Gracia y Vida Cristiana

Casa de Adoracion, Alabanza & Fortaleza Gracia y Vida Cristiana Pastor Azael Carcamo / General Gracia y unión / 2 Pedro 3.17–18 La vida cristiana, de principio a fin, depende totalmente de la gracia de Dios. 2 Pedro 3.17–18 RVR60 17 Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza. 18 Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén. «Maravillosa gracia.» El teólogo, escritor y Profesor John H. Westerhoff de la Facultad de Teología de la Universidad de Duke, Durhanen, Carolina del Norte (USA), en su libro ¿Tendrán fe nuestros hijos? relata una experiencia espectacular y única que le tocó vivir en un retiro espiritual en el que participaban jóvenes y adultos de una iglesia a la que había sido invitado. Al llegar la media tarde uno de los hermanos asistentes notó que había desaparecido su billetero –con sus documentos y unos 200$ aproximadamente– del bolsillo de su chaqueta, que estaba colgada en un perchero. 2000 Clearview Ave 117 Atlanta GA 30340 Page 1 of 4 Casa de Adoracion, Alabanza & Fortaleza Naturalmente las sospechas, la hostilidad y el enojo llenaron la atmósfera. Hubo acusaciones, malestar y desprecio. La reunión, tan inspiradora hasta ese momento, perdió su encanto y se interrumpió bruscamente. Luego de un buen rato de dimes y diretes y la más negra perspectiva de un malogrado final de lo que por la mañana había prometido ser un inspirador retiro espiritual. Reuní el grupo e hice la única cosa que sabía hacer –relata Westerhoff–. Leí en el Templo el incidente que se narra en el Evangelio de Juan cap. 8, vv. 2 al 11. Es la historia de la mujer encontrada en adulterio. Los líderes religiosos –dice este pasaje bíblico– deseaban que Jesús la condenara, pero él solamente dijo: «Aquel de vosotros que esté sin pecado, arroje la primera piedra». Como nadie lo hizo, le dijo a la mujer: «¿Nadie te ha condenado?», y ella le respondió: «No Señor, ninguno». Jesús entonces le dijo: «Tampoco yo te condeno. Vete, y en adelante no peques más». Después de esto –prosigue–, oré para que la gracia de Dios estuviera entre nosotros. Al finalizar la oración, el joven que había robado la billetera se adelantó para hacer su confesión y devolverla. Se produjo una pausa y un silencio expectante. Iban a expulsarlo y mandarlo de regreso a su casa cuando alguien gritó: –«¿Quieres quedarte?». El joven murmuró con vergüenza y timidez: –«Sí». –«Quédate, quédate», gritaron todos. Y uno tras otro se adelantó para abrazar al jovencito. Westerhoff pidió que entonaran el himno «Maravillosa Gracia», tras lo cual prosiguió aquel retiro espiritual que concluyó con una experiencia única y conmovedora para todos los presentes. Ese himno, cuya letra y música es de Haldor Lillenas, la tradujo al castellano R. F. Maesí: Maravillosa gracia, única salvación Hallo perdón en ella, completa redención. El yugo del pecado de mi alma ya rompió. Pues de Cristo divina gracia me alcanzó. Maravillosa gracia, 2000 Clearview Ave 117 Atlanta GA 30340 Page 2 of 4 Casa de Adoracion, Alabanza & Fortaleza cuán grande es su poder, El corazón más negro, blanco lo puede hacer. Gloria del cielo ofrece, sus puertas ya me abrió. Pues de Cristo divina gracia me alcanzó. La gracia de Dios compensa la debilidad humana 2 Corintios 12.8–9 RVR60 8 respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí.9 Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Ver también 1 Co 2.1–5; 2 Co 9.8; He 2.14; He 4.15; He 5.2; Stg 4.6; 2 P 3.17–18 Los creyentes deben orar por gracia Hebreos 4.16 RVR60 16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. Ver también Sal 25.16; Os 14.1–2; Col 1.9; Col 4.12 La experiencia cristiana puede resumirse en términos de gracia 1 Corintios 15.10 RVR60 10 Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo. Ver también Hch 18.27; Ro 5.2; Gl 1.15; Flp 1.7 2000 Clearview Ave 117 Atlanta GA 30340 Page 3 of 4 Casa de Adoracion, Alabanza & Fortaleza Los creyentes deben buscar experimentar más de la gracia de Dios Hechos de los Apóstoles 20.32 RVR60 32 Y ahora, hermanos, os encomiendo a Dios, y a la palabra de su gracia, que tiene poder para sobreedificaros y daros herencia con todos los santificados. Ver también Hch 13.43; Col 1.3–6; He 13.9; 1 P 5.12; 2 P 3.18 Los creyentes están capacitados para servir a Jesucristo por su gracia 1 Pedro 4.10 RVR60 10 Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios. Ver también Hch 15.39–40; Ro 5.17; Ro 12.6; Ro 15.15; 1 Co 3.10; 2 Co 12.9; Gl 2.9; Ef 3.7–9 La gracia de Dios es vista en el carácter cristiano, especialmente en la generosidad 2 Co 8.6–7 Se refiere a una donación que se levantó para los cristianos pobres de Jerusalén. Ver también; Hch 4.33; Hch 11.22–23; 2 Co 9.13–14; Col 4.6 Una experiencia real de la gracia de Dios requiere la cooperación del creyente 2 Corintios 6.1 RVR60 1 Así, pues, nosotros, como colaboradores suyos, os exhortamos también a que no recibáis en vano la gracia de Dios. Ver también Flp 2.12–13; He 12.15; 1 P 5.5; Stg 4.6 Página . Exportado de Software Bíblico Logos, 15:19 29 de septiembre de 2019. 2000 Clearview Ave 117 Atlanta GA 30340 Page 4 of 4