De la duda a la fe

“De la duda a la FE”

Habacuc 2:4

Como país, y aun el mundo entero podemos decir que estamos viviendo unos días históricos, si CRISTO tarda en venir lo que hemos vivido en estos meses será muy mencionado en el futuro.

Algo que debemos tener en mente, es que la historia de nuestro país, del mundo, la historia de nuestras familias, la historia de nuestra iglesia, podemos decir la historia en si, está en las manos de Dios.

Vamos a ubicarnos en la historia presente, lo que se está escribiendo en la actualidad en nuestra sociedad, y la realidad es que no es muy diferente a lo que le toco vivir al profeta Habacuc.

¿Qué encontramos en el libro de Habacuc? Lo que encontramos es una conversación entre Dios y el profeta, de la cual podemos sacar muchísima enseñanza. Para poder comprender un poco mejor el libro debemos tener en mente que el tema es: DE LA DUDA A LA FE, podemos ver al profeta batallando con dudas e inquietudes, y vemos como el libro termina con una poderosa declaración de confianza.

Habacuc vivió en un tiempo donde todo estaba saliendo mal. Vivió en una época en la que hubo gran corrupción nacional y aflicción, en la que la tierra estaba llena de violencia, de odio y estallidos de maldad—su aflicción se ve reflejada en los primeros versos 1:1-4

La inquietud que anima al profeta a que inicie un dialogo con Dios tiene que ver con la justicia Divina: ¿Cómo es posible que un Dios justo permita que haya injusticia en su pueblo? Las palabras de Habacuc están en forma de lamento y expresan dos angustiosas preguntas: ¿Hasta cuándo? (¿Hasta cuándo clamaré, y no oirás; ¿y daré voces a ti a causa de la violencia, y no salvaras?) Y ¿Por qué? (¿por qué me haces ver iniquidad, y haces que vea molestia? Destrucción y violencia están delante de mí, y pleito y contienda se levantan) Estas preguntas dan la impresión de que ya había estado orando a Dios por mucho tiempo y la falta de respuesta lo tiene frustrado y desesperado, con muchas dudas.

Como resultado de la mucha iniquidad (v.4) no hay un estado de derecho justo en Judá. Los fallos de las cortes salen manipulados y no siguen las exigencias de la Ley de Jehová. El justo no puede escaparse de los ataques y del maltrato de los impíos que controlan el sistema y se benefician de la injusticia.

¿No suena eso como lo que está sucediendo actualmente? ¿Por qué, dice Habacuc tengo que clamar ¡violencia!, y no obtengo respuesta? He aquí el gran problema de la oración que no obtiene contestación. Tenemos aquí el caso de un hombre que está preocupado por su nación porque ve que todo sale mal. El pueblo vive sumido en la maldad; hay inquietud, violencia, injusticia y opresión por doquier. Cuando todo el asunto es traído ante las cortes, las cortes mismas están corruptas, por lo que Habacuc se siente profundamente preocupado.

Posiblemente la frustración del profeta era más grande al recordar ciertos ejemplos del pasado: Éxodo 2:23-25; Jueces 3:9; Salmo 145:19.

A SU TIEMPO LLEGA LA RESPUESTA:

La porción 1:5-11, vemos la respuesta de Dios al clamor del profeta—Dios le dice al profeta que está realizando una obra que lo asombrara. Dios le dice al profeta que usará a los Caldeos (babilonios) como instrumentos para castigar al pueblo.

Increible, pero Dios usaría a un pueblo impío para cumplir sus propósitos. Aunque no lo entendamos, el Dios Soberano sabe lo que está haciendo.

Un detalle muy significativo: notemos el verso 5, “Mirad entre las naciones, y ved, y asombraos…” la idea es que antes de que el profeta clamara Dios ya estaba haciendo algo—aunque no alcancemos a ver, Dios está obrando para cumplir sus propósitos.

La porción 1:12-17 nos deja ver que el profeta no entendía como un Dios Santo usaba a una nación tan malvada para castigar a su propio pueblo, los judíos.

Dios tenía una gran lección que enseñarle al profeta y al pueblo.

Recordemos que el libro de Habacuc es una conversación entre el profeta y Dios: en 1:2-4 el profeta le habla a Dios; 1:5-11 Dios le contesta al profeta; 1:12-17 el profeta nuevamente le habla a Dios; 2:1 nos muestra lo que el profeta hizo en medio de un tiempo de frustración (esto nos debe de dar una gran lección a cada uno de nosotros—aunque el profeta experimente frustración, y recibió la respuesta que posiblemente no esperaba, y no entendía, ¿Qué hace el profeta? Las expresiones mencionadas en el 2:1 nos dejan ver que Habacuc tiene confianza de que Dios volverá a contestar, y que él estará listo para recibir el mensaje de Dios.

En lugar de desesperarnos, debemos esperar pacientemente la respuesta de nuestro Dios.

Dios en efecto le responde al Profeta Habacuc, para dejarle saber que Dios tiene un plan que a su tiempo se cumplirá, todo a su debido tiempo, notemos 2:2-3.

Dios le menciona ciertas verdades al profeta, que servirían de ánimo y fortaleza durante los días difíciles que estaba viviendo—verdades que nos debieran animar a nosotros en el presente para seguir adelante, sabiendo que la historia pasado estuvo en las manos de Dios, la presente está en las manos de Dios y la futura estará en las manos de Dios.

I. EL JUSTO POR SU FE VIVIRA. 2:4

A. El verso 4 describe 2 clases de personas:

i. Las que se enorgullecen, debido a que confían en sí mismas.

1. Un claro ejemplo serían los caldeos. 1:7, 11

2. De igual manera, las personas sin Cristo, sin darse cuenta pueden ser instrumentos en las manos del Señor—pero no dan Gloria a Dios, todo lo hacen por sus fuerzas, en su justicia y muchas veces le atribuyen las victorias a dioses falsos.

ii. También el texto nos habla del justo que vivirá por fe.

1. Esta porción es de las porciones más importantes de toda la Biblia. La encontramos en 3 ocasiones en el Nuevo Testamento.

a. Rom.1:17 “Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá” enfasis en JUSTO.

b. Gál.3:11 “Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá” enfasis en VIVIRÁ.

c. Heb.1038 “Mas el justo vivirá por fe; Y si retrocediere, no agradará a mi alma” enfasis en POR FE.

2. En medio de las injusticias y calamidades de la vida, los creyentes, justos delante de Dios debemos vivir por FE, confiando que Dios tiene propósitos buenos, aunque no lo entendamos.

II. LA TIERRA SERÁ LLENA DEL CONOCIMIENTO DE LA GLORIA DE JEHOVÁ. 2:14

A. La tierra en el día de Habacuc no estaba llena de mucha Gloria, ni tampoco lo está el día de hoy.

B. De hecho, el pasaje muestra “ayes” haciendo referencia a prácticas que Dios aborrece

i. Avaricia y codicia violenta: 2:5-11

ii. Homicidio a sueldo: 2:12

iii. Embriaguez: 2:15-16

iv. Idolatría: 2:19

C. Estas son las mismas prácticas que contaminan a las naciones en la actualidad. Y Dios los aborrece tanto hoy como lo hizo en el día de Habacuc.

D. Pero la promesa es que la GLORIA DE DIOS un día llenará la tierra, porque JESUCRITO volverá, derrotará todo pecado y establecerá su Reino Justo.

III. JEHOVÁ ESTÁ EN SU SANTO TEMPLO. 2:20

A. El texto nos dice: “Más Jehová está en su santo templo; calle delante de él toda la tierra.”

B. Ante las calamidades e injusticias que imperan en nuestra sociedad, Dios sigue sentado en su Trono, como en Isaías 6.

C. No tenemos necesidad de quejarnos ni de dudar, porque Él reina e interviene en los asuntos de las naciones.

D. Habacuc pensaba que a Dios no le interesaban los problemas de la vida, pero descubrió que a Él le importaban mucho y que obraba según su plan y a su tiempo.

E. Es por ello que el justo vive por fe.

F. Si miramos a nosotros mismos o a las circunstancias, nos desanimaremos y desearemos darnos por vencidos, pero si miramos a Dios por fe y hacia adelante a la gloriosa venida de Cristo, nos animaremos y seremos capaces de avanzar en victoria.

Dios quizo animar a Habacuc, mostrándole: 1.- EL JUSTO POR LA FE VIVIRÁ. 2.- LA TIERRA UN DÍA SERÁ LLENA DEL CONOCIMIENTO DE LA GLORIA DE JEHOVÁ. 3.-JEHOVÁ ESTA EN SU SANTO TEMPLO.

¿Qué IMPACTO tuvieron estas declaraciones en el profeta?

El capítulo 3 nos muestra que Habacuc es un hombre que ha sido transformado, tocado por el Señor—EN VEZ DE QUEJARSE, ALABA AL SEÑOR.

Dios cambia nuestros lamentos si nosotros como Habacuc nos damos tiempo para esperar ante él en oración y oír su Palabra.

Habacuc:

1. Apela a la misericordia de Dios. 3:2

2. Recuerda los hechos poderosos del pasado. 3:3-16

3. Expresa una poderosa confesión de FE. 3:17-19