PEDID, BUSCAD, Y LLAMAD

PEDID, BUSCAD, Y LLAMAD (MATEO 7:7-11).

Hay que reconocer nuestras necesidades (Santiago 4:2; Isaías 55:8,9; Jeremías 10:23; Proverbios 3:5,6).

Hay que ser constante e importuno (Lucas 18:1; 11:1-13; Mateo 15:21-28).

Hay que confiar en Dios, como Padre.

Por ser nuestro Padre se preocupa por nosotros (Mateo 5:45; 6:8,9,26,32; Salmos 103:13,14).Por ser nuestro Padre nunca da malas dádivas (Santiago 1:17; Romanos 8:28). Si nosotros sabemos lo que necesitamos, lo podemos pedir con confianza. Si nosotros sabemos que no hemos encontrado el camino, lo podemos buscar con esperanza. Si nosotros sabemos que no somos capaces de entrar podemos llamar con seguridad. La ayuda de Dios para los que se la piden esta siempre disponible. Dios siempre provee lo necesario si lo pedimos correctamente.No por motivos egoístas (Santiago 4:3). Según la voluntad de Dios (I Juan 5:14,15).

3.         En el nombre de Cristo (Juan 14:13).

4.         Filipenses 4:18,19,13; II Corintios 9:8; Efesios 3:20;

II Pedro 1:3; Santiago 1:5-7; Hebreos 2:17,18; Romanos 8:26,27.

Esta es la fuente de ayuda para cumplir con los mandatos de este sermón, especialmente en cuanto al juicio y el discernimiento en Mateo 7:1-6