Sermón sin título (2)

Dependencia

Sinopsis

Confianza en Dios u otras personas. La dependencia en Dios para la ayuda con necesidades espirituales y físicas surge de una comprensión de la impotencia humana, a pesar de que la dependencia puede ser dirigida incorrectamente. Las personas pueden mirar a otros para encontrar ánimo y apoyo, pero una sobredependencia no es recomendada.

La dependencia originándose en un sentido de impotencia

Impotencia física

(RVR60) — 6 En mi angustia invoqué a Jehová, Y clamé a mi Dios. El oyó mi voz desde su templo, Y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.

Ver también ; ; ;

(RVR60) — 4 Anduvieron perdidos por el desierto, por la soledad sin camino, Sin hallar ciudad en donde vivir. 5 Hambrientos y sedientos, Su alma desfallecía en ellos. 6 Entonces clamaron a Jehová en su angustia, Y los libró de sus aflicciones.

(RVR60) — 6 Jehová guarda a los sencillos; Estaba yo postrado, y me salvó.

(RVR60) — 38 Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?

(RVR60) — 25 Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre, 26 y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor,

Impotencia espiritual

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(RVR60) — 6 Si bien todos nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de inmundicia; y caímos todos nosotros como la hoja, y nuestras maldades nos llevaron como viento.

(RVR60) — 17 Y respondiendo uno de la multitud, dijo: Maestro, traje a ti mi hijo, que tiene un espíritu mudo, 18 el cual, dondequiera que le toma, le sacude; y echa espumarajos, y cruje los dientes, y se va secando; y dije a tus discípulos que lo echasen fuera, y no pudieron.

(RVR60) — 6 Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos.

(RVR60) — 18 Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo.

La dependencia en Dios estimulada

Dios es digno de ser confiado

(RVR60) — 16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

Ver también ; ; ; ; ; ; ; ;

(RVR60) — 31 Y vio Israel aquel grande hecho que Jehová ejecutó contra los egipcios; y el pueblo temió a Jehová, y creyeron a Jehová y a Moisés su siervo.

(RVR60) — 3 Y te afligió, y te hizo tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido, para hacerte saber que no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de Jehová vivirá el hombre.

(RVR60) — 5 Ofreced sacrificios de justicia, Y confiad en Jehová.

(RVR60) — 10 En ti confiarán los que conocen tu nombre, Por cuanto tú, oh Jehová, no desamparaste a los que te buscaron.

(RVR60) — 7 Estos confían en carros, y aquéllos en caballos; Mas nosotros del nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria.

(RVR60) — 3 Confía en Jehová, y haz el bien; Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad.

(RVR60) — 5 Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. 6 Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.

(RVR60) — 7 Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían.

(RVR60) — 4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.

Dios es un refugio

(RVR60) — 1 Dios es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.

Ver también ; ;

(RVR60) — 27 El eterno Dios es tu refugio, Y acá abajo los brazos eternos; El echó de delante de ti al enemigo, Y dijo: Destruye.

(RVR60) — 8 Esperad en él en todo tiempo, oh pueblos; Derramad delante de él vuestro corazón; Dios es nuestro refugio. Selah

(RVR60) — 1 En ti, oh Jehová, me he refugiado; No sea yo avergonzado jamás.

Dios puede ayudar a aquellos que dependen en él

(RVR60) — 6 de manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.

Ver también ; ; ;

(RVR60) — 6 Jehová está conmigo; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre. 7 Jehová está conmigo entre los que me ayudan; Por tanto, yo veré mi deseo en los que me aborrecen.

(RVR60) — 4 En ti esperaron nuestros padres; Esperaron, y tú los libraste. 5 Clamaron a ti, y fueron librados; Confiaron en ti, y no fueron avergonzados.

(RVR60) — 18 He aquí el ojo de Jehová sobre los que le temen, Sobre los que esperan en su misericordia, 19 Para librar sus almas de la muerte, Y para darles vida en tiempo de hambre. 20 Nuestra alma espera a Jehová; Nuestra ayuda y nuestro escudo es él.

(RVR60) — 17 Si no me ayudara Jehová, Pronto moraría mi alma en el silencio. 18 Cuando yo decía: Mi pie resbala, Tu misericordia, oh Jehová, me sustentaba.

Dios ayudará a aquellos que dependen en él

(RVR60) — 13 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?

Ver también ; ;

(RVR60) — 2 Mi socorro viene de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra. 3 No dará tu pie al resbaladero, Ni se dormirá el que te guarda. 4 He aquí, no se adormecerá ni dormirá El que guarda a Israel.

