Episodio 18 La Peregrinación

Serie la historia bíblica de la redención- A.T Episodio 18 La Peregrinación

Tema: La Peregrinación en el desierto

Texto: Números 10:11-13, 33-36

Y sucedió que en el año segundo, en el mes segundo, el día veinte del mes, la nube se levantó de sobre el tabernáculo del testimonio; y los hijos de Israel partieron, según su orden de marcha, del desierto de Sinaí. Y la nube se detuvo en el desierto de Parán. Así partieron la primera vez conforme al mandamiento del S EÑOR por medio de Moisés.

Así partieron desde el monte del S EÑOR tres días de camino, y el arca del pacto del S EÑOR iba delante de ellos por los tres días, buscándoles un lugar dónde descansar. Y la nube del S EÑOR iba sobre ellos de día desde que partieron del campamento. Y sucedía que cuando el arca se ponía en marcha, Moisés decía: ¡Levántate, oh S EÑOR! y sean dispersados tus enemigos, huyan de tu presencia los que te aborrecen. Y cuando el arca descansaba, él decía: Vuelve, oh S EÑOR, a los millares de millares de Israel.”

Números 10:11-13, 33-36

Desarrollo

Números es el título del cuarto libro del AT. El libro de los Números relata una fase crucial del viaje de Israel por el desierto cuando pasó de una vida de esclavitud en la tierra de Egipto a la tierra de la promesa en Canaán.[1] En la tradición hebrea, el nombre del libro no es Números sino “En el desierto”. Como sucede con otros libros del Pentateuco, se emplea una palabra o frase significativa de la primera línea del libro como título del mismo. Este título hace hincapié en el desierto como marco en el que se desarrolla el libro, con Israel viajando desde un gran imperio civilizado como es Egipto a su hogar *prometido en Canaán.[2] el desierto nunca es un lugar ideal para que vivan los humanos. Es un lugar de caos, amenaza, peligro y muerte, y por tanto un lugar que debe evitarse. Pero cuando uno se ve forzado a soportar el desierto durante un tiempo, como le ocurre a Israel en el libro de los Números, se puede experimentar como un lugar de maduración y aprendizaje o como un sitio de desintegración y muerte.[3] El libro de Números presenta un segmento crucial de treinta y nueve años de la historia de este pueblo del pacto. El registro histórico de este libro abarca los años que transcurrieron desde cuando los israelitas acamparon en el monte Sinaí hasta cuando acamparon en las llanuras que están al oriente del río Jordán, una generación después.

Nos introduciremos en una breve mirada a esta peregrinación resaltando algunas verdades teológicas y advertencias Paulinas a observar la peregrinación de Israel con un cuidado tal que no repitamos nosotros la historia. Permítame introducirles con esa advertencia:

'Porque no quiero que ignoréis, hermanos, que nuestros padres todos estuvieron bajo la nube y todos pasaron por el mar; y en Moisés todos fueron bautizados en la nube y en el mar; y todos comieron el mismo alimento espiritual; y todos bebieron la misma bebida espiritual, porque bebían de una roca espiritual que los seguía; y la roca era Cristo. Sin embargo, Dios no se agradó de la mayor parte de ellos, pues quedaron tendidos en el desierto. Estas cosas sucedieron como ejemplo para nosotros, a fin de que no codiciemos lo malo, como ellos lo codiciaron. No seáis, pues, idólatras, como fueron algunos de ellos, según está escrito: E l pueblo se sentó a comer y a beber , y se levantó a jugar . Ni forniquemos, como algunos de ellos fornicaron, y en un día cayeron veintitrés mil. Ni provoquemos al Señor, como algunos de ellos le provocaron, y fueron destruidos por las serpientes. Ni murmuréis, como algunos de ellos murmuraron, y fueron destruidos por el destructor. Estas cosas les sucedieron como ejemplo, y fueron escritas como enseñanza para nosotros, para quienes ha llegado el fin de los siglos. Por tanto, el que cree que está firme, tenga cuidado, no sea que caiga. No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea común a los hombres; y fiel es Dios, que no permitirá que vosotros seáis tentados más allá de lo que podéis soportar, sino que con la tentación proveerá también la vía de escape, a fin de que podáis resistir la. '

1 corintios 10:1-13

I. Murmuración y castigo (cap. 11).

Mientras que al Israel que está murmurando a tan solo días de haber salido de Egipto, si educación religiosa, sin un conocimiento pleno del Dios que los ha sacada de allí y con hábitos y costumbres egipcia, se les muestra la gloria de Dios con él envió del mana. El ahora Israel con veintiséis meses, con una ley, una ordenanza del culto, una revelación y manifestación del Dios santo en el monte y ahora en el tabernáculo, ya no son tratados de la misma manera, pues ahora ellos son responsables de vivir y estar a la altura de un comportamiento del Dios al que ellos sirven.

II. Ratificación del orden de autoridad y funciones del sacerdocio de Aaron y medios de subsistencia a través del diezmo, la ofrenda, los furtos de la tierra. Cap. 18

'Entonces el Señor dijo a Aarón: Tú y tus hijos, y tu casa paterna contigo, llevaréis la culpa en relación con el santuario; y tú y tus hijos contigo llevaréis la culpa en relación con vuestro sacerdocio. '

Números 18:1

Una de las importantes enseñanzas a resaltar en este libro y en especial en este pasaje, es que mientras Aaron tiene una función de la ordenanza del culto y su desempeño, sin el esta sujetado a Moisés y las directrices de este.

