viviendo en un mundo de ansiedad
RESPIRA • Sermon • Submitted
0 ratings
· 61 viewsNotes
Transcript
SERIE: “RESPIRA” / Fe en un mundo ansioso.
BOSQUEJO 1: Vivir en un mundo de ansiedad
Es innegable que en la actualidad nos vemos amenazados por un enemigo llamado ansiedad. Veamos algunos preconceptos instalados en nuestro inconsciente colectivo. Lo que la gente cree que es tener ansiedad:
• Estar desesperado
• Tener prisa
• Querer que algo pase rápido
• Que es un invento
• Que te volviste loco
• Que estás así porque quieres
• Que solo tienes un mal día
Lo que realmente este tener ansiedad:
• Preocupación extrema
Problemas para gestionar el nerviosismo
• Irritabilidad
• Cansancio, fatiga
• Presión en el pecho y dificultades para respirar
• Dificultad para tragar
• Insomnio
• Despertares nocturnos •
Temblores, tics • Dolor de cabeza o estomacal sin motivo aparente
• Rumiar ideas – pensar en algo sin parar
• Dificultad para realizar tareas rutinarias como ir a una reunión o viajar en transporte público.
→ ¿Dónde está Dios cuando experimento ansiedad?
Comencemos por una historia de la Biblia que hoy veremos desde una perspectiva diferente.
Inmediatamente después, Jesús insistió en que sus discípulos regresaran a la barca y comenzaran a cruzar el lago hacia Betsaida mientras él enviaba a la gente a casa. Después de despedirse de la gente, subió a las colinas para orar a solas.
Muy tarde esa misma noche, los discípulos estaban en la barca en medio del lago y Jesús estaba en tierra, solo. Jesús vio que ellos se encontraban en serios problemas, pues remaban con mucha fuerza y luchaban contra el viento y las olas. A eso de las tres de la madrugada, Jesús se acercó a ellos caminando sobre el agua. Su intención era pasarlos de largo, pero cuando los discípulos lo vieron caminar sobre el agua, gritaron de terror pues pensaron que era un fantasma. Todos quedaron aterrados al verlo.
Pero Jesús les habló de inmediato: «¡Tengan ánimo! ¡Yo estoy aquí! ¡No tengan miedo!».
Entonces subió a la barca, y el viento se detuvo. Ellos estaban totalmente asombrados
→ ¿Qué es lo inusual que hace Jesús? Jesús entra al bote inestable.
Veamos qué pasa un par de capítulos antes:
Al atardecer, Jesús dijo a sus discípulos: «Crucemos al otro lado del lago». Así que dejaron a las multitudes y salieron con Jesús en la barca (aunque otras barcas los siguieron). Pronto se desató una tormenta feroz y olas violentas entraban en la barca, la cual empezó a llenarse de agua.
Jesús estaba dormido en la parte posterior de la barca, con la cabeza recostada en una almohada. Los discípulos lo despertaron: «¡Maestro! ¿No te importa que nos ahoguemos?», gritaron.
Cuando Jesús se despertó, reprendió al viento y dijo a las olas: «¡Silencio! ¡Cálmense!». De repente, el viento se detuvo y hubo una gran calma. Luego él les preguntó: «¿Por qué tienen miedo? ¿Todavía no tienen fe?».
Los discípulos estaban completamente aterrados. «¿Quién es este hombre? —se preguntaban unos a otros—. ¡Hasta el viento y las olas lo obedecen!».
Jesús no los deja solos en su ansiedad. Se une a ellos. Él está con ellos.
¿Qué es lo que tú puedes notar sobre su respuesta?
→ ¿Qué hace que tu bote se sienta inestable últimamente?
Todos nos sentimos ansiosos a veces. Ese nudo en el estómago o un miedo persistente cuando te enfrentas a un desafío, suele ser la respuesta natural de tu cuerpo al estrés o la presión. La ansiedad es un sentimiento que todos, en cualquier etapa o experiencia, llegamos a enfrentar.
La ansiedad puede parecer un problema real, y a veces lo es. Pero aquí está lo significativo para recordar: la ansiedad existe para alertarnos sobre algo importante; podría estar diciéndonos que algo está mal o en peligro y producirnos cierta inseguridad. Podría estar alertándonos algo sobre nuestros cuerpos, nuestras relaciones, o sobre necesidades básicas como la alimentación y el sueño.
La clave es que aprendamos a escuchar. ¿Dónde está Dios trabajando en medio de mis momentos de ansiedad? …
en medio de mi agenda y la presión que tengo encima? …
durante los tiempos que estoy en mi zona cómoda? …
¿estoy comiendo y durmiendo bien? …
¿me estoy exponiendo a situaciones peligrosas?
