2 Tes. 3:6-15, La Fructuosidad de Su Fe
La Iglesia en la Palabra • Sermon • Submitted
0 ratings
· 1,137 viewsRazones por la cual cada creyente deber tomar en serio su responsabilidad de hacer el bien.
Notes
Transcript
Introducción:
Introducción:
Predicciones apocalípticas falladas. Varias personas a través de la historia han intentado predecir el fin del mundo, incluyendo predicciones modernas acerca del año 200, el calendario Maya del 2012, todas demostradas de ser erróneas. Los Milleritas, de quienes proceden los Adventistas del Séptimo Día, siguieron a William Miller, quién profetizó el fin del mundo el 23 de abril, 1843. Sus seguidores vendieron todas sus posesiones y esperaron la aparición sobre un monte. Cuando esta fecha vino y se fue sin mucha diferencia notable, el grupo abandonó y volvió a sus vidas, teniendo que volver a empezar con sus vidas. Un caso entre varios en la historia de la predicciones falsas del futuro causando la negación de responsabilidades de la vida presente.
Situación en Tesalónica, por creer falsamente que el día del Señor ya había llegado, o que estaba por encima de ellos, algunos se enfocaron en esta realidad futura de tal manera que dejaron sus responsabilidades presentes.
Razones por la cual cada creyente deber tomar en serio su responsabilidad de hacer el bien.
Definición de “hacer bien”. El contexto define a lo que refiere:
Rom. 7:21, el contexto es vivir agradando a Dios luchando contra la carne.
1 Cor. 7:38, el contexto es el matrimonio.
Gal. 6:9, el contexto es las buenas obras.
2 Tes. 3:13, el contexto es trabajar para no ser carga a otros.
2 Tes. 3:6-15.
Pero os ordenamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente, y no según la enseñanza que recibisteis de nosotros.Porque vosotros mismos sabéis de qué manera debéis imitarnos; pues nosotros no anduvimos desordenadamente entre vosotros,ni comimos de balde el pan de nadie, sino que trabajamos con afán y fatiga día y noche, para no ser gravosos a ninguno de vosotros;no porque no tuviésemos derecho, sino por daros nosotros mismos un ejemplo para que nos imitaseis.Porque también cuando estábamos con vosotros, os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma.Porque oímos que algunos de entre vosotros andan desordenadamente, no trabajando en nada, sino entremetiéndose en lo ajeno.A los tales mandamos y exhortamos por nuestro Señor Jesucristo, que trabajando sosegadamente, coman su propio pan.Y vosotros, hermanos, no os canséis de hacer bien. Si alguno no obedece a lo que decimos por medio de esta carta, a ése señaladlo, y no os juntéis con él, para que se avergüence. Mas no lo tengáis por enemigo, sino amonestadle como a hermano.
1° Razón: el hacer bien expresa el evangelio.
1° Razón: el hacer bien expresa el evangelio.
Por la obediencia a la enseñanza dada, vs: 6-8.
Los términos traducidos ordenamos y mandamos, se refieren a una orden militar, que debe ser obedecido.
La enseñanza (vs: 6) es la misma doctrina que usó en el previo capítulo (2 Tes. 2:15), indicando instrucciones de una autoridad aceptada, apostólica, en este caso.
Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra.
Los que andaban desordenadamente, literalmente “fuera de linea, u orden” se conducían de forma fuera de sintonía con la vida piadosa cambiada por el evangelio que Pablo y sus acompañantes les habían enseñado. Su mismo ejemplo de responsabilidad propia había sido vinculado con la predicación del evangelio, 1 Tes. 2:9, un hecho que repite en nuestro pasaje.
Porque os acordáis, hermanos, de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios.
Por la demostración del amor fraternal.
El concepto de no ser gravosos, no ser carga a otros, era para que no sea de tropiezo al mensaje del evangelio, sino de la demostración del afecto fraternal que Pablo y sus acompañantes tuvieron por los tesalonicenses, aunque tuvieron derecho como apóstoles de ser sustentados por ellos, 1 Tes. 2:6-8.
ni buscamos gloria de los hombres; ni de vosotros, ni de otros, aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo.Antes fuimos tiernos entre vosotros, como la nodriza que cuida con ternura a sus propios hijos.Tan grande es nuestro afecto por vosotros, que hubiéramos querido entregaros no sólo el evangelio de Dios, sino también nuestras propias vidas; porque habéis llegado a sernos muy queridos.
