La Salvación

Introducción:

(iLL):

Si Dios hubiera percibido que nuestra mayor necesidad era económica nos hubiera enviado un economista.

Si hubiera percibido que nuestra mayor necesidad era entretenimiento nos habría enviado a un comediante o artista.

Si hubiera percibido que nuestra mayor necesidad era estabilidad política nos habría enviado a un político.

Si hubiera percibido que esta necesidad era de salud nos habría enviado a un doctor.

Pero El en su sabio y profundo conocimiento de sus “criaturas”; percibió que nuestra mayor necesidad tenía que ver con nuestro pecado, con nuestro distanciamiento de Él, y con nuestra incapacidad de relacionarnos con El y nos envió desde el cielo a un Salvador.

Uno como El; de su misma “esencia” y “naturaleza” divina pero que se encarno y se hizo humano como uno de nosotros; para así salvarnos.

Hermanos!! Es la intención de toda la Biblia; y en especial del NT. Que los creyentes podamos ver en la Salvación nuestra posesión más valiosa y la más grande bendición que Dios nos ha concedido en esta vida.

Es la Salvación en Cristo; el “tesoro” escondido que un hombre encuentra en Mt.13:44; en un campo. Y gozosamente al considerar su valor, vende todo lo que tiene para poseerlo.

Es Cristo, y la Salvación que poseemos en El, lo que le lleva a decir al apóstol Pablo en Filipenses 3. Que “todo” lo que antes podía tener para el algo de valor; hoy es visto como basura.

Hermano!! Es así como tu vez la Salvación: ¿Como tu posesión más valiosa? ¿Como tu más grande bendición?

Me temo que algunos aun NO. Hermanos!! La Salvación inmerecida que Dios por su Gracia y a través de la FE nos ha concedido en Cristo. Es la bendición más grande que pecadores como tu y como yo; hallamos podido recibir.

Habremos podido recibir de Dios sanidades temporales, a enfermedades y malestares pero la Salvación es una bendición mucho mayor.

Habremos podido gozar de la provisión de Dios en esta tierra y de sus bendiciones materiales pero la Salvación es una riqueza en Cristo mucho mayor.

Y así sucesivamente; todas las bendiciones terrenales y temporales. Que hayamos podido recibir de Dios no se comparan con su más grande bendición para nosotros; la Salvación.

Y repito, mis Hermanos!!: Es la intención de toda la Biblia; y en especial del NT. Que los creyentes podamos ver en la Salvación nuestra posesión más valiosa y la más grande bendición que Dios nos ha concedido en esta vida.

Quisiera invitarles entonces a leer juntos en Efesios 2:1-7. Este es un pasaje que estoy seguro nos va ayudar a poder ver la Salvación de esta manera.

En estos versículos; el apóstol Pablo ayuda a los creyentes en Efeso; a que puedan ver en la Salvación la más grande bendición que Dios les ha concedido.

Creo que nuestro autor presenta de DOS ideas “principales” en nuestro pasaje:

Un análisis de nuestra “condición” antes de ser Salvos. (vs.1-3)

Un análisis de la obra de Dios en la Salvación. (vs.4-7)

I. Un análisis de nuestra “condición” antes de ser salvos. (vs.1-3)

Estos tres versículos, son una dolorosa “descripción” de la condición de TODO hombre en esta tierra, que no ha sido salvo.

Y de ellos, al menos se puede decir CUATRO cosas acerca de la condición de todo ser humano.

Esta muerto. (vs.1a)

Por supuesto que esta es una referencia a la muerte espiritual. Es decir a la condición de estar “separados” de Dios en la que todo hombre y mujer se encuentra; por su pecado.

Si recordamos, Dios claramente advirtió a Adán en Génesis 2. Que el día que comiera del fruto del árbol del bien y del mal; moriría.

Sabemos que Adán y Eva comieron (Gn.3) y alguno podría decir pero no murieron. Y es cierto que aunque no experimentaron de inmediato la muerte física la cual vino después, en ese mismo instante quedaron separados de Dios y muertos espiritualmente.

¿Que significa estar muerto espiritualmente?

Estar separados de Dios.

Que así como un “cadáver” no puede responder a los estímulos externos. Así nosotros en nuestra condición de estar “separados” de Dios por nuestro pecado, tampoco podemos responder en nuestras propias fuerzas/por nuestra propia iniciativa a su invitación de ser salvos.

Desobediencia. (vs.1,2)

El vr.2 termina llamando a toda la humanidad: “hijos de desobediencia”.

Es decir aquellos, que están caracterizados por un estilo de vida “obstinado” “soberbio”, en el que se rechaza la voluntad de Dios y no se somete a ella.

Las palabras “delitos” y “pecados” (vs.1) describen este estilo de vida desobediente.

“delitos”: implica que el ser humano conociendo la “norma”, el “estándar”, la “voluntad” de Dios revelada en su Palabra, decide obstinada y soberbiamente no vivir de acuerdo a ella. Y desviarse, siguiendo su propio camino.

“pecados”: lit. “errar al intentar dar en el blanco”. No, no implica que el hombre se esforzó por agradar a Dios pero en su intento fallo; para nada, implica que el hombre sabiendo lo que Dios demanda prefiere dar la espalda y apuntar en otra dirección contraria a la voluntad de Dios.

Hermanos!! ¿En cuantos "aspectos” este mundo en su desobediencia no le ha dado la espalda a Dios, y sea revelado en contra de su voluntad?

Esclavitud. (vs.2,3)

Observa en el vs.2 como Pablo relaciona nuestros “delitos” y “pecados”, nuestra vida de desobediencia. Como una que “sigue la corriente de este mundo”.

Esta frase me hace pensar en la imagen de un río crecido, que esta desbordado y arrasa con todo lo que esta a su paso.

Lo que Pablo esta diciendo aquí es que nuestras vidas de desobediencia están siendo guiadas por la fuerza de este mundo. Pero no encontrar de nuestra voluntad, no obligándonos. Sino al amar y desear las cosas de este mundo (1Jn.2:15-17).

La “corriente” de este mundo, es decir sus ideas pecaminosas y su estilo de vida contrario a Dios, nos arrastra NO a la fuerza SINO porque amamos al mundo y las cosas que hay en el.

Y quien controla, dirige, promueve y estimula la corriente de este mundo es el propio Satanás (vs.2).

El hombre sin Dios, debido a su amor por el mundo; es un esclavo de este mundo.

Ahora si leemos en el vs.3. El hombre sin Dios también es un esclavo de sus deseos pecaminosos, de sus impulsos, de sus pasiones carnales (Ga. 5:19-21) a los cuales se rinde como un siervo a su Amo.

[ Ira. (vs.3) ]

¿Que deben esperar aquellos que amando más a este mundo, le siguen y le dan la espalda a Dios?

¿Que deben esperar aquellos que viven para complacer sus deseos perversos y pecaminosos?

¿Que deben esperar aquellos que viven una vida caracterizada por la desobediencia a la voluntad de Dios?

¿Que deben esperar aquellos que esta por su pecado separados de Dios y muertos espiritualmente?

!! Condenación!! Es así como termina el vs.3 advirtiéndonos de la “ira” futura que experimentaran merecidamente todos aquellos que mueran en su pecado.

II. Un análisis de la obra de Dios en la Salvación. (vs.4-7)