¿Qué podría Dios o la ansiedad estar tratando de decirnos?
Cuando la ansiedad toma el control, puede hacernos sentir inestables. Intentamos diferentes cosas para hacer que ese sentimiento de inestabilidad desaparezca.
Estas se llaman “estrategias de afrontamiento”. Algunas estrategias de afrontamiento pueden adormecer o entumecer nuestros sentimientos, como el alcohol, las drogas y las autolesiones, pero es obvio que causan aún más problemas.
→ Estrategias de afrontamiento Todo lo que hacemos para intentar eliminar, reducir o tolerar el estrés. Con el tiempo, si ignoramos la ansiedad, puede causarnos otras luchas como la depresión.
Cuando escuchamos lo que nuestra ansiedad está tratando de decirnos, podemos ...
• Conocer quiénes somos, qué situaciones nos hacen sentir inestables y qué afrontamiento saludable y estrategias funcionan para nosotros.
• Usar nuestra capacidad para hacer cambios cuando las situaciones en nuestra vida nos hagan sentir tensos.
• Reconocer dónde está presente Dios y trabajando en nuestro bote inestable.
• Practicar escuchar a Dios para que podamos experimentar la paz y compartir esa paz con los demás.
Como si pudiéramos cultivar un jardín para cosechar lo que queremos, podemos cultivar prácticas para cosechar paz en nuestras vidas al ayudarnos a caminar a través de este mundo ansioso y reconocer a Dios a nuestro lado, en nuestro bote inestable.
Cuando empezamos a sentir ansiedad o tristeza, hay tres cosas importantes que podemos hacer:
1. Mirar hacia arriba.
1. Mirar hacia arriba.
Después de despedirse de la gente, subió a las colinas para orar a solas.
En medio de la ansiedad Miramos hacia arriba para fortalecer nuestra relación con Dios
Caminar sin mirar hacia arriba nos lleva a desesperarnos, perder el control
en medio de un mundo ansioso, sino nos detenemos a mirar no vamos a poder avanzar
2. Mirar hacia adentro.
2. Mirar hacia adentro.
Todos quedaron aterrados al verlo.
Pero Jesús les habló de inmediato: «¡Tengan ánimo! ¡Yo estoy aquí! ¡No tengan miedo!».
Luego él les preguntó: «¿Por qué tienen miedo? ¿Todavía no tienen fe?».
Las preguntas de Jesús llevan a una mirada interior, a ver donde nace el miedo
las preguntas de Jesús son una invitación a auto analizarse
en muchas ocasiones usamos estrategias de afrontamiento, para evitar este punto
un ejercicio practico es preguntarse ¿por que estoy sintiendo esto?
3. Mirar alrededor.
3. Mirar alrededor.
Entonces subió a la barca, y el viento se detuvo. Ellos estaban totalmente asombrados
Jesús estaba dormido en la parte posterior de la barca, con la cabeza recostada en una almohada. Los discípulos lo despertaron: «¡Maestro! ¿No te importa que nos ahoguemos?», gritaron.
¿quien esta contigo en la barca?
¿quienes te ayudan a navegar en este mundo ansioso?
cuando te comiences a desesperar es necesario saber a quien vas a llamar
las personas en nuestro bote nos levantan o nos hacen caer, nos animan o desaniman
Reflexión diaria
1. Tomar conciencia de la presencia de Dios. Encuentra un lugar tranquilo, lejos de distracciones.
2. Tomar varios minutos para respirar, relajarte e invitar a Dios a estar presente contigo. Repasa el día con gratitud. ¿Cuáles son las cosas buenas que han sucedido hoy? ¿Por cuáles razones puedes estar agradecido?
3. Prestar atención a tus emociones. ¿Qué momentos a lo largo del día han sido difíciles o tensos? ¿Dónde está Dios trabajando en medio de mis momentos de ansiedad? ¿Qué podría Dios o la ansiedad estar tratando de decirme?
4. Perdonar y pedir perdón. ¿Con quién estoy enojado o frustrado? ¿Hay cosas que pueda perdonar y dejar ir para tener paz? ¿Por cuáles razones me gustaría ser perdonado?
5. Mirar hacia el mañana. ¿Cómo puede ser diferente el mañana? ¿En qué me gustaría pedirle a Dios que me ayude?
Analiza las palabras de Jesús en diferentes versiones bíblicas:
Luego dijo Jesús: «Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso.
“Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso”
“Ustedes viven siempre angustiados y preocupados. Vengan a mí, y yo los haré descansar”.
“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar”.