Cuando les instruye acerca del amor fraternal en 1 Tes. 4:9-11, les anima a seguir creciendo en ese amor, y presenta el “ocuparse en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos” como una aplicación de ese amor fraternal.
Pero acerca del amor fraternal no tenéis necesidad de que os escriba, porque vosotros mismos habéis aprendido de Dios que os améis unos a otros; y también lo hacéis así con todos los hermanos que están por toda Macedonia. Pero os rogamos, hermanos, que abundéis en ello más y más; y que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado,
Por el entendimiento que el trabajo es un campo misionero.
La vida responsable llega a ser un testimonio digno de Dios, 1 Tes. 2:10-12. Pone los pies a la vida piadosa.
Vosotros sois testigos, y Dios también, de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con vosotros los creyentes; así como también sabéis de qué modo, como el padre a sus hijos, exhortábamos y consolábamos a cada uno de vosotros, y os encargábamos que anduvieseis como es digno de Dios, que os llamó a su reino y gloria.
La vida responsable buscar andar honradamente a la vista del mundo, 1 Tes. 4:11-12. Pone confianza al mensaje que predicamos.
y que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado, a fin de que os conduzcáis honradamente para con los de afuera, y no tengáis necesidad de nada.
La vida responsable es un testimonio de una vida piadosa que se preocupa y se responsabiliza por los suyos, sin ser una carga a los demás. Pone realidad a las declaraciones. Pablo instruye firmemente contra el que no cuida de los suyos, 1 Tim. 5:8.
porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.
Explicó cómo se suponía que debían vivir y cómo su trabajo reflejaba la gloria de Dios y cómo, al hacer bien su trabajo y lo mejor que pudieron, fueron sal y luz para la cultura. Ese es el significado de ver nuestra vocación correctamente. El trabajo es misional.
Grant, J. H., Jr. (2011). 1 y 2 Tesalonicenses: La Esperanza de la Salvación. (R. K. Hughes, Ed.) (Pág. 199). Wheaton, IL: Crossway.
Ilustración: el hacer bien expresa el evangelio. “Dios te amó tanto que envió a Su Hijo Jesucristo, y Dios amó tanto al mundo que te envió a ti.”
Aplicación:
2° Razón: el hacer bien deja buen ejemplo a seguir.
2° Razón: el hacer bien deja buen ejemplo a seguir.
Ejemplo de obediencia, vs: 9-11. Pablo y sus acompañantes había instruido ya a los tesalonicenses el deber de ser responsables y no depender de otros o ser carga a otros. Ellos mismos dieron dieron el ejemplo al trabajar para su sustento mientras estaban allí con ellos. Pablo les recuerda esto varias veces en sus dos cartas, pero no querían que fuese tropiezo en la recepción del evangelio, 1 Tes. 2:3-6, 9; 1 Cor. 10:31-33.
Porque nuestra exhortación no procedió de error ni de impureza, ni fue por engaño,sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones.Porque nunca usamos de palabras lisonjeras, como sabéis, ni encubrimos avaricia; Dios es testigo;ni buscamos gloria de los hombres; ni de vosotros, ni de otros, aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo.
Porque os acordáis, hermanos, de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios.
Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios. No seáis tropiezo ni a judíos, ni a gentiles, ni a la iglesia de Dios; como también yo en todas las cosas agrado a todos, no procurando mi propio beneficio, sino el de muchos, para que sean salvos.
Ejemplo del buen trabajo, vs: 12.
La palabra sosegadamente significa “con tranquilidad, o en tranquilidad.”
Pablo les anima a trabajar “tranquilos”, no causando alboroto, ni siendo gravosos y de mal testimonio a los del mundo, 1 Tes. 4:11-12.
y que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado, a fin de que os conduzcáis honradamente para con los de afuera, y no tengáis necesidad de nada.
Pablo también les está enseñando que el trabajo en sí, no es algo malo, sino que es dado por Dios.
El trasfondo de su mandato del vs: 10, es la creación. Dios puso a Adán en el huerto, entregándole el cuidado del huerto y de los animales, y dándole toda planta y fruto de árbol para comer, Gen. 1:29. La cosecha de esa comida y el cuidado del huerto, y el nombrar lo animales era trabajo.
Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer.
No es hasta después de la caída al pecado que entraría la dificultad del trabajo a la vida, Gen. 3:19. El desgaste del trabajo era la consecuencia del pecado, no el trabajo en sí.
Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.
De hecho, el sentir de trabajar bien, es un don de Dios, un vistazo de la llenura que proveía el trabajo antes de la caída al pecado, Ecl. 5:19.
Asimismo, a todo hombre a quien Dios da riquezas y bienes, y le da también facultad para que coma de ellas, y tome su parte, y goce de su trabajo, esto es don de Dios.
La buena ética de trabajo refleja el buen trabajo del buen Dador del trabajo, dándole gloria a Él, Col. 3:22-23.
Siervos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales, no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino con corazón sincero, temiendo a Dios.Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres;
Ilustración: el hacer bien deja un buen ejemplo a seguir.
VIDEO: Ejemplo de un padre.
Mi padre tuvo buena ética de trabajo, y me enseñó a trabajar. Una frase que mi padre siempre decía, e incluso mi hijo me ha escuchado decir, “Si no lo haces bien la primera vez, tendrás que hacerlo otra vez.” Esa frase no originó con él, tal como su ética de trabajo, sino con su padre, mi abuelo, quién le enseñó a trabajar a mi padre.
Aplicación:
3° Razón: el hacer bien evita los peligros del andar desordenadamente.
3° Razón: el hacer bien evita los peligros del andar desordenadamente.
El peligro de la amonestación, vs: 6, 14-15.
Pablo manda que los hermanos se aparten de aquellos andando desordenadamente. Este término significa evitar. Pero no es de apartarse permanentemente de forma maleducada.
En conjunto con el mandato del vs: 14, no os junteís, Pablo les está advirtiendo que no se asocien, teniendo una comunión intima con ellos. Les está mandando que eviten ser influenciados por los que andan desordenadamente. Es muy posible que ellos son los mismos que han causado las ideas falsas acerca del Día del Señor que Pablo tiene que corregir. Es el mismo tipo de mandato que encontramos en 1 Cor. 5:11. El creyente debe tener sumo cuidado en quién busca comunión (tener en común), pues esos individuos serán de influencia en su vida. Es lo que se ve en Sal. 1:1.
Más bien os escribí que no os juntéis con ninguno que, llamándose hermano, fuere fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o ladrón; con el tal ni aun comáis.
Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;
El resultado de la amonestación, la advertencia dada a aquellos quienes andan desordenadamente, en conjunto con el no asociarse con ellos de una forma influyente, trae a aquellos quienes son hermanos en la fe, vergüenza apropiada por lo que están haciendo que es desagradable a Dios. En todo, se trata como hermano, no como enemigo.
El peligro del enfoque erróneo, vs: 11.
No es que los que andaban desordenadamente, simplemente no hacían nada, perezosamente sentados en casa, sino que se ocupaban bastante. El término entremetiéndose indica una actividad constante. Es un juego de palabras en el original indicando que su negocio era meterse en los negocios de otros.
El problema no era la inactividad, sino la actividad en lo erróneo, “ocuparse en cosas inútiles” (Ortiz, P., V. (2000). Concordancia Manual y Diccionario Griego-Español del Nuevo Testamento. Miami: Sociedades Bı́blicas Unidas).
El término y sus derivados se usan de mujeres ociosas y chismosas en 1 Tim. 5:13, y de la magia en Hch. 19:19. Todo indicando que la actividad ocurría en lo indebido, lo que no agrada a Dios. El concepto de entrometerse está en conjunto con otras actividades pecaminosas en 1 Ped. 4:15.
Y también aprenden a ser ociosas, andando de casa en casa; y no solamente ociosas, sino también chismosas y entremetidas, hablando lo que no debieran.
Asimismo muchos de los que habían practicado la magia trajeron los libros y los quemaron delante de todos; y hecha la cuenta de su precio, hallaron que era cincuenta mil piezas de plata.
Así que, ninguno de vosotros padezca como homicida, o ladrón, o malhechor, o por entremeterse en lo ajeno;
Ilustración: el hacer bien evita los peligros del andar desordenadamente.
Aplicación: