El amor que Dios aborrece

Amar Crecer y Servir  •  Sermon  •  Submitted
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Debemos estar seguros de nuestro amor a Dios. Dios no comparte, a él no le gusta la infidelidad, Él es fiel, y espera que seamos fieles.

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Introducción:

El amor perfecto de Dios es un tema que se da por todas las Escrituras.
El absolutamente perfecto amor de Dios de igual manera exige que quienes lo aman participen de su odio a todo lo que se le oponen. El salmista exhortó Salmo 97:10
Salmo 97:10 RVR60
10 Los que amáis a Jehová, aborreced el mal; El guarda las almas de sus santos; De mano de los impíos los libra.
El proverbista dice, Proverbios 8.13
Proverbios 8:13 RVR60
13 El temor de Jehová es aborrecer el mal; La soberbia y la arrogancia, el mal camino, Y la boca perversa, aborrezco.
El salmista expresa, Salmos 119: 163
Salmo 119:163 RVR60
163 La mentira aborrezco y abomino; Tu ley amo.
Hermanos, Dios aborrece todas esas cosas porque son totalmente incongruentes con su naturaleza y su gloria santas.
Por eso Juan dice en 1 Juan 2.15
1 Juan 2:15 RVR60
15 No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
Pero entendemos que Dios, no aborrece al mundo como creación, Dios no aborrece a la gente, aunque sea pecador, Dios tiene su amor disponible para ellos, Dios no puede contradecirse, Dios aborrece el sistema de este mundo dominado por satanás el diablo.
Declaración: Juan describe el objeto importante del odio de Dios: el mundo y quienes lo aman.
Proposición: Dios nos manda a no amar el mundo.
Oración de transición: Hay dos Razones por los que los Creyentes no deben amar el mundo.
La primera razón, por la que no debemos amar el mundo, es:

I. DEBIDO A QUIENES SOMOS.

“ Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. (2:15b)
¿Quiénes somos?

1. Hemos sido perdonados de nuestros pecados. Efesios 2:1

Efesios 2:1 RVR60
1 Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,

2. Somos llamados hijos de Dios. Juan 1.12

Juan 1:12 RVR60
12 Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;

3. Somos nuevas criaturas. 2 Corintios 5.17

2 Corintios 5:17 RVR60
17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

4. Que estamos creciendo en nuestra relación con Dios. 1 Juan 2: 12-14

1 Juan 2:12–14 RVR60
12 Os escribo a vosotros, hijitos, porque vuestros pecados os han sido perdonados por su nombre. 13 Os escribo a vosotros, padres, porque conocéis al que es desde el principio. Os escribo a vosotros, jóvenes, porque habéis vencido al maligno. Os escribo a vosotros, hijitos, porque habéis conocido al Padre. 14 Os he escrito a vosotros, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio. Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes, y la palabra de Dios permanece en vosotros, y habéis vencido al maligno.
Todo eso somos, pero no somos inmunes al atractivo del mundo.
Puesto que aún somos pecadores caídos (aunque salvados por gracia), aunque somos verdaderos seguidores de Cristo somos tentados a través de nuestra carne por medio de comportamientos e iniciativas del mundo, pero ahí es donde nos definimos.
Juan dice: El que ama el mundo, osea que se deja dirigir por el mundo, anhela, hacer lo que el mundo hace, o está practicando lo que el mundo practica, entonces, dice Juan el amor del padre no está en él.
Ningún creyente verdadero puede vivir conforme , o amar al mundo.
Sea que la tentación venga de prioridades mundanas, diversiones mundanas, riquezas mundanas, o deseos mundanos, los creyentes desean resistir los esfuerzos del mundo por seducirlos. Como nos advirtiera Jesús , en
Lucas 16:13 RVR60
13 Ningún siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.
La segunda razón por la que Dios quiere que odiemos al mundo es.

