Dios es nuestro refugio en medio de la angustia

Hemos estado desarrollando durante el mes de septiembre y octubre la serie “Leyes para la vida”, basada en los 10 mandamientos que están expresados en Éxodo 20…sin embargo, nos hemos visto obligados a dejar un poco en pausa nuestra serie para tratar asuntos que es necesario meditar porque nos afectan a todos y en su momento debemos enfrentar los eventos que se avecinan con una perspectiva bíblica.

Hace dos domingos estuvimos meditando acerca de las declaraciones del papa Francisco y su apoyo a las uniones civiles de las personas del mismo sexo…era necesario…ante la enorme cantidad de comentarios, tanto en contra como a favor, traer la luz de Las Escrituras a este tema, porque tiene que ver con el ataque frontal y despiadado del mundo en tratar de redefinir a la familia, que es una institución bíblica, fundada por Dios mismo…Él ha establecido como debe conformarse y cuáles son los roles de cada individuo dentro del núcleo familiar, donde vimos que no son papeles de dominio, sino roles de función, de responsabilidad y complementarios y a la Luz de la Biblia demostramos como familias estables y sólidas fudamentada en principios bíblicos, resultan en sociedades y naciones estables…cuando el mundo ataca el fundamento bíblico establecido para las familias y se promueven iniciativas como los matrimonios entre personas del mismo sexo, entonces vemos como las sociedades y las naciones entrar en una espiral moral descendente, dando como resultado sociedades convulsionadas por la incertidumbre, la violencia y la confusión. Puede aparentar ser naciones prósperas desde el punto de vista económico, pero son sociedades con rumbo a la depravación moral y en situación de ponerse en camino directo del juicio de Dios. POR LO TANTO…LOS CRISTIANOS NO DEBEMOS PROMOVER INICIATIVAS QUE VAYAN EN CONTRA DE LO QUE DIOS HA ESTABLECIDO, EN ESTE CASO, PARA LA FAMILIA.

El domingo pasado, nuestro predicador invitado, el pastor Nephtalí Rodríguez nos animó a que tengamos una perspectiva bíblica de cuál debe ser nuestro rol en medio de la crisis que enfrentamos, como el de la Pandemia del COVID 19.

Pues estaba yo listo durante esta semana a retomar nuestra serie basada en los 10 mandamientos, estaba estudiando el sexto mandamiento cuando surgió esta tragedia humana del huracán ETA…vimos la destrucción, las personas que perdieron familiares y sus hogares. Vimos en los medios de comunicación la tristeza, el desconsuelo y el dolor de muchos compatriotas cuando fueron trstigos de lo inevitable, la impotencia y la desesperación de ver seres queridos, bienes materiales y hasta mascotas perdidas en un abrir y cerrar de ojos…entonces qué sucede…qué luz debemos dar los creyentes en medio de toda incertidumbre, qué mensaje de esperanza debemos compartir con personas sumergidas en medio de la desesperación…para esto…por favor…acompañenme al Salmo 46.

Salmo 46:1–11 RVR60

Dios es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida, Y se traspasen los montes al corazón del mar; Aunque bramen y se turben sus aguas, Y tiemblen los montes a causa de su braveza. Selah Del río sus corrientes alegran la ciudad de Dios, El santuario de las moradas del Altísimo. Dios está en medio de ella; no será conmovida. Dios la ayudará al clarear la mañana. Bramaron las naciones, titubearon los reinos; Dio él su voz, se derritió la tierra. Jehová de los ejércitos está con nosotros; Nuestro refugio es el Dios de Jacob. Selah Venid, ved las obras de Jehová, Que ha puesto asolamientos en la tierra. Que hace cesar las guerras hasta los fines de la tierra. Que quiebra el arco, corta la lanza, Y quema los carros en el fuego. Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra. Jehová de los ejércitos está con nosotros; Nuestro refugio es el Dios de Jacob. Selah

En ese salmo encontramos 3 verdades para que entendamos que Dios es nuestro refugio en el tiempo de la angustia…estas tres verdades responden 2 preguntas:

¿Quién es Dios para los que creen en Él? y ¿Quién es Dios para los que han depositado su confianza en Él?

