La perseverancia de los Santos
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INTRODUCCION
Esta mañana trataremos de responder la siguiente pregunta.
¿Puede un cristiano verdadero perder su salvación?
Hay 2 corrientes en el cristianismo evangélico que enseñan 2 posturas diferentes en lo tocante a este tema. Y son opuestas y no hay termino medio es SI o NO.
Puede alguien que verdaderamente fue salvado por Dios peder esta condición
El problema se reduce a un solo punto de discusión:
¿Hizo Cristo lo suficiente en la cruz para que Dios pudiese en armonía con su justicia, guardarnos salvo?
¿Por qué es tan importante esta pregunta y debemos estar seguros de conocer la respuesta con claridad y exactitud?
Este no es un tema doctrinal menor, por el contrario es algo mayor y elemental para que el creyente pueda alcanzar la madurez espiritual, y vivir asi el tipo de vida que Dios quiere que este viva. {Juan 10:10}
Es una doctrina histórica. Es el componente más importante de la salvación. Porque si la salvación no fuera permanente, entonces la doctrina de la elección sería cuestionada. La doctrina de la justificación sería cuestionada. La doctrina de la santificación sería cuestionada. Y, la doctrina de la glorificación sería cuestionada. El llamado de Dios sería cuestionado. Y, por lo tanto, la obra del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo sería también cuestionada.
Y entonces, lo que hace, del todo de las doctrinas de la salvación, el llegar a unirse y mantenerse unidas, es la naturaleza eterna de la salvación, la perseverancia de los santos. Y, esta ha sido la doctrina histórica de la verdadera iglesia.
En primer lugar, la perseverancia de los santos no significa que los cristianos nunca fallan. No significa que los cristianos no fallan de manera seria y de manera severa en sus vidas cristianas. Fallamos. Lo que significa, es no fallan de manera completa o final.
Fallar sí. Fallar severamente, sí. Fallar repetidamente, sí. Fallar completamente, no. Fallar finalmente, no.
En segundo lugar, es importante entender que no solo la perseverancia no significa perfección, si no que tampoco significa que cualquier persona, y toda persona que entre comillas “acepta” a Cristo, puede entonces vivir como quiera, sin temor alguno del infierno. No es suficiente tener una fe superficial en Cristo. No es suficiente tener un compromiso superficial con Cristo, un interés superficial en Cristo. No es suficiente tener ciertos buenos sentimientos hacia Jesús, y hacer un compromiso momentáneo con Él.
Un creyente puede pecar, como he dicho, puede pecar seriamente, puede pecar repetidamente, pero, él no se va a entregar a sí mismo al pecado. Él no va a estar otra vez bajo el dominio total del pecado. Él no va a estar otra vez bajo el dominio total del pecado. Él no va a perder la fe en Cristo. Y, él no va a negar a su Señor y el Evangelio.
Ningún verdadero creyente va a darle la espalda a la santidad, y va a abrazar al pecado al mismo tiempo.1 Juan 3:10,
10 En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios.
Entender esta doctrina de la perseverancia de los santos o la eternalidad de la salvación, entenderla mal, es producir caos con respecto a la doctrina de la predestinación, la doctrina de la elección, la doctrina
la justificación, la doctrina de la santificación, y la doctrina de la glorificación. Es, por así decirlo, deshacer todos los hilos en la cuerda de la salvación. Esa es la razón por la que dije al principio que éste es el elemento más importante en todo el rango de doctrinas de la salvación, y es este asunto de la perseverancia de los santos. Es finalmente lo que hace que la salvación sea la salvación, porque es para siempre.
Me imagino que ya se ha encontrado con alguien, que sido debatido con usted sobre esto, me imagino, que le han dicho que es una doctrina difícil de entender, como si las Escrituras adoptaran ambas posiciones, si no fuera algo claro. Como si en cierta manera fuera un asunto de preferencia personal. Pero, la realidad del asunto, es que es un componente absolutamente crítico en el entendimiento entero de la salvación.
Entendiendo lo que esta doctrina es y lo que realmente enseña déjenme tomar un momento para explicar las implicancias prácticas que un mal entendimiento de esta enseñanza puede tener en la vida del creyente, y en la vida de la Iglesia en general.
¿QUÉ SIGNIFICA SER SALVO?
“La salvación es de Jehová” (Jonás 2:9). Es algo tanto negativo como positivo (Colosenses 1:13), ya que somos salvos de una condición de perdición (nuestros pecados son perdonados), y somos puestos en una condición de salvación que provee al creyente con varias docenas de bendiciones positivas en el momento en que confiamos en Cristo. Estas bendiciones son muy inclusivas, ya que nuestra “salvación incluye todas las garantías divinas para el creyente, desde su liberación del estado de perdición hasta su presentación final en la gloria hecho conforme a la imagen de Cristo” (L.S. Chafer, Teología Sistemática, Publicaciones Españolas, 1986).
Pablo declara que Dios ya nos ha bendecido con toda bendición espiritual en Cristo (Efesios 1:3).
Algunas de las principales bendiciones de la salvación son:
la regeneración, la cual es una obra instantánea del Espíritu Santo al originar en el pecador creyente una nueva naturaleza al punto de transformarlo de un estado de muerte espiritual a uno de vida espiritual
la justificación, por la cual Dios declara al creyente justo en virtud de que está revestido de la justicia de Cristo (Romanos 3:21-26)
la libertad del dominio y la dominación del pecado (Romanos 6:2-14); ser colocado como un miembro en el cuerpo espiritual de Cristo, la iglesia (1 Corintios 12:13); y muchísimos otros actos positivos de Dios que tendrían que dar marcha atrás si es que una persona salva pudiera llegar a perderse.
