Estudio de Filipenses - Estima por los siervos
ESTUDIO DE FILIPENSES • Sermon • Submitted
0 ratings
· 41 viewsPablo tenía hijos espirituales, colaboradores y siervos que colaboraban con él en el ministerio, y recomienda que se los estime y se los reconozca porque están dispuestos a dar la vida por la obra de Cristo.
Notes
Transcript
En esta sección, el apóstol Pablo habla de dos de sus colaboradores, Timoteo y Epafrodito.
En primer lugar habla de Timoteo:
Espero en el Señor Jesús enviaros pronto a Timoteo, para que yo también esté de buen ánimo al saber de vuestro estado;pues a ninguno tengo del mismo ánimo, y que tan sinceramente se interese por vosotros.Porque todos buscan lo suyo propio, no lo que es de Cristo Jesús.Pero ya conocéis los méritos de él, que como hijo a padre ha servido conmigo en el evangelio.Así que a éste espero enviaros, luego que yo vea cómo van mis asuntos;y confío en el Señor que yo también iré pronto a vosotros.
Pablo menciona aquí tres características de Timoteo
Pablo menciona aquí tres características de Timoteo
Timoteo se caracterizó por :
(1) Su identificación con Pablo: “a ninguno tengo del mismo ánimo” o “de iguales sentimientos” a los míos.
En otras palabras, Timoteo era como el “alma gemela” de Pablo.
(2) También se caracterizó, dentro de esa identificación con Pablo, por su genuino interés por la iglesia.
“que tan sinceramente se interese por vosotros”. En este punto Timoteo contrastaba con todos los demás líderes y colaboradores de Pablo, “porque todos buscan lo suyo propio”, o “todos se interesan solo por sí mismos”, y “no lo que es de Cristo Jesús”.
Podemos notar que para Pablo el interés por la iglesia era exactamente igual al interés por Cristo Jesús, y esto lo entendió bien el mismo día de su conversión cuando se enteró que al perseguir a la iglesia estaba persiguiendo a Cristo
(3) Por último, Timoteo se caracterizó por un estilo peculiar de servicio: logró ganar el mérito de servir al lado de Pablo como sirve un hijo a su padre.
“ya conocéis los méritos o “su carácter aprobado” que como hijo a padre ha servido conmigo en el evangelio”. No dijo “me ha servido a mi” sino “ha servido conmigo en el evangelio”.
Luego habla de Epafrodito.
Mas tuve por necesario enviaros a Epafrodito, mi hermano y colaborador y compañero de milicia, vuestro mensajero, y ministrador de mis necesidades; porque él tenía gran deseo de veros a todos vosotros, y gravemente se angustió porque habíais oído que había enfermado. Pues en verdad estuvo enfermo, a punto de morir; pero Dios tuvo misericordia de él, y no solamente de él, sino también de mí, para que yo no tuviese tristeza sobre tristeza.
Pablo mencionó cinco cosas sobre Epafrodito
Pablo mencionó cinco cosas sobre Epafrodito
Aunque sabemos muy poco de Epafrodito, y menos que su nombre griego significa “apetecible”, podemos descubrir por la descripción de Pablo que:
(1) Epafrodito era miembro de la iglesia de Filipos.
Dado que Pablo lo llama “mi hermano” y otros traducen “vuestro hermano”, y literalmente dice “el hermano”.
(2) Era “el colaborador”, o “ayudante, cooperador, compañero de trabajo”, del ministerio apostólico de Pablo
(3) Además, Epafrodito fue “el compañero de armas” de Pablo, o “compañero de milicia” un camarada.
Es decir, aquel que está en el mismo batallón o cuerpo del ejército. Es probable que Epafrodito mostrara siempre un temple semejante a la de un soldado que sabe obedecer órdenes y enfrentar con valentía las adversidades.
(4) También Epafrodito fue un apóstol (apostolon, apóstolon) o mensajero, enviado de la iglesia.
(a) Los doce apóstoles, que fue de una categoría única y exclusiva, sobre los cuales estaba fundada la iglesia:
edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo,
(b) Los apóstoles de las iglesias, es decir, los mensajeros de las iglesias, que llevaban a cabo una función completamente diferente a los dos primeros grupos. Este último grupo no era referente como autoridad última para resolver problemas o establecer y confirmar una doctrina. Simplemente cumplían un pedido o mandato de una iglesia local.
Si no tenemos en claro esta distinción, podemos atribuir una autoridad o una prerrogativa a los que hoy se denominan “apóstoles” que en realidad no la tienen.
