Señales antes del arrebatamiento de la iglesia(parte IIIB): La apostasía doctrinal acerca de la segunda venida de Cristo.
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· 447 viewsLos verdaderos Creyentes, estamos llamados a cuidarnos de los falsos maestros, no sólo por su forma inmoral de vivir, sino también por su forma blasfema de negar la doctrina de la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo.
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Introducción:
Introducción:
En la última enseñanza sobre esta serie, se estudió el tema:
Apostasía moral al apartarse de las normas morales( 2 Pedro 2:2-22)
Aprendimos que los falsos profetas con engaño declaran ser profetas de Dios, y engañan con herejías destructoras, es decir con enseñanzas que producen resultados destructivos tanto en lo doctrinal como en lo moral.
El verso 3, nos muestra que esos falsos maestros y falsos profetas al igual que comerciantes deseosos de obtener ganancias personales, harán mercadería de los miembros de la iglesia con palabras fingidas. Mercadería (emporeuomai) significa “traficar en” o “lograr ganancia de”. Tales sujetos quieren enriquecerse de las personas a quienes “ministran”.
Luego de los versos del 4 al 10, Pedro da tres ejemplos del castigo de Dios sobre los injustos y de su misericordia sobre los justos.
El verso 3b, dice que : “Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se duerme”
Indica que los falsos maestros no enfrentarán la condenación eterna hasta su muerte, su sentencia fue decretada por Dios ya de largo tiempo.
Luego, Pedro hace referencia a tres relatos conocidos que nos muestran el precedente Bíblico de Dios para el juicio de aquello que no hacen lo bueno.
Dios no perdonó a los Ángeles que pecaron, los entregó a Prisión de Oscuridad.(verso 4)
Dios no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé y su familia, y trajo el diluvio sobre los impíos.(verso 5)
Dios condenó por destrucción a Sodoma y Gomorra para ponerla de ejemplo para los que vivirían impíamente y preservó al justo Lot.
(versos 6.8)
Pedro establece en los versos 9 y 10 que Dios va a utilizar los mismos patrones de juicios que ya ha utilizado para juzgar la impiedad en el presente y el futuro, así mismo guardará a los justos.
9 sabe el Señor librar de tentación a los piadosos, y reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio; 10 y mayormente a aquellos que, siguiendo la carne, andan en concupiscencia e inmundicia, y desprecian el señorío. Atrevidos y contumaces, no temen decir mal de las potestades superiores,
Este patrón del juicio divino está claro: Primero hay consuelo en el hecho de que el Señor sabe cómo librar de tentación a los piadosos.
Dios sabe cómo salvar a quienes le pertenecen; por tanto, no tenemos absolutamente nada qué temer.
Dios no solo sabe cómo rescatar a sus hijos sino también cómo reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio.
Mientras tanto los injustos son como prisioneros en la cárcel que esperan la sentencia final y la transferencia a su último destino.
Ahora vamos a hablar de:
“La apostasía doctrinal respecto a la segunda venida del Señor y de los juicios relacionados con ella”
“La apostasía doctrinal respecto a la segunda venida del Señor y de los juicios relacionados con ella”
Leamos 2 Pedro 3. 1-13
¿Qué nos enseña el apóstol Pedro en este relato?
A. Pedro escribe a lectores creyentes genuinos.
1 Amados, esta es la segunda carta que os escribo, y en ambas despierto con exhortación vuestro limpio entendimiento,
B. Hace un llamado a que tengamos memoria de lo que hemos aprendido tanto de los profetas como de los apóstoles.
2 para que tengáis memoria de las palabras que antes han sido dichas por los santos profetas, y del mandamiento del Señor y Salvador dado por vuestros apóstoles;
Pedro hermanos está haciendo este llamado porque el diablo reconoce cuán importante es esta doctrina para la Iglesia. Cuando los cristianos viven en la expectativa del regreso prometido de Cristo demuestran celo y entusiasmo espiritual, reconociendo que pronto darán cuenta a su Maestro.
Por tal razón en los versículos siguientes considera los argumentos falaces que los falsos maestros hacían y siguen haciendo acerca de la segunda venida del Señor.
Ahora que es lo primero que Pedro afirma:
1. Los falsos maestros, niegan la palabra de Dios y argumentan en contra de su segunda venida.
1. Los falsos maestros, niegan la palabra de Dios y argumentan en contra de su segunda venida.
3 sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán burladores, andando según sus propias concupiscencias,4 y diciendo: ¿Dónde está la promesa de su advenimiento? Porque desde el día en que los padres durmieron, todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación.
Estos falsos maestro reconocen la promesa de su advenimiento, pero simplemente lo menosprecian como falsas, ellos van a rechazar la realidad de la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo y de cualquier idea de una futura rendición de cuenta .
