FIRMES EN LA FE

1 Pedro  •  Sermon  •  Submitted
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Introducción

Si te quedaría solo un mes de vida ¿que es lo que harías?
Te das en el abandono de sufrir que vas a morir pronto y pasas horas en tu habitación lamentando que ya no podrás cumplir con tus metas, ya podrás ver a tus seres queridos, que va ser de tu negocio, que va ser de tu casa. ¿Pasarías tus últimos días lamentando por las cosas materiales y pasajeras?
Aprovechas cada semana, día, cada hora, cada instante para disfrutar de la vida dando gloria a Dios ¿es posible esto en medio del dolor? Sí!
Primera de Pedro trata de humillar tu mente. No se trata de calmarse, sino de aprender a descansar en la bondad de Dios. En esta carta, Pedro nos dice cómo soportar las luchas, mostrar amor verdadero a los demás, seguir el liderazgo y liderar a otros. (John D. Barry, 1 Peter: We are Refugees)
Dios Sabe quienes somos y qué es lo que necesitamos para seguir firmes en la fe en los momentos de dificultad.
La carta de 1 Pedro está dirigida a personas que están pasando momentos muy difíciles. Gente que tuvo que dejar su casa, su familia, sus negocios, su cultura y sufrir un cambio rotundo en sus vidas. No era nada fácil!
¿cómo les ayudaría a ellos en su vida saber todo eso? Primero debemos entender quienes somos, cual es el propósito de nuestra existencia, cómo debemos vivir en este mundo de pecado. En otras palabras debemos vivir nuestra identidad en Cristo y eso le da sentido a nuestra vida bajo cualquier situación, les motiva a seguir firmes en el evangelio.
¿Cómo podían vivir firmes en la fe? En esta ocasión Dios los fortalece a los expatriados con las siguientes declaraciones:
Fueron elegidos por el Padre
Santificados por el Espíritu Santo
Redimidos por la sangre de Cristo
Oración
El tema de esta mañana es

I. FUIMOS ELEGIDOS POR EL PADRE

Dios nos eligió
Nos eligió antes de la fundación del mundo 1 Pe 2:9; Ef 1:4; Ro 8:29 ¿quien escogió a quien?
Cristo fue destinado a la cruz antes de la creación del mundo en favor nuestro 1 Pe 1.20.
Nos eligió aún conociendo quienes éramos.
presciencia” saber por anticipado.
Dios conocía que éramos pecadores -idólatras, mentirosos, fornicarios, adúlteros, ladrones, estafadores, etc. Dios conoce aún lo más oculto de nosotros.
Dios sabía quienes eramos y a pesar de ello, nos eligió para ser sus hijos.
Fuimos elegidos para los propósitos de Dios
Ser sus hijos
Ser sus siervos
Vivir para la gloria de Dios -Ef 1:6

La elección de Dios es parte de su plan predeterminado, y no se basa en ningún mérito de aquellos que son elegidos, sino solamente en su gracia y amor hacia ellos desde antes de su creación.

II. FUIMOS SANTIFICADOS POR EL ESPÍRITU SANTO

El hombre por su propia cuenta no puede presentarse ante Dios
Por que es pecador -Rom 3:23
Dios es Santo -el lugar santísimo.
Por medio de la obra del Espíritu Santo podemos estar con Dios.
Es el Espíritu Santo quien convence al hombre de sus pecados Jn 16:8 -convencerá, culpar de pecado.
Guía a la verdad Jn 16:8; 14:26.
Nos santifica 1 Co 6:11; 2 Tes 2:13
Somos santificados para obedecer v.2c -Rom 16:26 cp. Rom 3:10-18
Somos santificados para servir

III. FUIMOS REDIMIDOS POR LA SANGRE DE CRISTO

La expiación en el AT solo purificaba momentáneamente.
Se necesitaba hacer cada año.
Es una solo vez para siempre Heb 9:12
La sangre de Cristo nos redime-limpia de todo pecado Ef 1:7
CONCLUSIÓN
Es por el amor y el poder divino que somos salvos, hijos de Dios. Es una obra completa de Dios en favor de quienes, sin merecerlo, fuimos escogidos por Dios.
La palabra “expatriado” nos dice que ellos eran temporalmente forasteros.
“los forasteros plantan sus vidas en un nuevo país pero conservan el carácter de su hogar original” Nuestro hogar es con Dios.
Ilustración: Las penurias de llegar a Machupicchu pero el gozo que da saber lo que sucederá cuando llegaremos.
En este mundo estamos como forasteros, entonces cualquier dolor es momentáneo hasta que lleguemos a casa para disfrutar de nuestro Padre Dios y de nuestra familia espiritual.
APLICACIÓN:
Si eres hijo de Dios, mantén firme la fe que un día, con el poder de Dios, hemos creído. Dios está con sus hijos acompañándonos en este peregrinaje hasta que seamos libres de todo dolor. No nos soltemos de la mano de Dios, sigamos firme, sigamos firme, adelante.
Cree en el Señor Jesucristo como tu Señor y Salvador. El murió en la cruz para darte una vida con propósito. Un propósito que va más allá de nuestras situaciones del presente. Dios nos salva para disfrutar de Él, hoy, mañana y por toda la eternidad.
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