(5) Por último, Epafrodito fue “el ministro”, el “ministrador de mis necesidades”, o más bien “un compañero de fatigas”.
Pablo lo llama “liturgos” (leitourgoV) de donde viene la palabra “liturgia”. El liturgos era el que servía en el templo, el que oficiaba el servicio y ofrecía las ofrendas. Su oficio era sagrado. La iglesia de Filipos había enviado una ofrenda para Pablo por medio de Epafrodito, y es por eso que Pablo lo describe como un “ministrador” de sus necesidades.
¿Por qué Epafrodito se angustió tanto?
¿Por qué Epafrodito se angustió tanto?
Epafrodito no se angustió por haberse enfermado, a punto de morir, sino porque la iglesia en Filipos se había enterado que él estuvo enfermo. “gravemente se angustió porque habíais oído que había enfermado”.
Tal era la sensibilidad y amor a su iglesia de este colaborador de Pablo que apenas podía soportar la idea que sus hermanos estarían preocupados por él.
Aquí vemos un principio espiritual que debemos rescatar: El principio de guardar la paz y la tranquilidad de la iglesia, y no sobrecargarla de preocupaciones.
Esto lo tenía bien claro Pablo que trataba siempre de alentar y animar a las iglesias cuando él estaba sufriendo, por ejemplo:
a fin de que nadie se inquiete por estas tribulaciones; porque vosotros mismos sabéis que para esto estamos puestos.
Y cuando escribió a Timoteo dio una serie de exhortaciones sobre la oración a favor de las autoridades “para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad” (1 Timoteo 2:2)
Por lo tanto, en lo que dependa de nosotros, debemos guardarnos de comentarios que puedan intranquilizar o perturbar a nuestros hermanos en la fe.
Así que le envío con mayor solicitud, para que al verle de nuevo, os gocéis, y yo esté con menos tristeza. Recibidle, pues, en el Señor, con todo gozo, y tened en estima a los que son como él; porque por la obra de Cristo estuvo próximo a la muerte, exponiendo su vida para suplir lo que faltaba en vuestro servicio por mí.
Dos cosas pide Pablo a la iglesia de Filipos en relación a Epafrodito
Dos cosas pide Pablo a la iglesia de Filipos en relación a Epafrodito
Les pide que:
(1) Reciban a Epafrodito con todo gozo.
La versión Latinoamericana dice “Celebren, pues, su llegada y alégrense en el Señor”. Es muy probable que regreso prematuro de Epafrodito a causa de su enfermedad produjera en él un sentimiento de fracaso, porque viajó a Roma para servir con Pablo por mucho tiempo y fue obligado por Pablo a regresar. Pero una iglesia que celebra con gozo un regreso es lo más reconfortante para el alma frustrada.
(2) En segundo lugar, les pide que lo tengan en “estima”.
Es decir, que honren a los que son como Epafrodito “y tened en estima a los que son como él” ¿por qué? Porque “por la causa de Cristo ha estado a punto de morir, exponiendo su vida para prestarme en lugar suyo el servicio que ustedes no podían” (NBE) Al recordar a Epafrodito ¡cuántos como él en nuestras iglesias deberían recibir el reconocimiento que merecen por su trabajo!
Ellos realizan funciones como delegados, misioneros, mensajeros, consejeros, asistentes de los enfermos, sostén de los débiles y mil tareas más.
Nuestros “Epafroditos” deben ser recibidos con una gran celebración y con gozo; deben ser estimados por toda la iglesia para que sirvan de ejemplo y de inspiración a todas las generaciones.
CONCLUSIÓN
CONCLUSIÓN
Tanto Timoteo como Epafrodito tuvieron en común su amor a la iglesia. Timoteo se destacó por su interés por los hermanos, anteponiendo la necesidad de la iglesia a la suya.
Y Epafrodito se destacó no solo por su alto sentido del deber, arriesgando aun su vida, sino también por su angustia por la iglesia para que no se preocupen o inquieten.
Teniendo estos dos ejemplos de vida, podríamos pensar en cómo estamos sirviendo nosotros.
Por otra parte pensar también en aquellos “Epafroditos” que están hoy entre nosotros, que están trabajando arduamente para el Señor y para la iglesia, y podríamos enviarles un mensaje de agradecimiento y reconocimiento por su trabajo.
Y os instamos, hermanos, a que respetéis a los que trabajan entre vosotros, y tienen cuidado de vosotros en el Señor, y os amonestan;