Y la segunda pregunta…¿Por qué debemos confiar de que Dios puede ser refugio seguro para el afligido?

Las lecciones de este salmo nos debe consolar ante cuaquier adversidad, sufrimiento y aflicción por la que estamos atravesando…sean estas familiares, económicas, enfermedad, luto…este salmo es la respuesta que todo creyente debe recordar…y todo incrédulo debe tomar en cuenta para entender que solo en Dios pueden encontrar sentido, propósito y fortaleza en medio del sufrimiento.

Cuáles son estas tres verdades:

I. DIOS ES NUESTRA FORTALEZA (V. 1 - 3)

II. DIOS GOBIERNA SOBRE TODO (V. 4-7)

III. DIOS ES TODOPODEROSO (V. 8-11)

Así que empecemos a meditar en este hermoso salmo y extraigamos sus tesoros…tenemos en primer lugar esta declaración, clara y contundente:

I. DIOS ES NUESTRA FORTALEZA (v. 1 - 3)

Tres aspectos resaltan resaltan en esta porción del salmo:

A. La realidad de la inestabilidad de las circunstancias de la vida

B. El carácter piadoso de Dios

C. Confianza inalterable

1. (“Nuestro pronto auxilio en las TRIBULACIONES”) La verdad de la inestabilidad de las circuntancias de la vida: por simple observación y experiencia propia sabemos que la vida en este mundo es inestable, dificil, llena de pruebas, aflicciones, dolor y sufrimiento (De hecho la palabra tribulación está asociado a toda adversidad física y mental asociada a situaciones externas adversas), de no ser así, Dios no nos daría instrucciones de cómo debemos enfrentar las circunstancias adversas de la vida. Es una falacia brutal, cruel y sobretodo antibíblica hacerle creer a la gente que la fe cristiana es el equivalente a ausencia de problemas, sufrimiento y pérdidas…de hecho, el Señor Jesucristo fue claro al decirle a sus discípulos (que incluye a todos los creyentes de todas las épocas) que “en el mundo tendrán aflicciones” (Juan 16.33). Entendiendo esto…el ser humano debe encontrar algo sólido, estable y confiable en que pueda descansar confiadamente cuando la tribulación llegue a nuestra vida.

2. El carácter piadoso de Dios: 3 cosas dicen acerca del carácter de Dios:

Él es refugio: Todos aquellos que son hijos de Dios por medio de Cristo pueden buscar a Dios para recibir ayuda y protección.

Él es nuestra fortaleza: Es la fuente de fuerza que todo creyente necesita para enfrentar la adversidad. Las personas que luchan en base a sus fuerzas emocionales en el mejor de los casos pueden llegar al menos a racionalizar la pena, el dolor y la incertidumbre. Solo aquellos que buscan a Dios como su fuente de fuerzas encuentran no solo consuelo, sino sentido y propósito dentro del sufrimiento. Cuando creemos efectivamente que Dios es “nuestra fortaleza” es que creemos en lo limitado de nuestras capacidades y decidimos recurrir al único que es Todopoderoso para encontrar las fuerzas, sobre todo espirituales y emocionales para enfrentar la adversidad. Ahora…recibir fuerzas de Dios no es algo subjetivo…buscar a Dios para recibir fuerzas se basa en el hecho de saber quién es Él y lo que ha hecho…es conocer y estar conscientes de las virtudes y perfecciones de Dios. La única fuente confiable para eso es La Palabra de Dios. Solo entendiendo quién es Dios podemos confiar plentamente en que Dios actuará con sus fuerzas por medio nostros en las dificultades y en las pruebas.

Pronto Auxilio: Dios es quién nos provee ayuda para nuestras necesidades. Ahora, eso no quiere decir que nos dará lo que nosotros pidamos o lo que creamos necesitar. ¿En qué forma Dios es nuestro auxilio? Santiago capítulo 1 nos enseña que las pruebas en la vida del creyente tienen el propósito de formar un carácter piadoso en nosotros purificándonos de la misma forma en que por medio del fuego se purifica el oro hasta refinarlo.

Santiago 1:2–4 RVR60

Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas,sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia.Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.

Es en ese contexto donde surgen las necesidades que Dios va a cubrir, las necesidades en las que nos va a auxiliar.

3. Esta primera parte del salmo nos habla también de confianza inalterable. El resultado de tener la convicción de que Dios es refugio, fortaleza y auxiio es la ausencia de temor. El temor aquí nos habla de una situación de ansiedad extrema o una aprensión que va más allá de nuestras fuerzas propias de personas que son agobiados por las situaciones porque creen que no hay esperanza. La ausencia de temor en el creyente descansa en el hecho de que todo está en las manos de Dios y que Él hará las cosas basado en su sentido de justicia, rectitud y bondad. En el lenguaje poético que usa el salmista habla de fenómenos extremos, es decir, de sucesos que van más allá de las leyes naturales: Remover la tierra (una especie de terremoto cataclísmico), que provoque que los montes sean movidos a los océanos…o que haya un fenómenos tan destructivo en los océanos…que haga que los montes tiemblen por la braveza del mismo (recordar los huracanes y sus poderosas formas destructivas).

Esta confianza va más allá de las sensaciones emocionales normales que podamos sentir. Es natural sentir temor en una situación de incertidumbre extrema…pero lo que no puede el creyente es entregarse a la desesperanza, al espanto propio de las personas que no tienen la certeza de que Dios está en control de todo y que lo que hace lo hace con propósito. Ese tipo de temor es algo que debe estar ausente en la vida de las personas que tenemos esperanza en Dios…aun incluso cuando nuestras oraciones no sean contestadas en la manera que nosotros esperamos…siempre debemos tener el pensamiento de Job que sin importar las circusntancias, Él decía “Sea el Nombre del Señor alabado”

¿Por qué debemos confiar en Dios para que sea Él nuestra fortaleza, nuestro refugio y nuestro auxilio?

II. DIOS GOBIERNA SOBRE TODO (V. 4-7)

Podemos confiar en Dios como nuestro refugio y fortaleza porque el gobierna soberanamente sobre todo…sobre las naciones, sobre la naturaleza, sobre la enfermedad, sobre las sociedades, las familias y los individuos. El gobierna en todos los niveles de la realidad que nos rodea…gobierna desde los elemenos más grandes, como las estrellas, soles, planetas…hasta el elemento atómico más pequeño. Él ejerce su soberanía sobre todo…pero no debemos ver el ejercicio de esa soberanía como algo negativo…porque Dios no ejerce esa soberanía de forma caprichosa…como se la ejercemos los seres humanos…Él ejerce esa soberanía en armonía a todos sus atributos, virtudes y perfecciones…Él gobierna sobre las enfermedades, sobre los huracanes, sobre los terremotos, sobre los tifones, sobre los gobiernos humanos, gobierna en tiempo de paz y en tiempo de guerra, da la vida y la quita, pone y quita reyes y gobernantes, y todo eso lo hace en armonía con su justicia, rectitud, amor, misericordia, bondad y eternidad.

Prestemos atención a dos aspectos importantes sobre la verdad de que Dios gobierna sobre todo:

A. Gobierno firme (v. 4 - 5)

B. Autoridad Firme (v. 6 - 7)

Gobierno firme: Los versículos 4 - 5 nos habla de la ciudad de Jerusalén, desde donde los reyes de Judá, desde la perspectiva humana, pero desde la perspectiva espiritual:

Será la ciudad desde donde el Señor Jesucristo gobernará a las naciones durante 1000 años, con vara de hierro, con verdadera justicia y equidad.

De la misma manera, desde su Trono celestial, Dios sigue gobernando de forma soberana sobre toda la creación…ni siquiera Satanás puede hacer algo si Dios no le permite hacerlo.

De modo que los v. 4 - 5 nos dan una referencia de lo inamovible y firme del gobierno de Dios.

Autoridad Firme: “Bramaron las naciones”…esta parta nos recuerda el Salmo 2, de cómo las naciones se revelan contra Dios.

Salmo 2:1–3 RVR60

¿Por qué se amotinan las gentes, Y los pueblos piensan cosas vanas? Se levantarán los reyes de la tierra, Y príncipes consultarán unidos Contra Jehová y contra su ungido, diciendo: Rompamos sus ligaduras, Y echemos de nosotros sus cuerdas.

