El Justo Se Levanta

Proverbios 24:16 — Porque siete veces cae el justo y vuelve a levantarse; mas los impíos caerán en el mar.

Siete veces. No creo que Salomón contó cuántas veces alguien cayó, y no creo que Salomón haya estado buscando un número mágico. Recuerde, esto es un proverbio. Posiblemente se refiere a la idea de “completo”. En otras palabras, decir que cae 7 veces y se vuelve a levantar tiene la idea de que cae un sinfin de veces y se vuelve a levantar.

Otro detalle importante que descubrimos: la manera en que el justo cae es diferente de la manera en que el impío cae. El justo cae sin romperse mientras que el impío cae y se quebranta. Imagine dos vasos que se caen, pero uno se quiebra y el otro no se rompe por nada. Y Dios dice, el justo cae pero no se rompe. Usted y yo podemos pensar que estamos rotos, pero para Dios, usted y yo seguimos intactos.

Y por eso, la pregunta que he estado meditando es: ¿Cómo es que el justo se levanta?

Porque, siendo honesto, hay situaciones y momentos en las que no me quiero levantar o que no le hallo la manera de levantar.

Quiero compartir dos conclusiones a la que llegué tras meditar sobre este versículo.

(1) El justo se levanta por la esperanza bienaventurada; el cielo

En contexto, la razón del porqué el justo cae es porque hay gente maldosa, gente tramposa, gente mentirosa, gente convenenciera y gente que al tratarnos con su egoísmo nos daña.

Hermanos, en el cielo, la ley de Dios se ejecutará a la perfección. Nadie lo dañará, nadie le tratará con intenciones de maldad. Jeremías profetizó que todos conocerán y obedecerán la ley de Dios. Y en ese lugar, nadie lo defraudará, nadie le será deshonesto, nadie le será grosero.

Ustedes y yo actualmente somos ciudadanos del cielo. Es cuestión de tiempo que habitaremos en ese lugar por toda la eternidad.

(2) El justo se levanta porque reconoce que Dios es justo

En contexto, el justo cae por ser tratado mal, de manera injusta, y puede sentir que la vida es injusta. Pero el justo está seguro que Dios es justo. Eso quiere decir que al fin de cuentas, al fin de la situación, al fin de la temporada amarga, quizá, al final de su vida, volteará a ver y se dará cuenta que Dios le fue justo.

Por eso, el justo no se llena de rencor, de odio, con ganas de vengarse. Porque aunque en el presente sienta que el mundo entero esté en su contra, sabe que Dios siempre ejecuta justicia.Por esta razón, debemos actuar que todo va a estar bien (como los papás siempre nos decía), porque para Dios, toda cuenta quedará ajustado.

Ahora, el justo se levanta no necesariamente porque las circunstancias mejoran. Sino que el justo se levanta sin importar las circunstancias. Acuérdese, se levanta por su esperanza en el cielo y por reconocer que Dios es justo.

Nuestros ojos deben estar puestos en Jesús. Jesús desea tener la preeminencia.

¿Cómo se levanta el justo?

Levantarse tiene la idea de enderezar, hacer recto, hacer derecho.

Enderece su esperanza en el cielo y en la justicia de Dios.