Purificación de la mujer que da a luz

Levítico 12:1–4 (RVR60)

1Habló Jehová a Moisés, diciendo: 2Habla a los hijos de Israel y diles: La mujer cuando conciba y dé a luz varón, será inmunda siete días; conforme a los días de su menstruación será inmunda. 3Y al octavo día se circuncidará al niño. 4Mas ella permanecerá treinta y tres días purificándose de su sangre; ninguna cosa santa tocará, ni vendrá al santuario, hasta cuando sean cumplidos los días de su purificación.

Introducción

Las leyes presentaban aspectos ceremoniales y morales, pero también civiles.

Aunque podríamos sacar una enseñanza espiritual de estas leyes, el valor espiritual de ellas siempre será la obediencia en cumplirlar exactamente como Dios lo demanda de parte del pueblo.

Dios que es Santo habitaba en medio de ellos, por lo tanto, debía de haber un orden, limpieza, reverencia, devoción, santidad y respeto en el campamento.

La inmundicia o impureza

Aunque la Biblia menciona que la mujer es inmunda después del parto, no es un aspeto negativo, malo o pecaminoso, sino más bien un recodatorio de nuestra naturales de pecado desde que nacemos.

Salmo 51:5 He aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre.

Génesis 3:16 A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti.

pues el dar a luz era una bendición para las mujeres israelitas. Para ellas la esterilidad era una maldición, esperaban ser bendecidas con ser escogidas para dar a luz al mesías.

Este periodo era de considerado de impureza para participar de las ceremonias religiosas y sociales, y no debe considerarse ninguna creencia falsa que la mujer estaba contamida de pecado y de demonios.

El aspecto civil

En nuestra ley, la mujer que da a luz tiene derecho a 30 días de reposo antes del parto y 54 días después del parto.

En la ley de Moisés, si la mujer tenía un varón tenía 40 días de purificación, (7+33), al 8vo día debían llevar al niño a circuncidar según el pacto de Dios con Abraham (Génesis 17:9-14).

Si daba a luz una niña tenía 80 días de purificación (14+66).

Algunos lo ven como algo negativo, denigrando así a las mujeres, pero Dios demuestra su consideración a las mujeres al darles más descanso cuando nacía una niña.

En este tiempo solo estaban separadas del santuario, no podía participar de la pascua o las ofrendas de paz, si era la esposa del sacerdote, no podía comer de las ofrendas de los sacrificios.

La higiene

Sabemos que después del parto, la mujer aun siguen expulsando residuos de placenta como en su periodo menstrual.

Antiguamente no existian las toallas femeninas, además la ropa interior no se usaba o era muy diferente a lo que usamos hoy.

Para la mestruación debía de purificarse por 7 días: Levítico 15:19 (NTV) »Cada vez que una mujer tenga su período menstrual, quedará ceremonialmente impura durante siete días. Cualquiera que la toque durante ese tiempo quedará impuro hasta el anochecer.

Un hombre no debía acostarse con su esposa en ese estado: Levítico 20:18 (NTV) »Si un hombre tiene relaciones sexuales con una mujer durante su período menstrual, ambos serán excluidos de la comunidad, pues juntos expusieron la fuente de su flujo de sangre.

Todos estos aspectos legales de Dios tienen aspectos de higiene, pues la suciedad es figura del pecado.

Lo que usaba la mujer para su purificación durante este tiempo era el agua limpia. Esto viene a romper todos esos mitos que la mujer no debe bañarse después de dar a luz. Lo mismo se aplica con la menstruación.

Las ofrendas

al cumplir su periodo de purificación, deberá llevar un cordero para holocausto y un pichon de paloma para expiación. El holocausto para reconocer su devoción y temor a Dios, y la expiación para la purificación y el perdón de los pecados que pudiera haber cometido en este tiempo.

Si la persona era pobre, llevaba dos tórtolas o dos pichones, uno para holocausto y otro para expiación. José y María no tenían suficiente para presentar un cordero:

Y cuando se cumplieron los días de la purificación de ellos, conforme a la ley de Moisés, le trajeron a Jerusalén para presentarle al Señor... 24y para ofrecer conforme a lo que se dice en la ley del Señor: Un par de tórtolas, o dos palominos. Lucas 2:22,24.

A persar que María fue concebida sin pecado, cumplió esta ley, pues no tenian nada que ver con el pecado sino con la ley civil.

Conclusión

Concluimos que el hecho que la mujer que daba a luz estaba inmunda no era por pecados o presencia demoniaca, sino un periodo de purificación de su cuerpo, para no contaminar el pueblo con los flujos, pues el pueblo también es santo delante de Dios, con ellos moraba la presencia de Dios.

Así hoy en día, en nuestras leyes, a la mujer se le da un periodo de descanso.

En la Biblia encontramos las sabias enseñanzas de nuestro Señor que son mucho mejor que las enseñanzas y creencias humanas.

Ustedes como mujeres procueren mantenerse limpias durante estos periodos propios de la mujer.

En lo espiritual nos enseña a guardarnos de la contaminación del mundo, a purificarnos constantemente a traves de la Palabra de Dios, la oración y la comunión.

A presentarnos siempre delante de Dios con ofrendas de gratitud.