Debemos definir quién es un Verdadero Creyente
• Es uno que Cree (Juan 3:36)
36 El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.
• Uno que ha sido perdonado (Col 1:14)
14 en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.
• Uno que ha sido hecho apto (Col 1:12)•
12 con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz;
Que esta en el reino del hijo (Col 1:13)
13 el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo,
• Que es una nueva criatura (2Cor 5:17)
17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
• Que goza de una nueva ciudadanía (Fil 3:20)
20 Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo;
• Que esta completo en Cristo (Col 2:10)
10 y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad.
SEGURIDAD ETERNA
DIOS TRABAJANDO
DIOS TRABAJANDO
DIOS EL PADRE
DIOS EL PADRE
I. PROPOSITO – PODER – ACTITUD DE DIOS.
a) PROPOSITO DE DIOS
a) PROPOSITO DE DIOS
(Efe 1:4 – Rom 8:29-30 – Efe 2:6-7)
4 según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él,
29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
30 Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.
6 y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús,
7 para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.
b) PODER DE DIOS
b) PODER DE DIOS
(Juan 10:26-29– 2 Tim 1:12)
26 pero vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho.
27 Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen,
28 y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.
29 Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.
12 Por lo cual asimismo padezco esto; pero no me avergüenzo, porque yo sé a quién he creído, y estoy seguro que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día.
c) ACTITUD DE DIOS
c) ACTITUD DE DIOS
( Rom 5:8-10 )
8 Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
9 Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira.
10 Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida.
DIOS EL HIJO
DIOS EL HIJO
a) MUERTE DE CRISTO
a) MUERTE DE CRISTO
(Jn 1:29; JUAN 19:30 ; Heb 10:10)
29 El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.
30 Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu.
10 En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre.
b) RESURRECCION DE CRISTO
b) RESURRECCION DE CRISTO
1 Pedro 1:3
3 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,
c) EL MINISTERIO ACTUAL DE CRISTO
c) EL MINISTERIO ACTUAL DE CRISTO
- Intercede por nosotros
- Intercede por nosotros
(Hebreos 7:23-25)
23 Y los otros sacerdotes llegaron a ser muchos, debido a que por la muerte no podían continuar;
24 mas éste, por cuanto permanece para siempre, tiene un sacerdocio inmutable;
25 por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.
24 Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios;
- Es Nuestro Abogado
- Es Nuestro Abogado
( (Ro. 8:34; He. 9:24; 1 Jn. 2:1).
34 ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
24 Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios;
1 Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.
Tomada como un todo, la obra de Cristo en su muerte, resurrección, abogacía e intercesión proporciona una seguridad absoluta para quien está de este modo representado por Cristo en la cruz y en el cielo. Si la salvación es una obra de Dios para el hombre y no una obra del hombre para Dios, su resultado es cierto y seguro y se cumplirá la promesa de Juan 5:24 de que el creyente no <<vendrá a condenación’.
24 De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.
DIOS EL ESPIRITU SANTO
DIOS EL ESPIRITU SANTO
a) Nos regenera.
a) Nos regenera.
Juan 3:3-6 | Tito 3:5
3 Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.
4 Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer?
5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.
6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.
5 nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo,
b) Vive en nosotros
b) Vive en nosotros
1 Corintios 3:16 : 1 Corintios 6:19
16 ¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?
19 ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?
c) Nos sella
c) Nos sella
(Efe 1:13) (Efesios 4:30)
13 En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,
30 Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención.
d) Es el anticipo de algo Seguro
d) Es el anticipo de algo Seguro
14 que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.
El deposito (arrabon)
e) Nos da la seguridad de que pertenecemos a la familia de Dios
e) Nos da la seguridad de que pertenecemos a la familia de Dios
16 El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.
Entonces se puede concluir, de este gran cuerpo de verdad, que el propósito eterno de Dios, que es para preservación de los suyos, no podrá jamás ser derrotado. Con este fin ha previsto cualquier obstáculo posible. El pecado, que podría producir, separación ha sido pagado en su totalidad por la obra de Cristo en la cruz. Por lo tanto
¿PUEDE UNA PERSONA SALVA LLEGAR A PERDERSE OTRA VEZ?
¿Puede un cristiano perder su salvación? ¿Puede una persona una vez que ha sido salva y que ha recibido el regalo gratuito de Dios de la vida eterna y que ha nacido en la familia de Dios, volver otra vez de forma exacta y completa a la posición de pecador perdido y culpable a los ojos de Dios? ¡Claro que no! La naturaleza misma de la vida espiritual que ha sido recibida - eterna - y la Fuente y el Agente Divino de esa vida - Dios - impiden que se llegue a la conclusión que una persona salva pueda llegar a perderse otra vez.
A veces a la doctrina bíblica que una persona que ha recibido a Jesucristo, que ha nacido en la familia de Dios, y que ha sido justificado por la fe, nunca jamás puede perderse otra vez, se le llama seguridad eterna. Otros se refieren a ella como la perseverancia de los santos porque la seguridad de nuestra salvación no se apoya en nosotros sino en Dios - está basada en la obra del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.