Las naciones en términos generales, de forma abierta y deliberada, se revelan contra Dios…a eso se refiere el término “bramar”, es una queja en voz alta, una especie como de “pataleo” de las naciones en contra de Dios…quieren romper sus ligaduras y no someterse nunca más a su autoridad.

Sin embargo, en una sola frase se nos declara la naturaleza de la autoridad de Dios...”Dio Él su voz, se derritió la tierra”…una forma simbólica que nos da a entender lo contundente de su autoridad y cómo la misma no puede ser siquiera discutida.

Esta sección termina con la frase afirmando que el Dios que todo lo gobierna está con nostroso y reafirma que Él y solo Él es nuestro refugio.

III. DIOS ES TODOPODEROSO (v. 8 - 11)

Para terminar este salmo, que nos debe llenar de consuelo y esperanza, a la soberanía de Dios se agrega su virtud de Omnipotencia, es decir…Todopodeoros, nada es imposible para Dios.

A. Interviene con Poder Majestuoso e Irresistible (v. 8 - 9)

B. Debemos descansar y esperar en Él. (v. 10 - 11)

A. Interviene con Poder Majestuoso e irresistible: Aquí se nos habla de la forma en que Él interviene en todos los eventos de la historia de la humanidad. El lenguaje es vívido...”ved las obras de Jehová”…qué obras…establece de forma soberana la guerra y la paz…establece reinos…establece gobiernos…todo para sus propósitos eternos.

Ante la magnitud y magnificencia de esa verdad…¿qué debe hacer el creyente?

B. Debemos descansar y esperar en Él: Estar quietos no significa inactividad, sino dejar que Él actúe en las circunstancias que están más allá de nuestras fuerzas, capacidades y conocimiento…cuando las cosas se vuelven imposible, entonces es cuando Dios interviene…cuando vemos las obras de Dios, ejercidas de manera soberana…muchas veces incomprensibles para nosotros, es ahí cuando llegamos a conocer “Quién es Dios”. Más allá de toda circunstancia que está más allá de las fuerzas de toda persona…podemos confiar de que Dios es nuestro refugio y fortaleza porque al final de cuentas, a pesar de toda la oposición del mundo que quieren romper sus ligaduras, Él sigue gobernando y al final…será exaltado, admirado y adorado...

CONCLUSIÓN

Los versículos 7 y 11 de este salmo cierran cada sección con la oración:

“Jehová de los ejércitos está con nosotros; nuestro refugio es el Dios de Jacob”

La pregunta clave aquí es: ¿Es el Dios de Israel, el Dios redentor y protector, su refugio?

¿Por qué es importante esta pregunta?

Porque de la respuesta positiva o negativa a esta determina su prespectiva del sufrimiento y las aflicciones, porque solo los que tienen una relación personal con Dios encuentran consuelo, propósito y fortaleza en medio de la prueba. Pero lamentablemente, lo cierto es que la mayoría de las personas enfrentan los sufrimientos desde un punto de vista fatalista y devastador…de una forma que denota que en ellos solo existe una racionanilización del problema, pero no un verdadero consuelo, no una verdadera esperanza.

Si efectivamente Dios es su refugio…entonces usted debe llevar esa esperanza a otros, usted debe hablarles a otras personas de la esperanza que hay en usted, usted debe hablarles a otros acerca del refugio que usted ha encontrado en Dios por medio de Cristo…que usted ha encontrado propósito y esperanza en medio de la adversidad y que sus fuerzas no dependen de las circunstancias, porque estas se encuentran en Dios

Si usted no supo que responder…o ciertamente usted sabe que Dios no es su refugio, sepa que Cristo es el camino a ese refugio, El Señor Jesucristo dijo:

“Yo Soy el Camino, y la Verdad y la Vida, nadie viene al Padre sino por mí”

Cristo por medio de su sacrificio en la cruz ha reconciliado al pecador con Dios y ha abierto ese camino al seguro refugio que podemos encontrar en Dios…solo así podemos encontrar propósito, consuelo, sentido y fortaleza en medio de las dificultades y pruebas.