Episodio 10 La llegada a Egipto y la liberación del faraón

Serie la historia bíblica de la redención- A.T  •  Sermon  •  Submitted
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Serie la historia bíblica de la redención- A.T Episodio 10 La llegada a Egipto y la liberación del faraón
Texto: 'Entonces Faraón mandó a todo su pueblo, diciendo: Echad al río a todo hijo que nazca, y a toda hija preservad la vida. Y por haber las parteras temido a Dios, él prosperó sus familias. Y Dios hizo bien a las parteras; y el pueblo se multiplicó y se fortaleció en gran manera. Y las parteras respondieron a Faraón: Porque las mujeres hebreas no son como las egipcias; pues son robustas, y dan a luz antes que la partera venga a ellas. Y el rey de Egipto hizo llamar a las parteras y les dijo: ¿Por qué habéis hecho esto, que habéis preservado la vida a los niños? Pero las parteras temieron a Dios, y no hicieron como les mandó el rey de Egipto, sino que preservaron la vida a los niños. Cuando asistáis a las hebreas en sus partos, y veáis el sexo, si es hijo, matadlo; y si es hija, entonces viva. Y habló el rey de Egipto a las parteras de las hebreas, una de las cuales se llamaba Sifra, y otra Fúa, y les dijo: y amargaron su vida con dura servidumbre, en hacer barro y ladrillo, y en toda labor del campo y en todo su servicio, al cual los obligaban con rigor. Y los egipcios hicieron servir a los hijos de Israel con dureza, Pero cuanto más los oprimían, tanto más se multiplicaban y crecían, de manera que los egipcios temían a los hijos de Israel. Entonces pusieron sobre ellos comisarios de tributos que los molestasen con sus cargas; y edificaron para Faraón las ciudades de almacenaje, Pitón y Ramesés. Ahora, pues, seamos sabios para con él, para que no se multiplique, y acontezca que viniendo guerra, él también se una a nuestros enemigos y pelee contra nosotros, y se vaya de la tierra. He aquí, el pueblo de los hijos de Israel es mayor y más fuerte que nosotros. Entretanto, se levantó sobre Egipto un nuevo rey que no conocía a José; y dijo a su pueblo: Y los hijos de Israel fructificaron y se multiplicaron, y fueron aumentados y fortalecidos en extremo, y se llenó de ellos la tierra. Y murió José, y todos sus hermanos, y toda aquella generación. Todas las personas que le nacieron a Jacob fueron setenta. Y José estaba en Egipto. Isacar, Zabulón, Benjamín, Estos son los nombres de los hijos de Israel que entraron en Egipto con Jacob; cada uno entró con su familia: Rubén, Simeón, Leví, Judá, Dan, Neftalí, Gad y Aser. '
Éxodo 1:1-22
Introducción
ÉXODO Se llama así al acontecimiento en el cual los israelitas salieron de •Egipto. La palabra viene del latín: ex= fuera de, hodos= camino.[1]
La historia de Éxodo (Ex), ofrece algunos datos que, dentro de ciertos márgenes de probabilidad, permiten delimitar la época en que acontecieron los hechos referidos. Tales datos, aunque no bastan para establecer fechas precisas, son de un innegable valor histórico. Por ejemplo, 1.11 revela que los israelitas, fueron residentes en Egipto durante 430 años (12.40-41), fueron obligados a trabajar en la construcción de dos ciudades: Pitón y Ramesés (llamada en egipcio Casa de Ramesés). “Este hecho sucedió entre finales del s. XIV y principios del XIII a.C. El Éxodo, segundo libro del Pentateuco, es el libro de la liberación y de la alianza con su código, de los primeros pasos por el desierto y de la fabricación del instrumental cúltico”. (Schokel, pág. 155) toda la narrativa de la salida de Egipto está en los capítulos (1:1–15:21)[2] solemos leer y pensar que esta salida fue algo rápido y repentino, pero es el proceso de salvación del Dios que los ha escogido.
Desarrollo
I. Gosen la residencia temporal
'Salió Israel con todo lo que tenía, y vino a Beerseba, y ofreció sacrificios al Dios de su padre Isaac. Y habló Dios a Israel en visiones de noche, y dijo: Jacob, Jacob. Y él respondió: Heme aquí. Y dijo: Yo soy Dios, el Dios de tu padre; no temas de descender a Egipto, porque allí yo haré de ti una gran nación. Yo descenderé contigo a Egipto, y yo también te haré volver; y la mano de José cerrará tus ojos. ' Génesis 46:1-4
i. En Egipto pero con conciencia de convertirse en una gran nación
Están ubicado en “la tierra de Ramesés” (Gn. 47:11) y estaba cerca del palacio real donde *José servía como visir.[3] Pero ellos conservaban esa promesa de que serian una gran nación.
II. La prosperidad en Egipto y la conciencia de una estancia temporal
i. La prosperidad en Egipto
Con Jose como visir de Egipto, la crisis económica mundial toma un giro distinto al punto que el Faraón compra toda la tierra de Egipto incluyendo los egipcios, y se menciona la primera ocasión del pago de impuestos de un 20% o la quinta parte de la producción de todas las cosechas, pero para los israelitas como extranjeros se les venden propiedades y ellos en lugar de empobrecerse se fortalecen.
'Los israelitas se establecieron en el territorio egipcio de Gosen. Allí compraron terrenos, y llegaron a tener muchos hijos. ' Génesis 47:27
ii. La conciencia de una estancia temporal en Jacob.
Jacob no ve cumplida la palabra en su totalidad, pero si es responsable y le exige a Jose que cuando muera no lo entierre en Egipto sino en la tierra que sus padres habían comprado la tierra de macpela que es la única tierra que poseyeron de la tierra que Dios les había prometido.