(RVR60) — 18 Cercano está Jehová a todos los que le invocan, A todos los que le invocan de veras. 19 Cumplirá el deseo de los que le temen; Oirá asimismo el clamor de ellos, y los salvará.

(RVR60) — 5 Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.

Ejemplos de algunos que no dependieron en Dios

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(RVR60) — 12 Y Jehová dijo a Moisés y a Aarón: Por cuanto no creísteis en mí, para santificarme delante de los hijos de Israel, por tanto, no meteréis esta congregación en la tierra que les he dado.

(RVR60) — 32 Y aun con esto no creísteis a Jehová vuestro Dios,

(RVR60) — 23 Y cuando Jehová os envió desde Cades-barnea, diciendo: Subid y poseed la tierra que yo os he dado, también fuisteis rebeldes al mandato de Jehová vuestro Dios, y no le creísteis, ni obedecisteis a su voz.

(RVR60) — 14 Mas ellos no obedecieron, antes endurecieron su cerviz, como la cerviz de sus padres, los cuales no creyeron en Jehová su Dios.

(RVR60) — 6 Los que confían en sus bienes, Y de la muchedumbre de sus riquezas se jactan,

(RVR60) — 13 Este su camino es locura; Con todo, sus descendientes se complacen en el dicho de ellos. Selah

(RVR60) — 17 Serán vueltos atrás y en extremo confundidos los que confían en ídolos, y dicen a las imágenes de fundición: Vosotros sois nuestros dioses.

La dependencia en Dios para ayuda física

Josafat y la gente de Judá. Ver también; Ezequías; los hombres de Judá

(RVR60) — 12 ¡Oh Dios nuestro! ¿no los juzgarás tú? Porque en nosotros no hay fuerza contra tan grande multitud que viene contra nosotros; no sabemos qué hacer, y a ti volvemos nuestros ojos.

(RVR60) — 14 Y tomó Ezequías las cartas de mano de los embajadores; y después que las hubo leído, subió a la casa de Jehová, y las extendió Ezequías delante de Jehová.

(RVR60) — 18 Así fueron humillados los hijos de Israel en aquel tiempo, y los hijos de Judá prevalecieron, porque se apoyaban en Jehová el Dios de sus padres.

Asa:

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(RVR60) — 11 Y clamó Asa a Jehová su Dios, y dijo: ¡Oh Jehová, para ti no hay diferencia alguna en dar ayuda al poderoso o al que no tiene fuerzas! Ayúdanos, oh Jehová Dios nuestro, porque en ti nos apoyamos, y en tu nombre venimos contra este ejército. Oh Jehová, tú eres nuestro Dios; no prevalezca contra ti el hombre.

(RVR60) — 8 Los etíopes y los libios, ¿no eran un ejército numerosísimo, con carros y mucha gente de a caballo? Con todo, porque te apoyaste en Jehová, él los entregó en tus manos.

David; dos hombres ciegos; María; Pablo

(RVR60) — 9 Pero tú eres el que me sacó del vientre; El que me hizo estar confiado desde que estaba a los pechos de mi madre. 10 Sobre ti fui echado desde antes de nacer; Desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios.

(RVR60) — 27 Pasando Jesús de allí, le siguieron dos ciegos, dando voces y diciendo: ¡Ten misericordia de nosotros, Hijo de David!28 Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron: Sí, Señor.

(RVR60) — 3 Y faltando el vino, la madre de Jesús le dijo: No tienen vino.4 Jesús le dijo: ¿Qué tienes conmigo, mujer? Aún no ha venido mi hora.5 Su madre dijo a los que servían: Haced todo lo que os dijere.

(RVR60) — 8 Porque hermanos, no queremos que ignoréis acerca de nuestra tribulación que nos sobrevino en Asia; pues fuimos abrumados sobremanera más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que aun perdimos la esperanza de conservar la vida. 9 Pero tuvimos en nosotros mismos sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos; 10 el cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte;

La dependencia en Dios para las necesidades espirituales

La dependencia como un niño es necesaria para aquellos que entrarán en el reino de Dios;

(RVR60) — 14 Viéndolo Jesús, se indignó, y les dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios. 15 De cierto os digo, que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él.

(RVR60) — 27 Respondió Juan y dijo: No puede el hombre recibir nada, si no le fuere dado del cielo.

