FARIVIRUS: Como Andar Conscientemente
FARIVIRUS: Infectados con Hipocresía Religiosa • Sermon • Submitted
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· 34 viewsPracticar una genuina comunión con el Señor y los demás se hace al andar conscientemente, siguiendo las acciones detalladas en los pasages.
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Introducción:
Introducción:
Aunque no todos serán infectados en esta pandemia, ciertamente, todos han sido afectados por esta pandemia. Una forma que nos ha afectado es que tomamos mas consciencia en acciones específicas que antes ni prestábamos mucha atención.
Andando conscientemente durante la pandemia:
Usando máscara aún si no tengo síntomas.
Manteniendo una distancia física de otros quienes no son de mi casa.
Asegurarme de mantener las manos limpias, especialmente antes de estar en contacto con otros.
Resistiendo tocar la cara.
Respetando los protocolos que los diferentes comercios han estipulado para su negocio.
Resistiendo hacer chistes morbosos acerca del virus.
Respetando el deseo del amigo, vecino, familia, en no visitarlos por estar en una situación de riesgo de salud.
Ahora, todos hemos sido afectados por el FARIVIRUS, la hipocresía religiosa, y aún a cierto nivel infectados por esta pandemia de gran peligro espiritual. Pero tal como andamos mas conscientes por la pandemia del COVID-19, debemos también andar mas conscientemente por la hipocresía religiosa.
Repaso de las últimas dos semanas:
FARIVIRUS: Infectado con la hipocresía religiosa. Aquí algunos conceptos paralelos con la pandemia del Coronavirus.
Andar asintomático: ciegos a nuestra propia condición, para lo cual debemos examinarnos bien a la luz de la Palabra de Dios.
Enfoque en limpieza externa: al enfocar en la santidad o religiosidad externa uno se pierde en el legalismo y se pierde de practicar y experimentar la misma misericordia de Dios.
Imponiendo reglas (para otros): Nuestra hipocresía personal tiene base en una perspectiva errónea de nuestra aceptación en Dios por medio de Cristo, por ende no aceptamos a otros que no cumplen nuestras reglas, que ni nosotros mismos cumplimos perfectamente.
La semana pasada empezamos a ver como luchar contra nuestra hipocresía personal, y terminamos viendo que debemos aceptar a otros tal como Dios nos aceptó en Cristo. Esto nos da un buen momento de contestar una pregunta que surge naturalmente: ¿Cómo es que puedo aceptar a un hermano con quién tengo opiniones opuestas? ¿Cómo puedo andar conscientemente junto con otros creyentes que no comparten mi perspectiva?
Aquí le damos un seguimiento en este mensaje:
Primeramente, debemos reconocer que la hipocresía crea obstáculos en las relaciones con Dios y con otros.
Debemos también confiar que la sincera dependencia en Cristo nos puede cambiar.
Finalmente, debemos practicar una genuina comunión con el Señor y los demás.
¿Cómo hago eso? ¿Cómo ando conscientemente ante el Señor y los demás?
Hay dos pasajes específicos que nos ayudan contestar esto: Rom. 14:1-15:7 y 1 Cor. 8.
Estos dos pasajes nos enseñan en cuanto a practicar y respetar la libertad cristiana, la libertad de consciencia.
¿Qué es eso? Es la práctica en las áreas de la vida que la Biblia no trata específicamente, que no nos da ni instrucción ni prohibición. Esencialmente llega a ser como un área gris porque parece no ser ni blanco ni negro.
Ahora, creemos y podemos ver que la Biblia trata con todo aspecto de la vida sea en mandato específico, o principio en general.
Por ejemplo, la Biblia no habla específicamente en contra de hacer trampa en una prueba, pero en principio nos manda a ser íntegros y honestos, lo cual va contra del hacer trampa en la prueba.
Pero es en la aplicación específico de esos principios generales donde encontramos las áreas grises. Al buscar aplicar principios bíblicos, habrá preguntas sobre algunos detalles de la vida debido a diferencias de cultura, trasfondo, entendimiento, madurez, o interpretación.
Algunos ejemplos que en años pasados habían sido áreas grises pero que hoy es casi chistoso hablar de ello como algo pecaminoso.
