¿Qué tan Grande es el Amor de Dios?

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Jesús es el mismo Dios que por su amor se encarnó para darnos el regalo más grande que podemos tener en la vida que es la salvación

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Introducción:

En este pasaje de Juan es considerado el pasaje más importante de toda la Biblia porque declara la verdad más importante para todo ser humano, porque además nos enseña la grandeza del amor de Dios, que estuvo dispuesto a darnos a su Hijo para demostrarnos que tanto nos ama.
Según información recibida de las Sociedades Bíblicas, este versículo ha sido traducido a más de 1900 idiomas y dialectos en todo el mundo. Se lo conoce como el versículo más famoso de las Escrituras. Y alguien ha declarado que no sólo es el más famoso sino también el más grande.
En el pasaje aparece el verbo griego (agapáo )para traducir amor y se usa 36 veces en este evangelio, frecuentemente para indicar el generoso amor de Dios por la humanidad pecadora, al mundo.
Ilustración: La película de John Q, una película del año 2002 donde el artista principal Denzel Washington está dispuesto a que le saquen el corazón para salvar a su hijo pequeño, nos demuestra que nosotros, a lo sumo, podríamos dar nuestra vida por un hijo, pero, quizás debemos preguntarnos:
¿Estaríamos nosotros dispuestos a dar la vida de uno de nuestros hijos para salvar a un asesino, a alguien malo, hablemos de personas que han cometido los pecados más grandes del mundo?,
¿ Realmente estaríamos dispuestos a dar la vida de uno de nuestros hijos?
Jesús dijo:
Juan 15.13 RVR60
13 Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.
Cuando pensamos bien, en la pregunta anterior y la afirmación de Jesús, entendemos entonces:
Principio: La grandeza del amor de Dios.
Declaración: Cuando vemos la entrega que Dios hizo al entregar a su hijo unigénito, podemos comprender la grandeza de su amor.
Transición: hay seis aspectos del amor de Dios que todos los hombres, pero especialmente los creyentes debemos comprender.
I. Una afirmación gloriosa.
II. Su carácter .
III. Su autor
IV. Su objeto.
V. Su don.
VI. Su propósito.
Vamos a desarrollar cada uno de estos aspectos:

I. “Una afirmación gloriosa”

Juan 3:16
Juan 3.16 RVR60
16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

A. El infinito amor de Dios se manifestó de una forma infinitamente gloriosa.

Este es el tema del texto de oro que se ha hecho tan querido a los hijos de Dios.
El amor de Dios, es el corazón mismo del glorioso evangelio de nuestro Señor Jesucristo. El mundo—todo el mundo—debe oírlo, proclamarlo y explicarlo.
a. Es la declaración de amor más grande que podamos encontrar en la historia de la humanidad, “De tal manera amó Dios al mundo …”
¿Acaso hay amor más grande que el de Dios? (Os. 14:4; Ap. 1:5).
Oseas 14.4 RVR60
4 Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos.
Apocalipsis 1.5 RVR60
5 y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre,
b. A pesar de nuestra rebelión contra él, Dios nos ama. Nos ama con amor eterno (Jer. 31:3; Jn. 13:1).
Jeremías 31.3 RVR60
3 Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.
Juan 13.1 RVR60
1 Antes de la fiesta de la pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para que pasase de este mundo al Padre, como había amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin.

B. Es el amor con alcance más grande.

a. Juan nos dice que Dios amó al mundo. Nadie queda excluido . No hay persona que esté fuera del alcance del amor de Dios(Is. 45:22)
Isaías 45.22 RVR60
22 Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay más.
b. No importa donde esté hasta ahí lo alcanza el amor de Dios.
Por más bajo que haya caído, por más lejos que se haya ido o se haya apartado de Dios (2 Co. 5:19).
2 Corintios 5.19 RVR60
19 que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.
Pero también Juan 3.16 arroja luz sobre los siguientes aspectos de dicho amor:

II. El carácter de su amor.

A. No se puede comprender humanamente. “De tal manera amó Dios.”
Cuando Juan dice “Porque de tal manera” se está llegando a una conclusión de lo que venía hablando Jesús anteriormente, o sea este es el resumen del contexto de este versículo desde Juan 3:1 al 3:12, como sabemos la lección comienza con la visita de Nicodemo de noche y todo lo relacionado al nuevo nacimiento; por todo lo antes dicho Juan dice: “Porque…” podemos decir llega a esta conclusión. Quiere decir en resumidas cuentas…, y nos demuestra cómo es que Dios ama.
B. Es amor en Acción.
“De tal manera amó”. El tiempo que se usa en el original (el aoristo( ἠγάπησεν)
Nos muestra el amor de Dios en acción, el cual se remonta hasta la eternidad y fructifica en Belén y en el Calvario, se considera como un hecho grande, central y único. Aquel amor era rico y verdadero, lleno de comprensión.
Otro aspecto que debemos considerar es que,

III. El autor de este amor es Dios.

Juan dice:“De tal manera amó Dios.”
La frase “de tal manera”, teniendo en cuenta lo que sigue, debe interpretarse con este significado: en un grado tan infinito y en forma tan trascendente-mente gloriosa, es el amor de Dios.
Él es plenitud de vida y plenitud de amor, por tanto el artífice de este amor para salvación del mundo.
Romanos 5.8 RVR60
8 Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Romanos 8.32 RVR60
32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?
Es en el corazón de Aquel cuyo mismo nombre es amor, que surge el amor al mundo y lo hace posible también en nosotros. 1 Jn. 4:9, 10, 19
1 Juan 4.9 RVR60
9 En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él.
1 Juan 4.10 RVR60
10 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.
1 Juan 4.19 RVR60
19 Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero.

