La Centralidad de las Escrituras.

Introducción:

Hermanos, toda iglesia bíblica que desea ser usada por Dios como un instrumento de bendición debe dedicarse a: el estudio serio y sistemático de la Biblia, (la Palabra de Dios); y a la proclamación; es decir predicación del mensaje de Salvación: el Evangelio que Dios nos ha encomendado.

Estas dos actividades son columnas vitales que sostienen la vida y el ministerio de una iglesia.

Vayamos a 2Tim. 3:16-17.

Estos versículos son un impactante testimonio en cuanto al “origen divino” de las Escrituras.

Ellos son indispensables para sustentar nuestra doctrina de la “inspiración” de las Escrituras. Y así ver la Biblia como Palabra de Dios.

Ahora; en estos versículos el apóstol Pablo también resalta la Suficiencia de las Escrituras: al referirse a su poder y a su utilidad.

Las Escrituras al ser “Palabra de Dios” contienen su poder y este obra a través de ellas en nuestras vidas.

La Historia del Cristianismo da testimonio una y otra vez de este Poder y Suficiencia de las Escrituras:

La historia cuenta de hombres que encontraron en la Biblia y en la lectura de esta, lo que buscaban insaciablemente en la filosofía, y la religión de su tiempo pero que no encontraban (Justino Mártir).

Otros vivían atormentados por sus pecados y el inminente juicio de Dios que tendrían que enfrentar, y solo a través de las Escrituras Dios les concedió la paz y la salvación en Cristo que tanto anhelaban (Martín Lutero).

Y aun a todos estos miles de testimonios podemos añadir los nuestros. Cuando Dios por medio de su Palabra, nos a sustentado, consolado, guiado, fortalecido y hasta corregido.

Es ante este Poder y Suficiencia de las Escrituras como Palabra de Dios, que una iglesia y cada cristiano debe proponerse hacer de ella algo central en su vida y en su ministerio.

El problema que muchos cristianos e iglesias tenemos es que comenzamos a poner a un lado la Palabra de Dios y a depender de otras cosas, como experiencias, visiones, sueños, tradiciones olvidándonos que ellas son Toda Suficientes para ayudarnos a conocer a Dios y caminar con El.

Entonces el reto para toda iglesia y cada creyente es el de hacer de las Escrituras algo Central/de Prioridad tanto en su vida como en su ministerio.

Cuando el apóstol Pablo escribe esta carta desde la prisión, en su segundo encarcelamiento al joven pastor Timoteo. Este enfrentaba muchos peligros en su ministerio. Y ¿Cual fue su concejo en estos versículos?

Que no olvidara lo Poderosa y lo Suficiente que eran las Escrituras para obrar tanto en su vida personal como en su ministerio.

Hermanos me gustaría, darles Hoy a la luz de este capitulo 3 (en 2 a Timoteo) y de estos versículos. DOS razones de porque las Escrituras deben ser centrales en nuestras vidas y en el ministerio de nuestra iglesia.

I. Las Escrituras deben ser centrales porque ellas son: Suficientes para guardarnos de la influencia y el error de falsos maestros.

Como ya hemos dicho en estos versículos Pablo resalta tanto el Poder como la Suficiencia de las Escrituras.

Pero ¿Cómo fue que llego a este tema?

Las palabras del apóstol Pablo en este versículo fueron dichas dentro del “contexto” de todo el capítulo 3 y 4.

El capítulo 3 inicia con la advertencia del apóstol Pablo sobre los “tiempos peligrosos” que se vienen para la iglesia; tiempos que serán identificados por hombres de carácter perversos que enseñaran el error y desviaran a muchos de la verdad.

Ahora; en este capitulo Pablo no solo advierte y describe el carácter perverso que acompañara a los hombres de estos “últimos tiempos” (que eran ya los tiempos de Timoteo y los nuestros) sino que además en el afirma que su joven discípulo Timoteo era y debería seguir siendo completamente diferente a ellos como un verdadero creyente (vs.10, 14).

Este capítulo se convierte entonces en un marcado contraste entre el “carácter” perverso de los falsos maestro y el de un verdadero creyente.

[Observar vs.13 el engaño de estos hombres y el imperativo vs.14 a estar firme] Es entonces a la luz del llamado del apóstol Pablo a Timoteo a que no se deje arrastrar por el error y a que se mantenga firme, y constante en la verdad (vs.14); que Pablo introduce el tema de la Suficiencia de las Escrituras (vs.15-17).

Pablo confiaba tanto en el poder que hay en la Palabra de Dios; que él está seguro de que este poder puede mantener a Timoteo firme en la verdad sin que este sea movido o arrastrado por el error de los falsos maestros.

Es esta confianza del apóstol Pablo en el poder de la Palabra de Dios; la que hoy nos lleva a nosotros a afirmar como iglesia; La Suficiencia y la Centralidad de las Escrituras en nuestras vidas como creyentes.

II. Las Escrituras deben ser centrales porque ellas son: Suficientes para obrar en nosotros y equiparnos.

(vs.16-17). La Suficiencia de las Escrituras en estos versículos esta evidenciada en que ellas son “Inspiradas” por Dios y “Usadas” por El para obrar en nuestras vidas.

SON Inspiradas por Dios: (Theopneustos) vs.16a

Pablo combina dos palabras: Dios y respiración. Mas específicamente “exhalar”.

Esta palabra comunica la idea de: Exhalada, Soplada, Impartida por Dios.

El énfasis recae en la Autoria de Dios, es decir como el autor de su Palabra.

Para Pablo era muy importante dejar marcada la imagen en sus lectores de que esta Palabra fue soplada por Dios. Pero por que?

En Genesis 1 Dios creo todo con el poder de su Palabra.

Y en Genesis 2 soplo en el hombre “aliento”/soplo de vida. Y este fue un ser viviente.

En Ez. 37 Dios da vida a un valle de huesos secos al ordenar al profeta que hable su Palabra sobre ellos y El enviar su viento sobre los huesos.

Las palabras de Jesus son “espíritu” y son “vida” Jn. 6:63. En el mismo capitulo Pedro dice: A quien iremos tu tienes palabras de vida eterna? (vs.68).

Solo la Palabra que ha sido exhalada, comunicada por Dios contienen su Poder y su Vida.

SON Útiles: vs.16b-17.

Ellas no solo contienen el Poder y la Vida de Dios. Sino que por el Espíritu la imparten al corazón del creyente obrando en este poderosamente y transformándolo.

Enseñar: la verdad de Dios que en mi ceguera no conozco.

Redargüir: apuntar a esas áreas de pecado que en mi soberbia no quiero ver.

Corregir: Devolverme al diseño original que en mi extravió y rebelión perdí o abandone.

Instruir en justicia: ejemplos de justicia. Aquellos que ahora debo admirar e imitar.

Todo esto Dios lo hace por medio de su Palabra con un solo fin; Equiparnos para hacer su obra y ser un testimonio de su poder en este mundo.