Pelo facial. Universidad Bíblica Moody no permitía barbas porque era señal de rebelión y pecaminosidad, más D.L. Moody tuvo una gran barba (FOTO).
Naipes. Eran usadas para juegos como Poker, dónde se apostaba. y los joker, guasón, bufón, o comodín, se asimilaban a una representación del diablo.
Truco. Parte del juego involucra la “mentira,” o “blofear,” fingir tener mejores cartas de lo que tienes.
Cines. No podrías controlar las imágenes que mostraban y era un lugar donde parejas se aprovechaban de lo oscuro.....
Hay varios temas abarcando la música, el entretenimiento, la vestimenta, los pasatiempos, y los lugares que uno frecuenta.
En tiempos recientes varios pastores quienes antes predicaban en contra de la tecnología y los medios sociales por necesidad han tenido que utilizarlos.
Hay otros ejemplos modernos que entran en estas categorías, pero quiero ser sensible hacia aquellos con estas convicciones, entonces no quiero mencionarlos al azar.
Las situaciones de los pasajes en Romanos y 1 Corintios son relevantes, similares el uno al otro, pero los protagonistas, y los antagonistas se intercambian entre los pasajes. Esencialmente, cada pasaje trata con cristianos débiles, y cristianos fuertes.
Esto de cristianos débiles y fuertes no se trata de su moralidad o su fortaleza espiritual contra el pecado, sino que se trata de su sensibilidad hacia el pecado.
Aquellos cristianos débiles son los son excesivamente sensibles al pecado que aún cosas inconsecuentes, los cuales no eran morales ni inmorales, eran vistos como pecado.
Aquellos quienes son débiles son quienes no han aceptado o comprendido plenamente las ricas implicaciones de la gracia de Dios. Por ejemplo, los cristianos débiles de Romanos 14 no les ha caído la ficha de las “misericordias de Dios” que Pablo les ha enseñado en los previos capítulos de la carta.
El comentarista Alva McClain explica la diferencia:
[Los débiles] no han agarrado el hecho que la salvación es aparte de toda obra, y el cristiano, cuando está unido con Cristo, deja todo legalismo y ceremonialismo y todo otro “ismo” detrás y está libre! Esa es su debilidad, no comprende ese sistema de verdad…
Los fuertes son los que han entrado completamente al descanso en Jesucristo. Ellos saben que la justificación es aparte de las obras, se han dado cuenta que la libertad en Cristo les ha sido dada y ya están terminados con las reglas del legalismo y ceremonialismo para siempre! Son fuertes en el sentido de comprender el significado de la fe cristiana...
Los hermanos débiles precisan corrección porque su posición está mal, y condenan a otros quienes no están de acuerdo con ellos. Se activan en juicio condenador...
Pero los fuertes también precisan corrección porque, mientras que tienen razón en principio, lo han usado incorrectamente en su actitud hacia sus hermanos más débiles.
— Romanos. Alva McClain
En Rom. 14:1-15:7, los cristianos griegos son los fuertes. Varios cristianos judíos todavía llevaban en sí la obligación de cumplir la ley dada por Dios a Moisés, con respecto a la dieta (vs: 2) y los días especiales (vs: 5), Col. 2:16. Eso era su trasfondo, y la ley venía de Dios, por lo tanto, sentían que se debían todavía mantenerlo y condenaban aquellos quienes no los respetaban. Por otro lado, los cristianos griegos, convertidos de la idolatría, entendieron que en Cristo, toda la ley se había cumplido, y no tenían que cumplir la leyes dietéticas y ceremoniales para honrar a Dios. Estaban libres en Cristo para disfrutar de todo lo que Él les había provisto, con gratitud y honra a Él.
Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo,
Ilustración: Desacuerdo con un hermano en la iglesia acerca de su participación en algo que yo veía como malo. Desde entonces, me he dado cuenta, por mi consciencia siendo mas educada por la Palabra de Dios, que mi posición en ese desacuerdo, aunque con buena intención, estuvo incorrecto. Si tuviéramos esa misma conversación hoy, sería diferente, animándole a ser cauteloso en lugar de condenar su participación. Ahora, por su lado, me comentó, “ah, ya sé lo que pasa aquí, te molesta porque eres un inmaduro y débil en tu consciencia, entonces no puedes juzgarme, yo tengo libertad en Cristo.” Ahora, él tenía la razón, pero tuvo una actitud de menosprecio hacia mi, lo cual también estuvo mal.
