Sermón sin título (14)

En estos días hemos visto como cada día amanecemos con una noticia nueva frente a las investigaciones de los supuestos actos de corrupción. Dia tras dia hemos visto como allanan y se llevan detenidas a muchas personas, todo dentro de la ley del hombre y la justicia humana, que siempre deja algo que desear a uno u a otro. Existe también en el hombre una serie de pensamientos que van corrompiendo el corazón y en muchos casos la fe, ejemplo de ello es cuando llamamos héroes de la fe a los personajes de Hebreos 11, personalmente no creo existan héroes de la fe sino HÉROE DE LA FE QUE ES CRISTO JESÚS Pero existe una justicia que es distinta y diferente, tenemos a un juez que llamamos justo y a un acusador que en muchos casos no necesita mentir solo decir la verdad para acusarnos. Hoy veremos la historia de Uza un personaje poco conocido para muchos, su historia revela el sentido de la justicia de Dios y su aplicación. El arca era un cofre o caja de madera de acacia enchapado en oro, fue construido y adornado por instrucciones especiales dadas por Dios mismo, su tapa era llamada el propiciatorio, allí estaban dos ángeles de oro uno de cada lado, tenia a los costados cuatro argollas de oro, para cuando debía ser cargada seria usando unas varas de acacia. Los filisteos habían tomada en un funesto día en que la gloria se alejó de Israel. Cuando el arca fue capturada por los filisteos , el más grande tesoro de Israel fue robado y llevado al templo pagano de Dagón. Al regresar, el arca a Israel fue colocada en un lugar seguro, estaban esperando el dia para su restauración pública a una posición de preeminencia en la nación. Finalmente vino la hora, y David deseaba ver la gloria de nuevo. El dijo:

1º Crónicas 13.3–4 RVR60y traigamos el arca de nuestro Dios a nosotros, porque desde el tiempo de Saúl no hemos hecho caso de ella.Y dijo toda la asamblea que se hiciese así, porque la cosa parecía bien a todo el pueblo.

David da la orden y traen el arca

1º Crónicas 13.7–11 RVR60Y llevaron el arca de Dios de la casa de Abinadab en un carro nuevo; y Uza y Ahío guiaban el carro. Y David y todo Israel se regocijaban delante de Dios con todas sus fuerzas, con cánticos, arpas, salterios, tamboriles, címbalos y trompetas. Pero cuando llegaron a la era de Quidón, Uza extendió su mano al arca para sostenerla, porque los bueyes tropezaban. Y el furor de Jehová se encendió contra Uza, y lo hirió, porque había extendido su mano al arca; y murió allí delante de Dios. Y David tuvo pesar, porque Jehová había quebrantado a Uza; por lo que llamó aquel lugar Pérez-uza, hasta hoy.

i Uza desobedecioDos cosas resaltan a primera vista en este texto la primera siendo David un estudioso de la palabra de Dios y un hombre conforme al corazon de Dios se enojo con Dios Y la otra que podemos ver es que