¿Ahora cómo lo hacen?
El apóstol nos enseña tres factores que dejan al descubierto la motivación de los corazones de los falsos maestros.
A. Practican la burla.
“sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán burladores” (3:3a)
A lo largo de la historia de la Iglesia los falsos maestros han tratado de intimidar a los fieles actuando como burladores despectivos mediante el menosprecio, en este caso, la esperanza de la venida de Jesús sufría la peor parte del escarnio.
La iglesia primitiva creía que el regreso de Cristo era inminente. El apóstol Pablo, por ejemplo, creía que esto iba a ocurrir incluso en el transcurso de su vida (cp. 1 Ts. 4:17), opinión que probablemente tenían todos los discípulos.
Como seguidores de Cristo, anhelaban reunirse con su Señor y ver su reino establecido en la tierra, sin embargo con el pasar del tiempo, esta expectativa creció mucho, hasta tal punto que al parecer algunos cristianos a quienes Pedro escribió había ya caído en dudas.
En tal situación los falsos maestros, desde luego, se apresuraron a sacar provecho de tales temores, plantando semillas de nuevas dudas y alimentando ansiedad en ellos.
Hoy pasa lo mismo, la gente tiene temor del fin mundo, pero no espera la venida del Señor, aún en las iglesias no se habla de este tema, y muchos cristianos, no vivimos esperando la venida del Señor, e inclusive hay muchos que se burlan de los que esperamos su venida.
B. El otro factor es la inmoralidad.
“ andando según sus propias concupiscencias” , (3:3b)
Sea que los falsos maestros lo admitan o no, la inmoralidad es la verdadera razón por la que niegan la Segunda Venida. Sus estilos de vida se enfocan en sus propias concupiscencias y en su sensualidad, Por tanto, niegan el regreso de Cristo porque les desagrada la idea de la retribución divina.
Quieren la libertad de ir tras todo tipo de placeres lujuriosos sin ningún temor al castigo futuro.
Por el contrario, los creyentes verdaderos aceptamos el hecho de que el Señor va a regresar (Hch. 1:10–11),
10 Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas,11 los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.
Entendemos que daremos cuenta de nuestras vidas (Ro. 14:12),
12 De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí.
Y que Él les dará recompensas basadas en la fidelidad (1 Co. 3:12–15).
12 Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, 13 la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará. 14 Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa. 15 Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego.
Creemos que cuando Cristo venga revelará los aspectos secretos del corazón (1 Co. 4:5).
5 Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios.
Quienes confiamos de verdad en el regreso del Señor tenemos un incentivo para llevar una vida santa Fil. 3:20
20 Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo;
Porque nos damos cuenta de “que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí” (Ro. 14:12).
C. El otro factor es el Uniformismo.
2 Pedro 3: 4
4 y diciendo: ¿Dónde está la promesa de su advenimiento? Porque desde el día en que los padres durmieron, todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación.
Ellos los falsos maestros se burlan, con una pregunta:
¿Dónde está la promesa de su advenimiento?
Ellos revisan la historia para burlarse, para apoyar este punto equivocado de vista.
Y dicen los padres durmieron, refiriéndose a los padres Cristianos, la primera generación de creyentes habían muerto y no vieron el cumplimiento de esta, ustedes tampoco la verán.
Y el otro argumento de los herejes era simple.
Si todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación (que significa que el universo es un sistema de causa y efecto divinamente creado pero cerrado y naturalista), entonces la intervención divina (que incluye el regreso de Cristo) debe descartarse a priori.
En tiempos modernos, a ese punto de vista se le conoce como uniformismo.
Al sostener que el presente es la clave del pasado, el uniformismo afirma que los únicos procesos naturalistas que alguna vez han funcionado en el pasado son los mismos procedimientos que funcionan hoy día.
Por tanto niegan categóricamente la intervención divina a lo largo de la Historia.
A pesar de estos burladores, de este pensamiento uniforme Pedro más adelante enseña que hay argumentos suficientes para deshacer sus argumentos mismos y refutar las acusaciones blasfemas presentadas por los falsos maestros, Pedro se basó en cuatro fuentes principales:
Las Escrituras, la historia, la eternidad y el carácter de Dios.
Que será nuestro próximo tema a estudiar.
Conclusión:
Conclusión:
Los verdaderos Creyentes, estamos llamados a cuidarnos de los falsos maestros, no sólo por su forma inmoral de vivir, sino también por su forma blasfema de negar la doctrina de la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo.
Ellos a través de los tiempos se han manifestado en distintas maneras para negar esta doctrina:
Como burladores.
Por su conducta inmoral.
Por su pensamiento alineado al Uniformismo.
Dios nos ayude para que como creyentes de su palabra podamos mantenernos firmes en lo que él nos ha enseñado.
Bendiciones.