, demuéstralo enseñando con paz, mansedumbre y humildad al que veas débil. No diciendo “yo sé más que este… soy mejor cristianos”, creeme que esa actitud es despreciable y anticristiana.

- El apóstol condena ambas actitudes, la de desprecio y la de condena. Aunque desea que los derechos del débil sean plenamente respetados y que el vegetariano sea tratado con consideración comprensiva y deferencia genuina, él no es menos insistente en demandar que el débil se abstenga de condenar al fuerte, al que come, alegando como razón que “Dios lo ha aceptado”.

Los judíos tenían en este tiempo, en Roma, una base de alimentación prácticamente vegetariana, porque algunos no comían aún cerdo, que era la carne más consumida, porque arrastraban las normas con las que habían crecido, Pablo no condenaba esto, pero no quería que los judíos condenaran a los gentiles por comer cerdo.

Esto lo llamaríamos motivos de conciencia, se puede aplicar hoy a nuestros tiempos: por ejemplo en el caso de tomar vino. Hay quien por motivos de conciencia, sabiendo que le hace daño, se convierte en abstemio, esto está bien, pero, no es un dogma ni un mandamiento. Por lo cual, el abstemio no puede condenar a aquel que toma vino, lo toma moderadamente, usando el dominio propio. Ni el que toma vino moderadamente, puede acusar o condenar al abstemio por no tomarlo. Ni incitar al abstemio a tomarlo.

Hebreos 13.9 LBLA

9 No os dejéis llevar por doctrinas diversas y extrañas, porque buena cosa es para el corazón el ser fortalecido con la gracia, no con alimentos, de los que no recibieron beneficio los que de ellos se ocupaban.

c) ¿Quién eres tu para juzgar al que Dios ha aceptado?

(3)Así es hermanos, ¿Quien eres tu?, para juzgar a tu hermanos en base a opiniones personales, en base a lo que te crees sin un claro fundamento Bíblico, quien eres tu? sabiendo que aquel hermano tuyo, que ha nacido de nuevo, Cristo también murió por él.

Colosenses 2.16–17 LBLA

16 Por tanto, que nadie se constituya en vuestro juez con respecto a comida o bebida, o en cuanto a día de fiesta, o luna nueva, o día de reposo; 17 cosas que sólo son sombra de lo que ha de venir, pero el cuerpo pertenece a Cristo.

En Colosa existía algo parecido, los judaizantes acusaban a los gentiles porque no guardaban todos los días, pero con la llegada de Cristo, todo eso era la sombra de lo que había de venir. No es necesario para salvación ni la santificación. Con la llegado de Cristo, sólo Cristo salva, sólo por el podemos ser santificados.

Por lo tanto, hermano, si por cualquier otra tonteria, sólo porque tu lo piensas o lo arrastras de otra iglesia y su dogma, y no es esencialmente Bíblico, no sólo estás juzgando y condenando a tu hermano, sino al hacerlo a un hiijo de Dios, te estás poniendo en frente de Dios.

Romanos 9.20 LBLA

20 Al contrario, ¿quién eres tú, oh hombre, que le contestas a Dios? ¿Dirá acaso el objeto modelado al que lo modela: Por qué me hiciste así?

Cristiano maduro, si realmente piensas que lo eres, y ya sea por obras, por pensamiento, haces de esta manera, condenado o juzgando en base a tu criterio y no la Palabra de Dios, estás demostrando no sólo ser un inmaduro, sino que poco conocedor de la Palabra y de Dios.

Se humilde con tu hermano, y no busques los tres pies al gato, si es del Señor, es tu hermano, ¿Quien eres tu para juzgar en base a tu mero pensamiento a aquel que Dios a salvarlo? Sino lo haces con base en la Palabra y lo utilizas para su bien y para su enseñanza, mejor ve a pedir perdón.

Porque aquel que ves más débil, del Señor es, lo ha aceptado como hijo, y Dio es poderoso para sostenerlo en pie.

2. HACER TODO PARA EL SEÑOR (5-6)

a) No en base a vuestros sentimientos

Pablo, sigue hablando de un motivo de conciencia, si uno no come carne, y lo hace en un sentir personal y para gloria de Dios, que lo haga, pero que no juzgue y condene al que no le acompaña.

No podemos hacer un dogma de algo que la Biblia no prohibe.

