Episodio 19 La Peregrinación en el desierto parte 2

Serie la historia bíblica de la redención- A.T Episodio 19 La Peregrinación

Tema: La Peregrinación en el desierto

Texto: Números 6:22-27

22 Entonces habló el Señor a Moisés, diciendo: 23 Habla a Aarón y a sus hijos, y diles: “Así bendeciréis a los hijos de Israel. Les diréis: 24 ‘El Señor te bendiga y te guarde; 25 el Señor haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; 26 el Señor alce sobre ti su rostro, y te dé paz.’” 27 Así invocarán mi nombre sobre los hijos de Israel, y yo los bendeciré[1]

Números 6:22-27

Y acamparon junto al Jordán, desde Bet-jesimot hasta Abel-sitim, en las llanuras de Moab. 50 Entonces habló el Señor a Moisés en las llanuras de Moab, junto al Jordán, frente a Jericó, diciendo: 51 Habla a los hijos de Israel, y diles: “Cuando crucéis el Jordán a la tierra de Canaán, 52 expulsaréis a todos los habitantes de la tierra delante de vosotros, y destruiréis todas sus piedras grabadas, y destruiréis todas sus imágenes fundidas, y demoleréis todos sus lugares altos; 53 y tomaréis posesión de la tierra y habitaréis en ella, porque os he dado la tierra para que la poseáis. 54 “Y heredaréis la tierra por sorteo, por vuestras familias; a las más grandes daréis más heredad, y a las más pequeñas daréis menos heredad. Donde la suerte caiga a cada uno, eso será suyo. Heredaréis conforme a las tribus de vuestros padres. 55 “Pero si no expulsáis de delante de vosotros a los habitantes de la tierra, entonces sucederá que los que de ellos dejéis serán como aguijones en vuestros ojos y como espinas en vuestros costados, y os hostigarán en la tierra en que habitéis. 56 “Y sucederá que como pienso hacerles a ellos, os haré a vosotros.”[2]

Nm 33.49–56)

Desarrollo

La escena que abre el libro de Números ocurre diez meses y medio después de la llegada del pueblo al monte Sinaí. Esto fue un mes después de la terminación del tabernáculo (Ex. 40:1–33), y poco más de un año del comienzo del éxodo. [3] Números es el relato de las consecuencias de los israelitas en el desierto durante cuarenta años. A Ellos les fue prometida una tierra, pero antes de entrar allí, estuvieron 10 meses y 20 días en el desierto del Sinaí y al pie del monte Sinaí, siendo educados, instruidos, organizando todos los rituales del culto, los asuntos jurídicos, civiles, constitucionales y religiosos de la nación. Y cuando están preparados y consientes de las leyes del Señor, entonces Moisés envía a reconocer la tierra, y doce espías son enviados a Canaán. (aquí tenemos un principio bíblico importante, la verdadera bendición, no es primero económica, es primero salvífica, santificadora, con una alta conciencia del carácter santo de Dios y sus exigencias, para poder atrevernos a llamarle nuestro Dios y considerarnos nosotros como su pueblo). Pero el reporte del 84% de los espías era desalentador. Estos espías no eran gente común, eran jefes según Num. 13:2b “enviarás un hombre de cada una de las tribus de sus padres, cada uno de ellos jefe entre ellos.” [4]. solo un 16% creyó al Señor, sin embargo eso no fue suficiente y como consecuencia ellos tuvieron que estar 40 años en el desierto en lugar de un poco menos de dos años. un total de treinta y ocho años adicional en el desierto le siguen a este evento de rebeldía contra Dios. Desde el inicio de la travesía Egipto-Canaán, Dios esta llevando Israel por un desierto, de forma intencional, Él quiere que Israel, conozca a su Dios como uno que actúa y esta al control en medio del sufrimiento.

'Y te acordarás de todo el camino por donde el Señor tu Dios te ha traído por el desierto durante estos cuarenta años, para humillarte, probándote, a fin de saber lo que había en tu corazón, si guardarías o no sus mandamientos. '

Deuteronomio 8:2

I. Las implicaciones de la desobediencia (cap. 14: 30,33-34).

'De cierto que vosotros no entraréis en la tierra en la cual juré estableceros, excepto Caleb, hijo de Jefone, y Josué, hijo de Nun. Sin embargo, vuestros pequeños, de quienes dijisteis que serían presa del enemigo a ellos los introduciré, y conocerán la tierra que vosotros habéis despreciado. Y vuestros hijos serán pastores por cuarenta años en el desierto, y sufrirán por vuestra infidelidad, hasta que vuestros cadáveres queden en el desierto. Según el número de los días que reconocisteis la tierra, cuarenta días, por cada día llevaréis vuestra culpa un año, hasta cuarenta años, y conoceréis mi enemistad. '

Números 14:30-31,33-34

Tenemos aquí una consecuencia por el pecado con unas implicaciones de transcendencias histórica, 600 mil salieron de Egipto hacia Canaán, sin contar las mujeres y los niños. Para ser un poco conservador, digamos que son 1.800.000 mil, de los cuales Dios ha dicho solo los niños entrarán, es decir que solamente 600 mil entrarían, lo que significa que durante cuarenta años ellos sufrirían la perdida de sus seres queridos a escalas alarmantes, estamos hablando de una cantidad de 82 muertes por día.

