Salmo 46 Dios es Nuestra Fortaleza
Dios es nuestro Refugio en las dificultades de la vida
La confianza que el pueblo tiene en Dios, 1–7. Una exhortación a conocer a Dios, 8–11.
La confianza que el pueblo tiene en Dios, 1–7. Una exhortación a conocer a Dios, 8–11.
Division en 3 partes
En cualquier crisis, Dios es nuestro amparo y fortaleza. Amparo enfatiza más su protección; fortaleza la fuerza interior que da. Pronto, “muy encontrado”, recalca que Dios está siempre dispuesto a ayudarnos; por eso (v. 2) podemos confiar en él. Normalmente el cristiano cree que Dios “puede”, pero duda de que “esté dispuesto” en este caso. El salmista insiste en que Dios siempre está dispuesto.
El salmista insiste en que Dios siempre está dispuesto.
Los Nombres de Dios dan un entendimiento Profundo a este Salmo.
Ver.1-3
Ver.4-7
Ver.8-11
El Salmo 46.4 habla de un río que beneficia a la ciudad de Jerusalén. Hay manantiales de aguas fuera de Jerusalén, pero no ríos en las colinas. Lo que los hijos de Coré hicieron fue usar un río como símbolo de las bendiciones de misericordia y gracia que fluyen de la presencia de Dios sobre su pueblo.
Esta idea de un río fluyendo de la presencia del Señor a la tierra y alrededor del pueblo llegaron a ser una imagen importante en el pensamiento bíblico. Mire los siguientes pasajes y haga un resumen de sus mensajes respecto al río.
El salmista puede señalar hechos concretos, por eso dice, venid y ved. Por cierto, muchos no quieren ver y darán otras explicaciones. Desolaciones (v. 8) también puede traducirse “cosas sorprendentes”. Como vemos en Apocalipsis, antes de instituir un reino de paz, Dios tiene que hacer juicio. La victoria y subsecuente paz, aquí, anticipa la paz total en el futuro. Dios destruye las armas; carros se refiere a carros de guerra (cf. Isa. 2:1–4).
Estad quietos es una exhortación necesitada hoy. Nótese el paralelo con 2 Crónicas 20:17 (la victoria de Josafat) y con Isaías 30:15 (tiempo de Ezequías y la victoria sobre Senaquerib). Dios es exaltado cuando permitimos que él obre.
El v. 11 repite el estribillo del v. 7. Dado que Dios controla la naturaleza y la historia, podemos confiar en él. Dios de Jacob recalca su misericordia y su paciencia. Calvino se queja de los que no aplican este desafío a su propia situación. Insiste en que con estos dos (su poder y su misericordia) nada puede impedir que nuestra fe confronte a todos los enemigos que se levanten contra la iglesia.
El Salmo 46.4 habla de un río que beneficia a la ciudad de Jerusalén. Hay manantiales de aguas fuera de Jerusalén, pero no ríos en las colinas. Lo que los hijos de Coré hicieron fue usar un río como símbolo de las bendiciones de misericordia y gracia que fluyen de la presencia de Dios sobre su pueblo.
Esta idea de un río fluyendo de la presencia del Señor a la tierra y alrededor del pueblo llegaron a ser una imagen importante en el pensamiento bíblico. Mire los siguientes pasajes y haga un resumen de sus mensajes respecto al río.
Salmo 36.7, 8
Ezequiel 47.1–12
Apocalipsis 22.1, 2
El Salmo 46.4 habla de un río que beneficia a la ciudad de Jerusalén. Hay manantiales de aguas fuera de Jerusalén, pero no ríos en las colinas. Lo que los hijos de Coré hicieron fue usar un río como símbolo de las bendiciones de misericordia y gracia que fluyen de la presencia de Dios sobre su pueblo.
Esta idea de un río fluyendo de la presencia del Señor a la tierra y alrededor del pueblo llegaron a ser una imagen importante en el pensamiento bíblico. Mire los siguientes pasajes y haga un resumen de sus mensajes respecto al río.
Salmo 36.7, 8
Ezequiel 47.1–12
Apocalipsis 22.1, 2
Así como las gentes de Jerusalén pudieron hallar consuelo en el salmo cuando los rodearon ejércitos enemigos, así como Lutero pudo encontrar consuelo en el salmo cuando lo amenazaron el Papa y el emperador, también nosotros podemos encontrar consuelo en este salmo ante todo peligro, siempre hasta el fin del mundo. Las palabras “estad quietos” son tanto una reprimenda al mundo en rebelión contra Dios como la seguridad de paz para su pueblo