II. POR LO QUE EL MUNDO ES Y HACE.

1 Juan 2:16 RVR60
16 Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.
Juan habla en el versículo 16, de todo lo que hay en el mundo y proviene… del mundo y lo presenta en las tres descripciones calificativas de categorías de pecado.
Los deseos de la carne.
Es una alusión a las ansias viles y poco nobles de los corazones perversos. La carne denota la condición humana y su esencia pecaminosa.
Pero deseos, aunque aquí se refiere a negativamente a los impulsos sensuales del corazón, también pudiera aplicarse a deseos positivos.
2. Los deseos de los ojos.
Evoca sobre todo los pecados sexuales lujuriosos, pero aunque están incluidos en su definición, sin duda alguna la frase no se limita a ese significado.
La lujuria fundamental del corazón humano pervierte y distorsiona todos los deseos normales, es una búsqueda incesante que excede los límites apropiados de lo que es bueno, razonable y justo. Todo lo que se opone a la ley de Dios.
Pablo lo llama las obras de la carne. Gálatas 5:19-21.
Gálatas 5:19–21 RVR60
19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia,20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.
Hablamos de actitudes y acciones pecaminosas que son características principales del sistema del mundo y son irresistiblemente atractivos para la corrupción del alma no convertida.El mundo seduce a los pecadores a realizar acciones y tener pensamientos contrarios a la voluntad de Dios a través de los deseos de los ojos.
y el tercer elemento que usa el mundo, es:
3. La vanagloria de la vida.
Cuando hablamos de vanagloria hablamos de la arrogancia.
Dos textos, nos ayudan a entender que es lo que lleva en si:
Romanos 1:30 RVR60
30 murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres,
Santiago 4:16 RVR60
16 Pero ahora os jactáis en vuestras soberbias. Toda jactancia semejante es mala;
Esta vanagloria, es corrupción de lo más noble de la esencia humana, hablamos de la racionalidad, y nuestro espíritu, dado por Dios para disfrutarlos.
Por medio de la vanagloria la humanidad desafía a Dios y de manera arrogante intenta destronar al Soberano del universo.
En la Biblia encontramos a Satanás usando estos tres aspectos del mundo, para tentar, en uno triunfó, en el otro falló.
El primer caso es la tentación de Eva en el Edén. Génesis 3: 6
Génesis 3:6 RVR60
6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.
Deseos de la carne: “ vio la mujer que el árbol era bueno para comer”
Deseo de los ojos: “ que era agradable a los ojos”
Vanagloria de la vida: “ árbol codiciable para alcanzar la sabiduría”.
¿Cuál fue el resultado?, desobedeció y comió.
El segundo caso es la tentación de Jesús en el desierto, en Mateo 4.
Deseos de la carne: “ Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan”(v.3).
Deseos de los ojos: “ Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos,  y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares” (V. 8-9).
Vanagloria de la vida: “Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo,  y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, En sus manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra”.(V. 5-6).
En cada caso, el Señor, Jesucristo, no sucumbió ante la tentación, porqué, conociendo lo que Dios había dicho en su palabra, para responder a las falacias del diablo.
Jesús dijo, primera tentación, de la carne, no sólo de pan vivirá el hombre, en la de los ojos, le dijo, sólo al Señor tu dios adorarás y a él sólo servirás. y en la tercera tentación, en la de la vanagloria,le dijo, 2 No tentarás al Señor tu Dios.
Hermanos, nuestro enemigo el diablo, siempre tratará de engañarnos, y aún podrá utilizar la palabra de Dios como en el caso de la tentación de Jesús, pero también, podría mentir en relación a lo que Dios nos ha dicho, nos querrá poner las practicas de este mundo, haciéndonos creer que Dios se equivoca al decirnos algo, como en el caso de Eva, Dios había dicho que si comía del fruto del árbol que estaba en medio del huerto moriría, él le dijo primero, ¿Con que te ha dicho que no comas de ningún árbol?, y luego dice, no moriréis
Así va a buscar a hacer con nosotros.

Conclusión:

¿Cómo estamos en nuestra relación con el mundo?, ¿Amamos el mundo, o lo aborrecemos?
¿Qué practicas de mi vida me enseñan que estoy aborreciendo al mundo?
¿Cómo estamos, con los tres instrumentos que satanás usa para engañarnos ?
El deseo de la carne.
El deseo de los ojos.
La vanagloria de la vida.
¿Qué tanto estamos siendo exitosos, cuando satanás y su sistema mundano, nos tienta.
Debemos estar seguros de nuestro amor a Dios. Dios no comparte, a él no le gusta la infidelidad, Él es fiel, y espera que seamos fieles.
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