III. el envío de los espías tiempo del reconocimiento de la tierra y el informe cap. (13)

“Y volvieron de reconocer la tierra al cabo de cuarenta días, y fueron y se presentaron a Moisés y a Aarón, y a toda la congregación de los hijos de Israel en el desierto de Parán, en Cades; y les dieron un informe a ellos y a toda la congregación, y les enseñaron el fruto de la tierra.”

Números 13:25-26 LBLA

Dos informes uno fatalista y uno esperanzados.

i. El Informe fatalista

I. ‘Y le contaron a Moisés, y le dijeron: Fuimos a la tierra adonde nos enviaste; ciertamente mana leche y miel, y este es el fruto de ella. Solo que es fuerte el pueblo que habita en la tierra, y las ciudades, fortificadas y muy grandes; y además vimos allí a los descendientes de Anac. Amalec habita en la tierra del Neguev, y los hititas, los jebuseos y los amorreos habitan en la región montañosa, y los cananeos habitan junto al mar y a la ribera del Jordán. Y dieron un mal informe a los hijos de Israel de la tierra que habían reconocido, diciendo: La tierra por la que hemos ido para reconocerla es una tierra que devora a sus habitantes, y toda la gente que vimos en ella son hombres de gran estatura. Vimos allí también a los gigantes (los hijos de Anac son parte de la raza de los gigantes); y a nosotros nos pareció que éramos como langostas; y así parecíamos ante sus ojos.’ Números 13:27-29,32-33

Este es un lenguaje que es el resultado de mirar las circunstancias antes de mirar al Dios que esta al control de las circunstancias y creer, es esto un acto que desagrada a Dios y Pablo afirma diciendo, “de la mayoría de ellos no se agradó a Dios y por eso murieron en el desierto”. Si vamos a abrazar el camino del Señor debemos hacerlo con una confianza absoluta, que el esta a cargo de todo en nuestras vidas y que Él sabe que es lo mejor para nosotros.

ii. El informe esperanzador.

'Entonces Caleb calmó al pueblo delante de Moisés, y dijo: Debemos ciertamente subir y tomar posesión de ella, porque sin duda la conquistaremos. Pero los hombres que habían subido con él dijeron: No podemos subir contra ese pueblo, porque es más fuerte que nosotros. 'Números 13:30-31

El informe esperanzador es uno que trae calma, pero que se enfrentará a oposición, será la minoría y no la mayoría.

El informe esperanzador no se basa en fuerzas humanas.

'Y Josué, hijo de Nun, y Caleb, hijo de Jefone, que eran de los que habían reconocido la tierra, rasgaron sus vestidos; y hablaron a toda la congregación de los hijos de Israel, diciendo: La tierra por la que pasamos para reconocerla es una tierra buena en gran manera. Si el Señor se agrada de nosotros, nos llevará a esa tierra y nos la dará; es una tierra que mana leche y miel. solo que no os rebeléis contra el Señor, ni tengáis miedo de la gente de la tierra, pues serán presa nuestra. Su protección les ha sido quitada, y el Señor está con nosotros; no les tengáis miedo. ' Números 14:6-9

El informe esperanzador no se basa en lo que ven nuestros ojos sino en un acto de favor misericorde y de agrado Divino. Tenemos la responsabilidad como predicadores y ustedes como asamblea de quitarnos de nuestra mente cualquier vestigio que nos haga pensar que Dios está en deuda con nosotros o que Dios debe comportarse de tal o cual forma. Esta sociedad ha estado ofendiendo a Dios de toda forma y practica pecaminosa posible, no solo por desconocimiento, sino que lo que es peor aun con conocimiento de Dios.

Conclusión

La peregrinación de Israel fue un ejemplo, que hoy la iglesia tiene en este peregrinar en la tierra hacia la Canaán celestial. Al igual que el Israel como descendientes terrenales de Abram, la iglesia como descendientes espirituales, no estamos exentos de sufrimientos, necesidades y pruebas mientras llegamos finalmente a nuestra patria celeste, sea por medio de la muerte o por medio del rapto de la iglesia.

[1] Olson, D. T. (2012). NÚMEROS, LIBRO DE LOS. En T. D. Alexander & D. W. Baker (Eds.), R. Gómez Pons (Trad.), Diccionario del Antiguo Testamento: Pentateuco (p. 601). Barcelona, España: Editorial CLIE.

[2] Olson, D. T. (2012). NÚMEROS, LIBRO DE LOS. En T. D. Alexander & D. W. Baker (Eds.), R. Gómez Pons (Trad.), Diccionario del Antiguo Testamento: Pentateuco (p. 601). Barcelona, España: Editorial CLIE.

[3] Olson, D. T. (2012). NÚMEROS, LIBRO DE LOS. En T. D. Alexander & D. W. Baker (Eds.), R. Gómez Pons (Trad.), Diccionario del Antiguo Testamento: Pentateuco (p. 601). Barcelona, España: Editorial CLIE.