IV. EL OBJETO DEL AMOR DE DIOS.

A. El objeto del amor de Dios es el mundo.
Juan 1.10 RVR60
10 En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció.
B. Dios está haciendo un llamado al mundo..
“todo aquel que en el cree no se pierda”
Las palabras “todo aquel que en el cree” indican claramente que no se refiere a aves y plantas sino a la humanidad.
Aquí, sin embargo, no se entiende a la humanidad como el reino del mal, que está en rebeldía y abierta hostilidad contra Dios y Cristo ( ya que Dios no ama el mal.
c) Tal como aquí se usa, el término mundo significa la humanidad que, aunque cargada de pecado, sujeta al juicio, y necesitada de salvación, sigue siendo objeto del cuidado de Dios. La imagen de Dios se refleja todavía, hasta cierto punto, en los hijos de los hombres.
La humanidad es como un espejo. Originalmente este espejo era muy hermoso, una obra de arte. Pero, sin ninguna culpa del Hacedor, ha quedado horriblemente manchado por el pecado. Su creador, no obstante, aún reconoce su propia obra.
1 Juan 4.14 RVR60
14 Y nosotros hemos visto y testificamos que el Padre ha enviado al Hijo, el Salvador del mundo.

V. Su don.

“… que dio a su Hijo, el unigénito”.
El original dice literalmente: “que a su Hijo, el unigénito, dio”.
Todo el énfasis recae en la asombrosa grandeza del don; por esa razón, en esta cláusula el complemento directo precede al verbo.
El verbo dio se debe tomar en el sentido de, dio para morir como ofrenda por el pecado especialmente 1 Jn. 4:10
1 Juan 4.10 RVR60
10 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.
El dio de Juan es el no escatimó de Pablo en Romano 8:32
Romanos 8.32 RVR60
32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?
Dios nos dio todo, a su hijo lo regaló al mundo, lo hizo hombre, lo mandó a la cruz y lo resucitó.
Dios no vende a su Hijo, no lo intercambia por buenas obras (Ef. 2:9).
Efesios 2.9 RVR60
9 no por obras, para que nadie se gloríe.
Dios regala la salvación, por eso dice que nos ha dado a su Hijo (1 Jn.3:1).
1 Juan 3.1 RVR60
1 Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él.
El otro aspecto a considerar es ....

V. Su propósito.

A. La vida eterna.
“… para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”.
Dios no ha dejado a la humanidad abandonada. Amó al mundo de tal forma que dio a su Hijo, al unigénito, con este propósito: que los que lo reciben con confianza y fe permanentes tengan vida eterna.
Aunque el evangelio es anunciado a hombres de toda tribu y nación, no todo el que lo oye cree en el Hijo.
Pero todo aquel que cree—sea judío o gentil—tiene vida eterna.
B. Dios no quiere que el hombre se pierda.
Las palabras “… no se pierda” no significan simplemente: “No pierda la existencia física”
“Tampoco quieren decir: no sea aniquilado.”
Como indica el contexto (versículo 17), la perdición de que habla este versículo se refiere a la condenación divina, completa y eterna.
Es un estado que, en principio, empieza ahora aquí pero que no alcanza su completa y terrible culminación, tanto para el cuerpo como para el alma, hasta el día de la gran consumación.
Observemos entonces que perderse es el antónimo de tener vida eterna.
“… no se pierda mas tenga vida eterna”.
La vida que pertenece al futuro, al reino de la gloria, pero pasa a ser posesión del creyente aquí y ahora; es decir, en principio.
a. Esta vida es salvación, y se manifiesta en la comunión con Dios en Cristo.
b. Se manifiesta en la participación del amor de Dios.
c. Se manifiesta en su paz.
d. Se manifiesta en su gozo .
Estamos hablando de una vida que es diferente en calidad de la vida que caracteriza a esta era presente. .
Jesús dijo: …”Mas yo he venido para que tengan vida y vida en abundancia”
Sin embargo, también un sentido cuantitativo: se trata realmente de una vida eterna, que nunca termina.
C. Para recibir esa vida eterna se debe creer en el unigénito Hijo de Dios.
Pero es importante darse cuenta de que Jesús menciona la necesidad de la regeneración antes de hablar acerca de la vida eterna, recuerde que el contexto anterior, es el encuentro con Nicodemo, hablando del nuevo nacimiento..
La obra de Dios dentro del alma siempre precede a la obra de Dios en que el alma coopera, el hombre necesita arrepentirse de su vida de pecado y buscar el perdón de Dios, el resultado de esta acción , su fruto es la vida eterna, esta también el don de Dios.
Dios dio a su Hijo; Dios nos da la fe para aceptar al Hijo; y él nos da la vida eterna como recompensa por el ejercicio de esa fe.
¡A él sea la gloria por siempre jamás!

Conclusión:

¿Que podemos decir después de todo lo expuesto en esta expresión gloriosa?.
¿Cómo es el amor de Dios? ¿Cómo nos ha amado? ¿Qué tan grande es su Dios? ¿De qué manera nos ama? ¿Le amamos nosotros como él nos ama?.
La respuesta es: Dios es el amor, sin Él no habría amor de parte de nadie, ya que este es uno de los atributos comunicables de Dios, el poco amor que nosotros tenemos es solo un eco o reflejo del amor de Dios.
¿Crees tú esto? ¿Estarías dispuesto a recibir a Jesús como tu Señor?
Jesús es el mismo Dios que por su amor se encarnó para darnos el regalo más grande que podemos tener en la vida que es la salvación.
Te invito a que lo recibas hoy como tu Señor y Salvador personal.
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