Ver también ; ; ;

(RVR60) — 12 Jehová recompense tu obra, y tu remuneración sea cumplida de parte de Jehová Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte.

(RVR60) — 40 Respondiendo el otro, le reprendió, diciendo: ¿Ni aun temes tú a Dios, estando en la misma condenación? 41 Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; mas éste ningún mal hizo. 42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino.

(RVR60) — 47 y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén. 48 Y vosotros sois testigos de estas cosas. 49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.

(RVR60) — 4 Y tal confianza tenemos mediante Cristo para con Dios; 5 no que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios,

La dependencia en Dios expresada en la oración

(RVR60) — 2 Está atento a la voz de mi clamor, Rey mío y Dios mío, Porque a ti oraré.

Ver también ; ; ; ;

(RVR60) — 24 Porque no menospreció ni abominó la aflicción del afligido, Ni de él escondió su rostro; Sino que cuando clamó a él, le oyó.

(RVR60) — 13 Mas yo a ti he clamado, oh Jehová, Y de mañana mi oración se presentará delante de ti.

(RVR60) — 1 Jehová, escucha mi oración, Y llegue a ti mi clamor.

(RVR60) — 147 Me anticipé al alba, y clamé; Esperé en tu palabra.

(RVR60) — 1 De lo profundo, oh Jehová, a ti clamo. 2 Señor, oye mi voz; Estén atentos tus oídos A la voz de mi súplica.

Ejemplos de aquellos que claman en dependencia a Dios

los israelitas en Egipto; Job en su sufrimiento; gente de Jerusalén; Jeremías; Jonás desde dentro del pez; el recaudador de impuesto en el templo; iglesia orando por Pedro; los corintios orando por Pablo

(RVR60) — 23 Aconteció que después de muchos días murió el rey de Egipto, y los hijos de Israel gemían a causa de la servidumbre, y clamaron; y subió a Dios el clamor de ellos con motivo de su servidumbre.

(RVR60) — 28 Ando ennegrecido, y no por el sol; Me he levantado en la congregación, y clamado.

(RVR60) — 19 Ciertamente el pueblo morará en Sion, en Jerusalén; nunca más llorarás; el que tiene misericordia se apiadará de ti; al oír la voz de tu clamor te responderá.

(RVR60) — 55 Invoqué tu nombre, oh Jehová, desde la cárcel profunda;

(RVR60) — 2 y dijo: Invoqué en mi angustia a Jehová, y él me oyó; Desde el seno del Seol clamé, Y mi voz oíste.

(RVR60) — 13 Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador.

(RVR60) — 5 Así que Pedro estaba custodiado en la cárcel; pero la iglesia hacía sin cesar oración a Dios por él.

(RVR60) — 11 cooperando también vosotros a favor nuestro con la oración, para que por muchas personas sean dadas gracias a favor nuestro por el don concedido a nosotros por medio de muchos.

La dependencia mal colocada

La dependencia en las naciones vecinas

(RVR60) — 18 Ahora, pues, ¿qué tienes tú en el camino de Egipto, para que bebas agua del Nilo? ¿Y qué tienes tú en el camino de Asiria, para que bebas agua del Eufrates?

Ver también ;

(RVR60) — 20 Dices (pero son palabras vacías): Consejo tengo y fuerzas para la guerra. Mas ¿en qué confías, que te has rebelado contra mí? 21 He aquí que confías en este báculo de caña cascada, en Egipto, en el cual si alguno se apoyare, se le entrará por la mano y la traspasará. Tal es Faraón rey de Egipto para todos los que en él confían.

(RVR60) — 1 ¡Ay de los que descienden a Egipto por ayuda, y confían en caballos; y su esperanza ponen en carros, porque son muchos, y en jinetes, porque son valientes; y no miran al Santo de Israel, ni buscan a Jehová!

La dependencia en religiones y dioses falsos

(RVR60) — 4 Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza, Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían tras la mentira.

Ver también ; ;

(RVR60) — 20 Porque yo les introduciré en la tierra que juré a sus padres, la cual fluye leche y miel; y comerán y se saciarán, y engordarán; y se volverán a dioses ajenos y les servirán, y me enojarán, e invalidarán mi pacto.

(RVR60) — 17 Serán vueltos atrás y en extremo confundidos los que confían en ídolos, y dicen a las imágenes de fundición: Vosotros sois nuestros dioses.

(RVR60) — 8 Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.

La dependencia en la fortaleza y recursos humanos

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(RVR60) — 5 Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová.