En 1 Cor. 8, la situación es lo inverso, los cristianos judíos son los fuertes. La carne del cual habla en el pasaje se refiere a carne ofrecida a ídolos, lo cual obviamente no fue consumido por el ídolo, pero lo vendían en el mercado después. Los judíos, al saber que el ídolo no era sino un pedazo de material, de madera o algún metal, por ende, no tenía ningún efecto sobre la carne. Pero el cristiano griego quien se había convertido de esa adoración idólatra, lo veía mal y le afectaba por su pasada participación en esa idolatría.
Ilustración: Un compañero de trabajo, hermano en la iglesia, no le gustaba ningún tipo de música que sonaba más roquera. Si se parecía en alguna forma similar al rock, ni lo aguantaba. Al conversar esto con otro compañero de trabajo, también creyente, a quién le gustaba la música más fuerte y rítmica (yo estaba en el medio de la conversación, en preferencia y también lugar por estar sentados literalmente entre los dos en el asiento de banco de la camioneta en que viajábamos). El primer compañero le reveló que la razón por la que no le gustaba ese tipo de música, no era por la música en sí, sino porque le recordaba de su vida pasada sin Cristo, y no quería ni un recuerdo de esa vida pasada.
Si eres hijo de Dios, te has encontrado en una situación similar, o te encontrarás en una situación similar.
Como iglesia, no somos un club de personas parecidas, pero somos un cuerpo de individuos con distintos pasados, preferencias, prioridades, y pecaminosidades. Dios nos ha llamado a ser unidos en un sólo cuerpo, representando Jesucristo al mundo.
¿Cómo hacer eso? ¿Cómo podemos andar conscientemente, constantemente practicando una comunión genuina con Dios y los demás?
Cada creyente puede andar conscientemente en comunión genuina con Dios y los demás al aplicar dos principios básicos a su vida.
Podemos andar conscientemente en comunión genuina con Dios cuando entendemos que el andar en libertad es vivir en obediencia a Dios.
Podemos andar conscientemente en comunión genuina con Dios cuando entendemos que el andar en libertad es vivir en obediencia a Dios.
Libertad en Cristo- lo que no es:
No es decir que Dios tiene áreas grises.
Sant. 1:17.
Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.
Sant. 4:4.
¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.
Mat. 12:30.
El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no recoge, desparrama.
2 Cor. 6:14-16.
No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo?¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré entre ellos, Y seré su Dios, Y ellos serán mi pueblo.
La idea de observar estos versículos no es probar que para nosotros no existen áreas grises, sino que para Dios no existen tales áreas. Las áreas grises las crean nuestra condición caída y el pecado que sigue habitando en nosotros. Esto hace que la llenura del Espíritu sea vital en la vida de todo creyente para agradar a nuestro Dios de la mejor manera posible.
— Miguel Nuñez. “Como usar tu libertad cristiana sabiamente: Dios y las áreas grises.” https://integridadysabiduria.org/
No es abusar la libertad en licencia.
Gal. 5:13, 17.
Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.
Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.
1 Jn. 2:15-17.
No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
Libertad en Cristo- lo que si es:
Es buscar lo mejor para mi relación con Dios, 1 Cor. 6:12.
Todas las cosas me son lícitas, mas no todas convienen; todas las cosas me son lícitas, mas yo no me dejaré dominar de ninguna.
Es descansar en lo que Cristo ha hecho por mi, y no buscar ser santificado por las obras de la ley, Col. 2:20-23.
Pues si habéis muerto con Cristo en cuanto a los rudimentos del mundo, ¿por qué, como si vivieseis en el mundo, os sometéis a preceptos tales como: No manejes, ni gustes, ni aun toques (en conformidad a mandamientos y doctrinas de hombres), cosas que todas se destruyen con el uso? Tales cosas tienen a la verdad cierta reputación de sabiduría en culto voluntario, en humildad y en duro trato del cuerpo; pero no tienen valor alguno contra los apetitos de la carne.
Es buscar agradarle a Dios y ser más como Cristo en toda área de mi vida, Col. 1:10.
para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios;
Ilustración: Domingos sin pantalla.
Aplicación: FOTO- equilibrio en las áreas grises.
Postura personal en cuanto al uso de alcohol.
Podemos andar conscientemente en comunión genuina con otros cuando entendemos que el andar en amor es servir al prójimo.
Podemos andar conscientemente en comunión genuina con otros cuando entendemos que el andar en amor es servir al prójimo.
Andar en amor- lo que no es, Rom. 14:15.
Pero si por causa de la comida tu hermano es contristado, ya no andas conforme al amor. No hagas que por la comida tuya se pierda aquel por quien Cristo murió.
No es echar en cara la libertad, Rom. 14:15-16, 20.
Pero si por causa de la comida tu hermano es contristado, ya no andas conforme al amor. No hagas que por la comida tuya se pierda aquel por quien Cristo murió. No sea, pues, vituperado vuestro bien;
No destruyas la obra de Dios por causa de la comida. Todas las cosas a la verdad son limpias; pero es malo que el hombre haga tropezar a otros con lo que come.
No menospreciar al hermano con otra postura, Rom. 14:2-3.
Porque uno cree que se ha de comer de todo; otro, que es débil, come legumbres.El que come, no menosprecie al que no come, y el que no come, no juzgue al que come; porque Dios le ha recibido.
No es juicio condenador, Rom. 14:3-4,
El que come, no menosprecie al que no come, y el que no come, no juzgue al que come; porque Dios le ha recibido.¿Tú quién eres, que juzgas al criado ajeno? Para su propio señor está en pie, o cae; pero estará firme, porque poderoso es el Señor para hacerle estar firme.
No es una práctica superficial, Rom. 14:1, 21.
Recibid al débil en la fe, pero no para contender sobre opiniones.
Bueno es no comer carne, ni beber vino, ni nada en que tu hermano tropiece, o se ofenda, o se debilite.
Andar en amor- lo que si es:
Aceptar y dejar el juicio en las manos del Juez, Rom. 14:3, 10-12; 15:7.
El que come, no menosprecie al que no come, y el que no come, no juzgue al que come; porque Dios le ha recibido.
Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú también, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo. Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, Y toda lengua confesará a Dios. De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí.
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios.
Vivir para la gloria de Dios, Rom. 14:5-9, 18; 1 Cor. 10:31.
Uno hace diferencia entre día y día; otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté plenamente convencido en su propia mente. El que hace caso del día, lo hace para el Señor; y el que no hace caso del día, para el Señor no lo hace. El que come, para el Señor come, porque da gracias a Dios; y el que no come, para el Señor no come, y da gracias a Dios. Porque ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno muere para sí. Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos, o que muramos, del Señor somos. Porque Cristo para esto murió y resucitó, y volvió a vivir, para ser Señor así de los muertos como de los que viven.
Porque el que en esto sirve a Cristo, agrada a Dios, y es aprobado por los hombres.
Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.
Edificar y animar a otros, Rom. 14:13, 19; 1 Cor. 10:23.
Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano.
Así que, sigamos lo que contribuye a la paz y a la mutua edificación.
Todo me es lícito, pero no todo conviene; todo me es lícito, pero no todo edifica.
Dar preferencia al hermano, Rom. 15:1-2, 7.
Así que, los que somos fuertes debemos soportar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos.Cada uno de nosotros agrade a su prójimo en lo que es bueno, para edificación.
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios.
Ilustración: obrero en el ministerio para adictos frenado por el requisito acerca del uso del alcohol.
Aplicación: ¿Es la salud espiritual de tu hermano/a en la fe, más importante que tu libertad de consciencia?
¿Estás conociendo la Palabra de Dios mas cada día para que tu consciencia sea moldeada y sensibilizada a la obra del Espíritu Santo para crecerte para la gloria de Dios?
Conclusión:
Conclusión:
Cada creyente puede andar conscientemente en comunión genuina con Dios y los demás al aplicar dos principios básicos a su vida.
Podemos andar conscientemente en comunión genuina con Dios y con otros cuando entendemos que:
el andar en libertad es vivir en obediencia a Dios
el andar en amor es servir al prójimo.