'Y vivió Jacob en la tierra de Egipto diecisiete años; y fueron los días de Jacob, los años de su vida, ciento cuarenta y siete años. Y llegaron los días de Israel para morir, y llamó a José su hijo, y le dijo: Si he hallado ahora gracia en tus ojos, te ruego que pongas tu mano debajo de mi muslo, y harás conmigo misericordia y verdad. Te ruego que no me entierres en Egipto. Mas cuando duerma con mis padres, me llevarás de Egipto y me sepultarás en el sepulcro de ellos. Y José respondió: Haré como tú dices. ' Génesis 47:28-30
iii. La conciencia de una estancia temporal en Jose.
Jose también es consciente de no pertenecer a Egipto
'Y habitó José en Egipto, él y la casa de su padre; y vivió José ciento diez años. Y José dijo a sus hermanos: Yo voy a morir; mas Dios ciertamente os visitará, y os hará subir de esta tierra a la tierra que juró a Abraham, a Isaac y a Jacob. E hizo jurar José a los hijos de Israel, diciendo: Dios ciertamente os visitará, y haréis llevar de aquí mis huesos. ' Génesis 50:22,24-25
III. De la libertad a la esclavitud
'Entretanto, se levantó sobre Egipto un nuevo rey que no conocía a José; y dijo a su pueblo: He aquí, el pueblo de los hijos de Israel es mayor y más fuerte que nosotros. ' Éxodo 1:8-9
Ahora estamos en un nuevo panorama aproximadamente a 430 años después de la llegada a Egipto, con un giro sorprendente, después de ser autónomos como pueblo a convertirse en esclavos del faraón que no conocía a Jose. Poco a poco la memoria de Jose fueron borradas de la familia real y el odio por la prosperidad y crecimiento de la nación iniciarían el cumplimiento de la promesa de Dios que había prometido que el los sacaría de Egipto.
IV. La preservación de Moisés el legislador
Milagrosamente aquel primer holocausto no toco la vida de Moisés, como tampoco su vida fue tempranamente sesgada al ser puesta en el gran rio Nilo. Sino que milagrosamente es encontrado por la hija del faraón y maría la hermana de Moisés le ofrece una nodriza hebrea que era la misma Jocabec la madre de Jose y la historia nos deja en la escena donde Jocabec le entrega a la hija del faraón a su hijo quien lo prohijó es decir le adopto con todos los procesos legales y derechos correspondientes y le coloco por nombre Moisés.
'Y cuando el niño creció, ella lo trajo a la hija de Faraón, la cual lo prohijó, y le puso por nombre Moisés, diciendo: Porque de las aguas lo saqué. ' Éxodo 2:10
Conclusión
Ahora en Egipto luego de 430 años ellos están siendo oprimidos y encontramos el primer genocidio registrado en contra de la nación de Israel y las semejanzas entre la llegada de un libertador llamado Moisés y la llegada del Mesías. Cuando Moisés nació se dio orden de matar a todos los niños, igualmente con Jesús, Moisés es milagrosamente salvado y resguardado en el palacio del mismo faraón, Jesús es llevado por sus padres a Egipto y es guardado allí, Moisés traería liberación de la esclavitud del faraón que se proclamaba Dios, Jesús vendría para liberarnos del yogo de satanás que se proclama dios de este mundo, Moisés recibiría la alianza y e pacto, Jesús seria el que cumpliría toda la ley y el pacto, trayendo una nuevo pacto y interpretando y cumpliendo la ley dada a Moisés. Estamos ahora frente al nacimiento de uno de los lideres más importantes en la historia bíblica y en la historia de la redención, estamos frente al escenario donde se sentarán las bases de lo que sería servir al Dios de Israel. El éxodo es la salida, El acontecimiento central de la fe del pueblo de Israel es el éxodo. Israel «nace» como pueblo de Dios y como «nación» cuando sale de Egipto.
La salida de Egipto esta enmarcada por una pérdida de la relación con el Dios de sus padres y ahora se habían adaptado al estilo de vida libertino de Egipto.
y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Jehová. Josué 24:14
y por eso tenemos a un Moisés que es preservado y rescatado de la muerte y luego es enviado por Dios.
Puede decirse que el libro de Éxodo es la historia de un hombre, del hombre Moisés, que representa el punto céntrico alrededor del cual gira la crisis del plan de la redención. En el corazón de él se verifica el conflicto. El recibe la comunicación de Dios para el pueblo, y sobre él pesa toda la carga de las peregrinaciones. Es él quien recibe el golpe de la crítica del pueblo, pues se halla como mediador entre el pueblo y Dios, e intercede ante Dios a favor de ellos. Así que, ciertamente este libro es la historia de un hombre, un hombre de Dios que, como profeta, legislador, y caudillo, se mueve entre el pueblo de Dios.[4]
[1] Lockward, A. (1999). En Nuevo diccionario de la Biblia (p. 382). Miami: Editorial Unilit.
[2] Sociedades Bíblicas de España. (2011). La Palabra: El Mensaje de Dios para mí (2a edición, Éx 1.1). Las Rozas, Madrid: Sociedades Biblicas Unidas.
[3] Pfeiffer, C. F. (2002). En Diccionario bíblico arqueológico (p. 320). El Paso, Texas: Editorial Mundo Hispano.
[4] Gillis, C. (1991). El Antiguo Testamento: Un Comentario Sobre Su Historia y Literatura, Tomos I-V (Vol. 1, p. 246). El Paso, TX: Casa Bautista De Publicaciones.
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