Pablo tenía esto muy claro, el judío en su calendario tenía más días para guardar, pero no podía obligar al gentil a guardarlos.

Por ejemplo, muchos judíos seguían yendo a la sinagogas los sábados, y seguían en cierta manera guardando el sábado, pero los cristianos en general, ponían su énfasis, en el primer día de la semana, en lo que hoy conocemos domingo. Los judíos celebraban, la fiestas de los tabernaculos como nación judío, el yonkipur, la dedicación, pentecostés. Pero no necesariamente los cristianos gentiles debían celebrar tal día.

Pablo, vuelve a dar una libertad en conciencia.

En los tiempos de ahora lo vemos por ejemplo con la navidad, todo el mundo sabe la historia de la navidad, y que realmente Jesús no nació ese día. Bueno, hay cristianos que tomaron la decisión de no celebrar ese día, y tienen verdaderos y muy buenos motivos.

Otros cristianos si hemos optado por celebrar esas fechas, pero no lo celebramos como el mundo, sino conmemoramos que el Verbo se hizo carne, el cumplimiento y consumación de la promesa del mesías, el comienzo del tetelestai.

Sobre esto Pablo deja cierta libertad, y así debe ser nuestra actitud, ya sea de los que celebramos la navidad no condenar al que no la celebra, y el que no la celebra no condenar al que la celebra. Sino que hagamos lo que hagamos...

b) Hacer todo para el Señor

Ya comamos cerdo, cordero, ternera, o seas vegetariano hazlo para el Señor.

No buscando, la contienda, ni buscando el orgullo, que otros nos vean mejores, o creyéndonos superiores a todos. Sino que lo hagamos para el Señor. Pidiendo al Señor que nos de sabiduría y temor antes de hacer nada, y que nos ilumine si realmente debemos hacerlo o no por medio de su Palabra. Y si lo hacemos que lo hagamos para su gloria. Que realmente veamos si eso lo hago por glorificar a Dios, o por engrandecer mi ego.

Eso sera una buena manera de ver si es para hacer o no. Pero si ya pasaste estos filtros, y pasó el más importante, su Palabra, hazlo, hazlo no para ti, sino para el Señor. Y no caigas en una actitud sectaria, condenable y antibíblca.

1 Timoteo 4.1–5 LBLA

1 Pero el Espíritu dice claramente que en los últimos tiempos algunos apostatarán de la fe, prestando atención a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios, 2 mediante la hipocresía de mentirosos que tienen cauterizada la conciencia; 3 prohibiendo casarse y mandando abstenerse de alimentos que Dios ha creado para que con acción de gracias participen de ellos los que creen y que han conocido la verdad. 4 Porque todo lo creado por Dios es bueno y nada se debe rechazar si se recibe con acción de gracias; 5 porque es santificado mediante la palabra de Dios y la oración.

1 Timoteo 4:1

1 Timoteo 4.3–5 LBLA

3 prohibiendo casarse y mandando abstenerse de alimentos que Dios ha creado para que con acción de gracias participen de ellos los que creen y que han conocido la verdad. 4 Porque todo lo creado por Dios es bueno y nada se debe rechazar si se recibe con acción de gracias; 5 porque es santificado mediante la palabra de Dios y la oración.

c) Dando gracias a Dios.

c) Dando gracias a Dios.

Así termina el versículo 6, todo lo que hagáis hacerlo en acción de gracias a Dios, dando gracias a Dios y orando. Por eso oramos antes de comer. Y si en esa mesa hay una copa de vino, también entra en esa acción de gracia.

3. PORQUE SOMOS DEL SEÑOR (7-9)

a) No vivimos para nosotros mismos

Así es como debemos obrar, y buscar la unidad en lo fundamental. Porque ya no debemos vivir bajo nuestro propio interés, sino para el Señor.

Por eso damos gracias a Dios por el día, por el damos gracias a Dios por los alimentos, por eso damos gracias a Dios por permitir congregarnos hoy, por eso damos gracias a Dios cuando vamos a dormir por habernos permitido vivir ese día. Damos gracias a Dios y oramos para que el día siguiente, pase lo que pase, podamos vivir como Él quiere que vivamos, glorificando su nombre.

Y esto es una buena respuesta a lo visto hasta aquí. Si tenemos bien claro este punto, que nuestra vida le pertenece a Cristo, dejaremos de poner importancia en las cosas vanas, y empezaremos a caminar en las cosas importantes que Dios no ha revelado.

Hebreos 12.2 LBLA

2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de El soportó la cruz, menospreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios.

b) Vivamos o muramos, del Señor somos.

En nuestra conversión, experimentamos en cierta manera la muerte del yo, no total, pero parcial. Experimentamos, un nuevo nacimiento, y ahora ya vivimos para Cristo. Tenemos una comunión con Dios que antes no teníamos, tenemos la paz con Él, que es lo más maravilloso que podemos tener. Por lo tanto, ya no vivimos para nosotros.

Cada día tenemos que hacer morir más nuestro viejo hombre, y así, hasta que un día muramos en esta tierra, para que seamos recibido en la morada del Padre, y entonces, ya no nos debe dar miedo morir, porque vivamos o muramos del Señor somos.

Esto es algo que nadie nos puede arrebatar, esta certeza imputada, es un don de Dios, y es eterno.

Dejate de ya, de mirar las cosas insignificante de este mundo, mira a a tu hermano, y ponte en comunión en lo esencial, no busques contienda de lo insignificante, sino que halla un amor mutuo nutrido por el amor de Cristo, aquel amor, que le llevo a la cruz.

c) Por ese vino Cristo.

«Para esto murió y resucitó Cristo» para ser nuestro Señor

Para despojarnos del poder de la muerte, para quitarnos el peso de la ley que nos condenaba, con nos llevaba a una muerte eterna. Para arrebatarnos de la mano del diablo.

Murió y resucitó para que fuera imputada su justicia pura en nosotros frente al Padre, para abrir camino a casa del Padre, para recibir la bendición de ser hijos de Dios, miembros de su iglesia, coherederos de la eternidad.

Sino fuera por Cristo, hoy no estarías aquí. Hoy no serías llamado hijo de Dios, hoy el que está a tu lado no sería tu hermano. ¿Y aún sigues juzgando y condenando a tu hermano sabiendo esto? Que por al gracia de Dios fuiste salvo igual que tu hermano. Que somos imperfecto, pero aceptado por Dios padre por medio del Hijo, regenerados por el Espíritu Santo, templo del Espíritu de Dios.

d) Él es nuestra verdadera Unidad.

Por Cristo es que somos llamados hijos de Dios, por Cristo es que somos llamados unos a otros hermanos, por Cristo es que podemos caminar, por Cristo somos guardaos, por Cristo llegaremos a la meta.

Hermanos Él es la razón de nuestra unidad.

¿Quieres celebrar la navidad? Hazlo para el Señor y su gloria, ¿No la quieres celebrar? Hazlo para el Señor y su gloria. ¿Quieres ser abstemio? Hazlo para el Señor y su gloria. Pero no peques contra tu hermano, pues si haces algo para acabar juzgando y condenando a tu hermano en base a lo que piensas y no a ala Palabra, estarás desacreditado en aquello que haces para la gloria de Dios, no te valdrá de nada.

Con esto Pablo está dando un contundente mensaje tanto a Judíos como gentiles, a maduros como débiles, Cristo es el Señor de la iglesia, es el Señor tuyo y de tu hermano, Cristo murió por ti y tu hermano, Cristo es el Señor de aquellos cristianos que viven y que hoy descansan ya.

Por lo tanto:

4. NO MENOSPRECIE A TU HERMANO (10-12)

a) No juzgues a tu hermano por tontería.

No te creas, capad de juzgar o condenar, no juzgues en base a tu raciocinio, no juzgues sin el fundamente de la Palabra.

Quiero aclarar esto, pues está palabras se han manoseados y se han desvirtuados, en un contexto liberal, para justificar el pecado.

Cuando Pablo habla de no juzgar, habla en base a nuestra mente y pensamiento pecaminosos. Pero no nos quita la responsabilidad de examinar a nuestros hermanos y exhortarles con la Palabra.

Judas 3 LBLA

3 Amados, por el gran empeño que tenía en escribiros acerca de nuestra común salvación, he sentido la necesidad de escribiros exhortándoos a contender ardientemente por la fe que de una vez para siempre fue entregada a los santos.

1 Tesalonicenses 5.20–22 LBLA

20 no menospreciéis las profecías. 21 Antes bien, examinadlo todo cuidadosamente, retened lo bueno; 22 absteneos de toda forma de mal.

1 Juan 4.1–2 LBLA

1 Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus para ver si son de Dios, porque muchos falsos profetas han salido al mundo. 2 En esto conocéis el Espíritu de Dios: todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios;

Es echar un vistazo rápido por la Biblia y ver que no se refiere a eso.

Sino se refiere a no juzgar desde nosotros y nuestros pensamientos a nuestros hermanos, sino desde la Palabra de Dios.

Para

b) No menosprecie nunca a tu hermano.

No te creas mejor que tu hermano, sino que amale. Y si le ves en el error, no contiendas airadamente, sino que muestrale su error por medio de las escrituras, y no por tu orgullo y deseo de pisotearle.

El que ama, no menosprecia, y no juzgar en opiniones, sino que exhorta en amor y humildad por medio de la Palabra.

c) Preocúpate de ti, todos daremos cuentas a Dios.

Isaías 45.23 LBLA

23 Por mí mismo he jurado, ha salido de mi boca en justicia una palabra que no será revocada: Que ante mí se doblará toda rodilla, y toda lengua jurará lealtad.

Hermano no estés buscando al debilidad o imperfección de tu hermano, sabiendo que tu eres imperfecto, pide a Dios que te sabiduría y humildad para examinarte tu corazón y así Dios pueda ir perfecionadote para el día del Juicio.

Porque si hermano, si, estamos salvados, aquellos que hemos recibido la gracia de Dios, no seremos condenados al fuego eterno en el juicio, pero de cierta manera, daremos cuenta a Dios. El esposo dará cuenta por su vida y por su familia, la esposa por su vida y por sus hijos, el pastor por su vida, familia e iglesia. Todos daremos cuentas.

Esposo no juzgue la esposa de otro, preocúpate en instruir a la tuya, no sea que Dios te lo demande en el juicio. Madre no juzgues la educación de los hijos de otros, no sea que descuides los tuyos y Dios te lo demande en el juicio. Pastor, no juzgue el caminar de otra iglesia, no sea que hallas sido negligente en la cual Dios te ha puesto, y el te lo demande en el juicio.

Hermano no juzgues el caminar de tu hermano, no sea que Dios te mande el tuyo. Hermano, antes de esto, ora y si hay un error en ti pide perdón, y si ces un error en la vida de tu hermano, ve y con la Biblia en la mano exhortale por ella.

Recuerda, todos daremos cuenta a Dios.

CONCLUSIÓN

Viendo el contesto original de la carta, lo que vemos es que Pablo dio un verdadero mensaje, un mensaje que es Palabra de Dios, inspirado por Dios, como toda la Biblia.

Era un mensaje necesario, para que el Cristiano pusiera realmente el foco en Cristo, y no en el yo egoísta y pecaminoso.

Esta Palabra hermanos, nos llama, no exhorta a reconocernos pecadores, no perfectos, limitados en sabiduría, acusadores, chismosos, y indignos por naturaleza de esta gracia recibida.

Pero también nos da una gran noticia, que somos de Cristo, que si hemos recibido esta gracia, si nos hemos arrepentido de nuestros pecados y hemos alzado nuestros ojos a Cristo y hemos humillados nuestro corazón para que Él sea el Señor de nuestra vida, vamos bien, por la misericordia de Dios vamos dirección a Casa del Padre, para su gloria.

Por lo tanto, hermano, en lo que te sea posible facilita este caminar a tu hermano, por mucho que no te guste él, o te caiga mal, también Cristo murió por Él. No estamos llamados a caminar sólo con el grupito que nos cae bien de la iglesia, sino con toda la iglesia, incluso con el hermanos que menos te gusta. A él es al que más debes acercarte y así sea el Señor moldeandote y si ves algo en tu hermano que no te gusta, no le juzge bajo tu mirada humana, sino que ve a la Palabra y si le puedes exhortar hazlo.

Recuerda, tu también darás cuenta a Dios.

Recuerda, pero bueno, no tenemos que pasar por un tribunal condenatorio, pues Cristo murió y resucito para esto. Para que vivamos por Cristo, en Cristo y para Cristo. Él es quien nos une.

Vive como Cristo, ama a tu hermano, sigue las pisadas de Cristo.

¡En todo, sólo a Dios la gloria!