(RVR60) — 16 Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.

Ver también ; ; ;

(RVR60) — 16 El rey no se salva por la multitud del ejército, Ni escapa el valiente por la mucha fuerza. 17 Vano para salvarse es el caballo; La grandeza de su fuerza a nadie podrá librar.

(RVR60) — 8 Mejor es confiar en Jehová Que confiar en el hombre. 9 Mejor es confiar en Jehová Que confiar en príncipes.

(RVR60) — 1 Si Jehová no edificare la casa, En vano trabajan los que la edifican; Si Jehová no guardare la ciudad, En vano vela la guardia. 2 Por demás es que os levantéis de madrugada, y vayáis tarde a reposar, Y que comáis pan de dolores; Pues que a su amado dará Dios el sueño.

(RVR60) — 8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;9 no por obras, para que nadie se gloríe.

La dependencia en una conducta pecaminosa

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(RVR60) — 12 Por tanto, el Santo de Israel dice así: Porque desechasteis esta palabra, y confiasteis en violencia y en iniquidad, y en ello os habéis apoyado;

(RVR60) — 4 No hay quien clame por la justicia, ni quien juzgue por la verdad; confían en vanidad, y hablan vanidades; conciben maldades, y dan a luz iniquidad.

La futilidad de una dependencia mal colocada

(RVR60) — 19 Como diente roto y pie descoyuntado Es la confianza en el prevaricador en tiempo de angustia.

Ver también ; ; ; ;

(RVR60) — 6 Por cuanto desechó este pueblo las aguas de Siloé, que corren mansamente, y se regocijó con Rezín y con el hijo de Remalías;7 he aquí, por tanto, que el Señor hace subir sobre ellos aguas de ríos, impetuosas y muchas, esto es, al rey de Asiria con todo su poder; el cual subirá sobre todos sus ríos, y pasará sobre todas sus riberas;8 y pasando hasta Judá, inundará y pasará adelante, y llegará hasta la garganta; y extendiendo sus alas, llenará la anchura de tu tierra, oh Emanuel.

(RVR60) — 3 Y los egipcios hombres son, y no Dios; y sus caballos carne, y no espíritu; de manera que al extender Jehová su mano, caerá el ayudador y caerá el ayudado, y todos ellos desfallecerán a una.

(RVR60) — 13 Habéis arado impiedad, y segasteis iniquidad; comeréis fruto de mentira, porque confiaste en tu camino y en la multitud de tus valientes. 14 Por tanto, en tus pueblos se levantará alboroto, y todas tus fortalezas serán destruidas, como destruyó Salmán a Bet-arbel en el día de la batalla, cuando la madre fue destrozada con los hijos.

(RVR60) — 20 Y Herodes estaba enojado contra los de Tiro y de Sidón; pero ellos vinieron de acuerdo ante él, y sobornado Blasto, que era camarero mayor del rey, pedían paz, porque su territorio era abastecido por el del rey.

(RVR60) — 11 y que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado, 12 a fin de que os conduzcáis honradamente para con los de afuera, y no tengáis necesidad de nada.

Una dependencia apropiada en otros es recomendada

La ayuda humana puede fortalecer

(RVR60) — 2 Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo.

Ver también

(RVR60) — 9 Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. 10 Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. 11 También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; mas ¿cómo se calentará uno solo? 12 Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.

Ejemplos de una dependencia correcta en otros

el apoyo de un sacerdote a una hermana no casada

(RVR60) — 3 o por su hermana virgen, a él cercana, la cual no haya tenido marido, por ella se contaminará.

Apoyo para los pobres y necesitados:

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(RVR60) — 11 Porque no faltarán menesterosos en medio de la tierra; por eso yo te mando, diciendo: Abrirás tu mano a tu hermano, al pobre y al menesteroso en tu tierra.

(RVR60) — 35 Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis;36 estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.

Aquis encontró en David un soldado confiable; Urías y Zacarías eran testigos confiables; Maestros confiables son una bendición a la iglesia.

(RVR60) — 6 Y Aquis llamó a David y le dijo: Vive Jehová, que tú has sido recto, y que me ha parecido bien tu salida y tu entrada en el campamento conmigo, y que ninguna cosa mala he hallado en ti desde el día que viniste a mí hasta hoy; mas a los ojos de los príncipes no agradas.

(RVR60) — 2 Y junté conmigo por testigos fieles al sacerdote Urías y a Zacarías hijo de Jeberequías.

(RVR60) — 2 Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros.