EN LA AFLICCIÓN ME ALEGRARÉ EN EL SEÑOR (HABACUC 13:16-19)
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Transcript
1 ESCUCHO SU PALABRA (16)
2 EN EL SEÑOR CONFIARÉ (17)
3 EL ES MI SALVACIÓN (18)
4 EL SEÑOR ES FIEL (19)
Introducción
Llegamos al último sermón de esta serie, que nos ha acompañado desde que comenzó el confinamiento hasta hoy. Ya desde Marzo.
Vamos a entrar en esta maravillosa declaración final de la oración de Habacuc. La respuesta de la obra de Dios en la vida de Habacuc, la respuesta de la comunión con Dios, una valiosa enseñanza para nosotros.
Vimos a un Habacuc en el primer capítulo asolado por la perversión del pueblo judío, y clamando a Dios pidiendo que ayudará, pensando que Dios les había olvidado.
Después vimos la respuesta de Dios, que el está obrando y usará un instumento de castigo para los impíos judíos. Después vimos a el lamento de nuevo de Habacucm aunque era un lamento en el cual alababa a Dios.
En el capítulo 2, Habacuc toma la mejor decisión, creo que ahí hay un punto importante, donde Habacuc espera en oración y vela por la respuesta de Dios, Dios dice que no tendrá por inocente al culpable y que el justo por la fe se salvará. Dios no sólo muestra el castigo para sus enemigos, sino el camino para sus escogidos.
Y ya nos encontramos con esta oración que nos ha llevado estás últimas semanas, con la culminación de unos de los pasajes preferidos de los crsitianos en este libro y más conocido, que vamos a analizar.
El climax del cantico de Habacuc, la fe obrada en su corazón, la dependencia y comunión con Dios, el lugar en el cual debemos estar, humillado a Dios.
Entonces, antes la adversidad, ante este mundo, ¿Cómo debemos obrar? Miremos a Habacuc.
1. ESCUCHO SU PALABRA (16)
1. ESCUCHO SU PALABRA (16)
Aquí vemos la respuesta a lo que hizo en el versículo 1-2 de este capítulo.
¿Qué hizo habacuc?
1 Oración del profeta Habacuc, en tono de Sigionot. 2 Oh Señor, he oído lo que se dice de ti y temí. Aviva, oh Señor, tu obra en medio de los años, en medio de los años dala a conocer; en la ira, acuérdate de tener compasión. 3 Dios viene de Temán, y el Santo, del monte Parán. (Selah) Su esplendor cubre los cielos, y de su alabanza está llena la tierra.
Pero vamos más a trás
1 Estaré en mi puesto de guardia, y sobre la fortaleza me pondré; velaré para ver lo que El me dice, y qué he de responder cuando sea reprendido.
Habacuc hizo sabiamente, y es lo que todo cristiano debe hacer en momento de zozobra, no actuar precipitadamente, ni dejarse llevar por las pasiones carnales, sino que escuchó la voz del Señor, la voluntad del Señor y ante este hecho Habacuc y todo aquel que obra así
a) Ante el Señor temo y tiemblo.
2 Oh Señor, he oído lo que se dice de ti y temí. Aviva, oh Señor, tu obra en medio de los años, en medio de los años dala a conocer; en la ira, acuérdate de tener compasión.
Habacuc para expresar su temor al Señor y tu temblor dice, «Oí, y se estremecieron mis entrañas…»
y no sólo por lo que Dios había declarado a Habacuc de que vendría un Juicio, no, sino ese temor al hombre fue trasladado a un temor legítimo y verdadero a Dios, es a él a quien debemos temer.
Seguro que Habacuc podría recordar este salmo.
6 El Señor está a mi favor; no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?
Esto es debido a que Habacuc reconoce a Dios, y que Dios se le ha dado a conocer, y este está en su trono, el sujeta toda las cosas. Ya no dice, temo al hombre o
2 ¿Hasta cuándo, oh Señor, pediré ayuda, y no escucharás, clamaré a ti: ¡Violencia! y no salvarás? 3 ¿Por qué me haces ver la iniquidad, y me haces mirar la opresión? La destrucción y la violencia están delante de mí, hay rencilla y surge discordia.
Sino....
«A tu voz temblaron mis labios», podemos ver que gracias al trato de Dios en la vida de Habacuc, Habacuc ya no teme a las circunstancias, sino que esa fe le hace temer a Dios, eso lo podemos ver porque oró está magistral oración.
El escuchar la voz de Dios, nos hace conocer más a Dios y a su vez, hacer su voluntad y también conocernos mejor a nosotros mismo.
Por lo tanto,
b) Me enseña lo que realmente soy.
La voz del Señor nos hacer ver lo que realmente somos, hace vernos ya no como el centro de la creación, sino como hombres caído por naturaleza, en la cual el pacado mora en nosotros, esto nos hace temblar ante el Dios Santo.
Hace ver la santidad de Dios, su pureza y su justicia, y hace que sin Él nosotros eramos muertos espíritualmente, y esto a su vez, ahora por emdio de Cristo y por Él
4 He aquí el orgulloso: en él, su alma no es recta, mas el justo por su fe vivirá.
… Nos hace aunque temblar, estar confiados en Él.
Y obviamente temblamos porque mientras mas conocemos a Dios más temor debemos tener.
Pero también, tener paz y confianza sin importar la circunstancia.
c) En paz espero la aflicción por venir.
«Tranquilo espero el día de la angustia»
¿No suena esto contradictorio? ¿Angustia… tranquildad?
Yo creo que el ser humano usa poco estas dos palabras juntas para referirse al lo que dice el profeta.
Pues si hermanos, aquel que conoce el Señor, aquel que se conoce un poco, sabe que la confianza debe estar puesta en Dios y no en el hombre, sabe que si,que vendrá angustia, pero sabe también que Dios es fiel, y el le dará paz y aunque muera Dios no le abandonará.
Y esto es inevitable acordarse de Job, su angustia y su fe
15 Aunque El me mate, en El esperaré; pero defenderé mis caminos delante de El.
El poder tener comunión con Dios hace, que como dice el salmista
8 En paz me acostaré y así también dormiré; porque sólo tú, Señor, me haces habitar seguro.
1 El que habita al abrigo del Altísimo morará a la sombra del Omnipotente.
Y por eso podemos enlazar al otro punto:
2. EN EL SEÑOR CONFIARÉ (17)
2. EN EL SEÑOR CONFIARÉ (17)
Vuelvo a recordar a Job
10 Pero él le dijo: Como habla cualquier mujer necia, has hablado. ¿Aceptaremos el bien de Dios y no aceptaremos el mal? En todo esto Job no pecó con sus labios.
En el Señor debe estar puesta nuestra confianza
a) Aunque la naturaleza no acompañe
«Aunque la higuera no eche brotes, ni haya fruto en la viñas»
Aunque vengan tempestades que arrasen la cosecha, aunque hay enfermedades y pandemias que nos mermen y nos hagan vivir una vida distinta y con menos bienes de los que deseamos.
Aunque esto acontezca, nuestra actitud debe estar en confianza en el Señor.
Aunque se caigan gobiernos, aunque seamos perseguidos por el pensamiento “único y pecaminosos en pos de los ídolos de este siglo”, aunque caiga la economía y toda su reserva nacional, ¿Te angustiarás como hace todo aquel que no conoce al Señor? o ¿buscarás del Señor y en el te apoyarás?
b) Aunque no tenga todo lo que quiero
«Aunque falte el producto del olivo y los campos no produzcan alimento»
Una cosa que podemos aprender con esto, es a vivir, sabiendo que dependemos de Dios, muchas veces uno puede tener ideas de lo que quiere hacer, pero quizás, esa no es la voluntad de Dios.
Aprender a vivir en la voluntad de Dios es aprender a estar contento y ser agradecido a Dios, se tenga lo que se tenga, se pierda lo que pierda, se gane lo que se gane. Es vivir en gozo y paz hasta la eternidad.
c) Aunque pierda todo mis bienes
«Aunque falten las ovejas del aprisco y no haya vacas en los establos»
Y esto curiosamente, me hacer recordar de nuevo a Job
21 y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre y desnudo volveré allá. El Señor dio y el Señor quitó; bendito sea el nombre del Señor.
En Dios tenemos todos, sin Dios no tenemos nada.
Esto quiere decir, todo lo que tenemos le pertenece a Dios, es Dios quien nos lo ha dado, por lo tanto, si Dios da, gloria a Dios, si Dios quita, gloria a Dios también.
El triunfo de los Caldeos y Nabucodonosor no era Nabucodonosor, sino era Dios quien se lo permitía.
Por lo tanto, hermanos, tenemos aprender a vivir dependiendo más de Dios en toda circunstancia.
Habacuc, nos enseña eso. Fijaros la que se le venía y esta conquista “de tierra quemada” de los Caldeos iba a suponer todo esto que dice el profeta, la perdida material y de bienes. También iba a suponer el cautiverio y un cambio de vida de lo conocido ha lo desconocido.
El ser humano teme a los cambios y más si va a peor, sabes porque, porque al perder el control temen a lo que le pueda hacer las circunstancia, pero nosotros hermanos, los cristianos, gracias a Cristo, podemos estar tranquilo porque nunca perdemos el control, nunca deberíamos sentir esto, porque nuestra vida está controlada por Dios y es Él, por medio de su espíritu quien nos dirige camino a casa.
Ahora vamos a ver el motivo de la confianza de Habacuc.
3. EL ES MI SALVACIÓN (18)
3. EL ES MI SALVACIÓN (18)
Esta confianza a vemos también en varios más.
1 Entonces Ana oró y dijo: Mi corazón se regocija en el Señor, mi fortaleza en el Señor se exalta; mi boca sin temor habla contra mis enemigos, por cuanto me regocijo en tu salvación.
15 Aunque El me mate, en El esperaré; pero defenderé mis caminos delante de El.
1 Dios es nuestro refugio y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. 2 Por tanto, no temeremos aunque la tierra sufra cambios, y aunque los montes se deslicen al fondo de los mares; 3 aunque bramen y se agiten sus aguas, aunque tiemblen los montes con creciente enojo. (Selah) 4 Hay un río cuyas corrientes alegran la ciudad de Dios, las moradas santas del Altísimo. 5 Dios está en medio de ella, no será sacudida; Dios la ayudará al romper el alba.
10 En gran manera me gozaré en el Señor, mi alma se regocijará en mi Dios; porque El me ha vestido de ropas de salvación, me ha envuelto en manto de justicia como el novio se engalana con una corona, como la novia se adorna con sus joyas.
2 por medio de quien también hemos obtenido entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios. 3 Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia;
a) En esto me alegraré
Después de haber esuchado la voz del Señor, su evangelio, después de estar haber conocido nuestra naturaleza, ponemos nuestra confianza en Dios nuestro salvador por medio de Cristo, ¿Te das cuenta que puedes perder todo, menos este regalo, menos la salvación? Por lo tanto, en esto no alegramos y en el Señor confiamos.
18 Pues considero que los sufrimientos de este tiempo presente no son dignos de ser comparados con la gloria que nos ha de ser revelada.
35 ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada? 36 Tal como está escrito: Por causa tuya somos puestos a muerte todo el dia; somos considerados como ovejas para el matadero. 37 Pero en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. 38 Porque estoy convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni lo presente, ni lo por venir, ni los poderes, 39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
b) El Señor es mi gozo
«Me regocijaré»
4 Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez lo diré: ¡Regocijaos!
Habacuc ha tomado la decisión a la luz tanto de los acontecimientos como de las promesas de Dios. Así que se repite para dar énfasis: me alegraré… me regocijaré. Si hay una diferencia sutil (lo cual es dudoso), “lo primero enfatiza el canto audible de las alabanzas a Dios, mientras que lo segundo insinúa un movimiento físico”.
- Ambos conceptos representan una expresión adecuada de gozo en el SEÑOR y la distinción (que parece particularmente occidental) no se puede garantizar apropiadamente. Habacuc se regocija en el SEÑOR de forma adecuada y natural para un israelita que ha sido liberado de las ataduras del miedo y de la necesidad de entender y explicar el funcionamiento de Dios.
Y esto se debe
c) El Señor es mi salvación
9 mas yo con voz de acción de gracias te ofreceré sacrificios. Lo que prometí, pagaré. La salvación es del Señor.
Cristo pagó el sacrificio.
«Dios de mi salvación»
El profeta con esto, reoconoce que sólo la salvación está en Dios, y sólo por Cristo podemos ser salvos, Dios manifestado a los hombres.
Teniendo la salvación del Señor, tenemos comunión, y teniendo esto, estamos completo aunque lo perdamos todo en la tierra.
19 No os acumuléis tesoros en la tierra, donde la polilla y la herrumbre destruyen, y donde ladrones penetran y roban; 20 sino acumulaos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni la herrumbre destruyen, y donde ladrones no penetran ni roban; 21 porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.
33 Pero buscad primero su reino y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Sólo obtendremos la salvación por medio de Cristo manifestado en su Palabra.
17 Así que la fe viene del oír, y el oír, por la palabra de Cristo.
Solo Cristo
5 Porque hay un solo Dios, y también un solo mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús hombre,
Hermanos, teniendo al comunión Dios como dijo el profeta, podemos tener paz y gozo un en la calamidad.
2 He aquí, Dios es mi salvador, confiaré y no temeré; porque mi fortaleza y mi canción es el Señor Dios, El ha sido mi salvación.
Sabes por qué? Porque no depende de nosotros, sino De Dios.
4. EL SEÑOR ES FIEL (19)
4. EL SEÑOR ES FIEL (19)
Antes pasaremos a analizar el subscrito.
a) Descripción del subscrito
Estas últimas indicaciones, nos hacer recordar que estamos ante un salmo y/o oración que se convirtió seguramente en culto público, entre el sobreescrito, los (Selah) y el subscrito, nos deja prueba de ello.
Cuan importante es alabar ya adorar a Dios por quien es, y por lo que ha hecho, y de esto trata el último punto, el motivo del gozo de Habacuc y su fe.
a) El es mi Dios y mi fortaleza
Podrán venir a conquistarnos, podrán venir a robarnos, podrán venir a llevarnos esclavos, a querer esclavizarnos, pero esto no cambiará quien es Dios y quienes somos nosotros, sus hijos llamados de las tinieblas a la Luz para gloria de Dios.
Por lo tanto, tenemos la confianza que Él es nuestra fortaleza.
Como el pueblo de Israel cantamos y cantaremos un himno de Victoria.
1 Entonces Moisés y los hijos de Israel cantaron este cántico al Señor, y dijeron: Canto al Señor porque ha triunfado gloriosamente; al caballo y a su jinete ha arrojado al mar. 2 Mi fortaleza y mi canción es el Señor, y ha sido para mí salvación; éste es mi Dios, y le glorificaré, el Dios de mi padre, y le ensalzaré. 3 El Señor es fuerte guerrero; el Señor es su nombre.
c) El me mantendrá firme para llegar a la meta
Fiel es Dios
6 estando convencido precisamente de esto: que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Cristo Jesús.
«El ha hecho mis pues como la cierva»
אַיָּלָה [˒ayyalah] cierva.
Que en realidad, también puede ser traducido como corzo, rebeco, cabra.
Viendo el contexto de Habacuc bien se puede referir a la capra sinaítica, es una cabra montesa que vive en la zonas montañosas de la península sanítica, y ella caminan por los desfiladero parada sobre sus pezuñas, apenas nada es un obstáculo para ellas y caminan con seguridad.
Así es con nosotros, gracias a la salvación del Señor, pdoremos caminar en muchos contextos y lugares y situaciones, pero el Señor nos guardará, nos mantendrá firme pase lo que pase hasta llegar a la meta, a casa, a la tierra prometida, a la Eternidad con Dios.
Podemos que el nos hace perseverar y nos preserva. Pues perseveramos por su preservación.
CONCLUSIÓN
Si te pregunto… ¿vives en aflicción? Seguro que me dices que sí, y puedes que no seas optimista con el futuro que viene. Así era el panorama que esperaba Habacuc.
Si, nosotros no nos viene el pueblo Caldeo, pero tenemos un juicio, el Covid-19, el mundo está cambiando, ya no es como el mundo era antes de Marzo del 2020, y puede que vaya a peor. También la iglesia está siendo perseguida por los gobiernos que aprovechando al pandemía, como escusas lo usan para hacer el mal. Somos invadidos y quieren esclavizarnos por ideas que atentan contra la Palabra de Dios.
El panorama para alguien que no tiene al Señor puede que sea aterrador, ciertamente no recuerdo vivir algo tan peligroso como ahora, y no hablo del covid.
Pero si te puedo decir algo, no temas la circunstancia, ni al hombre, teme al Señor. Esto te dará paz y gozo en medio de las situaciones.
Sabiendo que el está con nosotros, el nos salvó, escuchamos su Palabra, nos da fe, El Señor es Fiel.
Hay varias cosas aprendí de Habacuc en este tiempo, y quiero cerrar con ellas.
Dios es Soberano
Dios está por encima de todo y en su trono.
Debemos buscar la voluntad de Dios y anteponerla a la mía.
Debemos ser humilde.
Debemos tener comunión Dios.
Debemos glorificar a Dios en todo momentos sea cual sea la circunstancia y tratar de no renegar, pues así lo quiere Dios.
Debemos alabar a Dios porqué como dice Habacuc 2:4, el nos ha dado la salvación por medio de Cristo, por la fe obrada por el Espíritu Santo, y si tenemos esto, estamos completo aunque todo se caiga. Sabemos que nuestro destino está con Él.
Gracias a Dios por todo.
¡En todo, sólo a Dios al gloria!