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II. En las orillas del jordán en la tierra de Moab. Cap. (Nm 33.49–56)

Esta es la segunda generación de los salidos de Egipto, con un Moisés que pronto los dejará. Y dará inicio la toma, conquista y posesión de la tierra de Canaán, un pueblo con heridas muy profundas y con una

conciencia de Dios muy distinta de sus antepasados. con responsabilidades que deben cumplir si desean contar con la bendición de Dios y tener paz en la tierra.

III. El significado de la bendición sacerdotal cap. (6: 22-27)

Cuando estábamos tratando el tema sobre los patriarcas de Israel, pueden recordar bien como esta bendición era tan importante y como Esaú la vendió y despreció y nunca la pudo recuperar aunque la buscó con lágrimas. Ahora deben notar como de forma progresiva la revelación de Dios va trasladando ciertas tradiciones centralizándolas y dándolas al ejercicio sacerdotal. Ahora bendecir en el libro de números es un oficio sacerdotal y este debía declararla a toda la asamblea, pero cada individuo era responsable colectiva e individualmente. Distando mucho de los conceptos equívocos donde pareciera ser que no importa como vivamos nuestras vidas, si tengo la bendición de una autoridad espiritual, lo demás es irrelevante.

Ahora estos versículos de número 6, especialmente del 24-26, se conocen en la literatura hebrea como paralelismos sinónimos; es un tipo de escritura donde la segunda línea repite el pensamiento de la primera línea con diferentes palabras, por eso leemos:

24“El Señor te bendiga y te guarde;

25el Señor haga resplandecer su rostro sobre ti,

y tenga de ti misericordia;

26el Señor alce sobre ti su rostro,

y te dé paz” ».

Num. 6:24-26

i. 24“El Señor te bendiga y te guarde;

El Señor te bendiga y te guarde;

¿qué significa ser bendecido en Israel?

para un judío la bendición de Dios no es entendida en el mismo contexto de los movimientos de la iglesia occidental, donde la bendición está asociada a la adquisición de bienes materiales. Para un judío la bendición; es identificada en términos de la proximidad que uno disfruta del rostro de Dios, Es mirar al rostro de Dios, para que la luz de su rostro este brillando sobre ti. Es lo que los reformadores llamaron, “Coran Deo”, es un vivir delante del rostro de Dios de tal manera que tu bendición es primeramente espiritual y eres guardado por un Dios todopoderoso. Lo contrario a la bendición Sería entonces la maldición, y la maldición es entonces todo lo contrario, es que el rostro de Dios sea quitado, que no resplandezca, que el Señor se aleje de ti, que no tenga misericordia, que no alce su rostro sobre ti, y que quite su paz de ti, esa señores, hermanos y hermanas, esa es la peor de las maldiciones que podemos sufrir.

ii. 25el Señor haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia;

El Señor alce sobre ti su rostro, y te de paz;

El rostro de Dios resplandeciente o alzado en la bendición sacerdotal habla de la experiencia de su auxilio, 'Pues el Señor es justo; Él ama la justicia; los rectos contemplarán su rostro.' Salmo 11:7, de eso se trata la revelación de la gracia divina. Es el lenguaje del culto, y en concreto el de la oración.

Es el deseo más anhelado por un judío, que se llegue el momento donde el cara a cara con Dios pueda ser restaurado finalmente como en el caso de Adán y Eva. pues a Moisés le dice; 'Y añadió: No puedes ver mi rostro; porque nadie puede verme, y vivir. ' Éxodo 33:20, es decir después de la caída de Adán y Eva, no fue posible gozar de una compañía tan íntima como la de ellos. En la bendición el sacerdote dice que su rostro resplandezca sobre ti, al punto que puedas ser acto y digno de recibir misericordia, está diciendo que seas objeto de su perdón.

Conclusión

Ahora estamos en las fronteras de la tan anhelada tierra en toda esta historia redentora del Antiguo Testamento. Nos introduciremos próximamente en la conquista.

[1] Lockman Foundation. (1998). Santa Biblia: la Biblia de las Américas: con referencias y notas (electronic ed., Nm 6.22–27). La Habra, CA: Editorial Fundación, Casa Editorial para La Fundación Bíblica Lockman.

[2] Lockman Foundation. (1998). Santa Biblia: la Biblia de las Américas: con referencias y notas (electronic ed., Nm 33.49–56). La Habra, CA: Editorial Fundación, Casa Editorial para La Fundación Bíblica Lockman.

[3] Du Bois, L. J. (2010). El Libro de NÚMEROS. En S. Franco (Ed.), Comentario Bíblico Beacon: Génesis hasta Deuteronomio (Tomo 1) (p. 407). Lenexa, KS: Casa Nazarena de Publicaciones.

[4] Lockman Foundation. (1998). Santa Biblia: la Biblia de las Américas: con referencias y notas (electronic ed., Nm 13.2). La Habra, CA: Editorial Fundación, Casa Editorial para La Fundación Bíblica Lockman.